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Demostración de una asociación estrecha entre los monómeros de fibrina y la resistencia a la insulina a partir de una técnica automatizada de elaboración propia

validado por los mismos autores del presente trabajo en un estudio epidemiológico de la resistencia a la insulina (Bracco J. et al, 2013).

Se encontró 29.4% de los pacientes con valores elevados, de los cuales 46.7% poseían resistencia a la insulina; 13.3% de sujetos fueron gestantes, 13.3% eran mujeres jóvenes con anticoncepción oral (ACO); 6.7% de los pacientes tenían hipotiroidismo sin tratamiento y 6.7% distintos carcinomas (Tabla nº 1).

El 66.70% que resultó de sumar los sujetos con insulinorresistencia, las gestantes, y los pacientes carcinomatosos, tendrían en evolución procesos angiogénicos: los primeros debidos a la obesidad asociada, los segundos por la angiogénesis fisiológica placentaria, los terceros por la angiogénesis tumoral. Se ha observado una asociación importante entre marcadores oncológicos, por ejemplo el antígeno carcinoembrionario (CEA), y los valores de PDF.

El mayor valor obtenido en este universo orientativo fue de unas 10 veces la mediana de sujetos normales, dando un resultado de 56.08 µg/ml; y correspondió a un paciente masculino, de 49 años de edad, diabético, con glucemia en ayunas de 339 mg/dl, hipertrigliceridemia de 259 mg/dl, gran resistencia a la insulina con cociente TG/HDL de 7.31 (valor de referencia < de 3.00) e índice optimizado de resistencia a la insulina de 17.5, con valor de referencia < 2.50.

6.            DISCUSIÓN

Según Vázquez Hernández, L.; Téllez Martínez, J.; Hicks Gómez, J. (2000), en los estudios publicados desde 1960 hasta la actualidad se ha establecido que el uso de anticoncepción oral, tiene efectos adversos tales como: aumento en la concentración de HDL, incremento de la apoproteína B-100, resistencia a la insulina, aterogénesis, alteración de los factores de coagulación así como aumento del riesgo de enfermedad tromboembólica venosa.

Estos datos concuerdan con el resultado de nuestro trabajo ya que los aumentos de monómeros de fibrina se asocian no solo con un incremento de la fibrinólisis, sino con los estados protrombóticos; y, según se rescata de las conclusiones de tales autores, la contracepción y los monómeros de fibrina se asocian con la resistencia a la insulina.

También es ampliamente conocida la situación de hipercoagulabilidad asociada a la gestación, con aumento de los monómeros de fibrina.

Según Almagro Vázquez, D. (2000); la tendencia trombótica que se presenta en el embarazo es expresión de cambios importantes en componentes esenciales del mecanismo hemostático: sistema de la coagulación, plaquetas y mecanismo fibrinolítico.

Actualmente se consideran como marcadores de la activación del mecanismo de la coagulación algunos complejos moleculares que se forman durante este proceso. En el embarazo se ha observado un aumento de los complejos solubles de fibrina. (Mak M. 1983; citado por Almagro Vázquez, D; 2000).

Por otro lado, en el último tercio de la gestación se produce una resistencia generalizada a la insulina. (Herrera E., 1997; citado por Clapez Hernández, S., 2000).

Los autores del presente trabajo han encontrado un aumento de PDFs en un 66% de gestantes estudiadas y una asociación importante entre PDFs y resistencia a la insulina, del orden de 46.7%.

La angiogénesis es necesaria para el crecimiento tumoral, para el escape de las células cancerosas a la circulación, y para el anclaje de las mismas en los tejidos hospederos. La angiogénesis requiere que se unan moléculas de señalización, tal como el factor de crecimiento endotelial vascular (vascular endotelial growth factor, VEGF), a receptores en la superficie de células endoteliales normales, para que se inicien señales dentro de estas células que promueven el crecimiento y la supervivencia de vasos sanguíneos nuevos.

Entre los inhibidores naturales de la angiogénesis se encuentra la angiostatina, que provine de la autoproteólisis o heteroproteólisis del plasminógeno. Sin destrucción proteolítica del plasminógeno aumenta la posibilidad de ser activado a plasmina, y de desencadenar la fibrinólisis y el aumento de los monómeros de fibrina. Por el contrario, la destrucción proteolítica del plasminógeno, no solo inhibe la angiogénesis a través de la angiostatina, sino que disminuye la cantidad de plasminógeno con capacidad para activarse a plasmina, reduce la fibrinólisis y los monómeros de fibrina.

Resulta claro, entonces que el proceso fibrinolítico se asocia de manera positiva con la angiogénesis, y ambos con el incremento de los monómeros de fibrina.

Una elevada concentración de la lipoproteína(a) está asociado a un riesgo mayor de aterosclerosis y cardiopatía isquémica debido a que es estructuralmente similar al plasminógeno,( Lázaro E. Alba Zayas, Giovanna Pereira Roca y Arístides Aguilar Betancourt, 2003), de modo que compiten por los sitios activos en la fibrina, inhibiendo así al plasminógeno y su subsecuente activación a plasmina, aumentando el establecimiento de trombosis y favoreciendo la aterosclerosis (Angles Cano, E.; 1997).

Según Yango, J. et al (2001), la deficiencia de la hormona tiroidea es probable que sea la principal causa de alteraciones de la coagulación en pacientes con hipotiroidismo. Esto condice con nuestras observaciones de aumento de monómeros de fibrina detectados en pacientes hipotiroideos sin hormona de reemplazo.

Según Turhan S. et al (2008); las hormonas tiroideas también ejercen su influencia sobre los receptores de LDLc y la lipoproteínlipasa, por lo que el hipotiroidismo determina un aumento de LDLc y de TG en plasma. La lipasa hepática también disminuye en el hipotiroidismo y retorna a sus valores normales con la administración de L-tiroxina.

En el hipotiroidismo sin tratamiento, entonces, ocurren desórdenes metabólicos similares a los que acontecen en la resistencia a la insulina.

7.            CONCLUSIÓN:

Los monómeros de fibrina son marcadores de:

  • Resistencia a la insulina
  • Angiogénesis
  • Adipogénesis
  • Apoptosis
  • Malignidad
  • Pro trombosis
  • Desórdenes metabólicos

8.            RECOMENDACIONES:

Si bien en el presente trabajo de han delineado conclusiones referentes a la fisiopatología de los productos de degradación de la fibrina, algunas insinuadas con anterioridad por otros autores, otras más novedosas; resultaría de interés profundizar las investigaciones sobre el poder de marcación de los mismos en el seguimiento de determinadas patologías confrontando sus valoraciones