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Presencia de dolor en adultos mayores institucionalizados

Presencia de dolor en adultos mayores institucionalizados

Autora principal: Claudia Marcela Cantú Sánchez

Vol. XVIII; nº 20; 1021

Presence of pain in institutionalized older adults

Fecha de recepción: 17/08/2023

Fecha de aceptación: 16/10/2023

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XVIII. Número 20 Segunda quincena de Octubre de 2023 – Página inicial: Vol. XVIII; nº 20; 1021

Autores:

*MTFS Claudia Marcela Cantú Sánchez. Candidata a Dra. En Ciencias del Desarrollo Humano. Profesor de Tiempo Completo. Departamento de Enfermería de Irapuato. División de Ciencias de la Vida, Universidad de Guanajuato, México. Integrante del Cuerpo Académico en formación Investigación en Promoción de la Salud y Cuidado en Grupos Vulnerables.

***Dr. Gerardo Ruvalcaba Palacios.  Profesor de Tiempo Completo. Departamento de Enfermería y Obstetricia de Irapuato. División de Ciencias de la Vida. Universidad de Guanajuato. México.

Línea de Investigación Prevención y estados crónicos del adulto.

****MCE Greever María Avila Sánsores. Profesor de Tiempo Completo. Departamento de Enfermería y Obstetricia de Irapuato. División de Ciencias de la Vida. Universidad de Guanajuato. México. Línea de Investigación Prevención y estados crónicos del adulto.

*****Dra. Ma. Gloria Vega Argote. Profesor de Tiempo Completo. Departamento de Enfermería y Obstetricia de Irapuato. División de Ciencias de la Vida. Universidad de Guanajuato. México. Línea de Investigación Prevención y estados crónicos del adulto.

Resumen

El dolor crónico en adultos mayores puede estar asociado a enfermedades crónicas como la artrosis, enfermedades cardiacas, neuropatías, etc. Pero también a alteraciones en el patrón del sueño, inmovilidad e incluso problemas psicológicos que haga que el adulto mayor demande la atención de sus familiares, mas del 60% de los pacientes institucionalizados sufren algún tipo de dolor. Aunado a la prevalencia de pluripatología y fragilidad puede aumentar. La evaluación a través de la exploración clínica es clave para conseguir un control adecuado al dolor, debido a que a menudo son excluidos de los ensayos sobre evaluación y tratamiento debido a las deficiencias en su estado cognitivo o sensorial. Con esta investigación se pretende valorar a adultos mayores para determinar su estado de salud a través de una valoración a través de la escala de EVA, es un estudio transversal, descriptivo, la muestra fue a conveniencia, debido a que algunos participantes se negaron a la evaluación, el universo es de 62 pacientes y la muestra de 29 adultos que aceptaron y firmaron consentimiento informado.

Palabras clave: Adulto mayor, dolor, albergue.

Summary

Chronic pain in older adults can be associated with chronic diseases such as osteoarthritis, heart disease, neuropathies, etc. But also to alterations in the sleep pattern, immobility and even psychological problems that make the elderly demand the attention of their relatives, more than 60% of institutionalized patients suffer some type of pain. Coupled with the prevalence of multiple pathologies and frailty, it may increase. Assessment through clinical examination is key to achieving adequate pain control, as they are often excluded from assessment and treatment trials due to impaired cognitive or sensory status. With this research, it is intended to assess older adults to determine their health status through an assessment through the EVA scale, it is a cross-sectional, descriptive study, the sample was convenience, because some participants refused to evaluation, the universe is 62 patients and the sample is 29 adults who accepted and signed informed consent.

Keywords: Older adult, pain, shelter.

