Alternativas Naturales: Recursos No Farmacológicos para Aliviar el Dolor en el Parto
Autora principal: María Salinas Bariain
Vol. XX; nº 11; 646
Natural Alternatives: Non-Pharmacological Resources for Pain Relief During Childbirth
Fecha de recepción: 13 de mayo de 2025
Fecha de aceptación: 10 de junio de 2025
Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com, Volumen XX. Número 11 – Primera quincena de Junio de 2025 – Página inicial: Vol. XX; nº 11; 646
Autores:
María Salinas Bariain, Doctora en Medicina y Cirugía, Hospital Universitario de Navarra (HUN), Pamplona (Navarra), España
Amaia Asin Belzunce, Doctora en Medicina y Cirugía, Hospital Universitario de Navarra (HUN), Pamplona (Navarra), España
Leyre Barrenetxe Sánchez, Doctora en Medicina y Cirugía, Hospital Universitario de Navarra (HUN), Pamplona (Navarra), España
Sara Lacunza Sánchez, Doctora en Medicina y Cirugía, Hospital Universitario de Navarra (HUN), Pamplona (Navarra), España
Resumen
Introducción: El parto es un proceso natural y esencial en la vida de la mujer y la continuidad de la especie. Sin embargo, muchas mujeres experimentan dolor significativo durante el trabajo de parto, afectando su bienestar físico y emocional. Tradicionalmente, se han utilizado intervenciones farmacológicas como epidurales y analgésicos, pero en las últimas décadas ha surgido interés en recursos no farmacológicos, que ofrecen beneficios potenciales y menor impacto en madre y bebé.
Objetivo: Analizar los recursos no farmacológicos utilizados para aliviar el dolor en el parto, evaluando su impacto en percepción del dolor, satisfacción materna y resultados obstétricos.
Material y métodos: Se realizó una revisión sistemática de estudios clínicos publicados hasta abril de 2025 en bases como PubMed, Scopus y Cochrane. Se seleccionaron investigaciones que evaluaron la efectividad de técnicas no farmacológicas en diferentes contextos culturales y sanitarios, incluyendo datos sobre percepción del dolor, satisfacción y resultados obstétricos.
Resultados: El análisis muestra que recursos como técnicas de relajación, hidroterapia, masajes, cambios de posición, música y apoyo emocional reducen significativamente la percepción del dolor, mejoran la satisfacción materna y favorecen resultados obstétricos positivos. La hidroterapia y las posiciones en movimiento facilitan el progreso del parto y disminuyen la necesidad de medicamentos y intervenciones. La presencia de apoyo emocional y técnicas de relajación crea un ambiente positivo, promoviendo un parto más natural y menos traumático. La evidencia respalda que estos recursos contribuyen a partos más seguros, con menos complicaciones y mayor satisfacción.
Conclusiones: Los recursos no farmacológicos son estrategias efectivas para aliviar el dolor, mejorar la experiencia y promover resultados obstétricos positivos. Su integración en la atención obstétrica debe fomentarse, garantizando opciones respetuosas y centradas en la mujer, promoviendo un parto más humanizado y saludable.
Palabras clave
Dolor de parto, matronas, terapias alternativas, obstetricia.
Abstract
Introduction: Childbirth is a natural and essential process in a woman’s life and the continuation of the human species. However, many women experience significant pain during labor, affecting their physical and emotional well-being. Traditionally, pharmacological interventions such as epidurals and analgesics have been used, but in recent decades, interest has grown in non-pharmacological resources, which offer potential benefits and a lower impact on both mother and baby.
Objective: To analyze the non-pharmacological resources used to alleviate pain during childbirth, evaluating their impact on pain perception, maternal satisfaction, and obstetric outcomes.
Materials and Methods: A systematic review of clinical studies published up to April 2025 was conducted using databases such as PubMed, Scopus, and Cochrane. Studies that evaluated the effectiveness of non-pharmacological techniques in different cultural and healthcare contexts were selected, including data on pain perception, satisfaction, and obstetric results.
Results: The analysis shows that resources such as relaxation techniques, hydrotherapy, massages, positional changes, music, and emotional support significantly reduce pain perception, improve maternal satisfaction, and promote positive obstetric outcomes. Hydrotherapy and movement-based positions facilitate labor progress and decrease the need for medications and interventions. The presence of emotional support and relaxation techniques creates a positive environment, promoting a more natural and less traumatic birth. Evidence supports that these resources contribute to safer deliveries, with fewer complications and higher satisfaction.
Conclusions: Non-pharmacological resources are effective strategies for pain relief, enhancing the childbirth experience, and promoting positive obstetric outcomes. Their integration into obstetric care should be encouraged, ensuring respectful, woman-centered options that promote a more humanized and healthy birth process.
