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Percepción de los Estudiantes del Cuarto Semestre del Programa de Enfermería

instrumento compuesto por 19 ítems presentados en forma de planteamientos o afirmaciones. En cada uno de dichos planteamientos se solicitó por escrito a los estudiantes seleccionar una de las opciones, con lo cual se esperaba medir la percepción de los sujetos a los que se le administró. Es decir, se presentó cada opción y se le pidió al sujeto que seleccionara, eligiendo una de las cinco alternativas de la escala tipo Likert, a cada alternativa se le asignó un valor numérico y así se obtuvo una puntuación respecto a cada planteamiento. Luego se elaboró una escala para medir la percepción según dimensiones, sub dimensiones e indicadores.

Confiabilidad del Instrumento

Bajo la perspectiva de Hernández (2003), toda investigación debe llevar un instrumento para medir una variable de interés que cumpla con dos requisitos indispensables como son la confiabilidad y la validez. Es por ello, que la confiabilidad fue realizada mediante la aplicación del instrumento a un grupo de 10 estudiantes de un grupo de estudiantes no pertenecientes a la población en estudio. Luego los resultados de este proceso fueron sometidos a un procesamiento para determinar el coeficiente de confiabilidad. Para la determinación de la confiabilidad del instrumento se realizó Prueba Alfa de Cronbach, obteniéndose una puntuación de 0,797 de 10 instrumentos analizados. Determinando de esta manera que el instrumento utilizado fue confiable.

Técnica de Procesamiento y Análisis de los Datos

Finalmente los datos fueron analizados mediante estadística descriptiva, se aplicó paquete estadístico SPSS, versión 12.0. En el cuestionario se le aplicó la escala de Likert, las respuestas se codificaron dependiendo de la dirección de las afirmaciones: favorable o positiva y desfavorable o negativa.

PRESENTACIÓN Y ANÁLISIS DE LOS RESULTADOS

A continuación se describen y analizan los resultados que se generaron, de la presente investigación.

En el Gráfico 1 se muestra que 60% de los estudiantes encuestados expresó una percepción medianamente favorable acerca de la práctica clínica en Enfermería Pediátrica, asimismo 40% expresó una percepción favorable, mientras 0% expresó una percepción desfavorable. Este resultado es relevante ya que los estudiantes consideraron las prácticas medianamente favorables, es decir consideraron que se lograron los objetivos y que las prácticas se desarrollaron de manera positiva. Las prácticas clínicas tienen un gran impacto educativo ya que los conocimientos que se adquieren en ellas, permitirán el desarrollo de las habilidades y actitudes propias de cada estudiante que les serán necesarias para la adquisición de competencias que les permita incorporarse como profesionales en el ámbito sanitario (Zapico, Yánez y otros, 2002).

En el Gráfico 2 se muestra que 63% de los estudiantes expresó una percepción medianamente favorable acerca de la práctica clínica en Enfermería Pediátrica. Asimismo 37% expresó una percepción favorable, mientras 0% expresó una percepción desfavorable. Este resultado es relevante si se considera que Bandura (1986), destacó la importancia del ambiente para el aprendizaje, así como también los factores personales (motivación, retención y producción motora). En este sentido hizo énfasis en la determinación recíproca entre el ambiente, la conducta y los factores personales (cognitivos, emocionales).Por su parte, Spencer resaltó la importancia del ambientes clínicos de enseñanza, expresando que la enseñanza en ambientes clínicos está enfocada en el abordaje de problemas reales y es ejecutada en el contexto de la práctica profesional.

En el gráfico 3 se muestra que 60% de los estudiantes encuestados expresó una percepción medianamente favorable acerca del contexto, asimismo 37% expresó una percepción favorable, mientras 3% se ubicó en una tendencia desfavorable. Es decir, que los estudiantes encuestados, manifestaron que el contexto donde se desarrollan sus prácticas es medianamente favorable para el aprendizaje. Este resultado es relevante, ya que existen estudios donde se destaca que el contexto en área clínica, no es siempre favorecedor para el aprendizaje. Para el caso de esta investigación, los estudiantes encuestados consideraron el contexto medianamente favorable.

En el gráfico 4 se muestra que 50% de los estudiantes encuestados expresó una percepción medianamente favorable; 40% una percepción favorable; mientras que 10% se ubicó en desfavorable, cuando se les preguntó acerca de la cordialidad, la cooperación, la receptividad y el apoyo de tipo académico del personal asistencial hacia los estudiantes de Enfermería.

Este hallazgo es relevante, si se considera que el personal asistencial es importante para el proceso de enseñanza- aprendizaje de los alumnos de Enfermería en áreas clínicas. Esto se debe, a que los planes de estudio de Enfermería estructuran sus enseñanzas en materias teóricas y prácticas, y que en la docencia intervienen profesionales procedentes de dos contextos diferentes: la Universidad y las Instituciones Sanitarias, en una relación denominada docencia servicio (Gutiérrez y La Torre, 2002). En esta relación, ambas instituciones se benefician, pues además que los estudiantes aprenden con los profesionales en servicio, la estadía para la formación práctica de los alumnos en los hospitales, podría significar una ayuda para el personal, si los estudiantes se sienten aceptados, bien tratados y logran estar integrados con el equipo de Enfermería.

En el gráfico 5 se muestra que 50% de los estudiantes encuestados expresó una percepción medianamente favorable; 23.3% expresó una percepción favorable y 26.7% expresó una percepción desfavorable cuando se le preguntó acerca de la organización, los recursos y la estructura de la Unidad Clínica donde acuden a las prácticas.

 Este resultado es importante ya que según Salinas (2000), la organización del proceso de enseñanza-aprendizaje, dependerá en gran medida del escenario, es decir, el marco espacio-temporal en el que el usuario desarrolla sus actividades de aprendizaje. Asimismo, Gordon (2003) manifiesta que los escenarios de práctica clínica en general, proveen el contexto para el aprendizaje activo de los estudiantes.

En el Gráfico 6, se muestra que 60% de los estudiantes encuestados expresó una percepción medianamente