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Manejo del paciente con lesiones por electrocución

Manejo del paciente con lesiones por electrocución

Autor principal: J. Fernández Eito

Vol. XVI; nº 7; 301

Managing the Patient With Electrocution Injuries

Fecha de recepción: 12/03/2021

Fecha de aceptación: 15/04/2021

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XVI. Número 7 –  Primera quincena de Abril de 2021 – Página inicial: Vol. XVI; nº 7; 301

–  AUTORES:

Fernández Eito J*, Fernández Eito M*

*(Diplomados Universitarios en Enfermería)

–  RESUMEN:

El ser humano vive rodeado de un mundo tecnológico que se mueve y funciona con electricidad, además de estar expuesto a fenómenos eléctricos imprevisibles como son los rayos. Es por ello, que cada vez sea más común la atención de pacientes que han sufrido descargas eléctricas tanto domésticas, industriales, como en la naturaleza.

Y dadas las peculiaridades de la corriente eléctrica, y del grado de lesiones que ésta puede producir en el ser humano, es fundamental para los servicios de urgencias extra hospitalarias y hospitalarias, poder conocer sus mecanismos de lesión y la tipología de lesiones que pueden derivarse de sus efectos. Pudiendo así dar una correcta atención a este tipo de pacientes y con ello conseguir el mayor grado posible de recuperación.

–  PALABRAS CLAVE:

Alto voltaje, Corriente eléctrica, Rayos, Electrocución, Fulguración.

–  ABSTRACT:

The human being lives surrounded by a technological world that moves and works with electricity, in addition to being exposed to unpredictable electrical phenomena such as lightning. That is why it is becoming more and more common to care for patients who have suffered electrical shocks, both domestic, industrial, and in nature.

And given the peculiarities of the electric current, and the degree of injuries that it can produce in humans, it is essential for extra-hospital and hospital emergency services to be able to know their injury mechanisms and the type of injuries that can arise from their effects. Thus, being able to give proper care to this type of patient and thereby achieve the highest possible degree of recovery.

–  KEYWORDS:

High voltage, Electric current, Lightning, Electrocution, Fulguration.

–  INTRODUCCIÓN:

Para poder atender y manejar bien al paciente con lesiones por electricidad, es necesario saber y conocer cuáles son las características de la corriente eléctrica y sus mecanismos de lesión. El manejo de estos pacientes con lesiones por electrocución o fulguración es bastante impredecible, pudiendo requerir desde una atención básica hasta una muy compleja, que implique un manejo interdisciplinar (Cuidados intensivos, traumatológicos, plásticos, hematológicos…etc.)

Dadas las características de la corriente eléctrica y los múltiples factores que influyen a la hora de producirse la descarga, las lesiones que dicha corriente pueda producir abarcan desde una simple lesión leve hasta poder producir la muerte de la persona afectada.

Nunca se debe de olvidar, pese a que el paciente pueda presentar inicialmente estabilidad hemodinámica y signos leves, pueden estar enmascaradas y latentes posibles complicaciones potencialmente más dañinas que lleven a la desestabilización del estado de salud e incluso derivar en un posterior parada cardiaca. Para ello será vital vigilar las complicaciones agudas tardías como arritmias cardíacas, fallos orgánicos, alteraciones hematológicas, alteraciones del sistema nervios…etc.

Por ello, deben de conocerse bien las características de la corriente eléctrica y sus posibles efectos sobre el cuerpo humano. Además de no olvidar que dadas las características de los múltiples factores que influyen en el momento del contacto con la fuente de corriente eléctrica, las lesiones son totalmente imprevisibles en cada caso.

–  Conceptos básicos de la corriente eléctrica:

Voltio: Es la unidad para el potencial eléctrico, o la fuerza electromotriz y la tensión eléctrica.

Amperios: Es la unidad de intensidad de corriente eléctrica.

Corriente eléctrica: Es el movimiento de las cargas eléctricas, por la diferencia de potencial.

Resistencia: Es el grado de dificultad que ofrece un material al paso de la corriente eléctrica. A mayor resistencia, menor paso de corriente.

Tipos de corriente:

  1. Corriente alterna.
  2. Corriente continua.
  3. Corriente de bajo voltaje: < 1000 v.
  4. Corriente de alto voltaje: > 1000 v.

–        Mecanismos de lesión de la electricidad:

  • Efecto directo de la corriente: Por alteraciones en los potenciales de la membrana celular.

–        Convulsiones y afectación de órganos por contracciones bruscas del sistema músculo – esquelético.

–        Arritmias cardiacas.

