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¿Cómo ha influido la pandemia de la Covid-19 en un gran problema como es la obesidad infantil y juvenil en España?

¿Cómo ha influido la pandemia de la Covid-19 en un gran problema como es la obesidad infantil y juvenil en España?

Autora principal: Laura Aguar Larraz

Vol. XVI; nº 7; 376

How has the Covid-19 pandemic influenced a big problem such as childhood and youth obesity in Spain?

Fecha de recepción: 12/02/2021

Fecha de aceptación: 03/04/2021

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XVI. Número 7 –  Primera quincena de Abril de 2021 – Página inicial: Vol. XVI; nº 7; 376

Autores:

Laura Aguar Larraz. Centro de Reconocimientos Médicos “Gómez Laguna”. Zaragoza, España.

Sara Reyes Navarrete, Terapeuta Ocupacional. Zaragoza, España.

M. Pilar Solanas Muñoz, enfermera cs alfajarín, Zaragoza, España.

Sonia Usón Lucea, Enfermera. Hospital Universitario Miguel Servet. Zaragoza, España.

Leticia Civiriain San Miguel, Enfermera, Fundación Picarral, Zaragoza, España.

Beatriz Moré Rubio, Enfermera, Atención primaria del Sector I, Zaragoza, España.

DECLARACIÓN DE BUENAS PRÁCTICAS:

Los autores de este manuscrito declaran que:

Todos ellos han participado en su elaboración y no tienen conflictos de intereses. La investigación se ha realizado siguiendo las Pautas éticas internacionales para la investigación relacionada con la salud con seres humanos elaboradas por el Consejo de Organizaciones Internacionales de las Ciencias Médicas (CIOMS) en colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS) https://cioms.ch/publications/product/pautas-eticas-internacionales-para-la-investigacion-relacionada-con-la-salud-con-seres-humanos/

El manuscrito es original y no contiene plagio.

El manuscrito no ha sido publicado en ningún medio y no está en proceso de revisión en otra revista.

Han obtenido los permisos necesarios para las imágenes y gráficos utilizados.

Han preservado las identidades de los pacientes.

Resumen:

España se sitúa según la Organización Mundial de la Salud (OMS) como unos de los países europeos con mayor índice de obesidad infantil y juvenil. El sobrepeso y la obesidad en niños y adolescentes conllevan un riesgo mayor de sufrir enfermedades cardiovasculares, diabetes o algún tipo de cáncer al llegar a la adultez. El año 2020 no ha ayudado a combatir este grave problema que sufre nuestro país. La pandemia que estamos viviendo, agrava todo esto. El confinamiento que sufrieron todos los niños en marzo del pasado año, hizo que se vieran alteradas todas sus actividades cotidianas. Dejaron de realizar actividad física casi a diario, aumentó considerablemente el tiempo de uso de dispositivos electrónicos, se modificaron las horas de sueño y tuvieron cambios desfavorables en las conductas alimenticias.

Con la vuelta a las aulas después del verano, la situación tampoco mejoró notablemente. Por un lado están los adolescentes, que regresaban a sus clases pero con semipresencialidad, sin todas las horas de educación física, y con un continuo sedentarismo y tiempo de pantallas los días que no acudían a colegios o institutos. Y por otro lado, los más jóvenes, que aunque si están recibiendo las horas que les corresponden en sus colegios, la actividad después de la jornada escolar se les ha visto reducida a muchos de ellos, por un entendible miedo al contagio, los padres no han apuntado a sus hijos a clubes deportivos ni a otras clases extraescolares. Manteniéndose así las horas que pasan en casa, cultivando un sedentarismo que no ayuda a la obesidad.

Palabras clave: obesidad infantil, pandemia, sedentarismo, actividad física.

Summary:

Spain ranks according to the World Health Organization (WHO) as one of the European countries with the highest rate of childhood and youth obesity. Being overweight and obese in children and adolescents carry a greater risk of suffering from cardiovascular diseases, diabetes or some type of cancer when they reach adulthood. The year 2020 has not helped to combat this serious problem that our country suffers. The pandemic that we are experiencing exacerbates all this. The confinement that all the children suffered in March of last year, caused all their daily activities to be altered. They stopped practicing physical activity almost daily, the time of use of electronic devices increased considerably, the hours of sleep were modified and they had unfavorable changes in their eating behaviors.

