Enfrentamiento clínico al nódulo tiroideo.
Resumen.
Introducción. Los nódulos tiroideos son sumamente comunes, se estima que el 4% de la población presenta un nódulo tiroideo palpable, y más del 50% tiene un nódulo perceptible por el ultrasonido, se revisan las guías emitidas por la Asociación Americana el Tiroides, la Asociación americana de Endocrinólogos Clínico, en colaboración con el Asociación de médicos endocrinólogos, la Asociación Europea del tiroides y más recientemente la Sociedad coreana de Radiología Tiroidea.
Enfrentamiento clínico al nódulo tiroideo.
Dr. Alfredo Arredondo Bruce. (*)
Dr. José Mejías Pérez. (**)
* Especialista de segundo grado en Medicina Interna, Profesor Auxiliar, Máster en Ciencias. Hospital Amalia Simoni. Camagüey. Cuba.
** Especialista de primer grado en Medicina Interna, Instructor. Hospital Amalia Simoni. Camagüey. Cuba.
Desarrollo. Las tres guías mostradas anteriormente para el diagnóstico y manejo del nódulo tiroideo tienen numerosas similitudes y varias disparidades. Acorde a las limitaciones respecto al corto/eficiencia, muchas de las recomendaciones en los tres estudios están basadas la opinión de especialistas. Todos recomiendan la biopsia de cualquier nódulo tiroideo mayor de un centímetro de diámetro con rasgos sospechosos, incluso micro calcificaciones, textura por ecografía (hipoecoica), mayor altura que anchura, o márgenes infiltrados.
Conclusiones. Las tres guías revisadas proporcionan una excelente visión con respecto al manejo de los nódulos tiroideos, las normas coreanas muestra una metodología más comprensiva respecto a la estratificación del riesgo de los quistes complejos, y el seguimiento de los nódulos tiroideos bajo control ultrasonográfico, considerado el riesgo de no diagnosticar un cáncer tiroideo de bajo grado contra los riesgos asociado a un procedimiento quirúrgico innecesario para la enfermedad benigna del tiroides.
Palabras clave. Nódulo tiroideo, cáncer, ecografía.
Summary.
Introduction. The thyroid nodules are extremely common, Them are considered that the population’s 4% presents a palpable thyroid nodule, and more than 50% has a perceptible nodule for the ultrasound, the guides are revised and was emitted by the American Association the Thyroid, the American Association of Clinical Endocrinology, in collaboration with the Association and medical endocrinology) and the European Association of the thyroid and but recently the Korean Society of Thyroid Radiology.
Development. The three guides shown previously for the diagnosis and handling of the thyroid nodule have numerous similarities and several disparities. Chord to the limitations regarding the cost/efficiency, many of the recommendations are based on the opinion of specialists. All recommend the biopsy of any thyroid nodule bigger than a centimeter of diameter with suspicious features, even micro calcifications, texture for ultrasound (hypo ecoic), bigger height that width, or infiltrated margins.
Conclusions. All the guides provide an excellent vision with regard to the handling of the thyroid nodules, the Korean′s norms has a more understanding methodology regarding the stratification of the risk of the complex cysts, and the pursuit of the nodules thyroid low control by ultrasound, considered the risk of not diagnosing a thyroid cancer of low grade against the risks associated to an unnecessary surgical procedure for the benign illness of the thyroid.
Key word. Thyroid nodule, cancer, ultrasound.
Introducción.
Los nódulos tiroideos son sumamente comunes, se estima que el 4% de la población presenta un nódulo tiroideo palpable, y más del 50% tiene un nódulo perceptible por el ultrasonido. Con el uso cada vez más frecuente de la tomografía computarizada y el ultrasonido para estudio de la carótida, se encuentran muchos nódulos tiroideos en los pacientes asintomáticos. En el examen clínico las masas tiroideas se muestran a menudo como un agrandamiento asimétrico de un lóbulo, (agenesia unilateral, tiroiditis linfocítica crónica, tiroiditis de Hashimoto, u otras anormalidades como nódulos linfáticos o persistencia del conducto tiro gloso). Se estima que la frecuencia de transformación maligna se encuentra en un 15-25%, siendo el cáncer tiroideo más agresivo en niños, asociado con metástasis temprana a los nódulos linfáticos regionales, pulmón y hueso. (1)
La palpación de una masa tiroidea puede ser solida, quística, o mixta. Los quistes benignos pueden ser evacuados con éxito por la aspiración, sin riesgo a la reaparición. Los quistes tienen bajo riesgo de malignidad. Sin embargo, la presencia de un quiste no excluye la presencia de neoplasia, sobre todo si la masa es mixta. (2)
Si la palpación orienta hacia un nódulo solido, la gammagrafía le permite al médico la clasificación en caliente, tibio, o frío. Algunas autoridades recomiendan que el diagnóstico definitivo sólo deba hacerse con la biopsia de aspiración de aguja fina (FNAB) o por biopsia por escisión, los resultados de la gammagrafía muestran un papel limitado en el diagnóstico inicial y manejo de los nódulos tiroideos. (3) Los nódulos calientes tienen su propia regulación y pueden suprimir el resto de la glándula. Esta auto regulación puede causar hipertiroidismo y tirotoxicosis. Los nódulos calientes son bastante comunes en los adultos (comprendiendo 20-25% de nódulos palpables) y puede asociarse con la enfermedad de Graves- Basedow. Los nódulos tibios generalmente son normo funcional; sin embargo, ellos pueden malignizarse, por definición, si el nódulo tibio muestra alguna función en la gammagrafía debe seguirse clínicamente, aunque el riesgo de degeneración sea muy bajo. (4)
Los nódulos fríos son adenomas foliculares u otros procesos benignos como la tiroiditis de Hashimoto o la hiperplasia de Hürthle. Ellos también pueden representar tejido ectópico u otro proceso benigno, como adenopatías benignas o absceso. El diagnóstico definitivo suele hacerse por estudio histológico. (4)
Se observa una gran variación en la frecuencia de aparición de los nódulos tiroideos solitarios a lo largo del mundo. Los factores más comunes son la ingestión de yodo y la exposición de las radiaciones nucleares. En las áreas circundantes a Nagasaki, Hiroshima, y Chernobyl, las proporciones de la enfermedad tiroidea han aumentado enormemente. Un estudio mostró que, después del accidente de Chernobyl, la incidencia de la enfermedad tiroidea en Europa Oriental aumentó a 62 veces la proporción normal. (5)
El uso extendido de sal yodada ha ayudado disminuir la ocurrencia de enfermedad tiroidea, incluyendo la enfermedad nodular. Sin embargo, el uso de la sal yodada solo se usa en algunos países, sobre todo en las áreas más desarrolladas. (6)
Durante los últimos años se han publicado tres guías diferentes sobre el manejo de los nódulos tiroideos. La primera guía fue