Keywords
Labor Pain, Nurse Midwives, Alternative Therapies, Obstretics.
Introducción
El parto es un proceso fisiológico fundamental en la vida de la mujer y en la continuidad de la especie humana. Sin embargo, a pesar de su carácter natural, muchas mujeres experimentan niveles significativos de dolor durante el trabajo de parto, lo que puede afectar tanto su bienestar físico como emocional. La gestión del dolor en el parto ha sido tradicionalmente abordada mediante intervenciones farmacológicas, como la epidural o analgésicos sistémicos. No obstante, en las últimas décadas ha emergido un interés creciente por explorar recursos no farmacológicos como alternativas o complementos a las técnicas convencionales, debido a sus beneficios potenciales y menor impacto en la madre y el bebé.
Los recursos no farmacológicos para el alivio del dolor en el parto comprenden una variedad de técnicas y estrategias que buscan reducir la percepción del dolor sin recurrir a medicamentos. Entre ellas se encuentran métodos como la respiración controlada, técnicas de relajación y visualización, masajes, acupuntura, hidroterapia, cambios en las posiciones corporales, música y apoyo emocional. Estas intervenciones se basan en principios fisiológicos y psicológicos que favorecen la reducción del estrés, mejoran la percepción del control durante el proceso y promueven una experiencia más positiva para la parturienta.
El interés por estos recursos responde también a consideraciones culturales, éticas y de seguridad. Muchas mujeres prefieren evitar los efectos secundarios asociados con los analgésicos farmacológicos o desean mantener un mayor grado de autonomía durante el parto. Además, diversos estudios sugieren que las técnicas no farmacológicas pueden contribuir a disminuir la duración del trabajo de parto, reducir la necesidad de intervenciones médicas adicionales y mejorar los resultados maternos e infantiles.
A pesar del creciente reconocimiento de estos recursos, existe aún cierta variabilidad en su aplicación clínica y en la evidencia científica que respalda su eficacia. Por ello, resulta fundamental realizar una revisión exhaustiva que permita evaluar los resultados obtenidos hasta ahora respecto a su efectividad en el alivio del dolor durante el parto. Este análisis contribuirá a identificar las prácticas más efectivas y seguras, así como a promover su integración en los modelos de atención obstétrica centrados en la mujer.
La justificación de este trabajo radica en la necesidad de ofrecer información basada en evidencia que apoye decisiones clínicas informadas y fomente prácticas respetuosas con las preferencias y derechos de las mujeres embarazadas. Además, busca contribuir al conocimiento científico sobre alternativas seguras y efectivas para mejorar la experiencia del parto sin depender exclusivamente de recursos farmacológicos.
En resumen, esta investigación pretende aportar una visión integral sobre los recursos no farmacológicos para el alivio del dolor durante el parto, resaltando sus beneficios potenciales y limitaciones actuales. Se espera que los hallazgos sirvan para orientar futuras investigaciones y promover políticas sanitarias que integren estas técnicas como parte esencial del cuidado obstétrico centrado en la mujer.
Objetivo
El presente estudio tiene como objetivo principal analizar los recursos no farmacológicos utilizados para aliviar el dolor en el parto, evaluando su impacto en la percepción del dolor, satisfacción materna y resultados obstétricos.
Material y métodos
Se realizó una revisión sistemática de estudios clínicos publicados hasta abril de 2025 que abordan las intervenciones no farmacológicas para el alivio del dolor en el parto. La selección de estudios incluyó investigaciones realizadas en diferentes contextos culturales y sanitarios, con el fin de obtener una visión integral y representativa de la efectividad y aplicabilidad de estas técnicas en diversas poblaciones.
El proceso de búsqueda se llevó a cabo en varias bases de datos académicas reconocidas, como PubMed, Scopus, Web of Science, Cochrane Library y Google Scholar. Se emplearon términos de búsqueda específicos relacionados con «intervenciones no farmacológicas», «alivio del dolor en el parto», «técnicas de relajación», «terapia de agua», «masajes», «posiciones de parto», «apoyo emocional» y otros sinónimos relevantes. Además, se aplicaron filtros para limitar los resultados a estudios clínicos, ensayos controlados aleatorizados, estudios observacionales y revisiones sistemáticas publicadas hasta abril de 2025.
La inclusión de estudios se realizó siguiendo criterios predefinidos: (1) estudios que evaluaron la efectividad de recursos no farmacológicos en la reducción del dolor durante el parto; (2) investigaciones que reportaron datos sobre percepción del dolor, satisfacción materna o resultados obstétricos; (3) estudios realizados en diferentes entornos culturales y sistemas de salud para garantizar la diversidad de contextos; y (4) publicaciones en idiomas inglés, español y otros idiomas relevantes, siempre que la traducción estuviera disponible.
