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Estudio de Prescripción – Indicación de antimicrobianos en la Unidad de Cuidados intensivos pediátricos de un Hospital general

fue el de las infecciones respiratorias agudas (IRA) con 47 pacientes que representaron el 56% , pudiendo estar relacionado con los meses en que se tomó la muestra que incluyó enero y febrero donde se produce un alza de las enfermedades respiratorias, coincidiendo con lo reportado por otros autores en un estudio realizado en el año 2012, en Santiago de Cuba, donde se obtuvo un 53,59% de casos portadores de IRA en los servicios de cuidados intensivos pediátricos. En los pacientes menores de un año los mecanismos inmunitarios aún no están totalmente establecidos por lo que son más vulnerables a la presentación de cuadros respiratorios agudos que requieren hospitalización y uso de antimicrobianos. 10

En el estudio se detectó que la segunda patología más frecuente fue la enfermedad diarreica aguda (EDA) con 20 pacientes para un 24% de la muestra. Aunque en Cuba la diarrea no constituye una causa importante de mortalidad infantil, mantiene una morbilidad considerable que demanda de una atención esmerada del personal de salud y de un importante gasto de recursos. 11

En el hospital pediátrico “Juan de la Cruz Martínez Maceira” de la misma provincia en 2015 esta enfermedad se ubicó en el segundo lugar con el 28,42 %. En nuestros hospitales está indicado que los pacientes lactantes con cuadro diarreico agudo que acudan a servicio de urgencia, sean hospitalizados para prevenir complicaciones. 12

Al comparar el presente trabajo con lo obtenido en otros estudios realizados entre el 2008 y 2012 en la provincia, en cuanto a las indicaciones y los esquemas terapéuticos empleados , en nuestros resultados predominaron con el 67% las prescripciones con indicaciones y usos adecuados, en tanto que en los estudios anteriormente mencionados predominaron las indicaciones y los esquemas terapéuticos inadecuados. De igual modo los antimicrobianos que se emplearon más frecuentemente en ambos estudios fueron la Ceftriaxona y la Cefotaxima. 13, 10

Consideramos que se debe hacer especial énfasis al momento de prescribir, cumpliendo con los parámetros a tener en cuenta en este indicador, no obstante el 48,4% de las prescripciones (64) fueron evaluadas como inadecuadas por incumplirse con la individualización del tratamiento, segundo indicador incluido en el estudio. La presencia de interacciones medicamentos riesgosas constituyeron también una invalidante en la adecuación de las prescripciones. En muchos casos ante el paciente grave el facultativo evalúa la relación riesgo/beneficio del tratamiento y se aplican estas combinaciones que pueden provocar reacciones adversas en el paciente. En el estudio no se valoró la presencia de estas reacciones adversas asociadas al consumo de los antimicrobianos.

La interacción de tipo riesgosa más frecuente fue la combinación Cefalosporinas/ Penicilina con el 40%, combinación que incrementa las concentraciones de ambos medicamentos por disminución del aclaramiento renal, aumentando la probabilidad de ototoxicidad y nefrotoxicidad, seguida de las interacciones riesgosas Cefalosporinas / Amikacina con el 27%, y de Vancomicina /Meronen con el 20%. Las cefalosporinas fueron los antimicrobianos más prescriptos en la muestra y los más implicados en las IMR. En las bibliografías consultadas son escasos los estudios cuantitativos que demuestran la magnitud de las Interacciones farmacológicas en las unidades de Cuidados intensivos. 14

Nuestros resultados coinciden con el estudio de Kodjovi, en el 2015, donde se detectaron 52 interacciones riesgosas que representaron 21,31% del total de prescripciones. Los antimicrobianos más relacionados en estas interacciones fueron Cefotaxima y Meronem con 22 interacciones cada uno, seguido de Vancomicina con 14 interacciones y Ceftriaxona con 10 interacciones riesgosas 12.

Mengana y colaboradores, en Santiago de Cuba realizaron un estudio referente al uso de antimicrobianos de amplio espectro en pediatría que incluyó cuidados intensivos, encontrándose un predominio en la muestra de la Ceftriaxona como medicamento más empleado (64,8 %), y la Unidad de Cuidados Intensivos como el servicio que más lo utilizó (41,7%), en esta investigación la ceftriaxona fue el antimicrobiano de amplio espectro más administrado, lo cual se corresponde con los protocolos de tratamiento en los pacientes que cursan con enfermedad infecciosa intestinal y neumonía bacteriana grave o complicada; asimismo, en las guías de tratamiento de las cefalosporinas de tercera generación se describe como el antimicrobiano de elección. 15

En nuestro estudio al unirse los resultados de los 3 indicadores previamente establecidos, se obtuvo que el 45,4 % de las prescripciones resultaron adecuadas (60 prescripciones) en tanto que las evaluadas de inadecuadas predominaron con el 54,6% (72 prescripciones). En estos resultados influyeron errores cometidos en la prescripción al incumplirse con la política de elección (16%), duración del tratamiento inadecuada (9.84%), tratamiento no correspondiente (10.6%) e Interacciones medicamentosas riesgosas (11.36%).

Otras investigaciones muestran resultados muy diferentes, por ejemplo, la realizada por Llanos-Zavalaga que notificó prescripciones inadecuadas en el 86 % de los pacientes a quienes se les indicó un antibiótico en su estudio. 16

Los resultados obtenidos por Ruvinsky y colaboradores en un estudio similar evaluaron como inadecuadas al 35.6% de las prescripciones de antimicrobianos en un hospital pediátrico. En ese trabajo la duración del tratamiento fue más larga de lo requerido en el 29,3% de los casos 17 Sin embargo en el trabajo de Booth y colaboradores se encontró una mayor incidencia de errores en las dosis y en la frecuencia de administración. 18

En la incidencia de Errores en la Prescripción Médica (EPM) reportada en la literatura existen diferencias como consecuencia de los distintos métodos para cuantificarlos y clasificarlos. En las Unidades de Cuidados intensivos pediátricos, las tasas de EPM van desde el 11 al 39%.19, 20

En el estudio realizado por Rodríguez- Melgoza y colaboradores en un servicio de Medicina interna, en el 2013, se observó que el principal motivo para la prescripción de Cefotaxima fueron las infecciones de las vías respiratorias, pero solo en el 3,49% de los casos se cumplió con los criterios de ausencia de contraindicaciones, ausencia de interacciones, selección y posología correctas. 21

Por último la tendencia al incremento en el uso de las cefalosporinas como la Cefotaxima antimicrobiano más empleado en nuestro estudio y la Ceftriaxona en segundo lugar merecen un llamado de atención al uso más racional de estos medicamentos, a un mayor empleo de los mapas microbiológicos de los servicios y una mayor eficacia de los comités farmacoterapéuticos hospitalarios.