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Artritis reumatoide: dolor, inflamación y cómo manejarla

Artritis reumatoide: dolor, inflamación y cómo manejarla

Autor principal: Teodoro Álvarez Mateos

Vol. XX; nº 17; 934

Rheumatoid arthritis: pain, inflammation, and how to manage it

Fecha de recepción: 12 de agosto de 2025
Fecha de aceptación: 6 de septiembre de 2025

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com, Volumen XX. Número 17 – Primera quincena de Septiembre de 2025 – Página inicial: Vol. XX; nº 17; 934

Autores:

Teodoro Álvarez Mateos, Enfermero Quiron Prevencion y Loga Salud
Verónica Vidal Villanueva, Enfermera Centro Salud Alcorisa
Catalina Cazacu, Enfermera Centro de Salud Alcorisa
Andrea Vidal Villanueva, Enfermera Hospital de Alcañiz, Teruel
Sergio Méndez Valle, Enfermero Hospital de Alcañiz, Teruel
Ana Subirats Valls, Enfermera Hospital de Alcañiz, Teruel
Elena Nina Tomiuc, Enfermera Centro de Salud Caspe

Resumen

La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad inflamatoria autoinmune crónica que afecta principalmente a las articulaciones, causando dolor, inflamación, rigidez y discapacidad funcional progresiva. Su diagnóstico temprano y tratamiento adecuado son esenciales para prevenir el daño articular irreversible y mejorar la calidad de vida del paciente. Este artículo aborda las características clínicas de la AR, los criterios diagnósticos actuales, las terapias farmacológicas y no farmacológicas disponibles, y destaca la importancia del abordaje multidisciplinario centrado en el paciente. Se incluyen resultados de una revisión bibliográfica reciente y se discute el impacto de la enfermedad a nivel físico, emocional y social.

Palabras clave

artritis reumatoide, inflamación articular, tratamiento, dolor crónico, autoinmunidad.

Abstract

Rheumatoid arthritis (RA) is a chronic autoimmune inflammatory disease that primarily affects the joints, causing pain, swelling, stiffness, and progressive functional disability. Early diagnosis and appropriate treatment are essential to prevent irreversible joint damage and improve patients’ quality of life. This article discusses the clinical features of RA, current diagnostic criteria, available pharmacological and non-pharmacological therapies, and emphasizes the importance of a patient-centered multidisciplinary approach. Results from a recent literature review are included, along with a discussion of the physical, emotional, and social impact of the disease.

Keywords

rheumatoid arthritis, joint inflammation, treatment, chronic pain, autoimmunity.

Introducción

La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad autoinmune sistémica y crónica que se caracteriza por la inflamación persistente de las articulaciones, lo que conduce a daño articular progresivo, dolor, fatiga y discapacidad funcional. A diferencia de la osteoartritis, que es degenerativa y relacionada con la edad, la AR involucra una respuesta inmunitaria desregulada que ataca por error el tejido sinovial, generando inflamación y destrucción del cartílago y hueso subyacente.

Afecta aproximadamente al 1% de la población mundial, con una incidencia mayor en mujeres (relación 3:1 con respecto a los hombres) y suele presentarse entre los 30 y 50 años. Además del compromiso articular, la AR puede afectar órganos como pulmones, ojos, piel y vasos sanguíneos.

Este artículo tiene como objetivo explicar los mecanismos patológicos de la AR, identificar sus síntomas principales, revisar las opciones terapéuticas actuales y destacar la importancia del diagnóstico precoz y un abordaje multidisciplinario para mejorar la calidad de vida de los pacientes.

Metodología

Se realizó una revisión narrativa basada en artículos científicos publicados en inglés y español entre 2010 y 2024, consultando bases de datos como PubMed, Scopus, SciELO y Google Scholar. Se incluyeron estudios observacionales, ensayos clínicos controlados, guías clínicas de asociaciones reumatológicas internacionales y revisiones sistemáticas. Se priorizó información sobre diagnóstico, manifestaciones clínicas, tratamientos farmacológicos y no farmacológicos, y calidad de vida en pacientes con AR.

Resultados

La artritis reumatoide afecta tanto a estructuras articulares como a otros sistemas del organismo. En los estudios analizados, se observa que más del 70% de los pacientes con AR presentan sinovitis en articulaciones pequeñas simétricas en fases tempranas, con especial compromiso de manos y pies. La rigidez matutina prolongada, superior a 60 minutos, es uno de los síntomas cardinales reportados en el 90% de los casos.

Las pruebas de laboratorio muestran que el 70-80% de los pacientes son positivos para factor reumatoide (FR) y/o anticuerpos anti-péptidos citrulinados cíclicos (anti-CCP), lo que permite una mayor especificidad diagnóstica. Sin embargo, entre un 20-30% de pacientes permanecen seronegativos, lo que requiere una evaluación clínica y de imagen más exhaustiva.

En cuanto a los reactantes de fase aguda, como la proteína C reactiva (PCR) y la velocidad de sedimentación globular (VSG), se hallan elevados en la mayoría de los pacientes con enfermedad activa, y se correlacionan con el grado de inflamación sistémica.

El uso de ecografía articular y resonancia magnética permite detectar inflamación sinovial y erosiones óseas antes de que sean visibles en radiografías, siendo herramientas útiles para el diagnóstico precoz.

