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Consideraciones para Enfermería en la toma de la presión arterial

  • la toma en casos de disconfort ambiental, vejiga llena, etc.
  • Debe estar sentado, con la espalda apoyada en el respaldo y las piernas apoyadas en el suelo y no cruzadas.
  • Haremos una toma de presión arterial en ambos brazos y determinaremos cuál es el brazo dominante, es decir, aquel que tenga la presión más alta.
  • El antebrazo debe estar en situación de pronación, apoyado a la altura del corazón y con la mano relajada.
  • El manguito debe estar ajustado a la piel y no debe tener ninguna presión de la ropa sobre el antebrazo, por lo que retiraremos la ropa del brazo para una mejor toma.
  • El tamaño del manguito debe estar adaptado al tamaño del brazo sobre el que se va a hacer la toma.
  • Se debe minimizar la actividad mental. El paciente no debe hablar durante la toma, ya que podrían alterarse los resultados.
  • El aparato de medida debe estar calibrado recientemente.

PROCEDIMIENTO DE TOMA DE LA PRESIÓN ARTERIAL:

La toma de la tensión debe hacerse de manera correcta para evitar errores en los resultados:

  • Los valores de la presión arterial se expresa en milímetros de mercurio.
  • Aunque existen diversos aparatos para tomar la presión, el más preciso es un esfigmomanómetro de mercurio. También tenemos el esfigmomanómetro de aire, que es el más utilizado y también es preciso. Para estos dos aparatos necesitaremos el uso de un fonendoscopio para escuchar el pulso. Por otro lado tenemos los aparatos eléctricos, que llevan incorporado un sensor para el pulso, lo que lo hace muy sensible a los ruidos y movimientos, por lo que es necesario que el brazo no se mueva y se mantenga el silencio para obtener una lectura correcta.
  • Usar un manguito del tamaño adecuado, que cubra 2/3 de la longitud del brazo y ajustarlo al brazo. El borde inferior debe quedar unos 2 a 3 cm sobre el pliegue cubital, quedando el manguito a la altura del corazón. Si se coloca más abajo, se pueden registrar presiones falsamente elevadas.
  • Es una técnica indolora, aunque puede presentar ciertas molestias por la presión ejercida sobre el brazo.
  • Una vez localizado el pulso radial en la muñeca debemos inflar el manguito unos 20-30 mmHg por encima de la presión necesaria para que desaparezca el pulso.
  • Colocando el fonendoscopio sobre la arteria braquial, desinflamos lentamente el manguito a un ritmo de 2-3 mmHg/segundo hasta que se restablezca el flujo sanguíneo pulsátil y se empiecen a escuchar los ruidos de Korotkoff. Estos ruidos se describen en 5 fases:
    • Fase 1: Aparición de ruidos de golpeteo claros con la aparición de un pulso palpable que corresponde con la presión sistólica.
    • Fase 2: Los ruidos se hacen más suaves y prolongados
    • Fase 3: Los ruidos son más secos e intensos
    • Fase 4: Los ruidos se amortiguan y son más suaves
    • Fase 5: Los ruidos desaparecen por completo, correspondiendo esa fase con la presión diastólica.
  • En la primera visita es aconsejable realizar la toma en ambos brazos para determinar en cuál de ellos existe una presión más elevada, siendo ese brazo en el que se tomará la presión habitualmente.
  • Si se hace más de una toma en un mismo brazo, debe pasar un período mínimo entre tomas de un minuto de tiempo, puesto que en caso contrario nos puede dar una presión errónea.
  • Inflar el manguito con demasiada lentitud o no lo suficientemente alto puede causar una lectura falsa.
  • Es importante indicar a qué hora se ha realizado la medición y si ha habido alguna particularidad, por ejemplo esfuerzo físico, una comida o un estado de excitación mental previo, ya que estos factores pueden modificar la presión a corto plazo.
  • Para establecer un diagnóstico deben realizarse tres series de medidas en semanas diferentes.

ALTERACIONES EN LOS VALORES DE PRESIÓN ARTERIAL:

La toma de la presión arterial es un control rutinario para conocer nuestro estado de salud y saber si hay algún problema en nuestro sistema circulatorio. Una vez que obtenemos un valor correcto de la presión arterial nos podemos encontrar que la persona tiene una presión más baja de lo normal, por lo que será hipotenso, o tendrá unos valores normales (normotenso) o bien tiene unos valores por encima de lo normal, con lo que será hipertenso. En el caso de que los valores estén alterados con respecto a la normalidad es el momento de iniciar un seguimiento que termine con el diagnóstico de esa alteración.

Si nos encontramos con una hipotensión arterial, el ritmo de bombeo de sangre del corazón es más lento de lo normal, lo que puede provocar mareos o desvanecimientos. Sin embargo, si resulta una hipertensión arterial, hay un aumento continuo de la presión sanguínea en las arterias que si se mantiene en el tiempo terminará por afectar a diversos órganos con el consiguiente peligro para la salud si no se trata a tiempo.

CONCLUSIONES:

La toma de la presión arterial es un procedimiento rutinario y sencillo que nos proporciona datos muy importantes sobre la salud de la persona. Sin embargo, esos valores carecen de validez si el procedimiento de la toma no se ha realizado correctamente. Hay muchos factores que pueden alterar los valores de presión, por lo que debemos ser muy rigurosos a la hora de determinar la presión arterial, ya que en caso contrario nos llevarían a establecer diagnósticos erróneos.