Factores de riesgo asociados a la infección de herida quirúrgica y principales medidas preventivas
Las heridas quirúrgicas se definen como la incisión o corte a través de la piel realizada durante una cirugía.
AUTORES:
- Adrián Vázquez Pérez. Enfermero. (Complejo Hospitalario Juan Ramón Jiménez).
- Estela Domínguez Carranza. Enfermera (Complejo Hospitalario Juan Ramón Jiménez).
- Juan Manuel Pavón Reyes. Enfermero (Complejo Hospitalario Juan Ramón Jiménez).
Palabras clave: heridas, cirugía, infección, prevención, riesgo.
INTRODUCCIÓN
Su cicatrización lleva a cabo una secuencia que se inicia en el mismo momento en el que se produce la lesión, proseguido por la coagulación, proceso inflamatorio, fibroplasia y angiogénesis y concluyendo con la formación de la cicatriz.
Estas heridas son susceptibles de infectarse, con mayor probabilidad en las fases tempranas de su recuperación, provocando graves efectos tanto a nivel local como sistémico.
DESARROLLO
Los microrganismos patógenos pueden provenir de tres focos:
- Propio paciente.
- Personal sanitario.
- Entorno quirúrgico.
Los principales factores de riesgo que se asocian a la infección de las heridas quirúrgicas son:
- Tipo de técnica quirúrgica.
- Tipo de lesión: limpia, limpia-contaminada, contaminada o sucia.
- Complejidad de la intervención.
- Factores inherentes al paciente (estado general previo, edad, problemas hematológicos,…).
- Necesidad de colocación de drenajes.
- Realización o ausencia de profilaxis antibiótica.
- El entorno quirúrgico (quirófano bien equipado, personal sanitario entrenado, materiales estériles, ambiente adecuado,…).
Las principales medidas preventivas se pueden dividir en prequirúrgicas y posquirúrgicas
MEDIDAS PREQUIRÚRGICAS:
- Higiene corporal del paciente, a ser posible dos horas antes de la intervención.
- Retirar prótesis, anillos, pendientes,…
- Uñas limpias y recortadas.
- Eliminar el vello corporal que se vea afectado por la intervención.
- Pintar la zona quirúrgica con antiséptico.
- Realizar aseo bucal.
MEDIDAS POSTQUIRÚRGICAS
Una de los principales mecanismos de transmisión de gérmenes es mediante el contacto con las manos con la herida quirúrgica, tanto del propio paciente como del personal sanitario, por lo tanto se deben seguir las siguientes recomendaciones:
- Lavado higiénico de manos previo a manipular la herida e inmediatamente después.
- Usar bata y mascarilla.
- Se evitara tocar una herida abierta sin guantes estériles.
- Si una herida está infectada, será recomendado cambiarse de guantes tras la retirada del apósito.
- El material e instrumental será exclusivo para cada cura.
- Evitar introducir el carro de curas en salas donde haya pacientes con heridas infectadas.
- Las curas de heridas con conocimiento de estar infectadas se realizarán las últimas, para intentar evitar así riesgos de contaminación del resto de heridas a curar.
- Si se observa infección por primera vez en una herida, es recomendable solicitar un cultivo microbiológico de la misma.
CONCLUSIÓN
La infección de las heridas quirúrgicas supone un gran impacto para el sistema sanitario, siendo muy importante intentar controlar los factores de riesgo que facilitan su incidencia, así como llevar a cabo todas las medidas preventivas posibles. En los casos en los que se detecte una herida infectada, es fundamental realizar un rápido diagnóstico y llevar a cabo antibioterapia adecuada de forma precoz.