Antecedentes

La economía mundial actualmente no está preparada para el aumento de la población de los adultos mayores y de las necesidades que se desarrollaran como la demanda de los servicios de salud, las nuevas investigaciones en gerontología han determinado que los Adultos Mayores son grupos vulnerables en cuanto a la educación y desarrollo en la sociedad siendo un grupo de interés, donde Médicos generales, Enfermeros, Psicólogos, Trabajadores Sociales, Geriatras, deben trabajar de manera conjunta para brindar una atención integral de calidad.  (Mogollón, 2012). La preparación a las nuevas generaciones sobre el envejecimiento se debe realizar a trabes de la promoción de hábitos saludables desde las primeras etapas de la vida donde el hombre sea visto de forma holística para atender y prever un futuro de los adultos mayores con atención médica adecuada. (Navarro, Ojeda, Ortega, Moreno, 2014).

El envejecimiento no solo es un fenómeno cronológico, como lo afirma  Allevato y Gaviria, 2008,   sino que es un fenómeno multifactorial que afecta todos los niveles de organización a nivel molecular en órganos y sistemas de manera inevitable, debido a que la esperanza media de vida ha aumentado en el último siglo a un promedio de 65 y más años y sigue aumentando. En los países de ingresos bajos y medio la mortalidad ha bajado en la infancia, los nacimientos y enfermedades infecciosas se han reducido, gracias a los programas de promoción de la salud y en el adulto mayor los problemas de salud son debido a la aparición de enfermedades crónicas debido a hábitos poco saludables, que son frecuentes, aunado a la poca cobertura en seguridad social y de servicios de salud (OMS, 2015).

La necesidad actual relacionada con el envejecimiento poblacional es el mantenimiento de la salud y la calidad de vida. Ya que la esperanza de vida al nacer aumento 40 años desde el siglo XII y el 50% de las personas que nacieron en el año 2000 vivirán en el año 2072, muriendo primero los hombres, causado por el estilo de vida. (Hernández, 2014). En México se ha presentado un rápido crecimiento demográfico de los años 1930 a 1970 caracterizado por la transición demográfica con base ancha y hacia la porción superior con estrechez. La tasa para 1970 de crecimiento fue la más alta de la historia del país con una fecundidad promedio de 7 hijos por mujer, lo que provocó la difusión de campañas de planificación familiar ubicando a la mujer en el ámbito laboral (Mendoza, 1998 en Ortiz Álvarez y Mendoza, 2008).

De acuerdo con la pirámide poblacional en el estado de Guanajuato se visualizó un aumento en el grupo etáreo de Adultos Mayores del 6.5% en el año 2000 y del 13.9% en el año 2015, y donde será más notable por su rapidez será en el corredor Industrial que incluye a la ciudad de León, Irapuato y Celaya. Los problemas de salud que se presentan con más frecuencia son: diabetes, cáncer, neumonía, depresión, sordera, ceguera, enfermedades no identificadas por proceso de envejecimiento. (Navarro, Ojeda, Ortega, Moreno, 2014).

El Diario Oficial de la Federación menciona sobre las condiciones de vulnerabilidad de los adultos mayores se han agudizado por el rápido crecimiento de la población de adultos mayores esto, provoca que aumente la demanda de los servicios que brindan asistencia, por lo tanto, se debe mejorar la atención de manera eficaz, rigiendo la atención de los adultos mayores con la NOM-167-SSA1-1997, sobre asistencia social. Prestación de servicios de asistencia social a adultos y adultos mayores en situación de riesgo y vulnerabilidad, siendo obligatoria en todo el territorio nacional tanto en los sectores, público, privado y social. Se convierte en un problema en la sociedad mercantilista y productiva, cuando el individuo ya no puede trabajar, aunado a un sistema familiar nuclear predominante, rechazando a las generaciones adultas para condenarlas a residir de forma independiente del resto de la familia. Muchas veces son ayudados de forma económica según Gascón, 2009, por los hijos, perdiendo su autoridad en la familia, en ocasiones son ingresados en asilos que les brinden los cuidados necesarios, en donde pocas veces son visitados quedando expulsados del seno familiar. Siendo más característico en las zonas urbanas y rurales el conservar su lugar dentro de la familia.

