Manejo y mantenimiento del reservorio venoso subcutáneo
Autora principal: Raquel Domingo López
Vol. XVIII; nº 16; 911
Revista Electrónica de PortalesMedicos.com
ISSN 1886-8924 – Publicación de artículos, casos clínicos, etc. de Medicina, Enfermería y Ciencias de la Salud
Manejo y mantenimiento del reservorio venoso subcutáneo
Autora principal: Raquel Domingo López
Vol. XVIII; nº 16; 911
Manejo del reservorio subcutáneo por las enfermeras
Autor principal: Manuel Rosado Grande
Vol. XVII; nº 17; 700
Cuidados de enfermería en el Reservorio Venoso Subcutáneo
Autora principal: Elena Boix Sau
Vol. XVI; nº 15; 816
La técnica de punción del reservorio venoso subcutáneo realizada por Enfermería
Debido al sencillo uso del reservorio venoso subcutáneo y al aumento de personas que necesitan ser tratadas con quimioterapia, el uso de estos dispositivos está aumentando de manera exponencial, permitiendo además punciones repetidas (hasta 2000) sin ocasionar daños, y evitando los numerosos problemas que llegaban a ocasionar anteriormente en los accesos venosos periféricos la administración de éste tipo de tratamientos.
Resumen: el reservorio venoso subcutáneo ha supuesto un avance en el tratamiento de pacientes con enfermedades crónicas y de larga duración. Son muchas las ventajas que conllevan su uso como mejor de la calidad de vida del paciente y un rápido, seguro y fácil acceso venoso.
En la atención sanitaria del siglo XXI la utilización de accesos vasculares es imprescindible en la mayoría de los casos siendo muy importante en el diagnóstico y tratamiento de la enfermedad.
Los servicios hospitalarios y el personal de Enfermería, en la práctica diaria, deben dar una respuesta eficaz y de calidad en la atención al usuario, teniendo en cuenta una visión integral del paciente, siendo el mayor reto de todos el obtener una satisfacción perceptible y real.
El aumento progresivo de pacientes que requieren terapias intravenosas prolongadas ha extendido cada vez más la implantación del reservorio venoso subcutáneo. Gracias a esto, se ha aumentado la calidad de vida del paciente evitando las continuas punciones intravenosas y permitiendo un mejor manejo de la terapia intravenosa de larga duración.