Resistencia a los antibióticos
INTRODUCCIÓN.
Se trata de un problema de salud pública ya que los antibióticos son indispensables para tratar las infecciones bacterianas que pueden poner en peligro la vida de las personas y los que les rodean.
AUTORES.
María Del Mar Domínguez Ibáñez; D.U.E
Raquel María Pino Martos; D.U.E
María Del Rocío Míguez Crespo; Medicina Intensiva.
PALABRAS CLAVE: Resistencia, Antibiótico, Bacteria.
LOS ANTIBIÓTICOS.
Son fármacos que se utilizan únicamente para tratar infecciones producidas por bacterias ya que son ineficaces frente a virus y micosis. Cada antibiótico es eficaz frente a determinadas bacterias, a esto se le denomina espectro de actividad.
Así mismo no son eficaces de igual forma para todas las personas, depende de la farmacocinética del fármaco (incluye el proceso de absorción, distribución, metabolización y eliminación del medicamento), de las enfermedades crónicas del paciente y la interacción con otros fármacos.
Se recomienda el uso de un sólo antibiótico que debe ser eficaz frente al agente patógeno, excepto en algunos casos en los que se requiere el uso de varios como son:
- En infecciones graves.
- Infecciones en las que las bacterias muestran rápida resistencia
- Infecciones causadas por más de una bacteria con diferente sensibilidad.
Para determinar la eficacia o no de un antibiótico frente a una bacteria se realiza el llamado antibiograma. Mediante esta prueba, que se lleva a cabo a través de diferentes técnicas en laboratorio, podemos determinar si una bacteria es:
- Sensible a un antibiótico, y por tanto con buena respuesta al tratamiento a dosis habituales.
- Resistente a un antibiótico, y por tanto no tendrá ningún efecto terapéutico.
- Sensibilidad intermedia. En estos casos se consigue efecto terapéutico si se dan ciertas condiciones, entre las que se encuentran por ejemplo una mayor concentración de fármaco.
Los antibióticos se pueden clasificar en:
- Según su mecanismo de actuación:
- Inhibidores de la síntesis de la pared bacteriana, como los B-lactámicos.
- Inhibidores de la síntesis de proteínas bacterianas, como las Tetraciclinas.
- Inhibidores de la síntesis de ácido fólico, como las Sulfamidas.
- Inhibidores de la duplicación del ADN, como las Quinolonas.
- Según el efecto que provoque:
- Bactericidas: provocan la lisis y la muerte bacteriana.
- Bacteriostáticos: inhiben el crecimiento bacteriano y con ello frenan la infección.
LA RESISTENCIA.
Se trata de un proceso natural de la bacteria para tratar de sobrevivir al efecto de los antibióticos. Se debe a la exposición constante de la bacteria a un antibiótico, por el abuso y uso generalizado de éste. Como consecuencia la infección se prolonga, aumenta el contagio y hay mayor número de complicaciones.
MEDIDAS PARA EVITAR LA RESISTENCIA.
- Medidas del paciente.
- Tomar antibióticos sólo bajo prescripción médica.
- No demandar antibióticos si el profesional no lo considera necesario.
- No utilizar antibióticos que le hayan sobrado a otra persona o estén almacenados en casa sin garantía de conservación.
- Prevenir las infecciones con medidas generales como lavado de manos, vacunación, etc.
- Completar el tratamiento aunque haya mejoría de los síntomas o incluso desaparición de los mismos, ya que esto no significa la curación de la enfermedad, por el contrario, hace que las bacterias sobrevivan y se adapten.
- Medidas profesionales.
- No usar antibióticos para tratar virus. Los antibióticos solo son eficaces para tratar enfermedades causadas por bacterias, en caso de usarse para tratar virus, por ejemplo gripe, además de ser ineficaces puede causar resistencia.
- Es preferible el uso de dosis altas de antibióticos durante un periodo corto frente al uso de dosis bajas durante un tiempo prolongado. Con esto se evita que las bacterias sobrevivan y se hagan resistentes.
- Si un antibiótico no es eficaz frente a la bacteria no se debe aumentar la dosis sino cambiar el tratamiento.
- Limpieza de manos y mantener el entorno limpio.
- Prescribir antibióticos SOLO cuando sea necesario.
- Notificar al equipo de vigilancia las resistencias a los antibióticos.
- Informar sobre la correcta toma de antibióticos y consecuencias del mal uso del mismo.
- Prevención de enfermedades.
- Medidas políticas:
- Planes para hacer frente a la resistencia a los antibióticos.
- Vigilancia de las infecciones resistentes a los antibióticos.
- Reforzar la prevención y control de las infecciones.
- Reglamentar el uso adecuado de medicamentos.
- Informar del impacto de la resistencia a los antibióticos.
- Disminuir la utilización de antibióticos en agricultura y ganadería para que llegue menos medicamentos a través del consumo y así disminuir las resistencias.
IMPACTO.
Frente a las resistencias antimicrobianas se deben utilizar antibióticos más caros. Como consecuencia aumentan los costes en atención sanitaria, la carga económica, tanto para las familias como para la sociedad, así como la duración de la enfermedad y del tratamiento. Por ello, la OMS aprobó en 2015 un plan de acción para asegurar la prevención y el tratamiento de infecciones con fármacos eficaces y seguros. En este se incluían 5 objetivos:
- Mejorar la sensibilización y los conocimientos en materia de resistencia antimicrobiana.
- Reforzar la vigilancia y la investigación.
- Reducir las infecciones.
- Optimizar el uso de antimicrobianos.
- Asegurar la inversión en la lucha contra las resistencias antimicrobianas.
BIBLIOGRAFIA.
- La resistencia bacteriana a los antibióticos. ¿Cuestión de inteligencia o de azar? Carmen Torres Manrique. Universidad de la Rioja. 2007.
- Farmacología Clínica para Enfermería. J.M. Mosquera-P.Galdos. MC Graw Hill-interamericana.
- La resistencia a los antibióticos. La amenaza de las superbacterias. Jesús Oteo Iglesias. Editorial. La CATARATA. 2016.
- MECA: Mejora de la calidad de los antimicrobianos recomendaciones S SEQ. José Prieto Prieto. Jose Ángel García Rodríguez. 2006.