Inicio > Dermatología y Venereología > Dermatitis flagelada a propósito de un caso

Dermatitis flagelada a propósito de un caso

Dermatitis flagelada a propósito de un caso

Autor principal: Ignacio Sainz Sánchez

Vol. XIX; nº 17; 728

Flagellated dermatitis regarding a case

Fecha de recepción: 12/07/2024

Fecha de aceptación: 02/09/2024

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XIX. Número 17 Primera quincena de Septiembre de 2024 – Página inicial: Vol. XIX; nº 17; 728

Autor principal: Ignacio Sainz Sánchez. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

Autores:

Ignacio Sainz Sánchez. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

Jorge Marín Ayarza. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

María del Pilar García Aguilar. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

Alba Sancho Sánchez. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

Javier Guillén Hierro. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

María Carmen Celada Suárez. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Universitario Miguel Servet, Zaragoza, España.

Guillermo Viguera Alonso. Médico Interno Residente en Medicina de Familia y Comunitaria. Hospital Clínico Universitario Lozano Blesa, Zaragoza, España.

Resumen:

La dermatitis flagelada es un cuadro de dermatosis poco frecuente, que se presenta con lesiones cutáneas muy características: presencia de lesiones maculares eritematosas o hiperpigmentadas de disposición lineal, distribución generalizada con predominio en tronco y extremidades superiores, asemejándose a marcas dejadas tras latigazos, asociado además a un intenso prurito corporal. Es una entidad que tiene varios factores desencadenantes, como es la ingesta de setas del género Shiitake (Lentinus Edodes) crudas o poco cocinadas en este caso la clínica suele aparecer a las 48-72 horas de la ingesta. Otro de los factores desencadenantes es la administración de ciertos fármacos quimioterápicos como es el caso de la bleomicina (antineoplásico utilizado especialmente en tumores sólidos como carcinoma de cuello uterino y carcinoma testicular, y en el Linfoma de Hodgkin). Presenta una evolución autolimitada por lo que la administración de tratamiento o no, varía desde una actitud expectante (si no aparece ninguna clínica, hasta el uso de antihistamínicos orales o corticoides tópicos u orales.

Palabras Clave: Setas Shiitake, flagelada, bleomicina, mácula.

Abstract:

Flagellated demartitis is a rare dermatosis, which presents with very characteristic skin lesions: presence of erythematous or hyperpigmented macular lesions of linear arrangement, generalized distribution with predominance on the trunk and upper extremities, resembling marks left after whipping, also associated to intense body itching. It is an entity that has several triggering factors, such as the ingestion of raw or undercooked Shiitake mushrooms (Lentinus Edodes). In this case, the symptoms usually appear 48-72 hours after ingestion. Another triggering factor is the administration of certain chemotherapy drugs, such as bleomycin (antineoplastic used especially in solid tumors such as cervical carcinoma and testicular carcinoma, and in Hodgkin’s Lymphoma). It presents a self-limiting evolution so whether or not to administer treatment varies from an expectant attitude (if no symptoms appear) to the use of oral antihistamines or topical or oral corticosteroids.

Keywords: Shiitake mushrooms, flagellada, bleomycin, macula.

Declaración de buenas prácticas:

Los autores de este manuscrito declaran que:

Todos ellos han participado en su elaboración y no tienen conflictos de intereses
La investigación se ha realizado siguiendo las Pautas éticas internacionales para la investigación relacionada con la salud con seres humanos elaboradas por el Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas (CIOMS) en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS).

El manuscrito es original y no contiene plagio.

El manuscrito no ha sido publicado en ningún medio y no está en proceso de revisión en otra revista.

Han obtenido los permisos necesarios para las imágenes y gráficos utilizados.
Han preservado las identidades de los pacientes.

Introducción:

La dermatitis flagelada es un cuadro de dermatosis poco frecuente. Es una entidad que tiene varios factores desencadenantes, como es la ingesta de setas del género Shiitake (Lentinus Edodes) crudas o poco cocinadas en este caso la clínica suele aparecer a las 48-72 horas de la ingesta. Otro de los factores desencadenantes es la administración de ciertos fármacos quimioterápicos como es el caso de la bleomicina (antineoplásico utilizado especialmente en tumores sólidos como carcinoma de cuello uterino y carcinoma testicular, y en el Linfoma de Hodgkin) (1).