Respecto a la progresión de la enfermedad, estudios longitudinales señalan que más del 50% de los pacientes no tratados adecuadamente desarrollan erosiones articulares dentro de los dos primeros años, y hasta un 30% puede presentar algún grado de discapacidad funcional en los primeros 5 años.

Los resultados sobre eficacia terapéutica muestran que:

El metotrexato sigue siendo el FAME sintético más efectivo y mejor tolerado, logrando control adecuado de la enfermedad en monoterapia en el 30-50% de los pacientes.

Los FAMEs biológicos han demostrado una mayor eficacia en pacientes con respuesta insuficiente a FAMEs convencionales, especialmente los inhibidores del TNF-alfa y del receptor de IL-6.

El esquema «tratamiento por objetivos» (treat-to-target) ha logrado tasas de remisión o baja actividad en el 60-80% de los pacientes en centros especializados.

La terapia combinada (metotrexato + biológico) ha mostrado mejores resultados clínicos y radiológicos en comparación con monoterapia.

En cuanto a los aspectos no farmacológicos, los estudios coinciden en que la actividad física supervisada, la educación terapéutica, y el apoyo psicosocial mejoran el estado funcional, reducen el dolor, y mejoran los indicadores de calidad de vida.

Una proporción considerable de pacientes con AR también refiere trastornos emocionales, especialmente ansiedad y depresión, que se correlacionan con mayor percepción de dolor, peor adherencia terapéutica y menor respuesta al tratamiento.

Discusión

La artritis reumatoide representa una de las enfermedades autoinmunes más incapacitantes si no se maneja oportunamente. Su curso clínico puede variar considerablemente entre los pacientes, con presentaciones desde formas leves y autolimitadas hasta formas severas y rápidamente progresivas. Esto hace fundamental un enfoque individualizado y adaptado a las características clínicas, serológicas y radiológicas del paciente.

Uno de los avances más significativos en la última década ha sido el cambio hacia el paradigma del tratamiento por objetivos, cuyo fin es alcanzar y mantener la remisión clínica. Esto implica un monitoreo frecuente (mensual o trimestral), utilizando escalas validadas como DAS28 (Disease Activity Score), que evalúan articulaciones inflamadas, dolorosas, reactantes de fase aguda y evaluación global del paciente.

Otro aspecto clave en la evolución de la AR es la ventana de oportunidad terapéutica, que corresponde a los primeros 6-12 meses desde el inicio de los síntomas. En este periodo, el tratamiento intensivo puede modificar significativamente la historia natural de la enfermedad, previniendo el daño estructural irreversible. Sin embargo, muchos pacientes son diagnosticados tardíamente, lo que compromete su pronóstico a largo plazo.

A pesar de los avances terapéuticos, persisten desafíos importantes:

El acceso desigual a tratamientos biológicos en muchos países, especialmente en sistemas de salud pública.

La aparición de efectos adversos relacionados con inmunosupresión, como infecciones, disfunción hepática o citopenias.

La adherencia al tratamiento es subóptima en una proporción relevante de pacientes, por temor a los efectos secundarios o por la falta de mejoría rápida.

La atención a la salud mental suele estar subestimada, aunque los síntomas depresivos y ansiosos tienen un impacto directo en la percepción del dolor y la funcionalidad.

Los nuevos enfoques terapéuticos incluyen:

Medicina personalizada, con el uso de biomarcadores genéticos y moleculares para predecir respuesta al tratamiento.

Desarrollo de biosimilares, que podrían reducir los costos y aumentar el acceso a terapias biológicas.

Terapias orales dirigidas, como inhibidores de JAK (tofacitinib, baricitinib), que muestran buena eficacia y conveniencia en la administración.

Finalmente, es importante destacar el papel del paciente informado y empoderado. La educación terapéutica, los grupos de apoyo y la comunicación efectiva con el equipo de salud son componentes esenciales para lograr resultados positivos a largo plazo.

Conclusiones

La artritis reumatoide es una enfermedad inflamatoria autoinmune crónica que requiere atención médica continua, diagnóstico precoz y tratamiento oportuno para evitar secuelas irreversibles. Sus síntomas articulares y sistémicos pueden afectar severamente la calidad de vida si no se abordan adecuadamente.

El uso de FAMEs y terapias biológicas ha revolucionado el manejo de la enfermedad, permitiendo alcanzar remisión en muchos casos. Sin embargo, esto requiere monitoreo constante, educación del paciente y acceso equitativo a los tratamientos.

El enfoque debe ser integral, incluyendo no solo intervenciones médicas, sino también acompañamiento psicológico y apoyo social. A medida que avanza la investigación, se espera que los tratamientos personalizados y los biomarcadores predictivos permitan una gestión aún más eficaz de esta compleja enfermedad.

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Declaración de buenas prácticas:
Los autores de este manuscrito declaran que:
Todos ellos han participado en su elaboración y no tienen conflictos de intereses
La investigación se ha realizado siguiendo las Pautas éticas internacionales para la investigación relacionada con la salud con seres humanos elaboradas por el Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas (CIOMS) en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El manuscrito es original y no contiene plagio.
El manuscrito no ha sido publicado en ningún medio y no está en proceso de revisión en otra revista.
Han obtenido los permisos necesarios para las imágenes y gráficos utilizados.
Han preservado las identidades de los pacientes.