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Actuación hospitalaria en cuidados paliativos

Actuación hospitalaria en cuidados paliativos

Autora principal: Lidia Pou Pérez

Vol. XV; nº 14; 729

Hospital action in palliative care

Fecha de recepción: 24/06/2020

Fecha de aceptación: 15/07/2020

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XV. Número 14 –  Segunda quincena de Julio de 2020 – Página inicial: Vol. XV; nº 14; 729

AUTORA: Lidia Pou Pérez

                 Graduada en Enfermería

                 Diplomada en Fisioterapia

Centro de trabajo: Hospital de Zaragoza. (España)

RESUMEN

El personal sanitario se encarga de asistir al enfermo en todas las etapas de la vida, desde la niñez incluyendo el nacimiento hasta la muerte; sabiendo que ellos como equipo de un centro sanitario son los que deben actuar en situaciones críticas, ya sea en el domicilio o en ingresos en centros hospitalarios.

Los cuidados paliativos o cuidados intensivos de bienestar se ofrecen a pacientes cuyo pronóstico de vida no es superior a 6 meses y sin posibilidad de curación, facilitan en su medida todo lo necesario para reducir el dolor y el estrés para ayudar morir. Se comprometen en el cuidado del paciente y la familia hasta el final que concluye con la muerte, pero para realizar estos cuidados es necesario de una educación temprana por parte del paciente y familiares.

La actuación de los cuidados paliativos los realiza un equipo de atención especializada con el objetivo de mejorar la calidad que incluyen mecanismos de apoyo para la comprensión del diagnóstico, ayuda en la interpretación para la toma de decisiones médicas, intimidad en las necesidades de higiene, emocional o social, en el control de la medicación para paliar el dolor y en el proceso del duelo.

E. Kübler-Ross en la década de los 60, estableció los principios conocidos como Cuidados Paliativos (C.P.) y consolidó el pensamiento de C. Saunders incluyendo la idea de servicio hospice a domicilio.

PALABRAS CLAVE: protocolos, cuidados paliativos, cuidadores, muerte digna.

SUMMARY

Health personnel are responsable for assisting the patienet at all stages of life, from childhood, including birth to death; knowing that they as a health center team are the ones who must act in critical situations, either at home or  in hospital admissions.

Palliative care or intensive wellness care is offered to patients whose life prognosis is not more than 6 months and without the possibility of cure, they provide everything necessary to reduce pain and stress to help die. They are committed to caring for the patient and the family until the end of the death, but in order to carry out this care, it is necessary to educate the patient and the family early.

The performance of palliative of palliative care is carried out by a specialized care team with the aim of improving quality, which includes support mechanisms for understanding the diagnosis, aid in interpretation for medical decisión-making, intimate higiene, emotional needs or social, im the control of medication to alleviate pain and in the mourning process.

E, Kübler-Ross in the 1960s established the principles known as Palliative Care ( C.P) and consolidated the thinking of C.Saunders including the idea of hospice service at home.

KEYWORDS: protocols, palliative care, caregivers, death with gignity.

INTRODUCCION

Los Cuidados Paliativos son los facilitados a enfermos terminales cuando ya no es posible una recuperación y sus metas son el confort, siendo el enfermo y no la enfermedad el verdadero protagonista.

Unas 200.000 personas al año precisan cuidados paliativos en los meses previos a su fallecimiento por cáncer u otras patologías. Se calcula que un 60% de los pacientes fallecidos por cáncer precisan ser tratados por equipos paliativos.

En España cada año mueren unas 90.000 personas debido al cáncer, con una tasa de mortalidad de 228 por cada 100.000 habitantes (Servidor Tempus, Instituto Nacional de Estadística), a pesar de los continuos avances sigue siendo una de las principales causas de muerte en nuestro país, esto se ha visto acompañado por un aumento de la mortalidad en los últimos veinte años, pasando de 60.000 casos en 1980 a 92.328 casos en 1998, aunque parece que en los últimos años el incremento va descendido y aparecen otras patologías.

Se habla de enfermedad terminal cuando se hace referencia a una enfermedad paulatina y progresiva, con múltiples síntomas y con un gran impacto emocional y pérdida de autonomía, además la respuesta al tratamiento específico es escasa o nula y el pronóstico de vida es limitado de 6 meses. La enfermedad terminal puede provocar dolor y síntomas físicos que van acompañados de sufrimiento emocional y espiritual que disminuyen la calidad de vida. Por ello la Organización Mundial de la Salud (1990), considera que la implementación de los Cuidados Paliativos es una necesidad indubitable y debe formar parte de una política de salud.

Uno de los objetivos terapéuticos es la familia, en la enfermedad avanzada la situación puede ocasionar estrés y es necesario cuidar las necesidades por parte del entorno del enfermo, ya que el ámbito familiar y social es un pilar importante en la atención del paciente. Gracias a su colaboración activa es más fácil avanzar en todos los objetivos para realizar el trabajo del equipo multidisciplinar, médicos, enfermeras, fisioterapeutas, TCAE y voluntarios.

Se realizo un estudio de Personalidad resistente, estrés percibido y bienestar psicológico en cuidadoras familiares de pacientes con cáncer terminal con el objetivo de observar el estrés y en estado de ánimo óptimo de cuidadores de cáncer. De 100 participantes mujeres de entre 27 a 68 años. Se le paso el Cuestionario de Personalidad Resistente, la Escala de Estrés Percibido y la de Bienestar Psicológico de Ryff. Los resultados fueron positivos entre personalidad resistente y bienestar psicológico, pero fueron negativas entre bienestar psicológico, estrés percibido y personalidad resistente. Destacaron que la limitación del estudio quizás se debió al no evaluar el estado de deterioro del paciente, posiblemente hubiese influido en mayor estrés y bienestar psicológico. Repararon que en futuros estudios sería aconsejable añadir la variable de apoyo social ya que puede influir de forma eficaz en el bienestar psicológico.

