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Enfermería de práctica avanzada: una solución con evidencia científica para el sistema sanitario chileno

Enfermería de práctica avanzada: una solución con evidencia científica para el sistema sanitario chileno

Autor principal: Jorge Fuentes Ascencio

Vol. XVIII; nº 13; 635

Advanced practice nursing: a solution with scientific evidence for the Chilean health system

Fecha de recepción: 05/06/2023

Fecha de aceptación: 29/06/2023

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XVIII. Número 13 Primera quincena de Julio de 2023 – Página inicial: Vol. XVIII; nº 13; 635

Autor:

Jorge Fuentes Ascencio1.

  1. Carrera de Enfermería, Universidad Santo Tomás de Chile, Talca. Chile. PhD Docente. https://orcid.org/0000-0002-6445-9430

Introducción

La actual situación demográfica y epidemiológica de Chile ha evolucionado hacia las patologías crónicas (1), por lo tanto, la mejora en los indicadores de salud permite aumentar la expectativa de vida de la población. Sin embargo, dicha prolongación debe ser lo más funcional y con la mejor calidad de vida posible.

Actualmente el sistema de salud chileno carece de cobertura para los pacientes crónicos, puesto que solo un tercio de ellos posee a lo menos un control al año, y la principal causa la constituye la escasez de oferta médica para atender a la gran cantidad de crónicos (2). Este déficit médico golpea fuertemente el bienestar de los usuarios, y los siguientes tres factores son el argumento de esta problemática:

  • Primero, el control de pacientes crónicos cardiovasculares que requieren ajuste en los medicamentos, solicitud de exámenes, derivaciones a niveles superiores, modificación medicamentosa de urgencia, etc., no encuentran horas médicas disponibles en el centro de salud familiar (Cesfam) donde se atienden.
  • Segundo, los pacientes terminales con cáncer que requieren manejo del dolor en domicilio están totalmente abandonados los días no hábiles o fines de semana, pues no cuentan con el acceso oportuno a la terapia analgésica, al no disponer de médicos para indicaciones de fármacos en estos casos, lo cual genera una gran desesperación en la familia, pues no saben cómo manejar el dolor de su ser querido, lo que atenta con el derecho a una muerte digna y sin dolor.
  • Finalmente, la asistencia comunitaria en el domicilio de las familias con alto riesgo, la modificación de indicaciones farmacológicas, ajustes terapéuticos, entre otros, impiden que la acción de la visita domiciliaria integral alcance una eficacia total en su ejecución.

Como sistema de salud podemos abordar un nuevo desafío, esta vez con el aporte de enfermería. Chile, al igual que otros países, necesita que las enfermeras y enfermeros prescriban fármacos bajo protocolos estandarizados y con algoritmos de actuación que faciliten la solución eficaz de los problemas de salud que aquejan a la población (3),  con el único objetivo de solucionarle el problema al paciente y de ningún modo reemplazar al médico.

Establecer esta nueva forma de cooperar y contribuir a una solución, con el respaldo legal del ejercicio de la profesión, en el artículo 113 del código sanitario del año 1997, sumado a la significativa evidencia científica internacional que demuestra que las enfermeras y enfermeros que logran prescribir en el sistema de salud de atención primaria, mejoran significativamente los indicadores de salud, la calidad de atención, el bienestar de la población atendida; disminuyen las descompensaciones y complicaciones como, a su vez, las mejores tasas de eficacia en el control.

Toma particular importancia la autonomía del profesional de enfermería, la que cuenta con respaldo internacional desde los años 50 en países como Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Suecia, Francia, Brasil, España, Irlanda, entre otros.

Desarrollo

La presente monografía representa esta problemática con la pregunta ¿la prescripción de enfermeras en Chile favorece la salud de las personas? Para lo cual se recopilará una serie de artículos de los últimos tres años, con diferentes indexaciones de revistas, cuya información será contrastada o comentada en relación con los distintos argumentos y posturas actuales.