Por lo anterior se pretende que se aplique en el adulto mayor mexicano, un modelo centrado básicamente en la funcionalidad, implicando los cambios de paradigmas sobre la curación y centrarse en el autocuidado para lograr el bienestar, garantizando la autonomía. Además debemos conocer el apoyo de la familia del adulto mayor que juega un papel importante en el bienestar a través del afecto, respeto y muchos de ellos necesitan ayuda al realizar las actividades de la vida diaria desde caminar, alimentarse, vestirse y bañarse. Estos grupos seguirán experimentando una serie de cambios biopsicosociales. Es de vital importancia la familia en el adulto mayor siendo su principal cuidadora, al brindar apoyo tanto físico, emocional, social y económico. (Navarro, Ojeda, Ortega, Moreno, 2014).

Es por esto que debemos apostar en la educación y sobre todo del adulto mayor, pero no esperar a que envejezcamos sino desde la infancia crear conciencia como individuos para mejorar nuestra calidad de vida con expectativas productivas, por lo que se han logrado varias metas en cuanto a la educación básica, media y superior. Existen algunos problemas económicos de los países que provocan el desempleo de larga duración y es que los empleos para los jóvenes son de baja calidad, se habla de una sobre-educación por el exceso de competencias que el joven adquiere contra una sub-educación, se habla que el joven lleva mucho tiempo hasta 6 en establecerse en un empleo formal, y muchas de estas condiciones no son las adecuadas ya que se involucran en trabajos como los llamados empleos temporales, todo esto lo podemos ver a diferencia de un adulto mayor, que por lo regular son jubilados o así era el ideal de los tiempos de generaciones pasadas, y ahora podemos ver que la tasa de desempleo es de las más severas de los últimos años.

Si aterrizamos estos cambios en México, se provocó una caída importante en la producción y por lo tanto en el empleo, hubo reajustes en el mercado laboral favoreciendo el empleo informal, afectando las exportaciones de la manufactura, esta crisis que hasta hoy no se ha podido superar. Además, aunado a la migración de los jóvenes para buscar una mejor calidad de vida en otro país, dejando a estos padres adultos mayores sin el apoyo cercano que necesitan, algo con lo que tiene que trabajar el gobierno es con el crecimiento económico enfocándose en los sectores más vulnerables de nuestro país.

Según Lugo, et al. (2014) Se espera que para el año 2020 aumentara la cantidad de adultos mayores, es por esto que se debe contar con la creación de empresas al cuidado de ellos, y con esto un crecimiento en las áreas de enfermería, optometría, odontología y especialidades médicas enfocadas en el adulto mayor, se pudiera pensar en casas de reposo, asilos o centros de día para los adultos mayores que fungen como guarderías pero además realizarían actividades recreativas para el cuidado de su salud, el personal que está a cargo debe contar con los conocimientos científico-humanos para la mejor atención con calidad y calidez, creo que en este mundo que ha entrado en la globalización sería una de las mejores opciones para poder ir generando empleos.

Envejecimiento cerebral

El envejecimiento es un proceso universal, continuo, heterogéneo, de carácter lento y complejo. Durante el mismo, el gradual deterioro de las capacidades funcionales hace a los individuos, debido a la pérdida de capacidad homeostática, particularmente susceptibles y vulnerables ante una gran variedad de alteraciones patológicas. La heterogeneidad se puede abordar tanto desde el punto de vista filogenético como ontogénico. Esta notable variabilidad interindividual e intraindividual con respecto a la velocidad y cantidad del envejecimiento resulta de una compleja interacción entre genética, medio ambiente y factores estocásticos. El envejecimiento del cerebro muestra cambios característicos que plantean la cuestión de si representan aspectos menores del envejecimiento, que no afectan considerablemente a su función, o si son precursores de trastornos neurodegenerativos (Wyss-Coray T, 2016). El encéfalo, desde el punto de vista neural, es un órgano posmitótico, aunque sabemos que en determinadas regiones persisten fenómenos neurogénicos. Como consecuencia de esta característica, cuando las neuronas se pierden por cualquier causa, son difícilmente recuperables, por lo que el número total de neuronas y el peso global del encéfalo disminuye de forma progresiva con el envejecimiento. A partir de los 60 años de edad el cerebro pierde de 2 a 3 g de peso anualmente. Estos cambios morfológicos generales también se atribuyen a modificaciones en la sustancia blanca de las regiones filogenéticamente más evolucionadas. Los estudios recientes de neuroimagen realizados a personas vivas, sin embargo, no son tan concluyentes, la variabilidad es importante y muchos ancianos no presentan cambios significativos desde el punto de vista macroscópico (Elobeid A, 2016).

