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Técnicas de Enfermería en el sondaje nasogástrico

Técnicas de Enfermería en el sondaje nasogástrico

Resumen:

En este artículo se pretende realizar una revisión de una de las técnicas de Enfermería, utilizada sobre todo para mantener un correcto estado nutricional del paciente en determinadas circunstancias. Es importante revisar y conocer correctamente el modo de ejecución y materiales necesarios con el fin de mantener una buena praxis y evitar complicaciones derivadas de un mal uso o desconocimiento hacia la práctica.

Autores:

  1. Rodríguez Valiente, Sonia. Diplomada en Enfermería.
  2. Jara Valiño, Francisco Javier. Diplomado en Enfermería.
  3. Romero Barranco, María. Diplomada en Enfermería.

Palabras clave:

Sonda nasogástrica, técnicas de Enfermería, nutrientes, nutrición enteral.

Introducción:

El sondaje nasogástrico es una técnica que consiste en la introducción de una sonda desde uno de los orificios nasales hasta el estómago. Se requiere de esta técnica para realizar una nutrición enteral, que es aquella en la cual se aportan nutrientes directamente al aparato digestivo. Se realiza para mantener un correcto estado nutricional, además de mantener una correcta función intestinal.

Puede ser utilizado además para administración de fármacos, realizar lavados gástricos en casos de intoxicación, drenar contenido gástrico (en ciertas cirugías), realizar cultivos o evitar broncoaspiración.

Técnica enfermera:

  • Hay que tener en cuenta no forzar la progresión, retirar prótesis dentales, elegir el calibre y el tipo de sonda adecuado y observar alteraciones respiratorias.
  • Explicar al paciente lo que se le va a realizar, solicitando también su colaboración.
  • Preparar el material:
    • Sonda nasogástrica del calibre elegido.
    • Guantes.
    • Jeringa de 50cc.
    • Lubricante hidrosoluble.
    • Fonendoscopio.
    • Esparadrapo o apósito.
  • Realizamos medición desde punta de la nariz hasta apéndice xifoides pasando por la oreja, para saber hasta cuanto hay que introducir la sonda para llegar al estómago.
  • Lubricamos el extremo de la sonda.
  • Comenzamos a introducir la sonda por el orificio nasal seleccionado.
  • Se indica al paciente que baje la cabeza y que empiece a tragar conforme la sonda va avanzando.
  • Una vez introducida, vigilar orofaringe para asegurarnos que la sonda no está allí.
  • Confirmamos la ubicación de la sonda, mediante la jeringa de 50cc, insuflamos aire a presión por la misma y escuchamos con el fonendo a la altura del estómago. También puede comprobarse mediante la aspiración para ver si drena jugo gástrico o mediante un control radiológico.
  • Para finalizar, fijaremos la sonda utilizando esparadrapo o apósito para este fin.

Complicaciones de la técnica:

Pueden aparecer determinadas circunstancias no deseables, derivadas de una mala técnica o propias del sondaje nasogástrico:

  • Erosión de la mucosa nasal.
  • Esofagitis por reflujo.
  • Obstrucción de la sonda.
  • Hiperventilación por ansiedad del paciente.
  • Neumonía por broncoaspiración de contenido gástrico.
  • Erosión de la mucosa gástrica.
  • Esofagitis por reflujo.

Contraindicaciones para realizar la técnica:

Son aquellos casos en los que no estaría indicada la realización del sondaje nasogástrico. Van a depender de la indicación para la cual se ha recomendado la técnica, dependiendo así:

  • Para la nutrición enteral:
    • Hemorragia digestiva aguda.
    • Obstrucción intestinal grave.
    • Presencia de vómitos persistentes.
  • Para realización de lavado gástrico:
    • Presencia de varices esofágicas, se deberían extremar las precauciones y valorar minuciosamente la necesidad.
    • Ingestión de ácidos, álcalis, sustancias causticas o derivados del petróleo.
    • Disminución del nivel de conciencia, debido a un riesgo aumentado de broncoaspiración.
    • Obstrucción nasofaríngea o esofágica.

Bibliografía:

  • Castro Lareo I, López Amado M. Técnicas de sondaje nasogástrico. En: Espinás Coord. Guía de Actuación en Atención Primaria. 2ª ed. Barcelona: semFYC; 2002; p.1256-58.
  • Gil Hernández A. Tratado de Nutrición: Tomo IV. Nutrición Clínica. 2ª ed. Madrid: Editorial Médica Panamericana; 2010.
  • Vielva B, Morais D, Saldaña D. Síndrome de sonda nasogástrica: a propósito de un caso. Acta Otorrinolaringol Esp. 2010; 61(1): 85-6.