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Código hipotermia en emergencias

urgencia hospitalarios para la inducción de la Hipotermia Terapéutica (HT). Habitualmente a este método se asocia el uso de bolsas de hielo colocadas en axilas, ingles y alrededor del cuello y la cabeza. Estas técnicas han mostrado ser seguras y eficaces, pero tienen la dificultad de mantener la hipotermia, por lo que luego se deben asociar otros métodos que mantengan al paciente en la temperatura deseada (mantas o colchones de enfriamiento, sistemas de almohadillas de hidrogel, mantas con agua o aire circulante). Hasta el momento no se han encontrado datos claros y evidencia suficiente que recomienden un método de enfriamiento sobre otro.

Protocolo de actuación extrahospitalaria para la hipotermia terapéutica

 1. Identificación del paciente susceptible de beneficiarse de la técnica y comenzar su aplicación en los primeros 15 minutos tras la restauración de la circulación espontanea.

Criterios de inclusión:

–                      Edad superior a 14 años.

–                      Tiempo estimado de parada cardiorrespiratoria (PCR) < 10 minutos.

–                      Recuperación de la circulación espontánea con o sin drogas vasoactivas en menos de 40 minutos desde la llegada de los equipos de emergencia, excepto situaciones especiales como ahogamiento, intoxicación por drogas, etc. Que podría estar en torno a los 60 minutos.

–                      Glasgow < 9 tras la recuperación de la circulación espontánea.

Criterios de exclusión

–                      PCR prolongada, con más de 40 minutos de reanimación, excepto situaciones especiales como ahogamiento, intoxicación por drogas, etc.

–                      Evidencia clínica de sangrado.

–                      Arritmias ventriculares refractarias a pesar de tratamiento específico.

–                      Hipotensión arterial (tensión arterial sistólica – TAS < 90mm Hg) refractaria a pesar de la terapia adecuada.

–                      Situación de coma debida a otras causas diferentes a las de la parada.

–                      Hipotermia < 30º

–                      Embarazo.

–                      Traumatismo cráneo-encefálico (TCE) grave o lesión neurológica grave.

2. Llamada al Centro coordinador activando la prealerta o el Código Hipotermia, poniendo en marcha todos los recursos necesarios para garantizar la continuidad asistencial y la trasferencia al centro útil.

3. Procedimiento de enfriamiento prehospitalario:

– Confirmar temperatura superior a 34 ºC mediante termómetro timpánico.

– Desnudar al paciente y colocar manta térmica y placas de hielo en axilas, ingles, cuello o tórax.

– Canalizar dos vías periféricas de grueso calibre.

– Realizar sedoanalgesia y relajación.

– Iniciar sueroterapia fría administrando 30-40 ml/kg de volumen de fluidos intravenosos ( suero salino fisiológico o Ringer lactato) a 4ºC en 1 hora (máximo de 3.500 ml).

– Monitorización de constantes: temperatura (Tª), frecuencia cardiaca (FC), tensión arterial (TA), SO2.

– Sondaje vesical con control de diuresis.

4. Trasferencia del paciente al Hospital, se informará verbalmente y se entregará hoja de informe de asistencia al responsable de la recepción del paciente (intensivista, médico de urgencias) de las incidencias del traslado, procedimiento empleado, medicación, registro de constantes, etc.

Una vez en el Hospital el paciente deberá de ser mantenido en hipotermia y sedorelajación durante 12-24 horas, para posteriormente comenzar un recalentamiento progresivo aconsejado de 0,25- 0,5ºC / hora hasta alcanzar normotermia.

DISCUSIÓN

La investigación en torno a la hipotermia terapéutica es un tema que precisa más investigación por parte de todos, cada vez está siendo más utilizada por los servicios de urgencias para disminuir las lesiones neurológicas, pero a pesar de las recomendaciones de sociedades científicas y guías de actuación nacionales e internacionales existen a día de hoy reticencias, lagunas y falta de protocolos establecidos entre los servicios de emergencias. Es necesario consensuar protocolos de actuación conjunta entre niveles lo que proporcionaría un manejo integral al paciente, optimizando la asistencia y garantizando la continuidad del proceso. Debe implantarse progresivamente primero capacitando al personal, con programas de formación y entrenamiento, adquiriendo los recursos para llevar a cabo con éxito el procedimiento y realizando periódicamente auditorías sobre casos posibles/casos activados.

CONCLUSIONES

La hipotermia terapéutica mejora la supervivencia, calidad de vida y minimiza las secuelas de los pacientes recuperados tras una parada cardiaca. Hay unos criterios definidos para aplicarla en el medio extrahospitalario y requiere a su vez una actuación coordinada para asegurar un resultado exitoso.

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http://www.revespcardiol.