Inicio > Odontología y Estomatología > Odontología pediátrica y embarazo: prevención desde el nacimiento

Odontología pediátrica y embarazo: prevención desde el nacimiento

Odontología pediátrica y embarazo: prevención desde el nacimiento

Autora principal: Cristina Isabel García Pena

Vol. XX; nº 03; 80

Pediatric dentistry and pregnancy: prevention from birth

Fecha de recepción: 08/01/2025

Fecha de aceptación: 05/02/2025

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XX. Número 03 Primera quincena de Febrero de 2025 – Página inicial: Vol. XX; nº 03; 80

AUTORES:       García Pena, Cristina Isabel

Graduada en odontología (USC)

Odontóloga en Servicio Gallego de Salud (SERGAS)

Fernández Díaz, Ana Belén

Graduada en enfermería

Matrona en Servicio Gallego de Salud (SERGAS)

Pérez Fernández, Mónica

Graduada en Nutrición Humana y dietética

Nutricionista en Servicio Gallego de Salud (SERGAS)

RESUMEN

La prevención de problemas dentales en el bebé debe comenzar desde el embarazo, con la salud bucal de la madre, y continuar a lo largo de la infancia. Mantener una higiene oral adecuada, evitar la transmisión de bacterias dañinas, y establecer hábitos saludables desde el nacimiento son esenciales para asegurar una sonrisa saludable. Visitar al odontopediatra de manera temprana y seguir las recomendaciones sobre el uso de flúor y la alimentación contribuirán a prevenir caries y otros problemas dentales. Una intervención temprana y constante garantiza el bienestar oral del bebé y establece las bases para una salud bucal óptima durante toda su vida.

PALABRAS CLAVE

Embarazo, pediatría, salud oral, prevención

ABSTRACT

Prevention of dental problems in the baby should start during pregnancy, with the mother’s oral health, and continue throughout childhood. Maintaining proper oral hygiene, avoiding the transmission of harmful bacteria, and establishing healthy habits from birth are essential to ensure a healthy smile. Visiting the pediatric dentist early and following recommendations on fluoride use and nutrition will help prevent cavities and other dental issues. Early and consistent intervention ensures the baby’s oral well-being and lays the foundation for optimal oral health throughout their life.

KEYWORDS

Pregnancy, pediatric dentistry, oral health, prevention

DECLARACIÓN DE BUENAS PRÁCTICAS

Los autores de este manuscrito declaran que:

Todos ellos han participado en su elaboración y no tienen conflictos de intereses
La investigación se ha realizado siguiendo las Pautas éticas internacionales para la investigación relacionada con la salud con seres humanos elaboradas por el Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas (CIOMS) en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
El manuscrito es original y no contiene plagio.
El manuscrito no ha sido publicado en ningún medio y no está en proceso de revisión en otra revista.
Han obtenido los permisos necesarios para las imágenes y gráficos utilizados.
Han preservado las identidades de los pacientes.

INTRODUCCIÓN

La odontología pediátrica juega un papel crucial en la salud bucal de los niños, y su relación con el embarazo es fundamental para prevenir futuros problemas dentales en los pequeños, desde el nacimiento. El cuidado oral comienza antes del primer diente del bebé y continúa durante su crecimiento y desarrollo. A continuación, se describen algunos puntos clave sobre la odontología pediátrica y la prevención dental desde el nacimiento, con énfasis en el embarazo.

1. Cuidado dental durante el embarazo

Es esencial que las mujeres embarazadas mantengan una buena salud bucal, ya que ciertos problemas dentales pueden afectar tanto a la madre como al bebé:

  • Gingivitis del embarazo: Es común que las mujeres experimenten inflamación de las encías debido a los cambios hormonales. Si no se trata, puede evolucionar a periodontitis, lo que puede aumentar el riesgo de parto prematuro o bajo peso al nacer.
  • Caries y salud general: Las caries en las madres no sólo afectan su bienestar, sino que también pueden aumentar el riesgo de transmisión de bacterias dañinas a los niños a través del contacto directo (como compartir utensilios).

Es recomendable que las mujeres embarazadas:

  • Visiten al dentista regularmente.
  • Mantengan una buena higiene oral.
  • Eviten el consumo excesivo de alimentos azucarados.
  • Usen hilo dental y enjuagues bucales recomendados por el odontólogo.

