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Caso clínico: Plan de cuidados en paciente con trastorno de la conducta alimentaria

Caso clínico: Plan de cuidados en paciente con trastorno de la conducta alimentaria

La anorexia y la bulimia son dos trastornos de la conducta alimentaria muy presentes en la actualidad y que son los más comunes en las consultas del servicio de la Unidad de Trastornos de la Conducta Alimentaria de nuestro centro.1. RESUMEN

Por eso, el presente trabajo pretende elaborar un plan de cuidados adaptado a las necesidades de una paciente de hospital de día de este servicio. Para ello, se utilizan las necesidades de Virginia Henderson.
Autora: Gema Santacreu Vallés. Enfermera del Hospital Universitari Joan XXIII de Tarragona.
Palabras clave: anorexia nerviosa, bulimia nerviosa, trastorno de la conducta alimentaria, plan de cuidados.

2. INTRODUCCIÓN:

Trastorno de la conducta alimentaria:
La anorexia nerviosa, la bulimia y los trastornos por afartament son enfermedades que se caracterizan por la adopción de conductas anómalas ante la alimentación, y por la insatisfacción ante la propia imagen corporal. La persona que los sufre come muy poco o impulsivamente hasta hartarse, vomita, hace ejercicio de forma exagerada, abusa de los laxantes o toma diürètics, son algunas de las manifestaciones posibles de este malestar que afecta globalmente a la persona
Los TCA afectan más del 5% de los adolescentes y jóvenes, pero también se producen en adultos. Están causados por una combinación de factores biológicos, psicológicos, sociales y culturales, que hacen que la persona llegue a afectar la regulación de diferentes aspectos de la persona como el cuerpo, la mente, la conducta y las relaciones con el entorno y las personas del mismo entorno.
La anorexia nerviosa se caracteriza por començar y traer una dieta restrictiva con el deseo de llegar a un peso por debajo del normal y mantenerlo. Esta pérdida de peso en un inicio es voluntaria, pero después la persona enferma sufre alteraciones sobre la regulación y la orden de diferentes procesos biológicos, psicológicos y sociales.
Hay dos tipos de anorexia nerviosa:
• Restrictiva: Se trata de un cuadro clínico donde los pacientes consiguen un bajo peso a través de dietas muy restrictivas, ayuno muy prolongado y abundante ejercicio físico de intensidad elevada. Estos pacientes no recurren a atracons ni purgas.
• Purgativa: Son pacientes que recorren de forma puntual o sistemàtica a atracones o purgas (vómitos, laxantes o diürètics). Debido a la pérdida de control de los impulsos propio de este grupo, las personas son más susceptibles a sufrir mayor variabilidad emocional, así como tomar sustancias aditivas (alcohol, tabaco,etc)
La bulimia nerviosa se distingue de la anorexia por la adopción de conductas de purga (vómitos, ejercicio en exceso, utilización de laxantes, etc) después de los afartaments con la única finalidad de no aumentar de peso o disminuirlo.
Hay dos tipos de bulimia nerviosa:
• Purgativa: Describe a las personas que a a menudo se autoindueixen el vómito, abusan de laxante, diürètics y enemas.
• No purgativa: Describe a las personas que regularmente hacen dejú o hacen muchas dietas, o realizan ejercicio de forma compulsiva. Este tipo sólo se mujer en aproximadamente del 6 al 8% de los casos de bulimia.

Veremos las diferencias más claras en la siguiente tabla (ver anexo 1) y las diferencias que hay entre el DSM-IV y el CIE (ver anexo 2)
El trastorno por atracón, en que se ingieren grandes cantidades de comer, tiene como consecuencia inmediata el sobrepeso, la obesidad y todos los riesgos que estado asociados (diabetes, hipertensión, hipercolesterolemia, etc)
Todos estos TCA producen alteraciones biológicas y psicológicas importantes en las personas enfermas, y también los ocasionan un grave proceso de desadaptación al entorno que los aísla de los amigos y amigas y altera seriamente las relaciones con la familia.
Cambios físicos y orgánicos
• Alteraciones: endocrinologicas, cardiovasculares, neurológicas, aparato digestivo, dentales, tejido óseo, problemas hematológicos, desequilibrio electrolítico.
En la siguiente tabla veremos las manifestaciones más frecuentes en la anorexia nerviosa (ver anexo 3)
Cambios conductuales (comunes a AN y BN):
• Dieta restrictiva y/o atracones
• Conductas de purga (vómitos, laxantes, diürètics)
• Alteraciones en la forma de comer y rechazo de ciertos alimentos
• Aislamiento social y familiar
• Conductas obsesivas y realización de rituales
• Conductas impulsivas y autolesiones (esconder comer, engañar…)
Cambios cognitivos (comunes a AN y BN):
• Excesiva preocupación para engordar
• Constantes pensamientos erróneos sobre la comida, peso y figura
• Sobrestima su peso y dimensiones
• Dificultad de concentración y memoria
Cambios emocionales (comunes a AN y BN):
• Cambios en el carácter
• Inestabilidad emocional, apatía, sentimientos de desvalorització, ideas autolíticas
• Ansiedad

