Inicio > Oncología > La supervivencia en el cáncer de mama en relación con algunos factores pronósticos > Página 3

La supervivencia en el cáncer de mama en relación con algunos factores pronósticos

También fueron observadas diferencias altamente significativas en la supervivencia según estadios (Log Rank 179,9 y Breslow 174,6, p<0,0001). Se obtuvo que el 97,8% de las pacientes que se encontraban en el estadio I alcanzaron una supervivencia de 5 años, mientras que las pacientes en estadio III solo el 3,6% presentó una supervivencia de 4 años.

Valorando las diferencias en la sobrevida para las diferentes opciones terapéuticas encontramos un tiempo de vida promedio mayor para las pacientes tratadas con cirugía y poliquimioterapia con un 78,2%. A diferencia de esto, las pacientes tratadas con poliquimioterapia primero y cirugía después para posteriormente continuar con poliquimioterapia solo el 3,6% presentó una sobrevida de 4 años, entre los diferentes grupos estudiados existió diferencia significativa (Log Rank 147,213). Haciendo el análisis de supervivencia de conjunto para todas las pacientes con cáncer de mama estudiadas se obtuvo que solo un 23% presentara una sobrevida de 5 años.

Discusión

El carcinoma mamario es la neoplasia más frecuentemente diagnosticada y causa importante de morbimortalidad en la mujer. El diagnóstico precoz es capaz de reducir hasta un 30% la mortalidad en mujeres mayores de 50 años; pero no hay suficiente evidencia de que sea eficaz en las mujeres menores de 50 años. El papel del equipo básico de salud juega un importante papel en el pesquizaje de esta entidad para poder realizar un diagnóstico precoz al igual que en la promoción de la realización del autoexamen de mama, método importante para la detección precoz. (11,12)

 En vista de la heterogeneidad que presenta tanto en términos de su perfil biológico como de su progresión clínica, se hace necesario contar con parámetros que colaboren en la elaboración de un pronóstico certero y un tratamiento eficaz. Los factores pronósticos clásicos en el carcinoma de mama son el tamaño del tumor, el estado de los ganglios linfáticos, la presencia de metástasis, la histopatológica y la edad de la paciente. (13,14)

La edad es un factor de riesgo para el cáncer mama, aumentando su incidencia con el incremento de su edad.  En nuestro estudio se evidenció un mayor reporte de pacientes a medida que aumenta la edad, coincidiendo estos resultados con los obtenidos por autores como Jesús Javier Vera Álvarez y col en el hospital general de Teruel en España (15). Molano Duque en su estudio  reporta que el 81,7% tenían edades a partir de los 56,93 años, con mayor frecuencia a partir de los 65 años (16). Esther Aguilar y col, en su trabajo sobre 1055 enfermas reportan el 68% a partir de los 57,5 años, con un rango entre 28 y 75 años (17).

El tamaño macroscópico (diámetro máximo) de las neoplasias primarias infiltrantes se considera como uno de los más importantes factores pronósticos en el cáncer de mama. En este aspecto nuestros resultados coinciden con los obtenidos por María Antonia Vaquero Perez (18).

Otro factor que repetidamente se ha señalado como el factor más importante para la evolución en el cáncer de mama es el estado de los ganglios axilares. El trabajo realizado por el Dr. Jesús Javier Vera Álvarez en el Hospital General “San Jorge” en España plantea que el 26% de los tumores de 1 cm. o menos tenían menor número de metástasis que los que tenían mayor tamaño tumoral, lo cual coincide con los resultados de este trabajo.

El estadio del cáncer de mama es esencial en la evaluación del tumor y en la determinación del tipo de tratamiento. El cáncer de mama se clasifica sobre la base de la extensión anatómica de la lesión en cuatro estadios; cada estadio identifica un grupo de tumores que tienen aproximadamente un pronóstico similar. En nuestro estudio la mayoría de las pacientes se encontraba en el estadio II. Es de señalar que la clasificación del estadio del cáncer de mama está basado en una evaluación meticulosa del tumor primario, los ganglios linfáticos regionales, y las metástasis a distancia, por lo que este resultado se corresponde con lo obtenido para los restantes factores analizados. Similares resultados fueron encontrados por Vázquez T en un trabajo realizado en el Centro de Diagnóstico Mamario de Uruguay (19).

El subtipo histológico de cáncer de mama invasivo no es pronósticamente importante, pero algunos tipos especiales de adenocarcinoma ductal infiltrante aparecen asociados a un riesgo muy bajo de recidiva: carcinomas tubulares puros, carcinomas papilares puros y carcinomas mucinosos puros los cuales presentaron poca incidencia. En nuestro trabajo las variedades histológicas de carcinoma ductal y lobulillar presentaron una mayor incidencia, resultado que coincide con todos los trabajos consultados en que la mayoría de los carcinomas mamarios son de tipo ductales o lobulillares infiltrantes, con predominio del primero, ya sea de forma pura o combinada con otros tipos.  En estudios realizados por  Magalys Catalina Suárez en un estudio realizado en el Hospital Oncológico de Santiago de Cuba se encontró que el carcinoma ductal infiltrante fue el que predominó, hallándose entre un 50 y un 70% de carcinomas infiltrantes de tipo ductal.

Los trabajos realizados por Lourdes Faure en el Hospital de Sagua La Grande presento resultados similares a los nuestros respecto a la localización del cáncer de mama siendo más frecuente en el cuadrante superior externo.

La supervivencia en al cáncer de mama depende más de la extensión en el momento del diagnóstico que de la histología. Existen una serie de parámetros que han sido valorados como indicadores pronósticos, algunos de los más importantes son el tamaño tumoral y las metástasis ganglionares. En nuestro trabajo se obtuvo mayor supervivencia en las pacientes que se diagnosticó menor tamaño tumoral, ganglios negativos o menor número de ganglios metastáticos y en estadio I. Esto reafirma que la detección precoz del cáncer de mama aumenta la supervivencia de las pacientes y confirma la necesidad de realizar estrategias educativas tanto para elevar el conocimiento del personal médico sobre esta afección, como para sensibilizar a la población femenina con la importancia de realizar el autoexamen de mama sistemáticamente. Nuestros resultados coincidieron con lo observado por Jesús Vera Álvarez en el Hospital General de San Jorge.

Estudios realizados por Iván Mora Díaz mostraron una probabilidad mayor de vida media en pacientes tratadas con cirugía más otro tratamiento (20). El tratamiento adyuvante en mujeres con metástasis ganglionares se ha demostrado beneficioso. La controversia está en la administración de este tipo de tratamiento en mujeres con cáncer de mama con ganglios negativos. Algunos trabajos publicados han presentado resultados positivos con la administración de quimioterapia adyuvante después del tratamiento quirúrgico con un aumento de la supervivencia global en las mujeres con cáncer de mama y ganglios negativos (Etapas I y IIA). En este estudio existe coincidencia, pues las pacientes que fueron tratadas con este esquema de tratamiento presentaron una mayor supervivencia que el resto de las pacientes tratadas con tratamiento de quimioterapia de inducción o neoadyuvante seguida de mastectomía o hasta cirugía conservadora con vaciamiento axilar seguida de radioterapia en función de la respuesta a la quimioterapia.