Valores altos de lipoproteínas de baja densidad (LDL)
El LDL transporta el colesterol a las células y se le conoce como “colesterol malo” porque se piensa que los niveles elevados de LDL contribuyen al padecimiento cardiovascular. El exceso de LDL en sangre origina una acumulación de grasa llamada placa en las paredes de las arterias, ésta inicia la afección aterosclerótica. Cuando la placa se acumula en las arterias coronarias que riegan al corazón, se incrementa el riesgo de sufrir un ataque cardíaco. Los niveles de LDL suelen elevarse en personas que consumen un alto contenido de grasa saturada, colesterol o ambas. En ocasiones en el hipotiroidismo también suelen elevarse los niveles de LDL11.
En cuanto a los niveles de LDL, lo óptimo es tener menos de 100 mg/dl; casi óptimo 100-129 mg/dl; limítrofe 130-159 mg/dl; alto 160-189 mg/dl; muy alto 190 mg/dl o más. Para reducir los niveles de LDL se debe tener una alimentación baja en grasas saturadas y colesterol, aumentar el nivel de actividad física, controlar el peso (adelgazar), consumir alimentos ricos en fibra y no fumar 11.
Valores bajos de lipoproteínas de alta densidad (HDL)
El HDL transporta al colesterol de las células de nuevo al hígado donde puede ser expelido del organismo. Al HDL se le llama “colesterol bueno” porque se piensa que niveles elevados de él reducen el riesgo cardiovascular. Si la persona tiene niveles bajos de HDL existe un mayor riesgo cardiovascular. Niveles bajos de HDL sugieren inactividad física, obesidad, hábito de fumar o diabetes tipo 2; es deseable que los niveles de HDL sean mayores a 40 mg/dl 11.
Valores altos de triglicéridos
Los triglicéridos son lípidos que proporcionan energía a los músculos. La alimentación que es alta en grasas saturadas o bien, alta en hidratos de carbono puede incrementar los niveles de triglicéridos. Algunos autores piensan que niveles elevados de triglicéridos aumentan el riesgo cardiovascular, pero no todos concuerdan en esto. Lo que sucede es que personas con niveles incrementados de triglicéridos con frecuencia son obesas, o tienen niveles bajos de HDL, presión arterial alta o diabetes tipo 2; todos éstos, factores de riesgo cardiovascular. Las cifras normales de triglicéridos son menores a 150 mg/dl 11.
Diabetes Mellitus tipo 2
Es conocida también como no insulinodependiente, es la forma de diabetes más frecuente ya que aproximadamente el 95% de las personas con diabetes padecen este tipo; se debe en muchos de los casos a un peso corporal excesivo y a la inactividad física 12, 13. Anteriormente este tipo de diabetes sólo la padecían los adultos, pero actualmente se está manifestando también en los niños. Comienza con resistencia a la insulina, es decir, las células del cuerpo no usan la insulina correctamente 13.
Los síntomas son parecidos a los de la diabetes tipo 1, pero con frecuencia menos intensos, por lo que existe la posibilidad de diagnosticarse cuando ésta ya ha avanzado y han aparecido complicaciones 12.
El diagnóstico se hace por medio de análisis de sangre; y su tratamiento consiste en una dieta saludable, actividad física, no fumar y la reducción de la glucemia con medicamentos orales, aunque también se podría requerir insulina12. Se debe vigilar y prevenir en los pacientes que la padecen la aparición de retinopatía, la que puede causar ceguera; se deben controlar los niveles de colesterol y lípidos en la sangre y detectar tempranamente cualquier signo de nefropatía. La neuropatía de los pies y la reducción del flujo sanguíneo aumentan el riesgo de úlceras en los pies; en éstos, se puede presentar una infección que conduzca a una amputación. Está demostrado que medidas simples como un estilo de vida saludable es eficaz para prevenir la diabetes tipo 2, o bien, retrasar su aparición 12. Las cifras normales de azúcar en la sangre son 60 a 110 mg/dl aunque los valores normales podrían variar según el laboratorio 14.
Otros estudios sobre el tema
En un estudio realizado por Zea, León, Botero, Afanador y Pinzón titulado “Factores de riesgo cardiovascular y su relación con la composición corporal en estudiantes universitarios” realizado en todas las carreras que oferta la Universidad Santo Tomás, Sede Bogotá, Colombia, entre los años 2011 y 2012 encontraron en su muestra de 286 estudiantes de 16 a 26 años los siguientes resultados: en hombres, valores de LDL ≥100 mg/dl (60.6%), porcentaje de grasa >20% (50.0%) y valores de HDL <40 mg/dl (39.4%). En mujeres encontraron un porcentaje de grasa >33% (63%), LDL ≥100 mg/dl (39.4%) y HDL <50 mg/dl (91.5%). Llegando a concluir que el 19.2% de los hombres y el 27.7% de las mujeres tienen riesgo aterogénico alto. Ellos encontraron correlaciones significativas con la composición corporal. Por lo que concluyeron que existe una alta prevalencia de factores de riesgo cardiovascular en jóvenes universitarios ocasionados por alteraciones del perfil lipídico y cambios antropométricos relacionados. Por lo que sugieren la necesidad de modificar sus estilos de vida así como la composición corporal 15.