En el presente análisis se hará una revisión de diversos artículos de los últimos tres años, el primero de ellos es del 2021, Revista Médica de Chile, que dice relación con la autonomía de la enfermera para mejorar el acceso y cobertura en oncología, sobre todo el manejo del dolor de los pacientes terminales en sus domicilios (4)

El segundo, de la editorial Elsevier, sobre atención primaria del año 2021, un estudio descriptivo en la resolución de la enfermera en procesos leves auto limitados, resolviendo un 47 % de las patologías autolimitadas (5).

De la misma editorial, enfermería clínica en Andalucía del año 2019, que evidencia la necesidad de desarrollar nuevos roles y competencias del cuidado en las enfermeras (6).

Finalmente, de la práctica avanzada (praxis, políticas y profesión) (7), publicado por dos autores de Bélgica y Canadá entre el año 2019 y 2021 que hace un análisis crítico de la transformación que ha tenido la profesión de enfermería luego de la institucionalización en la práctica avanzada.

El primer artículo nos permite argumentar que tanto la Organización Panamericana de la Salud (OPS) (8) como la Organización Mundial de Salud (OMS) recomiendan la implementación en el nivel primario de atención de enfermeras con la estrategia de práctica avanzada, para lo cual también se exige la formación de posgrado mínimo de magíster y con un nivel de conocimiento tipo experto. Un requerimiento obligatorio es que las universidades establezcan directrices de formación en práctica avanzada. Chile posee antecedentes en la Escuela de Enfermería de la Pontificia Universidad Católica de Chile, que está trabajando con la OMS y la OPS en su implementación. Adicionalmente, como en otros países de la misma región, mantiene una razón de médicos y enfermeras por cada 1000 habitantes, menor a la recomendada por la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico, OCDE, lo que se acentúa en los sectores más aislados y de difícil acceso, exponiendo a la población más vulnerable a dejarlos sin acceso a una atención profesional y oportuna de calidad.

En lo que respecta a oncología y la derivación a su domicilio, la atención primaria representa la continuidad en sus cuidados de áreas prioritarias como son el acompañamiento, la educación y el manejo del dolor. Este último debe brindarse en forma oportuna y eficaz, de lo contrario el paciente y su familia afrontan de manera negativa la experiencia del dolor y la incapacidad de aminorarlo o controlarlo, con la consiguiente frustración en su manejo y los traumas que genera ver morir a un ser querido con dolor. La metodología para implementar un programa de formación para dichas enfermeras en oncología y manejo del dolor se está llevando a cabo a través del centro del cáncer de la red de salud UC Christus, donde definen siete competencias del perfil de egreso de la enfermera en práctica avanzada de oncología para atención primaria.

Respecto a la capacidad resolutiva de las enfermeras en procesos leves autolimitados de atención primaria, existe un estudio observacional descriptivo realizado en 25 centros de atención primaria en Bilbao, Basurto, España. Entre el 01 de noviembre de 2019 y el 29 de febrero de 2020 se revisaron casi 7000 registros de pacientes, lo que evidenció el aporte que la enfermera realizaba en áreas tales como educación sanitaria, consulta administrativa y consulta médica. Es decir, la enfermera resuelve en un 47% los procesos leves autolimitados en atención primaria de salud (APS), por lo tanto, su participación es indesmentible en el manejo de pacientes de APS, más aún cuando su actuación permite liberar horas médicas y así destinarlas a otras necesidades más urgentes. El modelo se basa en la gestión de demanda asistencial en atención primaria, Euskadi.

El tercer artículo describe las competencias que debe desarrollar la enfermera en el sistema sanitario en Andalucía. Analiza el aumento de la complejidad de las organizaciones de salud que requieren buscar nuevos modelos de gestión y desarrollo de profesionales que respondan con intervenciones costo efectivas que beneficien a la población, y resuelvan sus problemas de salud en forma oportuna.

