maniobra de pronación nuestro objetivo debe ser la seguridad del paciente y la prevención de complicaciones.
CONTRAINDICACIONES:
- Fracturas vertebrales inestables
- Presión intracraneal (PIC) elevada
- Hemodinámicamente inestable
- Grandes quemados
- Fractura pelvis
- Heridas en cara o zona ventral
OBJETIVOS:
- Una correcta colocación del paciente en decúbito prono, para mejorar la ventilación.
- Adquirir la técnica y conocimientos necesarios para llevarlo a cabo.
- Prevenir la seguridad del paciente en todo momento.
- Evitar daños al paciente.
Real y Enrique (2002) describen el procedimiento del siguiente modo:
- Explicar la técnica al paciente en caso de que sea posible o bien a la familia, informando de las complicaciones previsibles, como la deformidad facial.
- Suspender la nutrición enteral, comprobar la permeabilidad de la sonda nasogástrica, confirmar que no hay contenido en el estómago y conectar la sonda nasogástrica a bolsa para forzar el vaciado gástrico y evitar el reflujo.
- Realizar la higiene del paciente por la cara ventral y colocar la cama en posición horizontal.
- Realizar las curas de heridas situadas en la parte ventral incluyendo el cambio de apósitos de los drenajes y su vaciado, también los apósitos de los accesos vasculares, comprobando su fijación y valorando la colocación de alargaderas en los catéteres vasculares o de bolsas colectoras en drenajes o heridas muy exudativos.
- Limpiar, lubrificar y ocluir con apósitos ambos ojos.
- Comprobar la fijación del tubo endotraqueal y la holgura suficiente de las tubuladuras del ventilador.
- Aspirar secreciones bronquiales y la cavidad bucal.
- Valorar junto al médico la necesidad de sedo-analgesia y de aumentar la FiO2 durante la ejecución.
- Retirar los electrodos del monitor y desconectar todos los cables de medición que no sean imprescindibles; puede ser suficiente el mantener una pulsioximetría transcutánea durante el giro.
- Durante toda la maniobra, la enfermera responsable del paciente debe sujetar el tubo endotraqueal, la sonda nasogástrica y la vía venosa, dirigiendo la operación desde la cabecera de la cama.
- A los lados de la cama se situarán uno o dos celadores, según la corpulencia del paciente, y una auxiliar de Enfermería para apoyar la maniobra.
- Desplazar al paciente hasta el extremo de la cama contrario al sentido del giro.
- Situar el brazo que queda en el centro de la cama con la palma de la mano hacia arriba y debajo del glúteo para evitar luxaciones de hombro y girar al paciente hasta dejarlo en posición decúbito lateral en el centro de la cama
- Colocar las almohadas en la cama junto al paciente a la altura de las escápulas, de la cadera y de los tobillos. A la altura de la cabeza se situará un empapador para la saliva y debajo de él un rodete o una toalla.
- Girar al paciente sobre las almohadas en decúbito prono.
- Centrar al paciente en la cama comprobando la correcta alineación corporal
- Volver a monitorizar las constantes, comprobando la correcta ventilación y el estado hemodinámico, valorando la realización de nuevas calibraciones.
- Revisar la situación del tubo endotraqueal y el funcionamiento de accesos vasculares y drenajes.
- Colocar la cabeza y los brazos en posición fisiológica y la cama en posición anti- Trendelemburg (10 a 15º de inclinación) para evitar el reflujo gastroesofágico y disminuir el edema facial.
- Situar la bolsa de orina en un lateral de la cama pasando la tubuladura por debajo de la pierna y manteniendo la sonda urinaria entre las piernas, despinzarla.
- Reanudar la nutrición enteral y recolocar aparatos si fuese preciso.
- Registrar el procedimiento y las incidencias durante el mismo.
Como cuidados específicos, siempre siguiendo a estos autores, destacan:
- Revisar periódicamente la alineación corporal correcta.
- Realizar cambios posturales cada 3 horas.
- Realizar cuidados oculares levantando los apósitos cada 6 horas para valorar edema orbital y estado de la conjuntiva.
- Vigilar el estado respiratorio, especialmente durante las primeras horas tras realizar el decúbito prono.
- Vigilar el estado de los accesos vasculares y del TET, evitando acodaduras y tracciones.
- Higiene general. Para realizar la higiene diaria de la zona ventral se colocará al paciente en decúbito lateral.
- Prevenir y vigilar la aparición de úlceras por presión con especial atención a dedos de los pies, rodillas, genitales, mamas, codos, acromion, mandíbula, pómulos y orejas.
- Comprobar la tolerancia a la alimentación con especial atención a la presencia de reflujo gastroesofágico. Cuantificar el aspirado gástrico cada 6 horas.
CONCLUSIÓN:
El síndrome de distrés respiratorio agudo (SDRA) ha sido definido por importantes sociedades médicas como la forma más severa o grave de lesión pulmonar aguda.
El decúbito prono es una estrategia que mejora la oxigenación, es una técnica segura y eficiente siempre y cuando se realice de forma estandarizada y protocolizada, para aumentar, la prevención de eventos adversos, en el paciente critico, mejorando por tanto la seguridad del paciente.
BIBLIOGRAFÍA:
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