2. Prevención desde el nacimiento

La prevención dental para el niño comienza desde el momento de su nacimiento. Algunos aspectos importantes son:

2.1. Cuidado de la boca del bebé antes de la erupción dental

Aunque los bebés no tienen dientes al nacer, la higiene bucal debe comenzar desde el principio:

  • Limpieza de encías: Después de cada comida, limpia suavemente las encías del bebé con una gasa húmeda o un paño limpio para eliminar cualquier residuo de leche que pueda contribuir a la formación de bacterias.
  • Evitar el uso de biberones de manera inapropiada: Evitar que el bebé duerma con el biberón en la boca o que se quede por mucho tiempo con líquidos azucarados (como leche o jugos), ya que esto puede promover la aparición de caries tempranas (conocida como caries del biberón).

2.2. Primeros dientes (erupción dental)

Cuando aparecen los primeros dientes (alrededor de los 6 meses), es importante empezar a usar un cepillo de dientes suave y específico para bebés, sin pasta dental. A medida que el niño crece, se puede introducir pasta dental con una pequeña cantidad de flúor (aproximadamente del tamaño de un grano de arroz). Explicaremos las características de las pastas dentales más adelante.

2.3. Visitas al odontopediatra

Se recomienda llevar al niño al odontopediatra para una primera consulta cuando aparezca su primer diente o, al más tardar, a los 12 meses. Durante la consulta:

  • Se revisará el desarrollo dental y oral del niño.
  • El odontopediatra proporcionará recomendaciones sobre la higiene oral.
  • Se detectarán posibles problemas tempranos, como malformaciones o alteraciones en la erupción dental.

2.4. Educación en hábitos de higiene

Los padres deben ser educados sobre la importancia de enseñar a los niños buenos hábitos de higiene bucal desde pequeños. Esto incluye el cepillado de los dientes al menos dos veces al día y el uso de hilo dental, así como una dieta equilibrada para evitar el consumo excesivo de azúcar.

2.5. Uso de flúor

El flúor es esencial para prevenir las caries. A partir de los 2 años, los niños pueden usar una cantidad más significativa de pasta dental con flúor (aproximadamente del tamaño de un guisante). Además, se pueden aplicar tratamientos con flúor en el consultorio odontológico para reforzar la protección dental.

3. Cuidado a lo largo del desarrollo

A medida que el niño crece, se deben realizar chequeos dentales regulares (generalmente cada 6 meses) para monitorear su salud bucal. Las recomendaciones incluyen:

  • Controlar el hábito de chuparse el dedo o el uso prolongado de chupetes, ya que pueden afectar la alineación de los dientes.
  • Mantener una dieta saludable, rica en frutas y verduras, y baja en azúcares refinados.
  • Fomentar hábitos saludables de higiene oral de manera constante, para evitar problemas como la caries dental.

4. Conciencia de la salud bucal en la infancia

Además de la prevención de caries, el cuidado dental infantil abarca otros aspectos, como el tratamiento de maloclusiones (problemas de alineación dental) o el monitoreo de la erupción dental. Detectar problemas de forma temprana puede reducir la necesidad de tratamientos invasivos más adelante.

En resumen, el cuidado dental en el embarazo y la prevención desde el nacimiento son claves para asegurar la salud bucal del niño a lo largo de su vida. Mantener una higiene adecuada, evitar hábitos dañinos y realizar visitas regulares al odontopediatra son pasos fundamentales para garantizar que el niño crezca con una sonrisa sana y fuerte.

5. Prevención a largo plazo: Fomentando hábitos saludables

La prevención de problemas dentales no termina con la erupción de los dientes. A medida que el bebé crece, los hábitos deben mantenerse y adaptarse a su desarrollo:

5.1. Dieta saludable para el bebé

La nutrición juega un papel fundamental en la salud dental. Una dieta equilibrada, rica en vitaminas y minerales, ayudará a fortalecer los dientes del bebé. Evitar el consumo excesivo de azúcares refinados es clave para prevenir caries. Una dieta saludable para el bebé debe ser equilibrada y ofrecer una variedad de alimentos que apoyen su crecimiento, desarrollo y salud dental. Desde la lactancia hasta la introducción de alimentos sólidos, es fundamental asegurarse de que el bebé reciba los nutrientes necesarios para fortalecer sus dientes y huesos. Fomentar buenos hábitos alimenticios desde temprana edad es clave para prevenir problemas de salud a largo plazo, incluyendo las caries dentales.