Otro estudio efectuado por Irurita y colaboradores, titulado “Utilidad del índice aterogénico en la predicción de enfermedad coronaria prematura” realizado en el año de 2007 en una muestra de 951 varones de Las Palmas, España; 515 pacientes menores de 51 años, con enfermedad coronaria y 436 controles mayores de 56 años, sin enfermedad; encontraron que a pesar de su juventud, la prevalencia de factores de riesgo en los pacientes masculinos es muy alta; y que el índice aterogénico resulta una herramienta útil para detectar a las personas con riesgo de enfermedad coronaria prematura 16.
Por todo lo anterior, el problema de esta investigación consistió en detectar si existe riesgo aterogénico en estudiantes universitarias de la Carrera de Enfermería de la Facultad de Estudios Superiores Iztacala de la Universidad Nacional Autónoma de México (FESI UNAM). Y la pregunta de investigación quedó planteada de la manera siguiente:
¿Presentan factores de riesgo aterogénico estudiantes de Enfermería de la FESI UNAM?
El objetivo de la investigación fue el de determinar si estudiantes de Enfermería de la FESI UNAM presentan factores de riesgo aterogénico.
Metodología
La presente es una investigación cuantitativa, exploratoria, descriptiva, evaluativa y transversal. Se obtuvo una muestra no probabilística de 48 estudiantes universitarias mujeres de Enfermería de la FESI UNAM. Se les informó acerca de los objetivos del estudio y a quienes aceptaron participar en él se les proporcionó un formato que contenía el consentimiento informado, en el cual se estipulaban los riesgos inherentes a la toma de una muestra de sangre y el derecho a retirarse del estudio en el momento en que lo decidieran. El protocolo de investigación del presente trabajo contó con el dictamen favorable de la Comisión de Ética de la FESI UNAM.
Se realizó el registro de los datos antropométricos, clínicos y bioquímicos. Para el levantamiento de los datos antropométricos y clínicos, a todas las participantes se les agendó una cita dentro de una misma semana y en horario fijo (de 7 a 8 de la mañana con ayuno de al menos 8 horas). Se registró su edad, se les midió peso corporal, talla, índice de masa corporal, perímetro abdominal, presión arterial sistólica y diastólica. El peso fue medido con una báscula digital tipo Tanita que fue calibrada en su precisión y exactitud con un peso conocido y observando que el coeficiente de variación para 5 medidas repetidas fuera menor al 5%. La talla se midió con un estadímetro. El perímetro abdominal, se midió con cinta métrica común y la presión arterial se determinó con un baumanómetro aneroide. Se hizo la toma de muestra de 5 ml de sangre venosa en la que se midieron los niveles plasmáticos de los lípidos y la glucosa realizados por un laboratorio de análisis clínicos certificado por el sistema del Programa de Aseguramiento de la Calidad (PACAL).
Se tomaron como datos de referencia para interpretar los resultados los parámetros siguientes:
- Para el IMC de 25 a 26.9 significa que hay sobrepeso y datos mayores indican obesidad.
- Circunferencia de cintura > 85 cm factor de riesgo para enfermedad cardiovascular.
- Hipertensión; valores mayores a 140/90 mmHg.
- Colesterol mayor a 200 mg/dl, se considera elevado.
- LDL mayor a 100 mg/dl, se considera elevado.
- HDL menor a 40 mg/dl se considera como riesgo cardiovascular.
- Triglicéridos con mayor cantidad a 150 mg/dl se considera riesgo cardiovascular.
- Glucosa mayor a 110 mg/dl significa glucemia basal alterada. Dos mediciones de 126 mg/dl se considera diabetes tipo 2, o una al azar mayor a 200 mg/dl.
El análisis estadístico de los datos se hizo por medio de estadística descriptiva con medidas de frecuencia absoluta y relativa así como, medidas de tendencia central para lo que se empleó el programa SPSS versión 22.
Resultados
- La edad promedio de la muestra fue de 22.37 años con un rango que va de los 21 a los 27 años.
- La talla promedio de toda la muestra fue de 1.59 m.
- El peso promedio de la muestra fue de 63.25 kg.
- El índice de masa corporal (IMC) de la muestra se ubicó en 25.
- El perímetro abdominal promedio fue de 78.42 cm.
- La presión arterial sistólica promedio fue de 95 mmHg.
- La presión arterial diastólica promedio fue de 66 mmHg.
- El colesterol promedio para toda la muestra fue de 170 mg/dl.
- El LDL promedio para toda la muestra fue de 123 mg/dl.
- El HDL promedio para la muestra fue de 39 mg/dl.
- Los triglicéridos promedio para la muestra fueron en una cantidad de 102 mg/dl.
- La glucosa promedio para toda la muestra se ubicó en 96 mg/dl.
Interpretación de los resultados promedio de la muestra
Se trata de una muestra de mujeres universitarias jóvenes con una media de edad de 22.37 años, con una talla promedio de 1.59 m y un peso promedio de 63.25 kg. El índice de masa corporal (IMC) que resultó de 25 indica que en promedio la muestra tiene sobrepeso. El perímetro abdominal promedio se encuentra en términos de normalidad (78.42 cm) pues es menor a 85 cm. En cuanto a la presión arterial también resultó normal para toda la muestra ya que arrojó una cifra promedio de 95/66 mmHg.