Inicio > Sin categoría > La relación del equipo multidisciplinario con los familiares del donante de órganos > Página 3

La relación del equipo multidisciplinario con los familiares del donante de órganos

Según el criterio de la esfera de la medicina donde se manifiestan, los problemas de la bioética médica se clasifican en problemas de la ética clínica (por ejemplo, los dilemas de las relaciones entre médicos y pacientes, del trasplante de órganos, etc.) y de la investigación con sujetos humanos.
Como vemos, los diferentes tipos de clasificaciones no se excluyen entre sí, sino que, algunas de ellas, se relacionan.

La identificación y clasificación de estos problemas son, evidentemente, aportes de la bioética médica al pensamiento ético contemporáneo.

Existen múltiples definiciones del objeto de estudio de la bioética. No obstante, la más difundida y aceptada es la de la Enciclopedia de la bioética: «Estudio sistemático de la conducta humana en el campo de las ciencias biológicas y de la atención de la salud, en la medida en que esta conducta se examine a la luz de valores y de principios morales». (26)

No obstante las críticas surgidas desde la década de los ochenta, el núcleo teórico y metodológico de la bioética médica está constituido por el paradigma principialista, formulado por Beauchamps y Childress en la obra Principios de ética biomédica. Este paradigma está formado por cuatro principios: beneficencia, no-maleficencia, autonomía y justicia.

El principio de beneficencia, continuador de la moral de beneficencia de la ética médica tradicional, es aquel que plantea que las acciones del médico deben procurar el bien para la vida y la salud del paciente.

El principio de no-maleficencia, tomado de la ética hipocrática, se rige por la máxima «primun non nocere», es decir, ante todo, no hacer daño. El sujeto agente de estos principios es el médico.

La autonomía -según el norteamericano Edmund D. Pellegrino, líder mundial de la bioética- es «(…) capacidad de autogobierno, una cualidad inherente a los seres racionales que les permite elegir y actuar de forma razonada, sobre la base de una apreciación personal de las futuras posibilidades evaluadas en función de sus propios sistemas de valores»(27). Su sujeto agente es el paciente.

Indisolublemente unido al principio de autonomía, se encuentra el procedimiento del consentimiento informado, que se refiere al deber que tiene el médico de obtener la aprobación del paciente para aplicar los procedimientos diagnósticos y terapéuticos necesarios para solucionar los problemas de salud que confronta, mediante la presentación de una información objetiva, clara y veraz del estado en que se encuentra.

La introducción del principio de la autonomía constituye la esencia de la revolución conceptual que ha realizado la bioética médica en el pensamiento ético médico contemporáneo. Esto se debe a que reconoce en los pacientes la racionalidad como cualidad definitoria de su esencia, su libertad como un derecho natural, la autodeterminación como una de sus capacidades y la igualdad entre los diferentes sistemas de valores propios de los individuos. Por eso, el principio de autonomía establece la libertad, la independencia, la democracia y la igualdad como rasgos que deben caracterizar las relaciones entre médicos y pacientes. De este modo, se instaura el paradigma ideológico liberal y neoliberal en el seno de las concepciones ético-médicas, y se desplaza el paradigma naturalista de la ética médica tradicional.

La justicia, principio muy debatido por las diferentes concepciones bioéticas, se refiere a la necesidad de distribuir con equidad los recursos en salud y de tomar decisiones acertadas y equilibradas en la solución de los dilemas de la asistencia médica. Este constituye el principio del equilibrio entre la beneficencia y la autonomía en los casos en que existen conflictos éticos entre los médicos y los pacientes. Por eso, el sujeto agente de este principio es la sociedad.

La relación con la familia del donante.

Es un verdadero reto moral y espiritual la relación con la familia del donante. En este proceso están implicados los factores personológicos, los valores morales, las creencias religiosas, los principios éticos y humanistas de los miembros del equipo. De ahí que se requiera una alta profesionalidad, una integridad personal y moral y una convicción de la necesidad y la utilidad del trasplante para salvar una o más vidas. Esta situación pone a prueba no solo la competencia profesional del equipo, sino también su integridad y sus valores.