El nuevo rol de enfermera en práctica avanzada está avalado por el marco normativo de ese país; España, con el desarrollo de competencias en la especialización y la evidencia científica (8) . La ciencia refiere que la adquisición de competencias específicas se logra mediante la formación continua con un mínimo de horas de formación teórica o práctica que deben ser emitidas por entidades y actividades formativas debidamente acreditadas con un mínimo de experiencia o años de especialización. Chile presenta un desafío (9), pues le es imposible suplir este déficit de atención médica, sin considerar el dominio de competencias de la enfermera de práctica avanzada, considerando el liderazgo, las relaciones interpersonales, la autonomía profesional, la gestión de calidad y de cuidados, la educación y docencia, finalmente la promoción y la prevención. La práctica avanzada ha generado un nuevo contexto socio histórico en países tales como Canadá, Estados Unidos y a su vez un cambio cultural puesto que los usuarios solicitan atención con este tipo de profesional enfermera y no un médico como se acostumbraba.

Como antecedente en políticas públicas, Canadá a través de la Biblioteca Nacional de Quebec presenta una serie de evidencias recolectadas desde 1973 a la fecha, sobre las regulaciones para la práctica avanzada.

Conclusiones

La implementación de enfermeras en práctica avanzada de oncología permite solucionar los problemas de acceso y oportunidad particularmente en el manejo del dolor, lo que exige a las universidades chilenas, un plan académico de formación de EPA con un alto nivel que respalde su quehacer.

La evidencia internacional respalda la capacidad resolutiva de la enfermera avanzada, resuelve casi la mitad de los procesos que valora a pesar de no disponer de todas las herramientas en competencias para indicar todos los medicamentos y estar sujeta a solo algunos protocolizados.

Con los nuevos roles de la enfermera, se hace imperioso incluir nuevas competencias en enfermeros y enfermeras con el objetivo de dar respuesta a la ciudadanía. Esto evidencia la gran evolución que ha generado al formar y capacitar enfermeras a nivel mundial. Modificando el perfil de egreso de la profesional, reorientando las posibilidades de desarrollo lo que se sustenta en presentar esta nueva respuesta a la demanda asistencial.

Finalmente, Chile, a través de sus autoridades políticas y de salud, debe plantearse este nuevo escenario, con el fin de dar respuesta a la gran demanda asistencial que no está siendo abordada ni resuelta correctamente, basta revisar el análisis de la Dra. Margozzini donde solo un tercio de la población estaría controlada y compensada, en términos cuantitativos equivale a 7 millones de personas sin atención de calidad.

Se debe implementar a la brevedad las tres especialidades de enfermería solicitadas por el ex ministro Enrique Paris Mancilla, quien firmó el Decreto N°8 año 2013 de Especialidades de Enfermería:

– Enfermería Práctica Avanzada de Oncología.

– Enfermería Práctica avanzada de Atención Primaria y Comunitaria.

– Enfermería Práctica Avanzada de Geriatría y Gerontología.

Considerando, la necesidad de asegurar calidad en los servicios sanitarios y con el fin de dar cumplimiento al régimen de garantías explícitas en salud o ley GES, en que las enfermeras son parte del equipo de salud cumpliendo el rol del cuidado en todas sus dimensiones, el reconocimiento de su especialización en estas áreas favorecerá la implementación de nuevas estrategias en especial los usuarios de la ley N° 21.258.

El desarrollo académico de las especialidades de los prestadores individuales ha incorporado a las enfermeras.

La enfermera debe ejecutar labores de prevención, diagnóstico oportuno, tratamiento e investigación, además que el Ministerio de Salud debe contar con un sistema de certificación de especialidades de enfermeras como prestadores individuales legalmente habilitados para ejercer la práctica avanzada.