La dermatitis flagelada por consumo de seta shiitake fue descrita por primera vez por en el año 1977. Las setas del género Shiitake (Lentinus Edodes) se consumen con mucha frecuencia en países como China y Japón, siendo estas la segunda especie de setas más consumidas en todo el mundo, aunque cada vez con mayor frecuencia es posible encontrarlas e incluirlas en nuestra cocina, con el boom de la comida asiática. Es una especie de seta muy consumida en la cultura oriental debido a sus «supuestos» beneficios para la salud: tiene propiedades antihipertensivas e hipolipemiantes y en la medicina tradicional china se utilizan como tratamiento adyuvante contra el cáncer colorrectal y gástrico, por su supuesto beneficio anticarcinogénico. Desde la descripción del primer caso en el año 1977 en Oriente, su frecuencia ha ido aumentado exponencialmente, estudios realizados datan en 2006 la aparición del primer caso en Europa. Aunque su patogenia no está claramente definida, se aboga por el componente tóxico de las setas en personas con susceptibilidad como factor causal (2).

El cuadro clínico de la dermatitis flagelada por consumo de setas Shiitake suele aparecer a las 48-72 horas tras la ingesta de las mismas cuando están crudas o poco cocinadas, este cuadro se presenta en forma de lesiones lineales maculares eritematosas o hiperpigmentadas que se cruzan entre sí y que predominan en tronco, miembros superiores, cuello o incluso cara, sin afectación de mucosas, acompañándose de un intenso prurito generalizado. En la literatura médica describen el carácter dosis dependiente de la toxicidad del cuadro, una ingesta en cantidades pequeñas puede no provocar la aparición del cuadro clínico, este mismo suele aparecer tras una ingesta importante de setas crudas o poco cocinadas. Es muy infrecuente la clínica sistemática y generalizada, con cuadros de fiebre, diarrea, parestesia de manos, disfagia y conjuntivitis (3).

Se han descrito en la literatura otras reacciones adversas causadas por setas de este género, como dermatitis de contacto alérgica, urticaria de contacto, asma alérgica, fototoxicidad y casos de neumonitis crónica de hipersensibilidad inducida por esporas (4).

El diagnóstico es clínico debido a que la biopsia es inespecífica y tanto las pruebas epicutáneas, scratch-test y prick-to-pick suelen ser negativas, una buena anamnesis es importante para orientar el caso hacia el diagnóstico definitivo. Debemos hacer hincapié a la hora de preguntar al paciente sobre todo por el consumo de setas del género shiitake poco cocinadas o crudas o productos derivados de ellas o si algún otro comensal ha tenido el mismo cuadro clínico.

El diagnóstico diferencial incluye principalmente urticaria aguda, toxicodermia por bleomicina, dermatomiositis y enfermedad de Still.

El cuadro clínico suele tener resolución espontánea y el tratamiento será sintomático. No existe un tratamiento claramente definido. El pronóstico es benigno, no se han descrito cuadros graves en los que el paciente haya corrido un riesgo vital (5). El pilar principal del tratamiento es paliar los síntomas que presenta el paciente mediante el uso de fármacos antihistamínicos y corticoides tópicos, los cuales suelen ser suficiente para la resolución del cuadro. El uso de corticoides orales está reservado para cuadros más graves (6). Parece que la corticoterapia puede ayudar a acortar el tiempo de recuperación, los expertos recomiendan limitar la exposición solar mientras dura el proceso (7). La desaparición completa del cuadro se suele dar en torno a la segunda semana, aunque hay constancia en la literatura médica de cuadros que han durado hasta 1 mes (8). Hay que recalcar que un nuevo consumo abundante de dichas setas puede producir de nuevo la aparición del cuadro clínico, por lo que se recomienda limitar el consumo o cocinar las setas (9).

Caso clínico:

Paciente mujer de 55 años de edad, sin alergias medicamentosas conocidas, con antecedentes médicos de hipertensión en tratamiento con enalapril (inhibidores de la enzima conversora de la angiotensina IECA) 10 mg cada 24 horas, dislipemia en tratamiento con simvastatina 20mg cada 24 horas, que acude a urgencias por presentar desde hace 48 horas una erupción cutánea eritematosa y pruriginosa generalizada. La paciente negaba haber realizado ningún cambio en su medicación habitual o cambio en el uso de dermocosmética o productos de higiene y lavado, negaba viajes recientes a la naturaleza o al extranjero. La paciente no presentaba fiebre, artralgias, diarreas, náuseas ni vómitos, dolor abdominal ni otra sintomatología, salvo la erupción cutánea y el prurito. Después de preguntar a la paciente, esta nos comenta el antecedente de ingesta de setas shiitake en su casa en un plato de ramen, comenta que los otros comensales no han padecido esta erupción.