With the return to classrooms after the summer, the situation did not improve significantly either. On the one hand, there are the adolescents, who returned to their classes but with semi-presidentiality, without all the hours of physical education, and with a continuous sedentary lifestyle and screen time on the days that they did not attend schools or institutes. And on the other hand, the youngest, that although they are receiving the hours that correspond to them in their schools, the activity after the school day has been reduced to many of them, due to an understandable fear of contagion, parents do not they have enrolled their children in sports clubs or other after-school classes. Keeping this way the hours they spend at home, cultivating a sedentary lifestyle that does not help obesity.

Keywords: childhood obesity, pandemic, sedentary lifestyle, phisycal activity.

Basándonos en los últimos datos analizados, en España, el 34% de la población de entre 3 y 24 años tienen sobrepeso u obesidad. Si dividimos más los rangos de edades, cerca del 40% de los niños de edades comprendidas entre 3 y 8 años y el 35% de los jóvenes de entre 8 y 17 años sufren de obesidad o sobrepeso. (3-6)

Por sexos, el 39,2%de los chicos de entre 3 y 24 años tienen este problema, frente a un 28,4% de chicas de estas mismas edades. (1)

Los últimos estudios aumentan la alerta sanitaria. La obesidad dentro de la población infantil sigue creciendo. Los datos de nuestro país son de los más altos de Europa, situándonos tan solo por detrás de países como Italia y Grecia.

Son muchos los problemas negativos de salud, los que conllevan un exceso de peso: en los músculos esqueléticos, acelera la hipertensión, aumentan los niveles de colesterol, problemas cardiovasculares, diabetes e incluso el aumento de la probabilidad de sufrir algún tipo de cáncer en edad adulta y además empeora enfermedades como el asma.(2)

Tampoco debemos de olvidarnos de la parte emocional, la obesidad puede afectar de forma negativa en el autoestima de los jóvenes. El entorno y la sociedad en general es muy exigente con el aspecto físico.

Una gran cantidad de expertos desde hace ya tiempo nos advierten de que se está produciendo un abandono en la dieta mediterránea, una dieta tan saludable como se ha demostrado tantísimas veces. La importancia del desayuno, el consumo de frutas y verduras y el aceite de oliva, están desapareciendo en la vida de los más jóvenes. Por el contrario una cuarta parte de los niños come bollería de forma habitual. Algunos productos que deberían consumir de forma ocasional se han convertido en un básico de la alimentación de los más pequeños. Como galletas, refrescos, golosinas u otros ultra procesados. (4)

Otro dato relevante y muy importante que conocemos, gracias a importantes estudios como (Aladino)  es que la adherencia a la rica dieta mediterránea varía notablemente en función de los ingresos anuales que entran en el hogar  y del nivel de estudios de los padres. Este estudio cita que: “Del análisis por categorías sociales se desprende que las familias con ingresos inferiores a 18.000 euros y cuyos progenitores no tienen estudios superiores ni trabajo remunerado conforman el colectivo más vulnerable al exceso de peso. Una de las causas es que estos niños y niñas tienen peores hábitos alimentarios: acuden más a establecimientos del tipo fast food, toman menos fruta diaria y consumen golosinas con más frecuencia. Por contra, los menores de familias con rentas superiores a 30.000 euros con estudios universitarios presentan una mayor adherencia a la dieta mediterránea, con un consumo diario de frutas, verduras, legumbres y pescado y donde el aceite de elección es el de oliva.” (5)

Resumiendo, el 80% de los escolares necesita mejorar su alimentación.

Debemos de considerar la actividad física en el mismo nivel de importancia que la alimentación. Muchas veces cae en el olvido. La OMS recomienda que niños y jóvenes realicen como mínimo  1 hora de ejercicio físico al día. Hay que fomentar las actividades cotidianas de la vida como son caminar, subir escaleras, ir andando, en bici o patinete al colegio y hacer actividades deportivas.

