Tratamiento de la sensibilidad dentinaria
RESUMEN: La hipersensibilidad dentinaria se caracteriza por un dolor breve y agudo que se origina en la dentina expuesta como respuesta a un estímulo externo y que no puede atribuirse a ninguna otra forma de defecto o enfermedad dental. Es una condición prevalente. Los tratamientos para aliviar la hipersensibilidad dentinaria se basan en la interrupción de la respuesta neural a los estímulos dolorosos o en la oclusión de los túbulos abiertos, a fin de bloquear el mecanismo hidrodinámico.
Patricia María Puga Guil. Doctora en Odontología por la Universidad de Granada.
Daniel Gálvez Estévez. Licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Granada.
Laura Sanz Ceballos. Doctora en Farmacia Por la Universidad de Granada.
Este trabajo presenta una breve descripción del diagnóstico, la etiología y la epidemiología de la hipersensibilidad dentinaria, su manejo clínico, y los productos disponibles para su tratamiento.
Palabras clave: Odontología, Sensibilidad dental, Hipersensibilidad dentinaria, dentina, recesión gingival, dolor.
OBJETIVOS:
- Definir la hipersensibilidad dental (HD)
- Conocer los factores predisponentes y patológicos de hipersensibilidad dental
- Identificar las diferentes patologías con las que realizar el diagnóstico diferencial de hipersensibilidad dental.
- Conocer el tratamiento de la hipersensibilidad dental.
INTRODUCCIÓN:
La hipersensibilidad dentinaria (HD) consiste en un dolor dental intenso y transitorio causado por la exposición de la dentina al medio oral y que aparece con relación a un estímulo químico, osmótico, térmico o táctil y que no puede ser asociado a ningún otro tipo de patología dental. Se trata de un dolor de tipo agudo, palpitante y quemante originado en un estímulo nocivo que activa nervios específicos, transmitiendo la sensación hacia el sistema nervioso central, donde es interpretado como dolor. Los casos más graves de hipersensibilidad dental pueden ocasionar cambios emocionales, alterando el estilo de vida de las personas afectadas.
Epidemiología: La hipersensibilidad dental es un problema cada vez más importante que debe tratarse. Es la causa más frecuente de odontalgia. Afecta a de cada 7 personas adultas u puede dar lugar a la aparición de diversas patologías bucales como caries, gingivitis o periodontitis, si no se trata de forma adecuada. Los estudios de prevalencia de hipersensibilidad dental muestran valores muy diferentes, oscilando entre el 4 y el 57%, Estas diferencias se atribuyen a diversos factores como el método de diagnóstico, la población y los estilos de vida y hábitos de higiene bucal e ingesta de alimentos y bebidas ácidos. También se observa mayores niveles de hipersensibilidad dental a nivel radicular (60-98%) en pacientes que se realizaron algún tratamiento periodontal.
Respecto al sexo, se observa mayor incidencia de hipersensibilidad dental en las mujeres, el rango de edad se encuentra entre los 20-49 años, con pico máximo de incidencia entre los 30-39 años. La hipersensibilidad dental está incrementando en los jóvenes y adolescentes a causa del exceso en el consumo de bebidas acidogénicas y el uso de productos de blanqueamiento sin supervisión. En las personas mayores se observan niveles más bajos de hipersensibilidad dental, consecuencia de procesos reparadores que disminuyen la permeabilidad y conductancia hidráulica.
La hipersensibilidad dentinaria es más frecuente en zonas cervicales vestibulares y los dientes más afectados son los caninos y los premolares. Esta distribución coincide con la incidencia de recesión gingival. Lo que sugiere que la recesión gingival es la causa principal de exposición dentinaria y factor predisponente de hipersensibilidad dentinaria.
Patogenia: La sensibilidad dental aparece cuando la dentina pierde su protección natural y queda al descubierto. Cuando el diente pierde su protección debido a una retracción de la encía y/o a un desgaste del esmalte dental, los túbulos dentinarios quedan abiertos al exterior, permitiendo que os estímulos externos alcancen las terminaciones nerviosas y provoquen la sensación de dolor. Los estímulos que desencadenan principalmente el dolor son estímulos térmicos (aire, frío y calor); estímulos químicos (alimentos dulces, ácidos y cítricos); y estímulos mecánicos (cepillado dental, hábitos orales, instrumentos dentales, retenedores de dentaduras parciales removibles y el blanqueamiento dental)
La exposición dentinaria puede ser multifactorial. Entre sus posibles causas destacan:
- Por abrasión. A causa de cepillado dental inadecuado en fuerza y/o frecuencia o por empleo de pasta de dientes muy abrasiva
- Por erosión o descalcificación, principalmente a nivel del cuello del diente; consecuencia del consumo de comidas y bebidas ácidas (zumos de cítricos, refrescos carbónicos, etc.).
- Por desgaste (atracción y/o abfracción), a causa de la fuerza excesiva de la masticación (trauma oclusal, bruxismo) o los malos hábitos.
- Por la presencia de recesión gingival, causadas por tratamientos odontológicos, como un tratamiento periodontal básico o una ortodoncia. También pueden deberse a anomalía anatómicaque, a causa de un defecto, la dentina queda al descubierto.
- Patologías generales o ciertas situaciones que provocan un medio oral ácido, Patologías estomacales (úlcera, hernia de hiato, etc.), psicológicas (bulimia, anorexia nerviosa) o profesionales (catadores de vinos, panaderos, etc.).
Varias hipótesis tratan de explicar la patogenia de la hipersensibilidad dentinaria:
- Teoría del mecanismo transductor: el dolor puede ser transmitido desde la unión amelocementaria hasta las terminaciones nerviosas cerca de la pulpa dental, a través de la membrana plasmática del proceso odontoblástico o por el movimiento del líquido que rodea el mismo.
- Teoría de la modulación: ante un estímulo irritante de la dentina, el odontoblasto se lesiona y libera neurotransmisores productores de dolor.
- Teoría de control de entrada y vibraciones: todos los nervios pulpares se activan por vibraciones, al irritarse la dentina y las fibras más pequeñas transmiten el dolor.
- Teoría hidrodinámica: el estímulo externo en la dentina provoca movimiento del líquido tubular de la dentina, lo cual estimula los procesos nerviosos de la pulpa y transmiten el impulso doloroso.
Diagnóstico: El diagnóstico de dolor por hipersensibilidad dentinaria es claro, pues aparece siempre precedido de estímulos diversos pero fácilmente identificables: alimentos o bebidas muy frías o muy calientes, consumo de sustancias dulces o ácidas, cepillado de dientes, dolor al respirar aire frío, etc. El dolor es intenso, muy bien localizado en el diente que lo sufre y de corta duración; sólo se percibe mientras actúa el estímulo que lo provoca. La hipersensibilidad dentinaria varía en intensidad, desde leve hasta muy dolorosa. En algunas personas puede ser tolerable, mientras que en otras es problema grave que llega a afectar a su calidad de vida, sus hábitos de higiene oral y el tipo de alimentación.
Es fundamental realizar diagnóstico diferencial con otras causas que pueden ocasionar dolor en los dientes, principalmente con los trastornos pulpares que son irreversibles y requieren un tratamiento radical. El dolor de la hipersensibilidad dentinaria es localizado y de corta duración y el paciente señala un punto, el de la patología pulpar es más difuso, intenso, pulsátil y de larga duración, y el paciente señala un área.