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Queratoacantoma: exéresis por estética de lesión no maligna

Queratoacantoma: exéresis por estética de lesión no maligna

RESUMEN

El queratoacantoma (QA) es un tumor cutáneo que se presenta habitualmente como un nódulo con un cráter central de queratina. Se caracteriza por su rápido crecimiento inicial, seguido de un período variable de estabilidad y una última fase de resolución espontánea.

Es fundamental reconocer este tipo de lesiones por su similitud con el carcinoma de células escamosas.

AUTORES

Dra. Mª Teresa Montejo Fernández. Médico especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Servicio Cántabro de Salud. Cantabria.

Dra. Lucía Pilar Salag Rubio. Médico residente de Medicina Familiar y Comunitaria. Servicio Cántabro de Salud. Cantabria.

Palabras clave: Queratoacantoma, carcinoma de células escamosas.

CASO CLÍNICO

Presentamos el caso de una mujer de 80 años con deterioro cognitivo leve e hipertensión arterial, que sigue tratamiento habitual con enalapril 10 mg.

Acude a su médico de atención primaria por presentar en región laterocervical izquierda una tumoración de aproximadamente 2,5 cm de diámetro, sobreelevada, no dolorosa, que ha experimentado un rápido crecimiento en las últimas tres semanas. En el lecho de la lesión descrita, presenta un nódulo eritematoso de varios meses de evolución, por el que no había solicitado valoración médica.

En la exploración física se objetiva la presencia de un nódulo solitario, de consistencia firme y bordes eritematosos con centro crateriforme relleno de material queratínico (Imagen 1).

Se remite al servicio de dermatología para extirpar la lesión, ante la sospecha clínica de queratoacantoma versus carcinoma epidermoide.

La biopsia confirma que se trataba de un queratoacantoma, con arquitectura en cráter y proliferación de células escamosas bien diferenciadas.

La evolución de la paciente fue satisfactoria sin nuevas recurrencias.

DISCUSIÓN

El QA fue descrito por primera vez a finales del siglo XIX por Sir Jonathan Hutchinson, como una úlcera crateriforme de la cara. Supone un tumor escamoso cutáneo queratinizante, caracterizado por un crecimiento rápido.

Es más frecuente en individuos de raza blanca y edad avanzada, especialmente entre la sexta y la séptima década. Es discretamente más frecuente en varones que en mujeres.

Su etiología es desconocida, pero parece haber diversos factores, tanto exógenos como endógenos, implicados: radiación ultravioleta (factor más frecuente), traumatismos (láser, radioterapia, cirugía), consumo de tabaco, contacto con alquitrán y otros productos químicos, así como predisposición genética. Por otro lado, diversos estudios han encontrado virus de la familia HPV hasta en el 50% de los pacientes con queratoacantoma. Los serotipos más frecuentes son 5, 6, 9, 10, 14, 19, 20, 21, 38, 48, 49 y 80.

Todos estos factores conducen a la mutación de diversos genes: la inactivación del gen p53 y la sobreexpresión de la Ciclina D1; implicados en el desarrollo del queratoacantoma.

Clínica: Generalmente se trata de un nódulo solitario y firme, rosado o color carne, en forma de cúpula y con un cráter central relleno de material queratínico, de aproximadamente 1,0 a 2,5 cm. de diámetro. El 95% de las lesiones, se localizan en zonas pilosas fotoexpuestas, aunque pueden aparecer en cualquier área pilosa. La localización más frecuente es la cara (labio inferior, mejilla, nariz y párpado), así como cuello y manos. No suele afectar a palmas, plantas o mucosas, y en casos excepcionales es subungueal.

Los queratoacantomas crecen rápidamente, durante un período de 1 a 2 meses, posteriormente suelen presentar un periodo de involución espontánea de hasta 6 meses, en el cual el 50% de ellos desaparecen.

La lesión inicial, en la fase proliferativa, es una mácula rosada, que se convierte en pápula para adoptar finalmente una forma en volcán con un cráter central queratínico. En la segunda fase, la lesión deja de crecer y se mantiene con forma de cráter. Finalmente en el estadio de involución, se produce la expulsión de la queratina y la reabsorción de la masa tumoral, dejando una cicatriz atrófica e hipopigmentada.

En la mayoría de los casos, el queratoacantoma es un tumor benigno, pero hasta en un 20% de los casos pueden ser agresivos, con invasión perineural, perivascular e intravascular y metástasis en ganglios regionales, lo que hace considerarlo una variante de carcinoma epidermoide bien diferenciado.

Esta situación aparece especialmente en pacientes de edad avanzada o inmunodeprimidos que presentan lesiones en áreas con fotoexposición crónica.

Tratamiento: Aunque la mayoría de estas lesiones suelen resolver espontáneamente, la mayoría de autores abogan por el tratamiento en base a las siguientes premisas: clínicamente puede ser indistinguible de un carcinoma de células escamosas; el tratamiento acelera la resolución, y en fases precoces limita el daño a las estructuras adyacentes así como mejora los resultados cosméticos.

Hay diversas opciones en cuanto al tratamiento:

– Escisión quirúrgica: supone el tratamiento de primera línea en QA solitarios. Es un procedimiento bien tolerado, y proporciona confirmación histopatológica de la eliminación del tumor. La escisión debe respetar los márgenes quirúrgicos recomendados para el carcinoma de células escamosas (4 mm) y debe extenderse a la grasa subcutánea.

– La cirugía de Mohs: es un método más complejo y costoso de escisión quirúrgica, generalmente se reserva para pacientes en los que se desea un procedimiento de preservación de tejido. Suele reservarse para los QA localizados en región central de la cara, oído, nariz y piel periocular y perioral. También se puede utilizar para lesiones de más de 2 cm de diámetro (QA gigante), ya que permite la confirmación de la extirpación del tumor antes del cierre de la herida y puede minimizar el tamaño del defecto quirúrgico.

– Terapias alternativas como el curetaje o la terapia intralesional con 5-fluorouracilo o metotrexate.

Pronóstico: Aunque la mayoría de los QA desaparecen tras el tratamiento o por involución espontánea; está descrito que aproximadamente un 5% de ellos recurren tras la escisión o el curetaje. Por otro lado, la incidencia de QA metastásico es extremadamente baja, y se discute si es debida a un diagnóstico erróneo de carcinoma de células escamosas.

IMÁGENES

Imagen 1. Queratoacantoma en cuello
Imagen 1. Queratoacantoma en cuello

BIBLIOGRAFÍA

  1. Kwiek B, Schwartz RA. Keratoacanthoma (KA): An update and review. J Am Acad Dermatol 2016; 74:1220.