En muchos casos resulta aconsejable tratamiento especializado que facilite el acceso a una información y oportunidades para la recuperación en el menor plazo posible
El tratamiento pretende acompañar a la persona y su familia en la reordenación y recuperación de estos procesos de una forma segura, facilitando, que puedan conseguir unos objetivos mínimos de salud, autocora y bienestar personal y social.
Tienen que llevar a cabo el tratamiento de los TCA equipos multe-disciplinarios de profesionales especializados para atender las complicaciones médicas, psicológicas, sociales y familiares que surgen. No hay un tratamiento ´nic estándar de la enfermedad que se tiene que adaptar a las características.
La persona afectada y su familia puede perder temporalmente su capacidad de funcionar adecuadamente, mostrando dificultad de poner en marcha sus recursos persona. Durante el tratamiento es fundamental facilitar la comunicación en la familia para la activación oportuna de las fuerzas, apoyos y compromisos necesarios para facilitar el proceso de recuperación.
Se trata de facilitar la capacidad de la persona para solicitar ayuda útil para ella que asuma la responsabilidad de su autocora.
En función de la edad de cada persona, hay que consultar su pediatra o médico, y si la persona se niega a recibir ayuda y tratamiento porque considera que no sufre ninguna enfermedad, hay que hacerle ver la impotencia de los riesgos físicos, psicológicos y sociales a que está expuesta, su gravedad y la necesidad de seguir un tratamiento especializado cuando haga falta.
El papel de la familia, y en general, del entorno a la hora de apoyar a lapersona que sufre un trastorno alimentario puede ser diferente dependiente de l momento del desarrollo y la edad de la persona, esto cómo de las particularidades naturales de cada situación concreta
Suele resultar de utilidad una actitud disponible, comprensiva y respetuosa con los sentimientos de las personas y de su espacio de desarrollo personal Así mismo tener información adecuada que facilite la tranquilidad en la toma de decisiones y a la hora de ofrecer el mejor apoyo posible también se recomendable.
El grado de implicación de la familia en el tratamiento es una cuestión que puede ser “pactada ”durante el tratamiento, cuando se dan las condiciones adecuadas de comunicación de las necesidades y deseos en este sentido entre la persona y la familia
Recomendaciones para evitar riesgos:
Evitar el auto imposición de dietas restrictivas y/o peculiares de alimentación, así como la adhesión excesiva a los modelos culturales y al estereotipo físico de estar delgado, son un grave peligro para la salud y una puerta de entrada a los TCA
Para evitar el rico de los TCA son muy importantes los hábitos saludables en l0alimentación de la familia: dietas completas, equilibradas y en compañía,
Al menos un golpe a l día, para comer o para cenar, la familia se tendría que reunir para compartir la comida.
También habría que fomentar el espíritu crítico frente a las exigencias de la moda y la exagerada valoración de la apariencia física.

