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Homeostasis alterada del zinc en individuos bebedores y fumadores. Repercusiones hepática, pancreática, alveolar

molecular e iónica, de la sangre (homeostasis de la sangre) es el resultado del equilibrio dinámico de las concentraciones de sus componentes, por tanto la homeostasis del cinc es el mantenimiento del equilibrio dinámico de sus concentraciones plasmáticas normales (3,4). La homeostasis del cinc es mantenida esencialmente por el ingreso al aparato digestivo del oligoelemento en la dieta (5,6,7) o por suministro suplementado de zinc oral (8,9,10) y la excreción/ reabsorción intestinal del cinc (5). La biodisponibilidad de un nutriente puede entenderse como el porcentaje del mismo, en relación con la cantidad contenida en la ingesta, que aparece en plasma y tejidos del organismo, y resulta por lo tanto, además, una medida de la capacidad entérica de absorción del nutriente.

La biodisponibilidad del cinc oscila del 20-30 % de su contenido en la dieta, siendo absorbido como Zn+2 por el intestino delgado, y es en el yeyuno donde se produce la mayor velocidad en el transporte (6,7). La Profesora de Pediatría de la Escuela de Medicina de la Universidad de Colorado, EE.UU., Dra. Nancy F. Krebs, considera que el valor máximo de absorción para el zinc en el adulto sano es de aproximadamente 6 mg/día (6). Esto equivale, a un 30% si el cinc dietario en el adulto es de 20 mg/dia, y a un 20% si la dieta diaria de cinc es de 30mg/día. Los valores recomendados de ingesta diaria en individuos sanos de 18 a mayor de 60 son, de 10mg `para las mujeres y de 14 mg para los hombres, y algo mayor para mujeres embarazadas y durante la lactancia, aunque se especifica un máximo diario tolerable de 40 mg de cinc, según el estudio realizado por el bioquímico clínico y nutriólogo Dr. C. Manuel Hernández Triana y colaboradores (11).

El 85% del cinc en el organismo se acumula en el músculo esquelético y en los huesos del Sistema Osteomioarticular (SOMA), el resto en dientes, pelo, piel, hígado leucocitos y testículos, y sólo el 0.1% se encuentra en el plasma, donde la homeostasis del cinc, es estrechamente regulada, entre 10-20 micromoles/litro (3-7).

La absorción es un proceso activo y saturable; existe un aumento de la velocidad de transporte pasivo cuando los niveles séricos de cinc se encuentran deprimidos, ya que a diferencia del hierro no hay un papel importante de las reservas en el hígado, que no son significativas, y la absorción está determinada por la entrada diaria del nutriente mediante la dieta. El principio de que la homeostasis total de cinc en el organismo humano está gobernada por el tracto gastrointestinal a través del ajuste entre las pérdidas de cinc endógeno y el ingreso de cinc exógeno absorbido, es la base actual de la estimación para las recomendaciones de cinc dietético para el hombre y la mujer (12,13). Esta relación no es lineal, y la eficiencia neta en la captación de cinc disminuye con el incremento del oligoelemento en la ingesta diaria, lo que ahora puede entenderse mejor dadas las siguientes revelaciones recientes relacionadas con los mecanismos celulares en los enterocitos y los transportadores de cinc.

Los transportadores de cinc en los enterocitos, ZIP4 y ZNT1, responden apropiadamente a la biodisponibilidad de cinc dietético; estos transportadores son responsables de la captación de cinc a través de un mecanismo regulador saturable y energético-dependiente o transporte activo.

El transportador ZIP4 se expresa en la superficie luminal del enterocito, facilitando el ingreso de cinc desde la luz intestinal; el transportador ZNT1 se localiza en la superficie basolateral de la célula y está involucrado en el transporte de cinc hacia el interior del organismo, vía sistema portal al hígado, y luego a la circulación, unido mayoritariamente a las metalotioneínas (MT).

Cuando la concentración intraluminal de cinc se incrementa hasta aproximadamente 2 mmoles/litro, que se corresponde aproximadamente con un ingreso de cinc de 10 mg por día, el transporte a través de la membrana celular (ingreso o absorción de cinc) se convierte en un mecanismo regulador no saturable y no energético-dependiente, o sea, se realiza por difusión facilitada o transporte pasivo (12-14). Así, el exceso intracelular de cinc se extrae por las metalotioneínas (MT), y el oligoelemento se excreta por la vía normal de formación de heces fecales y de exfoliación de los enterocitos. Finalmente el hecho de la interacción competitiva en la absorción intestinal entre el hierro y el cinc, y entre el cobre y el cinc, los tres micronutrientes antioxidantes que se absorben como cationes divalentes, debe explicarse por la presencia en apical de otra proteína transportadora de metales divalentes, la DMT1 (14,15).

El tabaquismo y el alcoholismo se consideran factores de riesgo en el mantenimiento de la homeostasis normal del cinc. Resulta entonces alarmante el aumento notable del tabaquismo y del alcoholismo en el grupo de edades de 15 a 19 años, y el inicio de estos hábitos tóxicos a los 14 años (16).

Con relación al tabaquismo en estudios epidemiológicos del 2002 al 2011 se informa de las prevalencias encontradas de consumo diario de cigarrillo en púberes y adolescentes. Los datos disponibles varían tanto en función del país como del intervalo de edades estudiado; por ejemplo en Gran Canaria (España), la prevalencia encontrada en estudiantes de 13 a 14 años (séptimo grado) fue de 6,3% (17); en estudiantes de Córdoba (España) entre 11 y 17 años de edad (de sexto a noveno grado) fue de 22,6% (18); en estudiantes de noveno grado de diferentes grupos étnicos en California y Hawai (Estados Unidos) fue de entre 5,8% y 19,7% (19); en Florida (Estados Unidos), en estudiantes de 13 a 15 años fue de 9,8% (20), y en estudiantes de todos los Estados Unidos se informan prevalencias de entre 7,8% y 18% (21,22).

En estudiantes cubanos de 13 a 15 años de edad la prevalencia de tabaquismo es del 29.9 %; pero además es alta la exposición al humo ambiental del cigarro: un 60 % de los adolescentes (10-19 años) son fumadores pasivos (23,24). Por otra parte, en el estudio realizado en una población constituida por 347 adolescentes de ambos sexos, en las edades comprendidas entre 12 y 16 años, de la Escuela Secundaria Básica «Guido Fuentes”, del municipio «Plaza de la Revolución», de la actual provincia de La