Por otro lado, se excluyeron estudios que no proporcionaron datos específicos sobre las intervenciones no farmacológicas y estudios con metodologías no rigurosas o con sesgos evidentes.
El proceso de selección de los estudios se realizó en varias fases: primero, una revisión de los títulos y resúmenes para descartar aquellos que no cumplían con los criterios de inclusión; posteriormente, una revisión completa de los textos seleccionados para confirmar su pertinencia y calidad metodológica.
Este proceso permitió identificar patrones, fortalezas y debilidades en la evidencia existente, así como realizar comparaciones entre diferentes contextos culturales y sanitarios para comprender mejor la aplicabilidad y efectividad de las intervenciones no farmacológicas en distintas poblaciones.
La importancia de este tema radica en la búsqueda de opciones seguras, efectivas y que promuevan una experiencia positiva para la madre, además de reducir posibles complicaciones asociadas a intervenciones farmacológicas.
Resultados
El proceso de parto es una experiencia única y significativa en la vida de una mujer, pero también puede estar acompañado de dolor intenso y emocionalmente desafiante. En los últimos años, ha habido un creciente interés en el uso de recursos no farmacológicos para aliviar el dolor durante el parto, debido a sus beneficios potenciales, menor riesgo de efectos secundarios y mayor participación activa de la madre en su proceso de parto. Este análisis se centra en evaluar cómo estos recursos influyen en la percepción del dolor, la satisfacción materna y los resultados obstétricos, aportando una visión integral de su efectividad y utilidad clínica.
Entre los recursos no farmacológicos más comunes se encuentran técnicas de relajación, respiración controlada, terapia de agua, masajes, cambios de posición, aromaterapia, música, apoyo emocional y técnicas de visualización. Estas intervenciones buscan reducir la percepción del dolor, mejorar la experiencia de parto y promover resultados obstétricos favorables, como un parto vaginal sin complicaciones y menor uso de intervenciones médicas.
Numerosos estudios indican que los recursos no farmacológicos pueden disminuir significativamente la percepción del dolor en el parto. La técnica de respiración controlada y la relajación, por ejemplo, ayudan a reducir la ansiedad y el estrés, que son factores que amplifican la sensación dolorosa. La terapia de agua, al sumergir a la mujer en un ambiente cálido y relajante, también ha demostrado disminuir la percepción del dolor, facilitando una experiencia más cómoda y controlada.
En este sentido, la música y el apoyo emocional, incluyendo la presencia de un acompañante, contribuyen a crear un ambiente de calma y seguridad, lo que puede reducir la percepción subjetiva del dolor. La posición vertical y el movimiento durante el trabajo de parto, como caminar o cambiar de postura, también ayudan a disminuir la intensidad del dolor y mejorar la comodidad.
La satisfacción materna con el proceso de parto está estrechamente relacionada con la percepción del control, la participación activa y la sensación de apoyo durante el parto. Los recursos no farmacológicos, al promover una mayor participación de la mujer en su experiencia, suelen estar asociados con niveles más altos de satisfacción. La sensación de control y la reducción del dolor contribuyen a que la mujer perciba su parto como una experiencia positiva, incluso en presencia de complicaciones o intervenciones médicas.
Estudios muestran que las mujeres que utilizan técnicas no farmacológicas reportan mayor satisfacción, mayor sensación de empoderamiento y menor incidencia de sentimientos negativos postparto, como la depresión o la ansiedad. Además, la presencia de apoyo emocional y técnicas de relajación favorecen un ambiente más positivo, fortaleciendo la relación entre la madre y el equipo de salud.
Desde el punto de vista obstétrico, el uso de recursos no farmacológicos puede influir en diversos resultados, como la duración del trabajo de parto, la necesidad de intervenciones médicas y la tasa de partos vaginales. La evidencia sugiere que estas técnicas pueden reducir la duración del trabajo de parto, disminuir la necesidad de analgesia farmacológica y reducir la incidencia de partos instrumentales o cesáreas. Por ejemplo, la terapia de agua y las técnicas de movimiento y posición han demostrado facilitar el progreso del parto, promoviendo un ambiente más cómodo y menos estresante para la madre.
La terapia de agua, en particular, ha sido ampliamente estudiada y se ha encontrado que ayuda a aliviar el dolor, reducir la ansiedad y mejorar la movilidad durante el trabajo de parto. Sumergirse en agua tibia puede disminuir la percepción del dolor, lo que a su vez puede reducir la necesidad de medicamentos analgésicos, que a menudo tienen efectos secundarios tanto para la madre como para el bebé. Además, el agua puede facilitar cambios en las posiciones de la madre, promoviendo un avance más eficiente del trabajo de parto y disminuyendo la fatiga materna.
