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Espesor corneal central. Factor predictor de ceguera en glaucoma

Espesor corneal central. Factor predictor de ceguera en glaucoma.

RESUMEN

Se realizó un estudio analítico de caso y control con el objetivo de para estimar la carga causal del espesor corneal central  como factor predictor de ceguera en pacientes con glaucoma crónico simple en el Policlínico “Frank País García” de Santiago de Cuba en el año 2013.  El universo estuvo constituido por 189 pacientes glaucomatosos.

Se emplearon variables sociodemográficas y clínicas. Los datos se recogieron mediante encuestas y se procesaron a través de un sistema de base de datos en SPSS 11.5 para Windows y Epidat 3.1. Utilizamos prueba de significación estadística Ji cuadrado con un nivel de significación de p > 0,05 y también el Odds Ratio.

Espesor corneal central. Factor predictor de ceguera en glaucoma.

Policlínico “Frank País García”. 2013.

Orlys Jones Romero. Especialista de primer grado en Medicina General Integral. Especialista de primer grado en Oftalmología. Profesor Instructor.

MSc. Pedro Alexei Bacardí Zapata. Especialista de primer grado en Medicina General Integral. Especialista de primer grado en Medicina Intensiva y Emergencia. Máster en Urgencias Médicas. Profesor Instructor.

Los resultados fueron llevados a tablas estadísticas para su mejor comprensión. Fue evidente el predominio de espesor corneal delgada en pacientes femeninos y en grupos de edades avanzadas. El espesor corneal central delgado se comportó como un  factor de riesgo asociado al desarrollo de la ceguera en paciente con glaucoma.

Palabras clave: Glaucoma / Epidemiologia, Factores de riesgo / Ceguera, Espesor Corneal Central.

INTRODUCCIÓN

La Organización Mundial de la salud (OMS) cataloga al glaucoma como el  responsable de alrededor del 80% de la ceguera evitable. Su variada forma de presentación hace más difícil un resultado satisfactorio, si tenemos en cuenta que la pérdida de visión es irreversible, que el curso normal de la enfermedad es asintomático en sus fases tempranas, difícil de descubrir, y que las opciones terapéuticas son menos atractivas, como pasa por ejemplo con la cirugía de la catarata. (1)

Estudios epidemiológicos actuales han rendido nuevas informaciones sobre la distribución mundial del glaucoma y sus factores de riesgo, enfocados en el glaucoma primario de ángulo abierto, por ser el tipo más frecuente. Se estima su prevalencia en un 2% de la población mayor de 40 años, que supera el 3 al 4% a partir de los 70 años; sus estimaciones son variables, alrededor de 1 a 3% en Europa, 1 a 4% en Asia, 2 a 3% en Australia y 1 a 5% en Estados Unidos; no obstante, las proporciones son mucho mayores en África: entre 1 a 8% o más, y en caribeños de origen africano de 7 a 9%. La incidencia es entre 0,1 a 0,2% por año en las poblaciones principalmente europeas, y más de 0,5% por año en Barbados. En algunos países como Jamaica e Inglaterra ocurren en 1,2% y en otros, llega a 6% en pacientes mayores de 65 años. También países como Argentina, Brasil, India y Tailandia plantean una alta prevalencia de glaucoma crónico simple por encima de 61 años de edad. (2)

Estudios realizados advirtieron que la cantidad de personas en todo el mundo con glaucoma alcanzó 60.5 millones en el 2010 y casi 79.6 para el 2020. (3) Es el causante de entre 10 y 15% de la ceguera mundial, y representa la segunda causa de ceguera en países en desarrollo. (4)

Cuba no está exenta de esta problemática. La OMS plantea que existen 66.900 ciegos y son el glaucoma crónico simple (GCS), la retinopatía diabética, el desprendimiento de retina y la hemorragia vítrea las principales causas de ceguera que afectan a la población. (5)

La etiología  del glaucoma primario de ángulo abierto es difícil de esclarecer, por lo que se piensa que se trata de una neuropatía óptica en la que el nervio óptico se encuentra sumamente sensible a los efectos deletéreos mecánicos de la presión intraocular (PIO), sin embargo, también hay daño estructural de la malla trabecular y del trabéculo-yuxtacanalicular, y posiblemente un factor isquémico del nervio óptico. En esta enfermedad no hay síntomas relevantes hasta que ocurre el daño visual, a menudo muy tarde para salvar una vida útil, de ahí la importancia que cobra el dia presión intraocular (PIO) alta, excavación aumentada de la papila y alteraciones del campo visual, se afirma que se han perdido por lo menos 10 años para que el tratamiento hubiera sido útil. (7)

Muchos son los factores que se plantean en la actualidad, pero el más importante y el único sobre el cual podemos actuar los oftalmólogos es la presión intraocular (PIO); (8) además se citan la edad, la raza, (9) la historia familiar; (10, 11) se plantean factores sistémicos como los vasoespasmos, la cefalea migrañosa, la diabetes; factores oculares como la miopía y más recientemente el grosor corneal central. (12, 13)

Investigaciones recientes han identificado la disminución del espesor de la córnea central (ECC) como un fuerte factor predictivo para la conversión de la hipertensión ocular a glaucoma primario de ángulo abierto. (14) El espesor de la córnea central (ECC) ha surgido como un nuevo factor de riesgo para el desarrollo y progresión del glaucoma, más allá de su influencia en la tonometría por aplanación como parámetro importante en el diagnóstico de la enfermedad. Varios estudiosos del tema relacionan la importancia del espesor de la córnea central (ECC) con el hecho de que córneas más delgadas se asocian con delgadez de otras estructuras oculares de soporte como la lámina cribosa y la esclera, con la consiguiente susceptibilidad del nervio óptico al daño glaucomatoso, esto constituye un tema controversial y no dilucidado aún. (15, 16)

El glaucoma constituye una de las principales causas de ceguera y de baja visión en el mundo con la consecuente discapacidad para los que la padecen, produciendo efectos negativos en el orden personal, laboral, sociofamiliar y económico, de ahí que se incluya dentro de los programas de enfermedades crónicas no transmisibles y de calidad de vida como estrategia a mediano y largo plazo para su control y/o disminución por parte del Ministerio de Salud Pública. Es una enfermedad multifactorial donde es muy importante el conocimiento y control de sus factores de riesgo, ya que de esta manera no solo mejoraríamos la calidad de vida de los pacientes sino que contribuiremos a la prevención de ceguera por glaucoma. Teniendo en cuenta estas consideraciones teóricas y la elevada prevalencia se realizó esta investigación para estimar la carga causal del espesor corneal central  como factor predictor de ceguera en pacientes con glaucoma crónico simple.

MÉTODO

Se realizó un estudio analítico de caso y control con el objetivo de estimar la carga causal del espesor corneal central como factor predictor de ceguera en pacientes con glaucoma