El ejercicio físico da muchísimos beneficios para la salud:

  • Par la salud física: ayuda a mantener a los niños en un peso adecuado, a prevenir enfermedades, mejora la coordinación y la agilidad y favorece la calidad del sueño.
  • Para la salud psicológica: ayuda a aumentar la concentración y rendimiento en clase, les reduce el nivel de estrés y les ayuda en el autoestima personal.
  • Para la salud social: les da a conocer la importancia del trabajo en equipo, les permite jugar y divertirse con los amigos y desarrollar las habilidades sociales.

El sedentarismo es un grave problema de salud que se puede equiparar a otra pandemia que ataca a los países más desarrollados.

Desde el pasado 13 de marzo de 2020, en el que la pandemia de la Covid-19 obligó a confinar nuestro país, miles de niños de todas las edades, quedaron encerrados en sus casas, disminuyendo notablemente la cantidad de ejercicio físico que la mayoría acostumbra a hacer a diario.

Los estudios que se han realizado sobre las consecuencias del confinamiento nos dicen que el nivel de sedentarismo y el tiempo frente a las pantallas o elementos tecnológicos se incrementaron notablemente. También hubo dificultades para adquirir alimentos saludables y para dormir las horas adecuadas. Un aumento en el nivel de estrés de los adultos, que normalmente se transmite a los más jóvenes. Todo esto supuso un gran deterioro de los hábitos de salud en los niños y adolescentes. (7)

Aunque el confinamiento total duró unos meses, las restricciones y recomendaciones de escasa movilidad y vida social han seguido y siguen permaneciendo en nuestras vidas. Lo cual hace que la preocupación sobre la obesidad infantil y juvenil en nuestro país siga a la alza.

Con el inicio escolar es septiembre para los más pequeños y las clases semi-presenciales para los adolescentes, no se ha podido retomar toda la actividad física que la población infantil y juvenil venía realizando hasta principios del año pasado.

 Los más pequeños, sí que realizan las horas que les corresponden de educación física. Aunque en muchos colegios han tenido que reinventar el método de impartir estas clases para poder cumplir las medidas de distanciamiento social y el uso de las mascarillas mientras hacen ejercicio físico. Pero sin embargo, muchos padres, ante la incertidumbre de no saber cómo iban a actuar los clubes deportivos respecto a medidas de seguridad, por el miedo al contagio o por no meter a sus hijos en otras famosas burbujas; decidieron no apuntar a sus hijos a realizar ninguna actividad extraescolar, entre las que se encuentran todas las deportivas. Esto conlleva que un buen número de niños, pasa todas las tardes en casa, sin el necesario movimiento que todos necesitamos, pero en especial la población infantil.

Este sedentarismo incrementado por la pandemia, se extiende a los adolescentes. Éstos si han visto reducidas sus horas de educación física al no tener que acudir a los centros docentes a diario, permaneciendo en sus casas delante de las pantallas de sus ordenadores los días que no tenían clase. Sin ejercitar su cuerpo de ninguna de las maneras. Si además añadimos, los que por las tardes tampoco realizan ninguna actividad deportiva, el tema empieza a ser muy alarmante.

Pero, ¿qué podemos hacer para combatir el sobrepeso y la obesidad en los niños? Los consejos son los habituales y los que todos conocemos o deberíamos conocer, pero que en esta situación que vivimos por la pandemia, se vuelven fundamentales. La Asociación Española de Pediatría (AEPED) los resume en unos puntos básicos:

 “ –     Una dieta variada, saludable y en las cantidades adecuadas para la edad de cada niño.              

    –    Beber solo agua. Se debe evitar, en lo posible, la ingesta de bebidas azucaradas, incluidos los zumos (aunque sean naturales, es mejor que coman la fruta fresca) y las bebidas energéticas.

   –    No picar entre horas.

   –    Evitar las chuches, la bollería industrial y, en general, todos los alimentos precocinados y ultra procesados.

   –    Realizar actividad física durante al menos 60 minutos por día, seguidos o distribuidos en distintas sesiones.”