También es importante considerar no solo el número de neuronas, sino lo que ocurre durante el envejecimiento con la arborización dendrítica neuronal y la densidad de espinas, sustrato morfológico de los contactos sinápticos. La neuroplasticidad (posibilidad de incrementar el árbol dendrítico, las espinas y los contactos sinápticos) no se pierde con el envejecimiento. Hace más de 30 años se pudo comprobar que la preservación del fenómeno de neuroplasticidad continuaba presente en la corteza del hipocampo de octogenarios y, sin embargo, desaparecía en ancianos con deterioro cognitivo (Buell SJ, 1979). Una característica importante de la organización funcional del cerebro es la presencia de un conjunto de ejes de redes neuronales interconectadas y altamente funcionales, como la ínsula, la corteza cingulada anterior y posterior, la corteza frontal superior y la corteza prefrontal medial. Estos ejes son también la estructura de la base neurocognitiva de redes funcionales, tales como la red de modo por defecto, la red ejecutiva central y la red de prominencia, indispensables para las funciones cognitivas superiores (Power JD, 2013). Las interrupciones relacionadas con la edad que aparecen en la conectividad entre estas zonas cerebrales producen efectos perjudiciales sobre la memoria episódica y las funciones ejecutivas en los adultos mayores, subrayando la importancia que esas redes de conectividad neural tienen en la comprensión del envejecimiento cerebral normal. En estudios neuropatológicos de base poblacional con ancianos que no habían sido diagnosticados de padecer enfermedad neurodegenerativa, aparecían depósitos proteicos anómalos relacionados con neurodegeneración. Estos acúmulos ocurren tanto en el compartimento intraneuronal o intraglial como extracelular (ovillos neurofibrilares, gránulos de lipofuscina, cuerpos de Marinesco y de Hirano, etc.). Estos hallazgos varían mucho entre individuos con determinadas lesiones cuya presencia está restringida solamente a ciertas áreas cerebrales. Se desconoce qué causa estas lesiones, si son realmente precursoras o iniciadoras de los procesos de neurodegeneración y enfermedad, o si simplemente son el producto de un cerebro envejecido. Es probable que sean una consecuencia de la función normal del cerebro con el paso del tiempo. Recientemente surge el concepto decline framework, que hace referencia a los cambios ligados a la edad en la activación neuronal y su interacción con el entorno como elemento potenciador. Los cambios en la activación neuronal ligados al envejecimiento engloban tres aspectos: reclutamiento compensatorio de las regiones prefrontales o de la red ejecutiva, reducción de la lateralización de la activación hemisférica con carácter compensatorio en el córtex prefrontal y, f finalmente, el índice neuronal del declinar cognitivo (Sugiura A, 2016).

