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Factores de riesgo, una mirada reflexiva en los pacientes con enfermedades cerebrovasculares isquémicas

    dislipidemia está implicada con menor claridad en las enfermedades cerebrovasculares, aunque es un factor bien conocido en la arterosclerosis coronaria y en la cardiopatía isquémica. La hipercolesterolemia interviene en la aterosclerosis de los grandes vasos y de las arterias carótidas, se ha observado una relación entre hipercolesterolemia y enfermedades cerebrovasculares isquémicas; un nivel de colesterol total en sangre, de 240 mg% o más, es un factor de riesgo mayor para enfermedades de las arterias, aumentando el riesgo de enfermedades cerebrovasculares isquémicas. Niveles de 100 mg/% de colesterol LDL, incrementa directamente el riesgo de enfermedades cerebrovasculares isquémicas. Niveles de 35 mg/% o más de colesterol HDL, reduce el riesgo de padecer de enfermedades cardiovasculares o enfermedades cerebrovasculares isquémica (24).
  • Diabetes Mellitus: Aunque la diabetes puede controlarse, las personas que padecen esta enfermedad tienen mayores probabilidades de sufrir un accidente cerebrovascular. Esto se debe principalmente a los problemas macro vasculares ocasionados por la diabetes y si existe hiperglucemia en el momento del accidente cerebrovascular, el daño cerebral causado por el puede ser más grave y extenso. La incidencia de los accidentes cerebrovasculares es mayor en las mujeres diabéticas que en los hombres diabéticos aumentando hasta tres veces el riesgo de enfermedades cerebrovasculares independientemente de la edad. Es un factor de riesgo importante sobre todo la diabetes tipo 1 que aparece en personas menores de 35 años, donde el proceso de lesión arterial es difuso. La diabetes grasa, por el contrario, parece jugar un rol modesto (9,21,)

Se tienen en cuenta los cambios en el estilo de vida de las personas como los siguientes:

  • El tabaquismo: El humo del cigarro ha sido establecido claramente como determinante de la enfermedades cerebrovasculares hasta 1,8 veces ya que acelera la ateroesclerosis y representa el factor causal esencial, dando lugar a la formación y paso a la sangre de numerosos productos (25,26,27,41).
  • Consumo excesivo de alcohol: Se recomienda limitarse a un consumo moderado de alcohol. Según la Asociación Americana del Corazón, el consumo moderado es un promedio de una o dos bebidas por día para los hombres y de una bebida por día para las mujeres. Una bebida se define como 1,5 onzas líquidas (44 ml) de bebidas espirituosas de una graduación alcohólica de 40° (80 proof) (tal como whisky americano o escocés, vodka, ginebra, etc.), 1onza líquida (30 ml) de bebidas espirituosas de una graduación alcohólica de 50° (100 proof), 4 onzas líquidas (118 ml) de vino o 12 onzas líquidas (355 ml) de cerveza. El beber más de esta cantidad por día aumenta el riesgo de hipertensión arterial y puede dar lugar a un accidente cerebrovascular (28).
  • Sedentarismo: Es la no realización de ejercicios sistemáticamente, como minino treinta minutos por espacio de tres días a la semana. La inactividad física no es sólo uno de los principales factores de riesgo coronario sino que también puede causar hipertensión arterial, niveles bajos de lipoproteínas de alta densidad (HDL) y diabetes. El hacer ejercicio físico durante 30 o 40 minutos por lo menos 3 o 4 veces por semana disminuye la presión arterial, eleva los niveles de HDL y ayuda a regular la cantidad de insulina que el organismo necesita, disminuye el riesgo de accidente cerebrovascular. y favorece el mantenimiento de una baja presión, elemento esencial para el buen funcionamiento de cerebro y corazón (39).
  • Obesidad: .Es el exceso de tejido adiposo que se manifiesta por un peso inadecuado, superior a los 10 kilogramos; comparando la estatura con el peso corporal este se comporta como un factor de riego independiente para las enfermedades cerebrovasculares isquémicas. Para todos los tipos de enfermedades cerebrovasculares isquémicas el riesgo poblacional debido a obesidad oscila entre el 15 al 25% (29). Según el Instituto Nacional de Diabetes, Enfermedades Digestivas y Renales de los Estados Unidos (30), la obesidad duplica el riesgo de sufrir hipertensión arterial, uno de los principales factores de riesgo cerebrovascular. Actualmente, muchos médicos miden la obesidad mediante el índice de masa corporal (IMC), que se calcula dividiendo los kilogramos de peso por el cuadrado de la talla en metros (IMC = Kg / m2). Una persona se considera obesa si tiene un índice de masa corporal superior a 30 (31, 32,40).
  • En estudios realizados también se ha evaluado las características psicológicas de los pacientes tales como la personalidad y el estrés como posibles factores de riesgo de este tipo de enfermedad (33,39).
  • Las enfermedades cardiovasculares: Las personas que sufren de una enfermedad cardiovascular tienen el doble del riesgo de padecer un accidente cerebrovascular que las personas con corazones sanos. El control de los tres principales factores de riesgo cardiovascular (el hábito de fumar cigarrillos o tabaco, el colesterol elevado en sangre y la hipertensión arterial) puede también reducir el riesgo cerebrovascular ,con mucho interés también se mencionaran la fibrilación auricular que de uno u otro modo provocan trastornos vasculares y trombo-émbolos, los cuales dificultan el riego sanguíneo al cerebro aumentando cinco veces el riesgo de las enfermedades cerebrovascular; otras a considerar son las valvulopatías, las coronariopatías, la insuficiencia cardiaca congestiva y la hipertrofia ventricular Izquierda (34,44).
  • El antecedente de haber sufrido o padecer de Ataques Transitorios Isquémicos son un claro síntoma de advertencia de un posible infarto cerebral .De las personas que han sufrido uno o más ataques de isquemia transitoria, más de un tercio sufrirá un Infarto cerebral. Los síntomas son similares a los de un accidente cerebrovascular grave. estos ocurren previos al infarto cerebral en el 10 al 20% de los pacientes, siendo el primer año donde se presenta mayor porcentaje de riesgo (5).
  • La ateroesclerosis, a menudo denominada «endurecimiento de las arterias», es una enfermedad que se caracteriza por la acumulación de materias grasas, colesterol y calcio en las paredes internas de las arterias. Esta acumulación de grasa puede obstruir los vasos sanguíneos (18).
  • La poliglobulia: una elevación moderada en el recuento de glóbulos rojos puede constituir un factor de riesgo cerebrovascular. Un número elevado de glóbulos rojos, aumenta el hematocrito que provoca hemoconcentración que puede dar lugar a la formación de coágulos (35).

Dentro de los factores de riesgo potenciales encontramos afecciones o patologías que aparentemente no se relacionan con la enfermedad cerebrovascular isquémicas, sin embargo en estudios realizados se ha demostrado que si deben ser considerados como tal y tenemos los siguientes:

  • Migraña.
  • Uso de anticonceptivos orales: independientemente, no constituyen un factor de riesgo significativo. Pero si se les combina con otros factores de riesgo,