Una dieta saludable para un bebé es crucial para su desarrollo físico, cognitivo y emocional. Aquí te proporciono una guía general de lo que debe incluir la alimentación de un bebé, dependiendo de su edad:

Desde el nacimiento hasta los 6 meses:

  • Lactancia materna: La leche materna es el alimento ideal para los primeros meses de vida. Proporciona todos los nutrientes esenciales, anticuerpos y grasas saludables para el bebé. Si la lactancia materna no es posible, la leche de fórmula es una alternativa recomendada.
  • Frecuencia de la lactancia: Durante los primeros meses, los bebés deben ser alimentados cada 2-3 horas, incluyendo las noches. A medida que crecen, la frecuencia puede espaciarse más.

Beneficios de la lactancia materna:

  • Favorece el desarrollo del sistema inmunológico.
  • Promueve una buena digestión.
  • Fortalece el vínculo madre-hijo.

A partir de los 6 meses (introducción de alimentos sólidos):

A esta edad, los bebés ya pueden comenzar a explorar alimentos sólidos, pero siempre manteniendo la lactancia como principal fuente de nutrición.

Alimentos recomendados:

  • Cereales para bebés: Se pueden ofrecer cereales fortificados con hierro, como el arroz o avena, generalmente mezclados con leche materna o fórmula.
  • Frutas: Pera, manzana, plátano y aguacate son opciones suaves y fáciles de digerir. Se deben ofrecer cocidas o trituradas.
  • Verduras: Zanahorias, calabaza, brócoli, patata y espinacas. Al principio, deben cocerse bien y luego triturarse.
  • Proteínas: Pollo, pavo o pescado bien cocido y desmenuzado. También se puede ofrecer huevo bien cocido (en pequeñas cantidades y siempre introduciendo un alimento a la vez para observar posibles reacciones alérgicas).
  • Yogur natural sin azúcar: A partir de los 6 meses también se puede introducir yogur sin azúcares añadidos.
  • Agua: Se puede ofrecer agua entre las comidas, especialmente cuando se introducen alimentos sólidos.

A partir de los 9-12 meses:

  • Comida más variada: El bebé puede comenzar a comer alimentos más texturizados, como pequeños trozos de alimentos blandos.
  • Proteínas: Además de pollo, pescado y huevo, se puede incluir carne magra (como res o cerdo) y legumbres como lentejas y frijoles, siempre bien cocidos y triturados o picados en trozos pequeños.
  • Frutas y verduras: Ofrecer frutas como durazno, melón, y verduras de temporada, siempre en trozos pequeños y bien cocidos.
  • Cereales integrales: Como arroz integral o avena, que pueden ofrecerse en forma de puré o en trozos blandos.

Evitar en esta etapa:

  • Miel: No debe darse a bebés menores de 1 año debido al riesgo de botulismo.
  • Frutos secos enteros: Pueden ser peligrosos por el riesgo de asfixia.
  • Alimentos muy salados o procesados.

A partir de los 12 meses (comida más similar a la de los adultos):

  • A los 12 meses, los bebés pueden comer la mayoría de los alimentos en trozos pequeños y con una mayor variedad de sabores.
  • Leche de vaca: A partir de los 12 meses, la leche de vaca se puede introducir como bebida principal. Sin embargo, debe ser leche entera, ya que el bebé necesita las grasas saludables para su desarrollo.
  • Comidas completas: Los bebés pueden comer alimentos de la familia, siempre adaptados a su capacidad de masticar y digerir, evitando piezas grandes o duras.

Recomendaciones generales:

  • Diversificación temprana: Es importante ofrecer una variedad de alimentos y ayudar al bebé a desarrollar un paladar diverso.
  • Comer en familia: Si es posible, comer juntos puede ayudar al bebé a observar y aprender de los hábitos familiares.
  • Evitar azúcares añadidos: Es fundamental evitar el azúcar en los alimentos para bebés, especialmente durante el primer año, para prevenir el riesgo de obesidad y problemas dentales.
  • Alimentos alergénicos: Introduce los alimentos potencialmente alergénicos, como el huevo, el pescado o los frutos secos, uno a la vez y observa por 3-5 días por si hay reacciones adversas.