Factores de Riesgo

La mayoría de los estudios sobre factores de riesgo en deterioro cognitivo tienen limitaciones, pues la mayoría de cohortes se encuentran contaminadas por pacientes que cumplen criterios de demencia en fases muy iniciales. El proceso que lleva al DCL es indudablemente complejo, involucrando varios e interrelacionados factores de riesgo (Lipnicki, 2017). Los factores de riesgo pueden estar relacionados con aspectos etiológicos o etiopatogénicos de la enfermedad. Estos factores pueden ser utilizados para valorar el riesgo de desarrollar la enfermedad, pero habitualmente no tienen la suficiente sensibilidad ni especificidad para ser utilizados como marcadores diagnósticos. Se sigue manteniendo la duda sobre si el DCL y su progresión comparten los mismos factores de riesgo que la EA (Bos, 2017).

Dolor en el adulto mayor

La valoración del adulto mayor se debe realizar como en cualquier otro grupo de edad, se debe iniciar con una historia clínica completa que aborde el tema de dolor, inicio, desencadenantes, técnicas usadas y eficacia, debe de incluir la exploración física y las repercusiones en el diario de las actividades realizadas durante el día. Gran parte de la valoración del dolor en el anciano coincide con la realizada a otras edades. Se debe iniciar con una completa historia clínica que contemple características del dolor, forma de inicio, desencadenantes, variaciones, irradiación, registrando las distintas terapias utilizadas y su eficacia. Debe continuarse con una exploración física, para concretar la localización y tipo de dolor. Además, se debe interrogar sobre la repercusión en la vida diaria, a nivel funcional, afectivo y social. Especial importancia tiene en el anciano la evaluación estandarizada de la capacidad funcional, ya que el dolor condiciona un deterioro de la misma, pudiendo provocar una situación de dependencia a veces irreversible si no se detecta de forma precoz. Esta información puede ayudar al diagnóstico de dolor, ya que con frecuencia los ancianos pierden la movilidad y la autonomía para evitar maniobras dolorosas. También sirve para establecer los objetivos del tratamiento y comprobar la eficacia, incluyendo la recuperación funcional entre dichos objetivos, además de la analgesia.

Para tratar el dolor en los adultos mayores es indispensable la evaluación, debido a que se sitúan como pacientes frágiles debido a que presentan mayor dificultad a la hora de evaluar y tratar su  dolor debido a la infraestimación del dolor y a la falsa creencia de tolerancia al dolor. El deterioro cognitivo es otro de los factores que influye en la evaluación correcta sobre la presencia de dolor. El dolor es una experiencia subjetiva donde la familia o los cuidadores tienden a sobrestimarlo. (Brown, Rakel, ME de Roud, RS. Morrison, Dk. Weiner, R. Bernabei)

*Planteamiento del problema

Hasta antes de la década de los setenta México carecía de una política pública definida que tratara el problema de los adultos mayores. Durante la época colonial, la reforma y el México revolucionario y posrevolucionario, la vejez era concebida como una condición natural e individual de los seres humanos, cuya atención correspondía al ámbito privado familiar, donde las instituciones de asistencia, sobre todo religiosas, se involucraban sólo en aquellos casos de extrema vulnerabilidad, abandono y desamparo. En este sentido la respuesta social, que no gubernamental, se basaba en los mandamientos de la fe y la caridad. A partir del Porfiriato la historia da cuenta de los esfuerzos del Estado, para hacerse cargo de las poblaciones dependientes (ancianos, menores, minusválidos).1 Así la atención a los ancianos queda a cargo de la Beneficencia Pública.

El Sistema Nacional para el Desarrollo Integral de la Familia, DIF, pasó a ser un brazo especializado, autónomo y desconcentrado del sector salud y se formó el Sistema Nacional de Asistencia Social que además de los sectores tradicionalmente atendidos de niños y mujeres agregó a los jóvenes y a los viejos (Centros de Integración Juvenil, Instituto Nacional de la Senectud) y creó filiales en todo el país, a nivel estatal y municipal, con manejo propio de recursos. La asistencia social se convirtió en un sistema complejo con compromisos, estrategias, leyes y convenios

Por lo que surge la siguiente   pregunta, ¿Cuál es el nivel de dolor que presentan los adultos mayores institucionalizados?

