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La depresión en el adulto mayor. Una mirada desde la actualidad

socioeconómico bajo y sexo femenino, la mujer es más susceptible a la depresión, lo que se conoce hasta el momento en esta mayor prevalencia es la presencia del quimismo cerebral, el sistema endócrino, el desarrollo emocional, el desarrollo social, el devenir histórico de los roles de mujer, podríamos decir que es la confluencia de algunos factores como el que ha llevado a través de la historia por la igualdad de género, actualmente la mujer asume mayor cantidad de roles (Stewart, 2005) el de madre, esposa, cabeza de hogar, jefa de grupo de trabajo, responsabilidades hogareñas domésticas, tradicionales, como se menciona en un estudio lo que le hace más vulnerable a tener afectaciones en la esfera psicológica.

Estudios sobre la realidad de las mujeres realizados por la OMS 2009, evidencian la vulnerabilidad de las mujeres a los trastornos mentales como también al suicidio, ya sea por la falta de acceso a la educación, sobrecarga laboral, la violencia física, psicológica y sexual.

Correa Donoso y Jadresic Marinovis (2005), exponen que la depresión en la mujer se incrementa con la edad fértil la cual está relacionada de manera directa con el aumento en la producción de estrógenos, este componente hormonal repercute directamente en los neurotransmisores por ello la frecuencia de cuadros depresivos en la adolescencia, concluyendo que los factores que afectan a la mujer para la aparición de cuadros depresivos son biológicos, psicológicos y sociales (Stewart, 2005), por lo que el ambiente social influye fuertemente en la precipitación del trastorno, donde la depresión se establece como una problemática multidimensional que demanda un análisis integral del paciente.

Este ámbito social hace parte de la herencia arcaica de la mujer sumisa concebida desde siglos atrás como lo menciona Amelia Valcárcel “Las mujeres están en posición simbólica de sumisión frente al poder simbólico masculino“, (Valcárcel, 2004, p.71), esta posición ha permanecido por años en diferentes culturas que actualmente se siguen viviendo de formas diferentes.

La depresión afecta a nivel mundial a 350 millones de mujeres (OMS 2012), según el estudio Poblacional de Salud Mental de Medellín 2011-2012 por la Alcaldía, los indicadores en la prevalencia de depresión por año para México es del 4,8%, España 4,9% y Colombia 4,1% mientras que en estados Unidos alcanza el 6,9%, es decir es mayor en países desarrollados por la tecnología e industrialización (Torres de Galvis et al., 2012).

Existen otros factores de riesgo fuera de la familia como los problemas de vivienda, la asistencia sanitaria, ambiente social y laborales (Londoño et al., 2010) como factores importantes para el aparecimiento de depresión, es así como las relaciones interpersonales marcan a profundidad las decisiones que tomemos

La madre trabajadora en el hogar apoya el sustento económico, sobre todo en sectores rurales de argentina, lo menciona Shmite 2009, estos roles sobre todo en mujeres campesinas hacen que la mujer sea la madre de familia que se encargue del cuidado de sus hijos.

FACTORES CULTURALES ASOCIADOS A LA DEPRESIÓN EN EL ANCIANO

La adultez mayor es considerada como uno de los momentos del ciclo vital que contiene gran parte de la historia de vida del ser humano. Socialmente se ha concebido a esta etapa llena de sufrimientos, inactividad, soledad, pérdidas, que contribuyen a la aparición de depresión.

La depresión es una problemática de salud mental, considerada una etapa en donde se presentan los mayores signos depresivos, puesto que el vivir muchos años, implica el no tener las habilidades necesarias para seguir haciendo frente a amenazas externas, a influencia de sucesos pasados o presentes significativos.

Las mujeres, las personas sin pareja y el bajo nivel de educación se asocian con mayor riesgo de depresión. Díaz, Martínez y Calvo 2002, acerca de los trastornos afectivos en el anciano establece que factores como el nivel socioeconómico, la residencia, el sexo, los aspectos biológicos, la edad, el nivel de estrés, déficit en el apoyo social, grado de funcionalidad y salud percibida son elementos de riesgo para el desarrollo de enfermedades psicopatológicas como la depresión. Vallejo 1998, categoriza a las causas de depresión en:

BIOLÓGICAS.- Incluyen los aspectos genéticos, la historia familiar, dopamina-serotonina que altera los estados de sueño y el síndrome premenstrual por la influencia hormonal.

LAS SOCIO-DEMOGRÁFICAS.- Como el sexo, la edad, el estado civil, el nivel de educación, socio-económico, la religión, el trabajo.

LAS PSICOSOCIALES.- Explican la depresión desde la personalidad, las relaciones interpersonales, soporte social, incluidas las pérdidas parentales o significativas.

LA FAMILIA COMO MEDIO PROTECTOR ANTE AMENAZAS DE TRASTORNOS MENTALES

El núcleo familiar adquiere un papel importante en el desarrollo de una vida psíquica adaptable del individuo que permita llevar una calidad de vida personal, familiar y social, son las primeras relaciones de padres con cuidadores lo que queda grabado en la psiquis del niño y es el punto de partida para desarrollar aptitudes del sujeto para la vida (Camps-Pons, Castillo-Garayoa, Revista Colombiana de Ciencias Sociales Vol. 6| No. 1 | enero-junio | 2015

Carolina Ochoa Gómez, Andrés Felipe Cruz Agudelo y Norman Darío Moreno Carmona 120 y Cifre, 2014; Londoño et al., 2010), de esta manera un niño al tener satisfechas sus necesidades fisiológicas, emocionales y desarrollarse en un ambiente familiar cálido repercute positiva y favorablemente en las personas

Estudios realizados en México por Andrade palos y cols. (2012), con pautas de crianza y síntomas depresivos en adolescentes evaluaron aspectos de las prácticas parentales obteniendo como resultados bajos niveles de apoyo de comunicación, autonomía y control percibido por el adolescente, entonces se hace necesario que desde la niñez se cuente con un fortalecido ambiente familiar basado en el respeto, la comunicación, el aprendizaje de habilidades y destreza que permitan desde temprana edad ir haciendo frente a la vida y a las circunstancias que se presentan en el día a día para que se siga pasando a las siguientes etapas del ciclo de vida con anticipación y apoyo familiar y de una sociedad totalmente abierta a una cultura de prevención e incluyente.

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

Estrada, A., Cardona, D., Segura, Á. M., Chavarriaga, L. M., Ordóñez, J., & Osorio, J. J. (2011). Calidad de vida de los adultos mayores de Medellín, 492–502.

Scientific, A. N. (2015). Condiciones de vida, estado nutricional y estado de salud en adultos mayores, Córdoba, Argentina, (JANUARY). http://doi.org/10.1590/1809-9823.2015.14058

Wagner, F. A., González-Forteza, C., Sánchez-García, S., García-peña, C., & Gallo, J. J. (2012). Enfocando la depresión como problema de salud pública en México, 35(1), 3–11.

Guías de Práctica Clínica de México 2012

Ochoa Gómez, C., Cruz Agudelo, A. F. y Moreno Carmona, N. D. (enero-junio, 2015). Depresión en la mujer: ¿expresión de la realidad actual? Revista Colombiana de Ciencias Sociales, 6(1), 113-135.