Por otro lado, las técnicas de movimiento y posición, como caminar, cambiar de postura, usar pelotas de parto o adoptar posiciones verticales, también han mostrado beneficios significativos. Estas prácticas pueden ayudar a aliviar el dolor, mejorar la circulación sanguínea y facilitar la rotación del bebé, lo que puede acelerar el proceso de parto. La movilidad durante el trabajo de parto también puede reducir la probabilidad de intervenciones médicas innecesarias, como el uso de fórceps o la realización de cesáreas, al promover un progreso más natural y efectivo.
Además, el apoyo emocional y psicológico que proporcionan estas técnicas no farmacológicas puede tener un impacto positivo en la experiencia de parto. La sensación de control y participación activa en el proceso puede disminuir el estrés y la ansiedad, que son factores que pueden influir en la duración y complicaciones del trabajo de parto. La presencia de acompañantes, técnicas de respiración y relajación también contribuyen a crear un entorno más positivo y menos traumático para la madre.
Es importante destacar que, aunque estas técnicas ofrecen múltiples beneficios, su efectividad puede variar según cada mujer y las circunstancias específicas del parto. Por ello, es fundamental que el equipo de salud evalúe cada caso individualmente y brinde información adecuada para que la madre pueda tomar decisiones informadas sobre las opciones disponibles. En resumen, la integración de recursos no farmacológicos en la atención obstétrica puede mejorar significativamente los resultados, promoviendo partos más seguros, menos intervenciones y una experiencia más satisfactoria para la madre y el bebé.
Conclusiones
La utilización de recursos no farmacológicos en el manejo del dolor durante el parto ha cobrado una importancia significativa en la atención obstétrica moderna, promoviendo un enfoque más humanizado y respetuoso con la experiencia de la mujer. Estos métodos, que incluyen técnicas como la respiración controlada, la hidroterapia, el uso de bolas de parto, masajes, cambios de posición y apoyo emocional, ofrecen alternativas seguras y complementarias a las intervenciones farmacológicas tradicionales. La evaluación de su impacto revela que estos recursos no solo contribuyen a reducir la percepción del dolor, sino que también mejoran la satisfacción materna y pueden influir positivamente en los resultados obstétricos.
En primer lugar, diversos estudios indican que las técnicas no farmacológicas son efectivas para disminuir la intensidad del dolor durante el trabajo de parto. La respiración profunda y controlada ayuda a las mujeres a manejar mejor las sensaciones dolorosas, promoviendo una sensación de control y calma. La hidroterapia, mediante el uso de baños calientes, ha demostrado reducir significativamente la percepción del dolor, además de favorecer la relajación muscular. La utilización de bolas de parto y cambios de posición favorecen la movilidad, lo cual puede disminuir la tensión y el malestar, facilitando un proceso de parto más cómodo. Estos recursos, al ser menos invasivos, también minimizan los efectos secundarios asociados a los analgésicos farmacológicos, contribuyendo a un parto más natural y respetuoso con las preferencias de la mujer.
En segundo lugar, la satisfacción materna se ve notablemente influenciada por la utilización de recursos no farmacológicos. Las mujeres que emplean estas técnicas reportan mayor sensación de control, autonomía y participación en su proceso de parto, aspectos que están estrechamente ligados a una experiencia positiva. La presencia de apoyo emocional, acompañamiento y técnicas de relajación generan un ambiente más cálido y empático, fortaleciendo la percepción de una atención centrada en sus necesidades y deseos. Como resultado, muchas mujeres expresan mayor satisfacción con su experiencia de parto, lo que puede tener efectos positivos en su bienestar psicológico y en la relación con su bebé.
Por último, en cuanto a los resultados obstétricos, el uso de recursos no farmacológicos ha mostrado efectos beneficiosos en algunos aspectos, como la reducción de la duración del trabajo de parto, menor necesidad de intervenciones médicas y una mayor probabilidad de parto vaginal sin complicaciones. Sin embargo, es importante señalar que estos resultados pueden variar dependiendo de la implementación y la individualidad de cada caso. La evidencia sugiere que, en general, estos métodos contribuyen a un proceso de parto más natural y menos intervenido, favoreciendo la salud tanto de la madre como del recién nacido.
En conclusión, los recursos no farmacológicos representan una estrategia valiosa y efectiva para aliviar el dolor en el parto, con beneficios que van más allá de la simple reducción del malestar. Mejoran la percepción del dolor, aumentan la satisfacción materna y pueden influir positivamente en los resultados obstétricos, promoviendo un parto más respetuoso, empoderado y saludable. La integración de estas técnicas en la atención obstétrica debería ser fomentada, garantizando que las mujeres tengan acceso a opciones que respeten sus preferencias y promuevan su bienestar integral durante uno de los momentos más importantes de sus vidas.
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