A la exploración física: auscultación cardiaca normal, rítmica sin soplos ni extratonos, auscultación pulmonar con murmullo vesicular conservado, no crepitantes, no hipoventilación, abdomen blando depresible no doloroso a la palpación, peristaltismo aumentado, saturación de oxígeno del 99%, frecuencia cardiaca de 75lpm y 36 grados de temperatura, faringe no eritematosa, pilares amigdalinos centrados y no presencia de edema de úvula. Destacaba la presencia de múltiples lesiones eritematosas lineales, siguiendo trayectos paralelos y entrecruzados entre sí a modo de «latigazos» de predominio sobre todo en tronco, raíz de miembros superiores y cara anterior de miembros inferiores, junto a cuello y cara. La paciente no presentaba afectación de mucosas y el dermografismo resultó negativo. Se realizó analítica general urgente con bioquímica, hemograma, gasometría venosa y coagulación, los resultados de la analítica urgente fueron normales, salvo una leve elevación de los leucocitos sin neutrofilia. Se contacto con el equipo de dermatología de guardia quien diagnosticó a la paciente de dermatitis flagelada por consumo de setas shiitake y se le dio de alta con tratamiento sintomático con bilastina 20 mg 1 comprimido cada 12 horas y corticoide tópico metilprednisolona aceponato crema 1mg/g. La paciente comenta mejoría progresiva del cuadro clínico, así como la desaparición de las lesiones en forma de latigazo progresivamente, con una resolución total de las lesiones en las siguientes tres semanas sin dejar hiperpigmentación asociada, además la paciente comenta desaparición del prurito con el uso de la bilastina.

Discusión:

La dermatitis flagelada es una patología que está en aumento en España y Europa debido al mayor consumo de setas shiitake empleadas en nuestra dieta habitual. Los especialistas en medicina de familia, así como el resto de especialidades hospitalarias tenemos que tener en cuenta este diagnóstico diferencial cuando nos presentemos ante un paciente con un cuadro clínico consistente en lesiones cutáneas maculares eritematosas o hiperpigmentadas de disposición lineal, distribución generalizada con predominio en tronco y extremidades superiores, asemejándose a marcas dejadas tras latigazos, asociado además a un intenso prurito corporal. Destacar que aparte del consumo de setas shiitake en cantidades elevadas poco cocinadas o crudas como desencadenante de la dermatitis flagelada, también nos podemos encontrar con el uso de Bleomicina como tratamiento quimioterápico. La toma de diuréticos o de fármacos inhibidores de la enzima conversora de la angiotensina (IECA) se asocia a una aparición prematura del cuadro clínico. El cuadro clínico suele ser leve, muy raras veces se dan complicaciones sistémicas. El diagnóstico es clínico debido a que la biopsia es inespecífica y tanto las pruebas epicutáneas, scratch-test y prick-to-pick suelen ser negativas, una buena anamnesis es importante para orientar el caso hacia el diagnóstico definitivo. El tratamiento consiste en paliar los síntomas que presenta el paciente mediante el uso de fármacos antihistamínicos y corticoides tópicos, con estas dos medidas la resolución de las lesiones suele ser espontánea en 2 semanas, sin dejar lesiones residuales en piel, aunque pueden persistir hasta pasado un mes, si por el contrario estas medidas no son efectivas del todo, se puede recurrir al uso de corticoterapia por vía oral.

Bibliografía:

  1. Netchiporouk E, Pehr K, Ben-Shoshan M, Billick RC, Sasseville D, Singer M. Pustular flagellate dermatitis after consumption of shiitake mushrooms. JAAD Case Rep. 2015;1(3):117-9.
  2. Nguyen AH, Gonzaga MI, Lim VM, Adler MJ, Mitkov MV, Cappel MA. Clinical features of shiitake dermatitis: A systematic review. Int J Dermatol. 2017;56(6):610-616.
  3. Stephany MP, Chung S, Handler MZ, Handler NS, Handler GA, Schwartz RA. Shiitake mushroom dermatitis: A review. Am J Clin Dermatol. 2016;17(5):485-489.
  4. Boels D, Landreau A, Bruneau C, Garnier R, Pulce C, Labadie M, et al. Shiitake dermatitis recorded by French Poison Control Centers-new cases series with clinical observations. Clin Toxicol (Phila). 2014;52(6):625-8.
  5. Czarnecka AB, Kreft B, Marsch WCh. Flagellate dermatitis after consumption of shiitake mushrooms. Postepy Dermatol Alergol. 2014;31(3):187-90.
  6. Agudo-Mena JL, García-Atienza EM, García-del Pozo-Martín de Hijas MC, Ochando-Ibernon G, Escario-Travesedo E. Flagellate dermatitis due to shiitake mushrooms. Semergen. 2018;44(1):68-70.
  7. Chu EY, Anand D, Dawn A, Elenitsas R, Adler DJ. Shiitake dermatitis: A report of 3 cases and review of the literature. Cutis. 2013;91(6):287-290.
  8. Wang AS, Barr KL, Jagdeo J. Shiitake mushroom-induced flagellate erythema: A striking case and review of the literature. Dermatol Online J. 2013;19(4):5.
  9. Poppe LM, Anders D, Kneitz H, Bröcker EB, Benoit S. Flagellate dermatitis caused by shiitake mushrooms. An Bras Dermatol. 2012;87(3):463-5.