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Una forma de Medicina Complementaria empleada por la comunidad: la Coleoterapia

Una forma de Medicina Complementaria empleada por la comunidad: la Coleoterapia

La presente es una investigación cualitativa que empleó el Método del Interaccionismo Interpretativo de Denzin para aproximarse al objeto de estudio. El problema consistió en reflexionar sobre las razones y los conocimientos que tienen integrantes de la comunidad mexicana para confiar y emplear la coleoterapia en el alivio de sus enfermedades. Lo anterior dio origen a la pregunta de investigación siguiente: ¿Cuál es la posibilidad de que exista un fundamento científico para esta terapia complementaria no convencional que se emplea por conocimientos culturales entre las personas?

Una forma de Medicina Complementaria empleada por la comunidad: la Coleoterapia

Autores: Jonathan Neftalí Gómez Trujillo, Pasante de la Carrera de Enfermería.

Leticia Cuevas Guajardo, Doctora en Educación, Profesora Titular ‘C’ de la Carrera de Enfermería de la FESI UNAM.

Lina Aidee Ruíz Cano, Pasante de la Carrera de Enfermería.

Investigadores de la Carrera de Enfermería de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la Universidad Nacional Autónoma de México (FESI UNAM).

RESUMEN

El objetivo consistió en cuestionar y contrastar los beneficios de la coleoterapia con la información proporcionada por los participantes de este estudio y lo aportado por autores que han realizado investigaciones en torno a este tipo de coleópteros. Los resultados encontrados fueron en favor de los beneficios que aporta este tratamiento complementario no convencional. Se concluye que vale la pena continuar con investigaciones experimentales sobre el tema.

PALABRAS CLAVE: terapia complementaria, coleópteros, cultura.

INTRODUCCIÓN

La humanidad ha sostenido una lucha constante por encontrar alternativas para la atención de su salud. En esa búsqueda, se ha desarrollado la medicina complementaria, que es: “un conjunto de sistemas médicos que no se basan en la medicina alópata occidental” 1. La medicina complementaria se ha difundido ampliamente, y una buena parte de la población mundial la ha utilizado al menos una vez en su vida. Ésta se emplea tanto en países desarrollados como: Canadá, Francia, Estados Unidos, Alemania, etc. De igual modo en países en vías de desarrollo como: México, China, y Argentina entre otros. Dentro de las prácticas de la medicina complementaria más empleadas se encuentran la herbolaria y la acupuntura.

El término “medicina complementaria” fue acuñado en Inglaterra, y hace referencia al uso en conjunto de las terapias naturales con la medicina convencional. Es un término que se adapta a la realidad, porque por lo general los pacientes combinan su tratamiento convencional con alguna terapia complementaria 2. Y es aquí donde surge otro término: “la medicina integrativa” que es la que combina tratamientos de la medicina convencional y de la medicina complementaria, conocida también como “medicina integrada”. Como ejemplos de tratamientos que se han propuesto en culturas no occidentales se encuentran la Medicina Tradicional China (Shiatsu, Chi Kung, Acupuntura) y Ayurveda 3.

Incluido en la Medicina Tradicional China surge la figura del “gorgojo chino”, cuyo nombre científico es Palembus (Ulomoides) Dermestoides, es de la familia Tenebrionidae, género, Palembus y especie, Ulomoides Dermestoides. Es un coleóptero que muchas personas lo ingieren para tratar enfermedades de diferentes tipos y orígenes tales como: dolores, asma, cáncer, psoriasis, vitíligo, artritis, artritis reumatoide, Mal de Parkinson, VIH, diabetes, mala circulación y otras enfermedades degenerativas 4, 5 dando origen a una forma de medicina no convencional o complementaria llamada “Coleoterapia”. La Coleoterapia se basa en la ingesta viva de un insecto conocido popularmente como «gorgojo». Este coleóptero fue descubierto por Casey en 1891. Don Arnoldo Rösler empezó a difundirlo en Argentina; a él se lo llevaron desde Alemania a Paraguay en el año de 1991 unas amistades. Los consumió y asegura haberse curado de un cáncer de piel (melanoma). Desde 2001 su principal promotor ha sido Rubén Dieminger apoyado por su esposa Dora Niewiarowicz 5. Rubén Aníbal Dieminger acuño el término de ‘coleoterapia’ ya que publicó un libro con ese nombre: “Coleoterapia», y tiene un sitio web denominado “La cadena del gorgojo”.

La «Cadena del gorgojo» es un proyecto que tiene el objetivo de instar a que se investigue si estos insectos mejoran o no la calidad de vida de las personas. En este sitio web se difunden opiniones vertidas por personas que consumen los coleópteros y recaba información sobre sus experiencias. Es una hipótesis que está en estudio, su teoría se fundamenta en un análisis cualitativo de los resultados obtenidos en tratamientos de distintas enfermedades en las que se consume vivo este gorgojo en combinación con los tratamientos convencionales en los que los enfermos han logrado una sobrevida o la cura total, inclusive en algunos casos de personas con cáncer 6.

Su hipótesis se basa en la acción antineoplásica natural obtenida por la ingesta del Tenebrio Palembus Dermestoides que podría liberar en el organismo proteínas, una cadena de aminoácidos y una sustancia desconocida que Dieminger denomina “Coleotoxina”, cuya acción sería la de avivar al sistema inmunológico, estimulando la generación de linfocitos T que tendrían una actividad antiviral, antiproliférica e inmunomoduladora 6.

La terapia consiste en la ingesta de coleópteros vivos (Palembus dermestoides) iniciando el consumo de insectos en forma creciente: el primer día uno y llegando al 70 en el día 70 del tratamiento. A partir de ahí inicia una cuenta regresiva hasta llegar a uno nuevamente, completando un ciclo de 150 días, con un consumo total de 4900 gorgojos 6. Dentro de la comunidad, es muy frecuente encontrar personas que acuden a esta terapia como tratamiento, asegurando una total efectividad al alivio de sus enfermedades. Son cada vez más las personas que, sin un fundamento científico, ni orientación médica, deciden recurrir al consumo de tenebrios, dando lugar a una serie de preguntas que cuestionan la seguridad y eficacia de la ‘coleoterapia’.

Uno de los cuestionamientos que nos hacemos, es si el empleo de estos “tratamientos” puede ocasionar riesgos y consecuencias fatales para quien los consume, ya que no existe alguna regulación en la calidad del producto, y las personas no hacen conciencia, sólo se dejan llevar por lo que otros dicen, no se detienen a pensar si lo que van a consumir está respaldado científicamente, o si su consumo traerá otras consecuencias, así como, no se cuestionan la forma en que esto actuará, o si afectará a su organismo.

Se sabe que nadie debe automedicarse, ni tomar medicamentos desconocidos, como tampoco consultar con personas que no tienen preparación; antes de que un medicamento o tratamiento alternativo salga a la venta, debe de ser registrado 7.