–        Parada respiratoria o cardio respiratoria.

  • Por efecto indirecto de la corriente:

–        Traumatismos y facturas por tetania intensa o caídas por salir despedido.

  • Por transformación de la energía en calor.
  • Alteraciones metabólicas por destrucción celular y afectación de órganos.

–  Factores que intervienen en las lesiones por la electricidad:

1.   El tipo de corriente.

  1. Corriente alterna, produce más accidentes, mayor
  2. Corriente continua, produce una contracción

2.   El trayecto de la corriente.

Las alteraciones son más graves cuando la corriente atraviesa el tórax o entra por la cabeza. Y en general son peores los trayectos horizontales (brazo-brazo) que los verticales (hombro-pierna). (Ver figura 1.)

3.   El tiempo de exposición.

A mayor tiempo en contacto con la electricidad, mayores lesiones potenciales.

4.   La resistencia del cuerpo.

Dependiendo de las características de cada tejido u órgano, estos ofrecerán más o menos resistencia a la corriente. Influyendo directamente en nivel de las alteraciones y lesiones producidas. La ropa y la piel son las principales barreras, una vez atravesadas la corriente apenas encuentra resistencia. (Ver figura 2.)

5.   La intensidad de la corriente.

Es el factor más importante en la producción de las lesiones eléctricas, y depende del voltaje de la corriente y de la resistencia de los tejidos que ésta atraviese.

–  Electrocución por bajo voltaje:

Son las ocasionadas por tensiones menores de 1000 voltios, y son las domésticas de 125 a 220 voltios las que más habitualmente más se producen. Por lo general los tiempos de exposición a la corriente son muy cortos, apenas segundos, y por ello apenas producen afectaciones importantes en personas adultas. En accidentes con tensiones de industriales superiores a los 380 voltios las lesiones son ya de mayor nivel.

Lesiones por bajo voltaje:

  • Paciente generalmente consciente.
  • Parestesias y aturdimiento de la zona o extremidad afectada.
  • Enrojecimiento o quemadura leve en la zona de contacto.
  • Lesiones temporales.
  • Muy posible la recuperación completa.
  • Existe potencial de muerte, pero presenta escasa letalidad.

–  Electrocución por alto voltaje:

Son las producidas por tensiones mayores de 1000 voltios. Los tiempos de exposición son prolongados, de minutos, por el efecto enganche de la tetania muscular intensa y mantenida. Debido a ello la corriente permanece y penetra más, produciendo grandes lesiones externas e internas. Generan en la víctima importantes complicaciones y secuelas irreversibles. Por lo general producen muy alta mortalidad.

Lesiones por alto voltaje:

  • Posibles alteraciones del grado de consciencia.
  • Tetania intensa.
  • Quemaduras profundas e internas.
  • Grandes lesiones tisulares e incluso amputaciones.
  • Arritmias cardiacas, fibrilación ventricular.
  • Frecuentemente insuficiencia renal por mioglobinuria de la rabdomiólisis.
  • Shock por síndrome compartimental frecuentemente necesaria fasciotomías extensas.
  • Puede haber hemolisis con disminución de la viscosidad sanguínea y shock.
  • Frecuentemente contusiones o fracturas, por caídas al salir despedido por el efecto desenganche.
  • Parada respiratoria, por parálisis del sistema respiratorio o del diafragma o lesión neuronal.
  • Asistolia más posible en corrientes alternas.
  • Fibrilación ventricular más posible en corriente continua.

–  Fulguración por rayos:

En las fulguraciones por rayos se produce una corriente continua de altísimo voltaje, de 30 millones de voltios. Pero los tiempos de exposición son casi instantáneo de 0,001 seg. a 0,1 seg. La mayor parte de la corriente transcurre por la superficie del cuerpo, siendo sólo una pequeña parte la que penetra en el organismo y que es la responsable de la afectación del corazón. Se pueden llegar a alcanzar una temperatura media de unos 8000 ºC. Producen una alta letalidad.

Lesiones por rayos:

  • Alteraciones del nivel de consciencia por daños del SNC: confusión, desorientación, amnesia, agitación, inconsciente, comatoso.
  • Lesiones oftalmológicas inmediatas o retardadas, hemorragias vítreas, desprendimientos de retina, laceraciones maculares, quemaduras corneales o conjuntivales, ceguera.
  • Quemaduras de menor superficie que las de alto voltaje. “figuras de Lichtenberg” (Ver imagen 1.)
  • Fracturas por traumatismos contusos, por el efecto de explosión del trueno.
  • Secuelas a largo tiempo debilidad generalizada y disfunción del sistema nervioso,
  • Los pacientes por rayo en diferencia a los electrocutados por altos voltajes no presentan una destrucción masiva de tejido ni quemaduras de gran extensión que nos obliguen a administrar grandes volúmenes de líquidos.
  • Parada cardiaca. (Asistolia o FV los ritmos más habituales) La actividad eléctrica puede regresar espontáneamente y el ritmo inicial tiende a ser bradicárdico.