CONCLUSIÓN:

Los hábitos que se adquieren en los primeros años de vida, tienen la posibilidad de permanecer hasta la adultez. Por eso, es sumamente importante que acostumbremos y enseñemos a los niños a seguir y comer una rica y variada dieta mediterránea, a realizar actividad física a diario y a despegarnos de las pantallas, evitando el sedentarismo.

Y aunque la pandemia de la Covid-19 está marcando mucho nuestras vidas y actividades cotidianas, tenemos que saber que existen muchas maneras de realizar ejercicio físico en familia, ya sea dando largos paseos, montando en bici, bailando en casa o realizando pequeñas tablas de ejercicios que sean fáciles para todas las edades. (8)

No valen excusas, la obesidad infantil y juvenil en nuestro país se ha convertido en una pandemia difícil de controlar.

Para esto también es necesario un compromiso político ayudado del resto de partes interesadas, públicas y privadas. La OMS lucha  y tiene como objetivo movilizar a todas estas organizaciones e involucrarlas en una estrategia común a nivel mundial que cuide el régimen alimentario, actividad física y salud. (9)

BIBLIOGRAFÍA:

  1. Moreno, P. G. (2020, 1 julio). Aumenta la obesidad infantil en España. EfeSalud. https://www.efesalud.com/obesidad-infantil-aumento-espana/
  2. Baca Cots, M. R. (2020, 12 noviembre). ¿Por qué la pandemia aumenta la obesidad infantil? Tu canal de salud. https://www.tucanaldesalud.es/es/tusaludaldia/articulos/pandemia-aumenta-obesidad-infantil
  3. Redacción Médica. (2020, 10 junio). El 40% de niños en España, con obesidad o sobrepreso. https://www.redaccionmedica.com/secciones/cardiologia/cuatro-de-cada-10-ninos-en-espana-es-obeso-o-tiene-sobrepeso–6075#:%7E:text=Seg%C3%BAn%20estudios%20por%20pa%C3%ADses%20de,15%2C2%20por%20ciento).
  4. Medicosypacientes.com. (2019, 18 noviembre). España, cuarto país de Europa con mayor índice de obesidad infantil. Médicos y Pacientes. http://www.medicosypacientes.com/articulo/espana-cuarto-pais-de-europa-con-mayor-indice-de-obesidad-infantil
  5. La Moncloa. 30/09/2020. La obesidad afecta al 23,2% de niños y niñas de familias con rentas bajas [Prensa/Actualidad/Consumo]. (2020, 30 septiembre). www.lamoncloa.gob.es/. https://www.lamoncloa.gob.es/serviciosdeprensa/notasprensa/consumo/Paginas/2020/300920-obesidad-infantil.aspx#:%7E:text=El%20informe%20revela%20que%20el,rentas%20superiores%20a%2030.000%20euros.
  6. Salazar, S. M. (2020b, agosto 11). Obesidad infantil, una urgencia en España agravada por el confinamiento. EfeSalud. https://www.efesalud.com/obesidad-infantil-urgencia-confinamiento/?fbclid=IwAR1xRWvBhElK_uy2Ro3ihXR9A4_d6R9Khw0XhMAZc-BjZ_vWX46UHqthG20
  7. Barca, K. (2020c, junio 5). El confinamiento por COVID-19 empeora la obesidad infantil: la actividad física disminuye 2 horas y el uso de dispositivos electrónicos sube hasta casi 5 horas al día. Business Insider España. https://www.businessinsider.es/confinamiento-covid-19-empeora-obesidad-infantil-654113?fbclid=IwAR1xRWvBhElK_uy2Ro3ihXR9A4_d6R9Khw0XhMAZc-BjZ_vWX46UHqthG20
  8. Colegio Oficial de Enfermería de Navarra. (2020, 10 marzo). Obesidad infantil: ¿qué podemos hacer para prevenirla? Palabra de enfermera. http://www.palabraenfermera.enfermerianavarra.com/blog/2020/03/10/obesidad-infantil-que-podemos-hacer-para-prevenirla/
  9. World Health Organization. (2013, 9 julio). OMS | ¿Qué se puede hacer para luchar contra la epidemia de obesidad infantil? OMS. https://www.who.int/dietphysicalactivity/childhood_what_can_be_done/es/