La actuación de los profesionales desde el ingreso del paciente es en función el protocolo de actuación de cada centro, primero se acoge al paciente enseñándole su habitación y entregándole o ayudándole a ponerse la ropa y una pulsera con sus datos identificativos. La enfermera le toma las constantes vitales y las anota en la hoja de evolución. Se informa al paciente y familia sobre la Institución y las normas a seguir. Los cuidados irán encaminados según la demanda que solicite el paciente, se utilizaran estrategias terapéuticas y se adaptaran en cada momento para mantener las necesidades en cada situación del proceso.

Colaborar siempre con el paciente y su familia en el proceso de la muerte, se mantendrá un ambiente tranquilo y sosegado para conservar la dignidad del paciente. No se divulgará información manteniendo la confidencialidad y el secreto profesional. Se realizarán tareas que fomenten la seguridad y autoestima del paciente crítico. Se le ayudará en lo posible en el proceso terminal y en las distintas fases, en la negación de su proceso, ante la ira, el pacto, la depresión y la aceptación.

La enfermera y TCAE realizarán diariamente y tantas veces como se requieran los cuidados de confort para la prevención de UPP mediante cambios posturales, si es necesario el fisioterapeuta colaborará en las movilizaciones. Desde fisioterapia se puede elaborar un patrón de trabajo diario, realizando una actividad motora pasiva para mitigar su dolor pero será el propio paciente que ira dando la pauta, ya que siempre se realizará en función de su estado de salud.

El dolor es una sensación sensorial y emocional desagradable que va unida a la evolución del proceso de morir manifestando estrés, ansiedad y malestar. El dolor se caracteriza por ser fisiológico, irradiado, difuso o localizado, en el paciente terminal suele ser difuso y continuo con un gran deterioro físico. Para evaluarlo se utilizarán escalas subjetivas como el Cuestionario del dolor McGill que evalúa aspectos cuantitativos y cualitativos del dolor, como localización, cualidad, propiedades temporales e intensidad. Y descriptivas simples (EDS). E. de Valoración Verbal (EVV), ESCALA VISUAL ANALÓGICA (EVA). Además, se cuantificarán los cambios fisiológicos, determinaciones bioquímicas, valoración del comportamiento de los pacientes y el consumo de analgésico.

Con las escalas se puede valorar el dolor ante la agonía en aquellas situaciones en que la vida se extingue gradualmente, en fase terminal y el pronóstico es de meses, la fase preagónica con un pronóstico de vida de semanas y en la fase agónica que es de sólo días.

Los síntomas más evidentes de agonía pueden ser el escaso tono muscular; los cambios en los signos vitales; deterioro evidente y progresivo del estado físico; enlentecimiento de la circulación; diaforesis; retención urinaria; la respiración puede ser lenta, rápida, agitada o con estertores; dificultad para la ingesta y agitación, angustia o afectación sensorial.

Otro síntoma de la agonía es el deterioro rápido y progresivo del estado general. La vía de elección para la medicación será muy importante para el paciente, nunca se utilizarán medidas agresivas, además es conveniente pactar la sedación con el enfermo y la familia si fuera preciso.

La sedación es la administración de fármacos adecuados para disminuir el nivel de conciencia con el objetivo de disminuir o anular la percepción de los síntomas asociados a la muerte. La aplicación de la sedación se evalúa mediante la Escala de Ramsay.

En el artículo publicado sedación terminal el último recurso ante una mala muerte, se realizó una investigación clínica observacional y prospectiva donde detallaron el resultado de la actuación clínica, mediante la sedación terminal de pacientes atendidos. Concluyo que los pacientes que formaron parte del estudio no sufrieron en el proceso de morir, y que es un objetivo posible de aplicación clínica.

CONCLUSION

La actuación de los profesionales sanitarios, en las últimas horas de vida de un paciente van unidas al concepto de muerte digna. Esta intervención se debe por la experiencia adquirida, a los avances científicos y farmacológicos con el fin de confortar al paciente terminal. La formación por parte del personal sanitario sobre los cuidados principales a pacientes terminales es imprescindible para renovar y mejorar los conocimientos acerca de los cuidados paliativos. Esta preparación a nivel psicológico y emocional del sanitario permite ayudar al paciente a tener una muerte digna, es una intervención por parte del equipo sanitario imprescindible para guiar y ayudar al paciente.

Los problemas asociados al paciente agónico estarán relacionados con el bienestar físico, social, espiritual y psicológico, formando parte del plan de tratamiento, pero no persigue curar, sino que pretende cuidar, acompañar y colaborar en el afrontamiento del proceso que concluye con la muerte.

La actuación de los Cuidados Paliativos, irán dirigidos a mejorar la calidad del paciente aportando comprensión y consuelo, además de orientar a la familia en la etapa del duelo.

La utilización de la sedación para aliviar el sufrimiento en la agonía con el consentimiento informado del paciente.

La necesidad de seguir formando a los sanitarios sobre el proceso de la muerte para que en los centros hospitalarios la especialización sea adecuada en los cuidados paliativos.

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