3.RECOGIDA DE DATOS Y ANTECEDENTES DE LA PACIENTE

RTE es una mujer de 39 años con trastorno de la conducta alimentaria (TCA) que ingresa de forma involuntaria el día 10/10/2017 a la URTA procedente de la Unidad de Agudos de Psiquiatría del Hospital de Bellvitge para tratamiento y seguimiento de anorexia nerviosa de tipo restrictivo. Los últimos ingresos se caracterizan por compromiso vital. Acude acompañada de su familia (marido, hijo, y sus padres).
La actitud que tiene ante el ingreso en un principio es de rechazo, pero ahora a la actualidad lo acepta.
Diagnòstic médico: Anorexia Nerviosa de tipo restrictiva.
Valoración sociofamiliar: Nace en Madrid y un golpe se casa, se traslada con su marido en Zaragoza por motivos de trabajo (puesto que él es ingeniero de caminos, puertos y canales). Allí estuvieron viviendo durante dos años hasta el 2012, donde por motivos de trabajo del marido, se trasladan a Tarragona. Tienen un hijo de 3 años.
Es la mayor de dos hermanos (el hermano tiene 4 años menos).
Con motivo del empeoramiento de su enfermedad, sus padres se mudan en Tarragona para cuidar de ella y de su hijo en abril del 2014
Empezó a estudiar farmacia cuando tenía 21 años y acabó al 2006. Hasta 2012 trabajaba de adjunta a una farmacia.
Historia familiar: No alcoholismo, no toxicomanías, no ninguna enfermedad mental además de la anorèxia nerviosa de tipo purgativa y no tiene ninguna otra enfermedad orgánica.
Ingresos económicos: Ella no trabaja desde el 2012, y los únicos ingresos que tiene su familia sueño procedentes del sueldo de su marido.
Vivienda: Vive en un primer piso de un edificio de Tarragona, ante el Parque Central. El hecho de vivir tan cerca dice que la hace sentir bien, puesto que los fines de semana van allí a dar un tumbo.
Valoración del estado físico:
No ninguna enfermedad endocrina especificada, ni TCE, ni AVC, ni ninguna enfermedad neurológica, ni cardiològica (ECG bien), no ha tenido ningún tipo de cáncer, ni ninguna otra enfermedad digestiva.
Sólo ha tenido un proceso infeccioso: Neumonía durante su ingreso en el hospital de Bellvitge.
Antecedentes familiares de enfermedades orgánicas: Según su árbol genealógico, muchos familiares tenían Corea de Hungtinton
Pruebas que se le han realizado: Analítica, ECG, control de peso y talla.
Signosvitales: Fecha de la valoración 18/12/2017
Pes: 54 Kg Corta: 1.71 m. IMC: 18,49 TA: 112/68 FC: 59
Audición: Normal. Visión: Normal.
Nivel de consciència: Alerta. Es una persona que hoy en día, acude en el Hospital de Día de la URTA, por lo tanto, se puede hablar con ella tranquilamente sin ningún tipo de dificultad.
Sido emocional: Eutímica. Ella dice estar contenta, establo actualmente
Factor estresando: Conflictos con la relación con su madre en casa. Ella explica que su madre es “ manipuladora”.
Inteligencia: Adaptada al entorno. Le gusta leer el diario, libros sobre historia de España y le gusta ver programas de televisión que tienen que ver con la salud.
Expresión verbal y lenguaje: Normal. Le gusta expresarse bien, con un lenguaje muy esmerado y con expresiones muy correctas.
Aspecto: Adecuado. Acude cada día a la Unidad con texanos y con un jersey de lana caliente, porque tiene siempre frío. Expresión facial: alerta. Postura: Decaído (se le explican cada día técnicas posturales porque corrija su postura). Forma de andar: Lenta.
Tratamiento: Actualmente no toma ningún tipo de medicación, pero acude cada día puntual y acompañada a nuestra Unidad, por lo tanto podemos decir que tiene una cumplimiento adecuado al tratamiento.

4.VALORACIÓN DE LAS NECESIDADES según Henderson:

1. RESPIRACIÓN:
La paciente no refiere haber tenido ningún tipo de enfermedad respiratoria, pero si que refiere haber pasado por procesos gripals e incluso una neumonía tóxica que la hizo estar ingresada unos días en el Hospital Universitario Joan XXIII.

2. ALIMENTACIÓN E HIDRATACIÓN:
La paciente refiere sequedad de piel pero que intenta hidratarla cada día mediante la aplicación de cremas hidratants. Se observa además, ausencia de brillantez capilar. Uñas no quebradizas.
Explica que durante su niñez había sido una chica más bien grassoneta y grande (puesto que es muy alta), pero que a partir de la adolescencia es cuando empezó a hacer dietas y a hacer restricción de alimentos.
Antes y después de las comidas, la paciente tiene que rellenar una hoja con una numeración que le da en su estado de ansiedad del 1 que significa bajo nivel de ansiedad hasta el 10 que significa máximo nivel de ansiedad. Casi casi siempre antes de comer, tiene niveles de ansiedad entre 7 y 8 y después de comer, sobre 5-6.
Suele pasar un tiempo de entre 30 y 45 minutos comiendo, lo hace de manera ordenada, primero el primer plato, después el segundo plato y finalmente los postres.
Refiere que cuando está en casa, suele comer con su familia, no la dejan que coma suela.
Hace un tiempo explica que normalmente escondía comer a los bolsillos, echaba zumo a las plantas, pero que actualmente ya no hace todo esto.
Se detecta que en determinados platos realiza rituales por ejemplo a la hora de comer espaguetis está mucho rato porque queden muy enrollados al tenedor y también se observa que se limpia la boca mucho a a menudo.
No realiza hoy en día conductas de purga (vómitos provocados, uso de laxantes o diureticos) pero explica que tiene episodios de diarrea cuando está nerviosa pero que esto le ha pasado desde siempre, que ella recuerde.