Cuidados de Enfermería en la realización de la prueba del enema opaco
Palabras clave: Enema, sulfato de bario, colon, intestino grueso, recto, contraste
RESUMEN
INTRODUCCIÓN: El enema opaco es una prueba diagnóstica utilizada en el campo de la gastroenterología que combina las radiaciones ionizantes y el contraste de bario administrado mediante a modo de enema para obtener imágenes radiológicas del intestino grueso.
Alba Domínguez Romero (Graduada en Enfermería, Enfermera Residente de Enfermería Pediátrica en Hospital Universitario Miguel Servet)
OBJETIVOS: Se pretende conocer la preparación previa a la prueba y las instrucciones que se siguen durante y después de la exploración, así como conocer los principios básicos de protección radiológica y las diferentes variantes del enema opaco. El enema opaco lo que pretende es visualizar el colon y estudiar su anatomía y si existen patologías. Aparte de utilizar la prueba como diagnóstico también se puede usar como tratamiento exclusivamente en los niños.
METODOLOGÍA Y DESARROLLO: El paciente necesita una preparación previa que comienza 72 horas antes modificando su dieta habitual a una dieta libre de residuos hasta el día de la víspera a la exploración en el que únicamente podrá ingerir líquidos y tomar una solución evacuante para vaciar el intestino. Después de la prueba el paciente ha de ingerir abundante cantidad de líquidos puesto que el bario causa deshidratación y si no se elimina correctamente se puede endurecer y aparecer estreñimiento, que suele ser lo más habitual.
CONCLUSIÓN: Se trata de una prueba muy segura, sencilla, poco invasiva y muy utilizada en el campo de la medicina digestiva. A pesar de que la preparación pueda ser algo molesta, la mayoría de los pacientes toleran bien la prueba. Existe un riesgo mínimo de irradiación pero no produce reacciones alérgicas ni efectos tóxicos conocidos.
PALABRAS CLAVE
Enema, sulfato de bario, bario, colon, intestino grueso, recto, contraste.
- INTRODUCCIÓN (1)
El enema opaco, enema de bario o el tránsito intestinal bajo es una técnica diagnóstica utilizada en el campo de la gastroenterología que consiste en obtener imágenes radiológicas del intestino grueso (colon y recto) mediante el empleo de un contraste opaco que se administra por el recto a modo de enema combinado con radiación ionizante (rayos X).
Se trata de una prueba sencilla y poco invasiva que permite detectar alteraciones en la morfología habitual tanto de las paredes del colon como de su luz intestinal.
Es una prueba ampliamente conocida y utilizada en el campo de la Medicina y su uso se remite principalmente de forma ambulatoria en una sala especial radiológica del hospital o del centro médico.
- RESEÑA HISTÓRICA (2)
La palabra enema proviene del griego «en-hienai» que significa enviar o inyectar en.
Los orígenes del clister se remontan a los tiempos del Antiguo Egipto.
La exploración radiológica del colon con medio de contraste fue descrita por primera vez en 1904, complementando con la fluoroscopia algunos años después.
En 1923, E. Fischer describió por primera vez el uso del doble contraste en la evaluación del colon.
Los primeros medios de contraste utilizados en el aparato digestivo fueron el subnitrato de bismuto y el subcarbonato de bismuto.
En 1910, Bachem describía las ventajas de usar el sulfato de bario pasando a ser el medio de contraste colectivo para explorar el sistema digestivo.
- OBJETIVOS
- Conocer los cuidados y la preparación antes, durante y después de la prueba.
- Averiguar las variantes del enema opaco.
- Conocer las indicaciones de la prueba, a qué pacientes va dirigido y a quienes les está contraindicado.
- Tener en cuenta los principios básicos de protección radiológica.
OBJETIVOS ESPECÍFICOS DE LA PRUEBA
- Visualización del recto, sigma e intestino grueso replecionado con un contraste de bario y obtener radiografías en cada una de las fases de relleno.
- Permite el estudio de la anatomía y el diagnóstico de patologías del colon y recto.
- Observar la evaluación del colon tras su diagnóstico.
- Se puede usar como tratamiento en invaginaciones del intestino grueso durante la niñez.
- METODOLOGÍA (1,3-11)
I. Preparación para el examen
a) Preparación del paciente los días previos
La exploración se realiza habitualmente de forma ambulatoria en la unidad de radiología en la sala de telemando o equipo de fluoroscopia. El paciente debe vaciar todo el contenido intestinal antes de la prueba, por lo que si no está vacío se puede pasar por alto alguna patología del colon que necesite tratamiento.
El paciente requiere de una cuidadosa preparación para una correcta visualización del colon, por lo que necesitará seguir unas instrucciones que se le explicarán previamente a la prueba.
72 horas antes de la prueba el paciente debe iniciar una dieta libre en residuos, es decir, tendrá prohibido comer: Productos lácteos, sopas, huevos fritos y tortillas, verduras y patatas, carnes grasas, en salsa, ahumadas, fritas o guisadas, caza, vísceras y embutidos, pescado azul: atún, caballa, salmón, anguila, arenques, sardinas, cualquier pescado en salsa, mariscos, quesos fermentados y blandos, frutas y zumos no filtrados, pan, chocolate, pasteles y dulces, grasas, aceites y salsas, especias: pimienta, mostaza, ajo, pepinillos, pimiento, café y té cargados, bebidas alcohólicas, agua con gas. En líneas generales, solo podrá alimentarse durante 3 días de: caldo de verduras filtrado, tapioca, arroz y pastas, carnes magras, cocidas sin grasa, hígado, pescados blancos, cocidos sin grasa o a la plancha, quesos duros, zumos de naranja filtrados, biscotes, galletas, miel y jalea, manteca, cruda en poca cantidad, café, té y tisanas ligeras, agua sin gas.
Durante el día previo al procedimiento, el paciente solamente podrá ingerir líquidos (agua, caldos filtrados, zumos colados, infusiones, té, café y bebidas sin burbujas) y deberá tomar una solución evacuante siguiendo la normativa del prospecto. Por ejemplo Citrafleet®: son dos sobres que se deben tomar uno a las 15h y otro a las 20h y se deben beberse y mezclarse con abundante líquido, al menos un vaso de 250ml cada 30 minutos hasta un total de 2 litros en el de las 15h y 1 litro en el de las 20h. Pasados alrededor de 60 minutos tras el último sobre, el paciente que sentirá necesidad de ir a defecar urgentemente y que deberá expulsar todo su contenido. Este momento puede resultar incómodo y algo doloroso pues al realizarse el vaciamiento de forma tan brusca, el peristaltismo avanza rápidamente. A partir de este momento las heces adoptarán un color claro y una consistencia líquida, lo que es un buen indicador de que el contenido intestinal se está vaciando adecuadamente. En ocasiones, si no se consigue una correcta limpieza con la solución evacuante, será necesario el empleo de enemas de limpieza siguiendo las indicaciones del prospecto, hasta conseguir una correcta limpieza del tracto digestivo.