Educación sanitaria sobre la picadura de un agua mala
Objetivo
Conocer los cuidados de Enfermería ante la picadura de un agua mala.
Educación sanitaria sobre la picadura de un agua mala
Autores:
- María del Pilar Tierra Burguillo. Phd, enfermera
- Noelia Murez Mójica. Enfermera
- Arancha Mójica Blanco. Enfermera
Metodología
Se ha realizado una búsqueda bibliográfica con las palabras Clave: Educación en Salud, Atención de Enfermería, Salud y Enfermería en Salud Comunitaria en el buscador Google Académico y en las bases de datos Dialnet y PubMed en los documentos de los últimos 5 años.
Resultados
Las aguas malas o Carabelas Portuguesas tienen su cuerpo casi transparente y sus tentáculos con células urticantes pueden causar daño en el momento en el que entran en contacto con la piel de una persona.
La sintomatología más frecuente es: escozor en la piel, ardor, dolor, e incluso debilidad, escalofríos y vómitos. Hay casos en los que se puede ver agravada la situación, pero son las menos.
Aquella persona que experimente una picadura de agua mala debería acudir a un puesto de salud o centro de salud para su tratamiento o autotratarse, en el caso de saber cómo hacerlo correctamente. Para una sintomatología local no grave, el tratamiento a realizar sería la aplicación de agua salada y nunca dulce, ya que esto liberaría toxinas con el empeoramiento de la situación. En el supuesto de quedar restos de tentáculos en la piel deberían retirarse con pinzas o guantes, nunca realizarlo mediante la frotación. Para el alivio de la inflamación se puede usar el frío local, que no debe ser hielo directo, otra opción es el uso de vinagre local diluido. Es aconsejado el uso de un antiséptico y tapar la herida para que no deje marca.
Conclusión
Enfermería debería asesorar a la población, sobre todo costera, para que se realicen curas correctas y sin complicaciones sobre todo en verano que es cuando más ocurren estos accidentes.