Si bien la fototerapia es muy eficaz, es posible que algunos bebés no respondan y sus niveles de bilirrubina continúen en aumento o se mantengan peligrosamente altos. En estos casos puede requerirse una técnica especial conocida como exanguinotransfusión y que consiste en extraer de forma gradual la sangre del bebé con sus altos niveles de bilirrubina y reemplazarla por sangre de un donante.
Esta técnica, muy eficaz, pero a la vez muy invasiva, suele realizarse en unidades de cuidados intensivos y conlleva un elevado riesgo de infecciones y complicaciones por lo que sólo se recomienda en casos de hiperbilirrubinemia muy elevados. La Tabla 2 (final del artículo) muestra sus indicaciones.
Procedimiento y Cuidados de Enfermería al recién nacido que precisa de fototerapia
Una vez se determine que el recién nacido debe ser tratado con fototerapia será ingresado en la unidad de cuidados neonatales, si no lo estaba con anterioridad, y se iniciará el protocolo.
- Procedimiento:
– Lavado de manos antes de las manipulaciones.
– Preparación del neonato:
- Lo desnudaremos y lo dejaremos sólo con el pañal dentro de la incubadora.
- Le colocaremos unas gafas para garantizar la protección ocular y cerciorarnos de que no sufrirá daños en la visión derivados de la exposición continua a la luz. Las ajustaremos sin ejercer demasiada presión.
– Preparación y comprobación del correcto funcionamiento de los aparatos que emitirán la luz, ya sean bancos de luz o mantas de fibra óptica:
- Si se usan bancos de luz: se colocarán sobre la parte superior de la incubadora, distanciados entre 5 – 10 cm del techo de ésta para que no se genere un calor excesivo y evitar así el sobrecalentamiento del neonato. Por el mismo motivo es conveniente disminuir la temperatura en su interior.
- Si se usan mantas de fibra óptica: tanto la almohadilla como la parte del cable que estén en contacto con el recién nacido se forrarán con una cubierta protectora. El niño se colocará sobre el lado luminoso.
– Durante el tiempo que se requiera la fototerapia se controlará que todos los materiales funcionan correctamente y de forma adecuada. Una vez terminado el tratamiento se retirarán y limpiarán.
- Cuidados de Enfermería:
Los objetivos fundamentales de nuestros cuidados serán:
– Informar y apoyar a los padres:
- Explicarles en qué consiste el tratamiento y facilitar que nos expongan sus dudas o miedos.
- Integrarlos en los cuidados habituales y favorecer así el contacto físico con el lactante; cambio de pañal, tomas, colocación gafas, cambios posturales.
- Durante las visitas, y siempre que los valores de bilirrubina lo permitan, apagar la fototerapia y quitar las gafas protectoras para favorecer el estímulo visual entre el recién nacido y sus padres.
- Al alta, instruir a los padres a reconocer los signos que pudiesen indicar un empeoramiento o un nuevo aumento de la bilirrubina.
– Garantizar la efectividad de la fototerapia:
- Verificar la distancia de la luz sobre la incubadora.
- Asegurarnos de la posición horizontal del colchón (garantiza una mejor incidencia de la radiación).
- Dirigir el centro de luz a la mayor superficie posible del recién nacido.
- No colocar objetos entre la luz y la incubadora.
- Realizar cambios posturales (decúbito prono y supino) cada tres horas, a ser posible coincidiendo con las manipulaciones durante las tomas para el mayor confort del bebé.
- Tener presente siempre apagar la fototerapia durante la extracción de las analíticas, pues la exposición de la sangre a la luz puede falsear los resultados.
– Evitar o reducir las posibles complicaciones:
- Protección y cuidados de los ojos.
* Comprobar la correcta colocación de las gafas periódicamente para evitar lesiones retinianas o asfixia por obstrucción de las fosas nasales.
* Aprovechar durante la alimentación para retirarlas y así favorecer el estímulo sensorial del neonato, valorar signos de conjuntivitis o realizar lavados con suero fisiológico.
* Cambiarlas cuando sea necesario.