5.2. Cepillado y cuidado continuo

Desde que el niño tiene sus primeros dientes, es necesario enseñarles la importancia del cepillado de dientes. Es recomendable:

  • Cepillar los dientes del niño al menos dos veces al día con pasta dental con flúor.
  • Introducir el uso de hilo dental tan pronto como los dientes del niño estén lo suficientemente cerca como para tocarse entre sí.
  • Las pastas dentales para bebés son productos especialmente formulados para la higiene bucal de los más pequeños, generalmente diseñados para ser seguros en caso de ingestión accidental, ya que los niños pequeños suelen tragar parte de la pasta al cepillarse. Estas pastas dentales suelen ser de uso recomendado a partir de los primeros dientes, alrededor de los 6 meses de edad. A continuación, te doy información clave sobre las pastas dentales para bebés.

Las pastas dentales para bebés se caracterizan por tener una fórmula suave y segura, adecuada para la etapa inicial del desarrollo dental:

  • Flúor: La mayoría de las pastas dentales para bebés contienen flúor, pero en concentraciones mucho menores que las pastas dentales para adultos. A partir de los 6 meses de edad, los odontólogos suelen recomendar el uso de pasta dental con flúor, ya que este mineral ayuda a fortalecer los dientes y prevenir las caries. Sin embargo, la cantidad de flúor es controlada, ya que los bebés tienden a tragar la pasta.
    • Se recomienda que los bebés menores de 2 años usen pasta dental con flúor que contenga solo una pequeña cantidad, equivalente al tamaño de un grano de arroz.
  • Sabores: Las pastas para bebés suelen ser sin sabores o con sabores suaves como el de manzana o fresa, sin aditivos artificiales ni colorantes, para hacer el cepillado más agradable sin riesgo de reacciones alérgicas.
  • Ingredientes no abrasivos: Las pastas dentales para bebés están formuladas con ingredientes no abrasivos, ya que los dientes de leche son más suaves que los dientes permanentes. El uso de una pasta abrasiva podría dañar el esmalte dental en los primeros dientes del bebé.
  • Sin riesgo de toxicidad: Dado que los bebés tienden a tragar parte de la pasta, estas pastas dentales no contienen ingredientes peligrosos como el lauril sulfato de sodio (un detergente que puede irritar el estómago) o edulcorantes artificiales.

5.3. Evitar hábitos perjudiciales

Es importante evitar que el niño desarrolle hábitos como el chuparse el dedo o el uso prolongado de chupetes, ya que pueden afectar el desarrollo adecuado de los dientes y la mandíbula.

6. La importancia del flúor

El flúor es un mineral esencial para la prevención de caries. Se recomienda el uso de pasta dental con flúor en la cantidad adecuada para el niño. En algunas áreas, también se puede aplicar flúor en el consultorio dental para fortalecer los dientes y prevenir las caries.

7. Educación a los padres

La educación de los padres es clave para garantizar una buena salud oral del bebé. Los padres deben aprender sobre la higiene dental adecuada, las mejores prácticas alimenticias, y la importancia de la visita al dentista.

CONCLUSIONES

La prevención de problemas dentales en el bebé comienza incluso antes de su nacimiento, con el cuidado adecuado de la salud bucal de la madre. A medida que el bebé crece, es esencial establecer hábitos de higiene oral, visitar al odontopediatra y fomentar una dieta saludable para prevenir problemas como las caries y asegurar una sonrisa sana durante toda su vida. La prevención desde el embarazo hasta la infancia temprana es fundamental para garantizar que el bebé crezca con una salud bucal óptima.

BIBLIOGRAFÍA

  • American Academy of Pediatric Dentistry. Guideline on management of the developing dentition and occlusion in pediatric dentistry. Pediatr Dent. 2018;40(6):92-102.
  • Gaffar A, Best AM, Wehler CJ, et al. Early childhood caries: The impact of maternal oral health. Pediatr Dent. 2017;39(2):110-118.
  • Bertelle N, Wada R, Shirakawa H, et al. Maternal dental care and child health: Preventive strategies for early childhood. Int J Paediatr Dent. 2020;30(3):276-283.
  • López R, Gutiérrez J, Callejas C, et al. Oral health of the mother and its impact on the development of oral health in the child. J Clin Pediatr Dent. 2019;43(2):105-110.
  • Chaffee BW, Allman D, Curbow B, et al. Pregnancy and oral health: The impact of maternal oral health on the child. J Am Dent Assoc. 2018;149(4):300-307.
  • Bertoldi AD, Laheij AM, Koroma D, et al. The first visit to the dentist: Importance and outcomes. Pediatr Dent. 2021;43(1):50-58.
  • Vargas CM, Kramarow EA, Yellowitz JA. Oral health behaviors among U.S. adults during pregnancy. J Am Dent Assoc. 2019;150(10):845-853.