–  Atención extrahospitalaria del paciente electrocutado:

Asegurarse ante de acercase a la zona y tocar a la víctima, que la fuente de corriente eléctrica está totalmente desconectada de la red eléctrica.

  • Evaluar a la víctima siguiendo el protocolo ABCDE.
  • Vigilar alteraciones del nivel de consciencia.
  • Corregir las posibles causas de hipotensión.
  • Vigilar la presencia de arritmias.
  • Prevenir la hipotermia si hay mucha superficie quemada.
  • Manejo del dolor.
  • Inmovilizar las posibles fracturas.
  • Escarotomía o fasciotomía de urgencia si el síndrome compartimental compromete las funciones cardio vascular o respiratorita.
  • Considerar el manejo de la víctima como un politraumatizado con posible lesión medular.
  • Exponer al paciente en busca de lesiones ocultas.
  • Tratamiento con fluidos si la rabdomiólisis está presente.
  • Desfibrilación o reanimación cardio-cardio pulmonar.

–  Atención hospitalaria del paciente electrocutado:

  • Controles analíticos de posibles alteraciones bioquímicas (K, Ca, CPK, Troponinas…etc.)
  • Búsqueda de lesiones o quemaduras en órganos internos.
  • Control de la diuresis y de la función renal (creatinina y urea).
  • Monitorización de la función cardio respiratoria.
  • Estudios radiográficos según sospecha.
  • Curas y cuidados de las lesiones o quemaduras.
  • Vigilar posibles complicaciones sistémicas tardías.
  • Nunca olvidar que lesiones superficiales pueden implicar lesiones profundas más severas.
  • Coordinación interdisciplinar (Intensivos, plásticos, trauma…etc.) para sus cuidados.

– CONCLUSIÓN:

La variabilidad de signos y síntomas que puede presentar un paciente que ha sufrido una gran descarga eléctrica, nos debe llevar a tener muy en cuenta, que este tipo de paciente pueda necesitar un tipo de atención muy compleja y especializada. Y es por ello, que el manejo y cuidado de sus lesiones debe estar bien coordinado entre el conjunto de especialidades que necesite (intensivos, trauma, neuro, plástica…etc.), pudiendo así conseguir el grado más óptimo de cuidados y atención, y que su recuperación sea lo más óptima posible.

Tanto los profesionales de los servicios extrahospitalarios como los de hospitalaria, nunca deberán de subestimar los signos o síntomas que presenta un paciente sometido a una descarga eléctrica. Nunca se debe olvidar, que lesiones o estados aparentemente leves, pueden estar ocultando lesiones más profundas e invisibles de mayor índole; y a posterior, pueden debutar de una forma aguda, desestabilizando el estado inicial del paciente.

Lesiones más tardías como las arritmias cardiacas, fallos orgánicos, alteraciones del sistema nervioso, alteraciones hematológicas…etc. puede llegar a comprometer la vida del paciente, igual o más que lesiones más visibles, estilo quemaduras, fracturas, amputaciones…etc.

Ver anexo

– BIBLIOGRAFÍA:

1.) National Association of Emergency Medical Technicians NAEMT. PHTLS Soporte vital básico y avanzado en el trauma prehospitalario. 6ª ed. Barcelona: Elsevier; 2011.

2.) E. I. García Criado, M. Torres Trillo, J. Torres Murillo, J. De Burgos Marín, M. J. Clemente Millán, J. M. González Barranco. Actitud ante la electrocución en Atención Primaria. SEMERGEN (1999); 25 (3): 229-233.

3.) Velasco Cargua, A., Díaz Chávez, A., Espín Jiménez, J., & Ruíz Satán, J. (2020). Manejo de quemaduras eléctricas. RECIMUNDO, 4(1(Esp)), 133-142. doi:10.26820/recimundo/4.(1). esp.marzo .2020.133-142.

4.) Lorente Romero, J., Vázquez López, P., Protocolos diagnósticos y terapéuticos en urgencias de pediatría; Sociedad Española de Urgencias de Pediatría (SEUP), 3ª Edición, 10/2019.