- Evaluar la exposición e integridad de la piel.
* Desnudar al niño; aprovechar el decúbito prono para abrir el pañal y dejar expuesta más superficie a la luz.
* Comprobar la integridad de la piel, la existencia de rojeces, lesiones o signos de deshidratación o sequedad.
* No aplicar cremas o sustancias oleosas durante el tratamiento.
- Control de la temperatura corporal
* Vigilar la temperatura del recién nacido y si es necesario reajustar la temperatura de la incubadora para evitar tanto la hipertermia como la hipotermia.
* Comprobar que la incubadora tiene un nivel de humedad alto para Limitar las pérdidas insensibles.
- Asegurar una ingesta adecuada y valorar signos de deshidratación.
* Favorecer la lactancia materna siempre que no implique que el recién nacido pase largos ratos sin fototerapia; en casos de succión poco efectiva o escasa subida materna, se puede recomendar a la madre que se saque la leche y se le dé en biberón o por sonda nasogástrica si el bebé aún no presenta el reflejo de succión.
* En caso de observar sequedad de piel o cualquier signo de deshidratación se puede suplementar la alimentación con agua o suero glucosado.
- Valorar la efectividad del tratamiento.
* Observar la evolución de la coloración; ésta no sustituye a las determinaciones analíticas, pero es un buen indicador.
* Evaluar la posible aparición de signos neurológicos derivados de altos niveles de bilirrubina u otras complicaciones como la diarrea o las erupciones cutáneas o quemaduras.
– Dejar todas nuestras actuaciones bien registradas.
- Se llevará a cabo el control por escrito de los periodos del uso de la fototerapia o de los de pausa (baño, alimentación).
- Los cambios en el comportamiento o coloración del neonato, así como del estado de la piel.
- Anotar número y características de las deposiciones y micciones, así como las tomas realizadas y la tolerancia observada en el recién nacido.
En definitiva, centraremos nuestros cuidados en garantizar el bienestar del recién nacido durante el tratamiento y en resolver las dudas o miedos de sus padres, haciéndolos parte necesaria de nuestra labor.
Anexos – Cuidados de Enfermería en el recién nacido con ictericia que precisa fototerapia
Anexos – Cuidados de Enfermería en el recién nacido con ictericia que precisa fototerapia
Bibliografía
- Esqué MT (comisión de estándares de la SEN). Recomendaciones para el traslado perinatal. Memoria SEN 2000-2001: p 29-38.
- Graef JW. Manual de Terapéutica Pediátrica. 5ta Ed. Barcelona: Masón-Little Brown S.A, 1995: 180-188.
- Nelson WE, Behrman RE, Kligman RM, Arvin AM. Tratado de Pediatría. 5ta Ed. Santiago de Acahualtepec (México): McGraw-Hill Interamericana Editores S.A, 1998: vol 1: 618-628.
- Omeñaca Teres F, Cámara Mendizábal C, Valverde Núñez E. Enfermedad hemolítica del recién nacido. En: Protocolos de Neonatología. Asociación Española de Pediatría. Sociedad Española de Neonatología. 2008; p. 384-388.
- Ortiz Tardío J. Ictericia por Hiperbilirrubinemia Indirecta. Protocolos diagnósticos y terapéuticos en pediatría 2001, 40: 147-150.
- Ríos GM. Síndrome ictérico del primer trimestre. Revista Chilena de Pediatría 2002, 73 (4); 399-401.
- Rodríguez Miguélez JM, Figueras Aloy J. Ictericia neonatal. En: Protocolos de Neonatología. Asociación española de Pediatría. Sociedad Española de Neonatología. 2008; p. 371-373.
- Servicio de Neonatología Hospital “JR Vidal”. Propuesta Normativa Neonatal. Corrientes: Servicio de Neonatología Hospital “JR Vidal”; 2001
- Vásquez de Kartzow R, Martínez Orozco MX, Acosta Argoti F, Velasco López D. Ictericia Neonatal. Guías de Práctica Clínica Basada en la Evidencia. Postgraduate Medicine 1999, 38 (5): 233-250.