Quienes posean un título o grado académico de magister o doctor otorgado por una universidad reconocida por nuestro país y que se encuentren contenidas en el listado de especialidades del Decreto N° 8 año 2013 del Ministerio de Salud de Chile implementado por el exministro Paris, podrán solicitar a la superintendencia de salud la inscripción en el registro de especialidades y ejercer como enfermeras de práctica avanzada. La vigencia propuesta en el decreto es de 5 años debiendo re acreditarse posterior al cumplimiento de dicho plazo.

La respuesta a la presente monografía concluye que la prescripción de fármacos por parte de enfermeras y enfermeros chilenos favorece a los usuarios y resuelve los problemas de salud que los aqueja, todo respaldado por la contundente evidencia científica internacional.

Referencias:

  1. Del-Río FV. Situación de salud post pandemia. Rev Médica Chile [Internet]. mayo de 2021 [citado 2 de febrero de 2023];149(5):810-810. Disponible en: http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S0034-98872021000500810&lng=es&nrm=iso&tlng=pt
  2. Margozzini P, Passi Á. Encuesta Nacional de Salud, ENS 2016-2017: un aporte a la planificación sanitaria y políticas públicas en Chile. ARS MEDICA Rev Cienc Médicas [Internet]. 4 de junio de 2018 [citado 2 de febrero de 2023];43(1):30-4. Disponible en: https://www.arsmedica.cl/index.php/MED/article/view/1354
  3. Michea L, Toro L, Alban N, Contreras D, Morgado P, Paccot M, et al. Eficacia de una estrategia estandarizada y simplificada para tratamiento de la hipertensión arterial en Chile: la Iniciativa HEARTS en las Américas. Rev Panam Salud Pública [Internet]. 6 de septiembre de 2022 [citado 2 de febrero de 2023];46:1. Disponible en: https://iris.paho.org/handle/10665.2/56365
  4. Márquez-Doren F, Palma-Rivadeneira S, Soto-Fuentes P, Lucchini-Raies C, Peña-Durán J, Nervi-Nattero B, et al. Una propuesta para mejorar el acceso y cobertura en oncología para Latinoamérica: enfermería de práctica avanzada. Rev Médica Chile [Internet]. abril de 2021 [citado 2 de febrero de 2023];149(4):591-7. Disponible en: http://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S0034-98872021000400591&lng=es&nrm=iso&tlng=en
  5. Román-Baquero J, Redondo-Collado D. Resolución enfermera de los procesos leves autolimitados en atención primaria: estudio descriptivo. Aten Primaria [Internet]. 1 de abril de 2022 [citado 2 de febrero de 2023];54(4):102219. Disponible en: https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0212656721002535
  6. Enfermería de práctica avanzada: praxis, políticas y profesión*. [citado 2 de febrero de 2023]; Disponible en: https://revistas.javeriana.edu.co/files-articulos/RGPS/20%20(2021)/54566349005/
  7. Bryant-Lukosius D, Valaitis R, Martin-Misener R, Donald F, Peña LM, Brousseau L. Enfermería con práctica avanzada: una estrategia para lograr la cobertura universal de salud y el acceso universal a la salud. Rev Lat Am Enfermagem [Internet]. 30 de enero de 2017 [citado 2 de febrero de 2023];25. Disponible en: http://www.scielo.br/j/rlae/a/LsdQZykj93tLMgJWnSZ9fRr/?lang=es&format=html
  8. Advanced Practice Nursing Roles, Regulation, Education, and Practice: A Global Study – PMC [Internet]. [citado 2 de febrero de 2023]. Disponible en: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC9205376/
  9. Urrutia-Egaña MJ, Perucca-Gallegos D, Valdés-Martinic CF, Urrutia-Egaña MJ, Perucca-Gallegos D, Valdés-Martinic CF. Enfermera de Práctica Avanzada en Chile: identificando barreras y oportunidades para el ejercicio del rol. Enferm Univ [Internet]. junio de 2021 [citado 2 de febrero de 2023];18(2):128-37. Disponible en: http://www.scielo.org.mx/scielo.php?script=sci_abstract&pid=S1665-70632021000200128&lng=es&nrm=iso&tlng=es