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Cuidados de Enfermeria en el paciente urostomizado

Cuidados de Enfermeria en el paciente urostomizado

Introducción: ante un cáncer de vejiga invasivo, la solución más habitual es la realización de una cistectomía radical, que consiste en la extirpación de la vejiga.

Metodología: revisión bibliográfica en las bases de datos Cuiden, Pubmed y Cochrane plus, así como en revistas científicas y libros especializados acerca de las urostomías.

Cuidados de Enfermeria en el paciente urostomizado

Autores: José Luis Serrano Carmona, José Luna Aljama, María Elena Luna Aljama

DUEs HU Reina Sofía de Córdoba

Autor principal: José Luis Serrano Carmona. DUE Servicio Andaluz de Salud

Resumen

Resultados: se han descrito los objetivos de educación sanitaria al paciente urostomizado, recomendaciones de higiene, cuidados en la colocación y retirada de la bolsa, así como los diagnósticos de Enfermería más habituales en esta patología.

Conclusiones: un estoma conlleva para el paciente una agresión muy importante a su imagen corporal, una amenaza a la capacidad de autocontrol del individuo, un elemento de incertidumbre en todas las esferas de su actividad, por lo que la educación sanitaria que puede ofrecer Enfermería es fundamental.

Palabras clave: cistectomía, urostomía, intervención, Enfermería.

Introducción

Los tumores de vejiga se han convertido, junto con los de próstata, en la primera causa de las derivaciones urinarias. Ante un cáncer de vejiga invasivo, la solución más habitual es la realización de una cistectomía radical, que consiste en la extirpación de la vejiga.

Podemos considerar dos tipos de derivaciones:

  • Derivación urinaria continente (ortotópica): para la eliminación y exteriorización de la orina se utilizará la vía natural o uretra. Es lo que conocemos como sustitución vesical por un asa ileal (neovejiga).
  • Derivación urinaria no continente (heterotópica): para la eliminación y exteriorización de la orina se creará una vía artificial. Es el caso de la ureteroileostomía cutánea tipo Bricker, que constituye la derivación urinaria más frecuente en Europa.

Esta última intervención fue propuesta por Eugene Bricker a principios del siglo pasado, pero no se pudo realizar de forma experimental hasta el final de la década de los años 50, siendo en la década de los 70 cuando algunos equipos de contados hospitales la empezaron a realizar.

El objetivo de este trabajo es proporcionar a los pacientes urostomizados una serie de medidas y consejos para el cuidado diario de la ostomía.

Metodología

Se ha llevado a cabo una búsqueda y revisión bibliográfica en las bases de datos Cuiden, Pubmed y Cochrane plus, así como en revistas científicas y libros especializados acerca de las urostomías. Se han incluido artículos cuyo idioma fuese el castellano o inglés con fecha de publicación posterior al año 2000.

Las palabras clave empleadas han sido: cistectomía, urostomía, intervención, Enfermería.

Resultados

Ante un paciente urostomizado los objetivos específicos de la educación sanitaria son:

  • Disminuir la ansiedad y ofrecer información sobre los cuidados.
  • Favorecer una rápida integración del paciente en su cuidado.
  • Informar de los recursos con los que cuenta tras el alta.

Normas de higiene:

  • Sólo se recomienda utilizar agua y jabón. A continuación se debe secar con una toalla a toquecitos evitando frotar bruscamente. Una vez que la piel esté bien limpia y seca, aplicar la bolsa.

Consejos:

  • La ducha puede realizarse con bolsa o sin bolsa (en los dispositivos de 2 piezas no ducharse con el disco y sin bolsa pues se filtraría el agua).
  • No utilizar desinfectantes para la limpieza del estoma.
  • No secar la piel con secador.
  • Si existiera vello alrededor del estoma, cortar con tijeras, no usar maquinilla.
  • Es fundamental ajustar perfectamente el adhesivo al estoma sin dejar nada de piel al aire.

Colocación de la bolsa:

  • Primero se debe medir el diámetro exacto del estoma.
  • A continuación se debe recortar el adhesivo al diámetro del estoma para que quede lo mas ajustado posible.
  • Retirar el papel protector que protege el adhesivo.
  • Seguidamente adherirlo cuidadosamente sobre la piel. Es mejor si se hace empezando de abajo a arriba.
  • Mantener la mano encima del adhesivo durante unos segundos ya que con el calor de la mano el adhesivo se pega mejor.
  • El disco ha de cambiarse cada 3 días y la bolsa al menos 1 vez al día.

Cambio de la bolsa:

  • Sujetar la lámina transparente de fijación del disco, mientras se retira la bolsa de arriba hacia abajo.
  • Colocar otra bolsa sobre el mismo disco.

Retirada de la bolsa:

  • Para retirar el disco, hay que hacerlo lentamente de arriba hacia abajo sujetando la piel con la otra mano.
  • Las bolsas no deben tirarse al WC. Tirar a la basura habiéndolas puesto previamente en otra bolsa bien cerrada.

Entre los problemas reales o potenciales que al alta pueden presentar estos pacientes (citados según la taxonomía NANDA) estarían:

  • Riesgo de ansiedad y temor relacionado con los cambios en su estado de salud.
  • Riesgo de deterioro de la integridad cutánea y riesgo de infección.
  • Déficit de conocimientos relacionado con la falta de adiestramiento ante la nueva situación.
  • Riesgo de trastorno de la imagen corporal y/o baja autoestima situacional.
  • Riesgo de alteración en el desempeño del rol y riesgo de déficit de actividades recreativas relacionado con el cambio en la imagen corporal.
  • Riesgo de disfunción sexual relacionado con el cambio de su imagen corporal y los cambios en su estado de salud.

Conclusiones

La existencia de un estoma conlleva para el paciente una agresión muy importante a su imagen corporal, una amenaza a la capacidad de autocontrol del individuo, un elemento de incertidumbre en todas las esferas de su actividad, una fuente continua e inagotable de angustia y depresión.

Uno de los principales objetivos de la Enfermería es educar para la salud, por lo que nos encontramos en una privilegiada para proporcionar al paciente urostomizado los conocimientos y tranquilidad necesarios para un correcto abordaje del estoma.

Bibliografía

  1. Martínez L (ed.). Ostomía. Manual de Patología Quirúrgica. Escuela de Medicina. Pontificia Universidad Católica de Chile (consultado 20-jun-2016). Disponible en: http://escuela.med.pub.c.l/ paginas/publicaciones/PatolQuir/PatolQuir_023.html
  2. Noda L, Alfonso L, Forte M, Valentin F, Reyes L. Problemática actual en el paciente ostomizado. Rev Cubana Med Milit. 2001;30:256-62.
  3. Turnbull, G.B. (2007). A pressure ulcer and an ostomy: An unlikely combination? Ostomy Wound Management, 53(5), 10-12.