El equipo multidisciplinario debe tomar conciencia del valor potencial de la donación para las familias de los fallecidos. Identificar el proceso implicado en: La comunicación de una mala noticia, la respuesta ante el dolor de las familias y la Influencia en la solicitud de donación, Incremento del número de órganos y tejidos para el trasplante y la ayuda para los familiares de los fallecidos.

Barreras en el proceso de comunicación.

 Rechazo por el temor a aumentar el dolor de los familiares
 Falta de entrenamiento en estrategias para afrontar el contacto con los familiares de los fallecidos

Prejuicios más comunes.

 La creencia de que los profesionales sanitarios no tienen nada que ofrecer a los familiares.
 La solicitud de donación supone una intrusión y empeora el duelo de la familia
 No se debe “pedir más”
 Ningún beneficio para los familiares (28)

El proceso de donación. Actitudes e implicaciones.

Aborda:

 El conocimiento de la importancia de los sentimientos personales.
 El Proceso de Duelo: formas en las que el profesional sanitario pueda sentirse eficaz.

Objetivos:

 Ser de ayuda a las familias.
 Disminuir la tensión del profesional
 Facilitar la donación

Contexto:

 Experiencias de familias donantes.
 Técnicas que permitan al profesional sentirse más eficaz.

</revoluciÓn>


El proceso de comunicación. Actitudes e implicaciones.

Si no está en un contexto de apoyo:

 Se sientan incómodos participando en el proceso de comunicación.
 Formulen la solicitud de manera insegura.
 Eviten participar en el proceso de comunicación.

Los familiares de los fallecidos pueden verse privados de:

 Una intervención en el duelo que la mayoría considera de ayuda para afrontar el dolor.

 Un derecho de elección.

Fases del proceso de duelo.

 FASE I.- Shock
 FASE II.- Confusión
 FASE III.- Búsqueda
 FASE IV.- Aceptación
 FASE V.- Reintegración

FASE I.- Shock

El doliente está como en trance, a veces se le habla y no responde. Esta situación corresponde a un mecanismo de defensa ente el dolor, conlleva negación a aceptar la muerte del ser querido, miedo a aceptar la pérdida y a afrontar el futuro.

FASE II.- Confusión

Algunas personas están desorientadas, no son capaces de hacer nada y tienen grandes dificultades para la toma de decisiones

FASE III.- Búsqueda

La búsqueda puede llegar a ser incluso física, aunque tiende a desaparecer ante lo infructuoso de la misma

FASE IV.- Aceptación

Poco a poco se van aceptando los hechos, ante lo irreversible de la situación.

FASE V.- Reintegración

Hay tendencia a aceptar la realidad.

Alternancia de épocas buenas y malas

Se va afrontando la realidad (29)

Ante esta compleja situación surge la necesidad de una comunicación eficaz para lograr los objetivos respetando el dolor y el duelo familiar. De ahí que se apliquen técnicas de comunicación.

Técnicas de Comunicación.

Reflejo de las emociones.

 Identificar la emoción
 Dar un nombre a esa emoción
 Expresar verbalmente la emoción

Condiciones para el reflejo de las emociones.

 Se refiere a la emoción correcta
 Expresa la intensidad correcta
 Se realiza después de presenciarla
 Finaliza con una pregunta

La relación de ayuda.

Es aquella que se produce entre dos personas, en las que una de las partes, intenta hacer surgir en la otra recursos y capacidades latentes, con el fin de afrontar los problemas de la forma más adecuada y resolutiva posible” (30)

 Es una relación terapéutica, ya que busca el restablecimiento de un estado de salud-equilibrio.
 Se produce en una situación de comunicación cara a cara, por lo que hay que facilitar y motivar la comunicación.
 La persona que ayuda, realiza un acompañamiento activo.
 El objetivo es buscar soluciones a los problemas que plantea una nueva situación.