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El parto en el medio extrahospitalario

El parto en el medio extrahospitalario

Se considera parto de urgencia al que se presenta de forma inesperada y no se ha planeado previamente.

Es raro que aparezcan partos inesperados en nuestros días, pero cuando ocurren, la preferencia es en mujeres multíparas con escasa o nula formación, o de medios rurales. Otro signo a tener en cuenta son las adolescentes con embarazos no deseados que pueden llegar a ocultarlo hasta el mismo momento del parto.

El parto en el medio extrahospitalario

Agustín Míguez Burgos. D. U. Enfermería FREMAP CIUDAD JARDÍN. Sevilla

Damián Muñoz Simarro. D. U. Enfermería D.C.C.U. Distrito Sevilla.

Susana Tello Pérez.

I.- INTRODUCCIÓN: CONCEPTOS

El parto es un proceso natural que sólo requiere un poco de atención al niño en el momento de nacer y una ayuda a la madre después.

Placenta:

Es un órgano discoide que pesa entre 500 y 600 gramos, y es el órgano intermedio que sirve para que la sangre del feto se purifique y a través de ella reciba alimentos y oxígeno de la madre.

Cordón umbilical:

Liga la parte anterior del abdomen fetal con la placenta insertándose en ésta; dentro de él se encuentran dos venas y una arteria que son las vías por las que la sangre del feto se purifica y por las que recibe las sustancias nutritivas.

Bolsa de las aguas:

Está constituida por las membranas fetales, estructuras que forman una bolsa cerrada dentro de la que se encuentran el feto y el líquido amniótico, sirviendo este último para amortiguar los golpes.

Fases del parto:

Son tres:

  • Período de dilatación.
  • Período de expulsión.
  • Período de alumbramiento.

Dilatación:

El cuello del útero se dilata progresivamente, para permitir la salida del feto (de 2 a 9 cm.). Puede durar varias horas. En este periodo se producen contracciones uterinas (dolores) espaciadas (20 – 10 minutos). Posteriormente, expulsión del tapón muco-sanguinolento, que cierra el cuello uterino durante el embarazo y rotura de la «bolsa de las aguas», generalmente al final de éste período.

Período expulsivo:

Se caracteriza por contracciones uterinas dolorosas cada 2 ó 3 minutos. Y es el periodo donde el niño sale al exterior.

Alumbramiento:

Es la salida de la placenta (aproximadamente media hora después de la salida del niño).

II.- PARTO URGENTE

Se considera parto de urgencia al que se presenta de forma inesperada y no se ha planeado previamente.

Es raro que aparezcan partos inesperados en nuestros días, pero cuando ocurren, la preferencia es en mujeres multíparas con escasa o nula formación, o de medios rurales. Otro signo a tener en cuenta son las adolescentes con embarazos no deseados que pueden llegar a ocultarlo hasta el mismo momento del parto.

El parto siempre tiene una serie de signos que nos hacen sospechar de su inminencia, son los considerados como pródromos del parto, y consisten en una sensación de aligeramiento (descenso de la cabeza fetal hacia el canal del parto), aumento de flujo vaginal, inicio de contracciones uterinas que la mujer va a referir como «endurecimiento del vientre», expulsión del tapón mucoso por el ablandamiento del cuello uterino que ya no puede «sujetarlo» y rotura de membranas (rotura de aguas).

Son signos de ingreso hospitalario:

–          Rotura de membranas.

–          Pérdida de líquido amniótico.

–          Contracciones regulares uterinas, cada 5´ durante una hora en las primíparas, y cada 10´ durante una hora en las multíparas.

Se consideraran signos de traslado urgente a centro hospitalario:

–          Sangrado vaginal.

–          Líquido amniótico teñido (amarillo, marrón o verdoso)

–          Cualquier distocia diagnosticada (prolapso cordón, parto de nalgas o transverso, abruptio placentario, etc.).

Ante cualquier signo de parto debemos hacer que la mujer no tome ningún alimento sólido ni líquido, por la posible inminencia del parto.

Cuando nos encontremos ante una situación de parto inminente debemos valorar diferentes aspectos para nuestra actuación, que serán:

–          Espacio físico en el que tenemos que atender el parto, o posibilidad de transporte hasta uno más idóneo.

–          Situación y distancia geográfica a un centro con atención especializada en este aspecto.

–          Estado general de la parturienta a nivel físico y psicológico (valorar la capacidad de colaboración de la mujer) si está tranquila, ansiosa, asustada o aterrada (adolescentes con problemática social).

–          Material que disponemos, gasas y compresas estériles, guantes estériles, material de cura y sutura, pinzas de cordón, etc.

–          Momento del parto en el que nos encontramos.

La actuación que tenemos que realizar ante un parto inminente en el medio extrahospitalario, es la siguiente:

1)             Proporcionar a la parturienta la mayor comodidad posible dentro del espacio físico disponible, que debe tener agua, calor y ropa suficientes.

2)             Decidir el traslado a un centro especializado o contactar con personal cualificado, si ninguna de las opciones es