Justificación

En la actualidad el aumento de promedio de vida ha provocado el desarrollo de enfermedades degenerativas que ocurren con más frecuencia ocasionando estados de minusvalidez. Actualmente en México viven 8 millones de adultos mayores y la ONU calcula que de continuar estas tendencias para el año de 2025 los adultos mayores en América Latina y el Caribe constituirán el 14.1% de la población del planeta llegando hasta el 22.6% en 2050. Nuestra sociedad relega a los ancianos ocasionando baja autoestima, deterioro físico y aislamiento social, en algunos casos maltrato, generando depresión.

Con los últimos avances en medicina y salud publica aumento el promedio de vida de las personas, y aunque la muerte no se evita, es de vital importancia llegar a una adultez con calidad, este cambio demográfico creará consecuencias a nivel social, demográfico, familiar y económico. Uno de los problemas de salud de este grupo poblacional serán las enfermedades crónicas con mayores prevalencias que ocurren por múltiples factores, es por esto que familia y sociedad tienen la responsabilidad de ofrecer las oportunidades para que el adulto mayor tenga las habilidades para lograr un autocuidado satisfactorio a través de intervenciones de Enfermería sobre todo en presencia de dolor para brindar confort al adulto mayor evitando la sobre medicación o intoxicación por interacciones medicamentosas.

Métodos y metodología

Se pretende trabajar con pacientes geriátricos que abarcan de 45-90 años que a su vez se dividen en Preseniles 45-60 años, Senectud gradual 60-70 años, Vejez declarada 70-90 años, longevos más de 90 años, que son los pacientes que se encuentran en una institución geriátrica permanente, se usó la escala de Eva para medir el dolor, posterior a esto se sacarán los datos sociodemográficos, vaciado e interpretación de las pruebas, análisis descriptivo de los resultados. Es un estudio descriptivo, transversal, cuantitativo realizado en Noviembre de 2022, se realizó a través de la escala Eva de dolor y autorización a través de consentimiento informado de cada uno de los integrantes que participaron en el estudio, se trabajó con 29 adultos mayores, el muestreo fue a conveniencia, el universo fue de 59 adultos mayores adscritos a la estancia geriátrica.

Consideraciones éticas: La investigación se consideró “sin riesgo” de acuerdo con el Reglamento de la Ley General de Salud en Materia de Investigación en Salud 25, vigente al momento del estudio, pues no se realizaron intervenciones sobre las variables fisiológicas ni psicológicas de los participantes, ni se recopiló información sensible, por lo que la participación de los sujetos no estuvo sujeta a la obtención de su consentimiento informado por escrito.

RESULTADOS (ver anexo)

Conclusión

Al aumentar la población de adultos mayores, la presencia de dolor será un desafío para los sistemas de salud, por eso la evaluación, manejo y tratamiento de esta población requiere personal capacitado para evitar la sobre medicación ya que se ha encontrado también prevalencia de alteraciones cognitivas que pueden afectar en la percepción del dolor.

Esta investigación ayuda a entender el dolor en adultos mayores que presentan dolor crónico que en muchos de ellos presentan deterioros auditivos, de visión y poca expresividad facial y movimientos ambulatorios, aun así existen pocos estudios sobre la percepción del dolor en este grupo que nos da la pauta para un mejor abordaje terapéutico incidiendo en una mejora en la calidad de vida, debemos reconocer que el envejecer no está relacionado con la presencia de dolor.

También pudimos encontrar que en las mujeres se presentó un nivel de dolor igual de los hombres con una percepción de 5  que se encuentra en dolor moderado en la escala de Eva con 2 personas tanto para hombres como con mujeres para las mujeres que presentaron dolor esto representa el 22% de la población femenina y en el caso de los hombres que presentaron dolor representa el 28.57% de la población masculina, y respecto a poco dolor 3 hombres que representa el 42.85% de la población que presentó dolor, presentaron en relación a 1 persona del sexo femenino.

Ver anexo

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