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Cáncer de mama. Trabajo de Revisión.

(mastalgia) aunque poco frecuente o se ha palpado alguna tumoración que generalmente es lo más frecuente por lo que asisten a consulta las pacientes (12).

Examen Físico:

Incluirá siempre la inspección y la palpación de la mama y se examinará la región axilar de cada lado con la mano contraria y con la mano de la paciente descansando sobre el hombro del médico. En este examen se hará ligera compresión sobre la parrilla costal, buscando ganglios aumentados de volumen. La palpación debe incluir las regiones supraclaviculares y axilares, palpando con la yema de los dedos y suavemente, precisando la existencia de ganglios, número, consistencia y movilidad, ésta debe realizarse en el sentido de las manecillas del reloj, con la paciente en posición supina elevando el hombro del lado a examinar con una pequeña almohada debajo de él, lo que desplaza la mama hacia la parte media del tórax, convirtiéndola en una masa flotante, debe precisarse tamaño, forma del tumor, delimitación, consistencia, grado de movilidad, sensibilidad al dolor y su localización.

 Podemos palpar un simple nódulo, indoloro, de tamaño variable, más frecuente en el cuadrante superoexterno de una mama (6-9,12), que puede mostrar o no señales de fijación superficial (piel de naranja) o a los planos musculares y acompañarse de adenopatías axilares. Rigol Ricardo O (6). plantea que la retracción del pezón y la ulceración de la piel son signos tardíos que asocian siempre metástasis distantes (pulmón, hígado, huesos, cerebro y otros).

El diagnóstico temprano del cáncer de mama es una premisa importante para el pronóstico de esta enfermedad. Según el Programa Nacional (6-9) existen 3 métodos que pueden ayudar en este sentido, lo cual coincide con algunos autores (3,12).

1. Pesquisa utilizando la mamografía cada 2 años. Válido para pacientes con factores de riesgo, mayores de 50 años sin tumoración palpable (menos de 1 cm).

2. Examen clínico anual de las mamas a todas las mujeres mayores de 30 años aunque sean asintomáticas.

3. Divulgación a la población femenina de cada área, de la metodología para el autoexamen de las mamas.

Técnica del autoexamen de mama (6,8,9). El autoexamen de mamas debe practicarlo la mujer mensualmente, recién terminada la menstruación. Si la mujer ya no tiene reglas, debe escoger un día determinado cada mes para crear el hábito. El procedimiento más sencillo es el siguiente: De pie frente a un espejo, primero con los brazos a los lados del cuerpo. Después con las manos en la cintura, se contraen los músculos pectorales y por último, con los brazos elevados a ambos lados de la cabeza, se tratará de detectar asimetrías en las mamas, cambios en la piel y las areolas, así como retracciones de la piel o del pezón. Seguidamente, la palpación de la mama: de pie, sentada o acostada con la almohada en la espalda y el brazo bien levantado por encima y detrás de la cabeza, se realiza con la mano opuesta y 4 dedos unidos (excepto el pulgar), palpando toda la mama con ligera compresión sobre la pared costal y siguiendo las imaginarias agujas del reloj. Con esta maniobra se puede detectar fácilmente la presencia de masas o tumoraciones, zonas de sensibilidad anormal o cambios de consistencia en alguna región, comparadas con exámenes anteriores

El diagnóstico en las etapas tempranas puede resultar más difícil, por lo que se recomienda como un criterio general pensar siempre en un posible cáncer mamario en toda mujer mayor de 30 años con un nódulo de mama, sobre todo si tiene en su historia algunos de los factores de riesgo ya señalados. Este criterio nos obliga a emplear los medios complementarios para precisar el diagnóstico.

Exámenes complementarios:

Mamografía:

Es el método de diagnóstico de mayor eficacia en la actualidad para la detección del cáncer de mama en mujeres entre 50 y 65 años y es además el mejor procedimiento de rastreo de la población de que disponemos (6-9,12,25). Aplicada de forma periódica y sistemática ha conseguido disminuir la mortalidad por cáncer de mama (26) y aumentar el número de cánceres tempranos diagnosticados. Se indica en mujeres asintomáticas y en las que presentan síntomas o signos sospechosos de patología mamaria, el valor predictivo positivo es de 15 a 30% (27).

Imágenes mamográficas del cáncer de mama:

Presencia de una masa de forma irregular y bordes mal limitados y especulados, densidad aumentada pudiendo ser asimétrica con distorsión de la arquitectura de la glándula, el 90% de todos los cánceres in situ ductales no palpables contienen calcificaciones, éstas son finas y pleomórficas y ramificadas (25).

Otras técnicas: Neumocistografía, Galactografía y Xeromamografía

Ultrasonografía (5-9,12).

Debe emplearse asociada con exploración clínica y otros métodos entre ellos la mamografía., permite dirigir la punción, localización preoperatoria de las lesiones a operar, no aconsejable en embarazadas o en mamas muy pequeñas. Es útil para precisar la naturaleza sólida o quística de lesiones nodulares identificadas en la mamografía y en el estudio de mamas con prótesis de silicona.

Biopsia percutánea dirigida por la imagen:

Es la técnica más utilizada en la actualidad en las lesiones mamarias no palpables, permite completar los informes de la mamografía y ecografía sospechosa, según las estadísticas su valor predictivo positivo es del 100% (28).

Biopsia por aspiración por aguja fina (BAAF) (5-9,12,29). Se emplea para evacuar quistes y hacer el estudio citológico del líquido y extraer pequeños fragmentos de tejido. El resultado negativo no excluye el cáncer. Sin embargo, orienta la terapéutica quirúrgica. Esta técnica debe ser practicada sólo por el especialista y debe realizarse siempre que se utilice la ultrasonografía previa, para evitar pinchazos innecesarios (6).

J. González Merlo (12) y colls. plantean como precisión diagnóstica global de esta técnica,