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Recuperador de sangre en el postoperatorio

Recuperador de sangre en el postoperatorio

La necesidad de recibir una trasfusión sanguínea tras una intervención quirúrgica, es cada vez más frecuente en la actualidad, de ahí la importancia del conocimiento y utilización de éste tipo de sistemas.

Jennifer Iglesias Carrascosa (Diplomada en Enfermería)

Palabras clave

Autotransfusión, cuidados postoperatorios, prótesis rodilla

Resumen:

La necesidad de recibir una trasfusión sanguínea tras una intervención quirúrgica, es cada vez más frecuente en la actualidad, de ahí la importancia del conocimiento y utilización de éste tipo de sistemas.

Abstract

The need to receive a blood transfusion after surgical intervention is becoming more frequent today, hence the importance of knowledge and use of this type of systems.

Introducción

Se le conoce con el nombre de CBC II o redón recuperador, se trata de un drenaje cerrado que recupera, filtra y permite la transfusión de sangre proveniente del propio paciente.

Se emplea mayormente en unidades de recuperación post-anestesia (URPAs) dada la estrecha vigilancia que precisa

Su uso principal es en prótesis de rodilla y cadera.

Descripción

El recuperador es un recipiente transparente con una capacidad de unos 800ml con escala de medición en cuyo interior hay un filtro de 200micrones. En su parte superior encontraremos una ruleta que regulará el vacío, una palanca con la que se liberará la sangre del interior de éste a la bolsa de trasfusión, las pilas y un filtro de aire de 0.45micrones. Desde su parte inferior conecta una tubuladura a una bolsa de reinfusión (ver imágenes)

Deberá permanecer colocado en la cama del paciente en posición vertical para evitar obstrucciones en el filtro.

La sangre que almacenemos en el recuperador tiene un límite de 5h para ser reinfundida al paciente (en una o varias reinfusiones), pasadas las cuales el recuperador pasará a comportarse como un redón y no podremos superar los 1000ml de sangre para no provocar alteraciones en la coagulación

Metodología

Cuando dispongamos de una cantidad suficiente de débito (se ha de saber que aproximadamente 100ml se pierden en el recuperador) procederemos del siguiente modo:

  1. Apretaremos la palanca de la parte superior para que la sangre pase del recuperador a la bolsa, manteniendo éste por encima de la bolsa
  2. Una vez que tenemos toda la sangre en la bolsa pinzaremos el tubo lo más cerca posible de la bolsa. No cortaremos éste ya que nos servirá para futuras transfusiones
  3. Emplearemos un sistema con filtro que viene con el recuperador para trasfundir ésta sangre al paciente a través de una vía periférica (evitar desconexiones para asegurar la asepsia)
  4. Finalizado el plazo de posible uso de ésta sangre (5h) es cuando cortaremos el tubo que une recuperador y bolsa, poniendo un tapón y retiraremos la bolsa que nos a servido para transfundir.

Ventajas

  • Rápida disponibilidad de la sangre
  • No precisa del tratamiento exhaustivo y costoso de desleucocitación y carga viral a la que se somete a los derivados sanguíneos
  • No hay riesgo de infecciones (VIH, VHB,VHC,CMV…)
  • Alternativa en pacientes que por convicción religiosa no aceptan componentes alógenos
  • Permite preservar las unidades limitadas de los bancos de sangre, utilizando la sangre del propio paciente

Conclusiones

Aunque requiere de un control exhaustivo en el postoperatorio inmediato, su fácil manejo y múltiples ventajas lo convierten en un redón indicado en cirugías que se prevean con abundante sangrado

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Bibliografía

Procedimiento de cuidados pre y postoperatorios CHN (actualizado Octubre 2018)