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Gestión de residuos

Gestión de residuos

RESUMEN: La gran variedad de residuos hospitalarios pueden estar incluidos en diferentes grupos dependiendo de su procedencia de generación. Cada grupo consta de un procedimiento y protocolización para su tratamiento así como de un sistema de gestión especializado que garantice su correcta eliminación. La labor del sanitario en este proceso consiste en la correcta diferenciación y deshecho de los residuos generados en el desarrollo de su trabajo para facilitar las futuras etapas del plan de gestión.

  1. Andrea Arduengo Romero. Graduada en Enfermería por la Universidad de Oviedo. Enfermera del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA).
  2. Melissa Fernández Alonso. Graduada en Enfermería por la Universidad de Oviedo. Enfermera del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA).
  3. Irene De La Torre Rodríguez. Graduada en Enfermería por la E.U.E. Cruz Roja de Sevilla. Especialista en Enfermería Familiar y Comunitaria. Enfermera del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA).
  4. María Azucena Maíllo Bada. Graduada en Enfermería por la Universidad de Oviedo. Enfermera del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA).
  5. Claudia Álvarez Rodríguez. Graduada en Enfermería por la Universidad de Oviedo. Enfermera del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA).
  6. Marta Veiga García. Graduada en Enfermería por la Universidad de Oviedo. Enfermera del Servicio de Salud del Principado de Asturias (SESPA).

OBJETIVOS: Conocer la información publicada, datos, legislación y protocolos establecidos en los documentos oficiales sobre la gestión de residuos hospitalarios.

MATERIAL Y MÉTODO: se ha realizado un proceso de revisión bibliográfica mediante la búsqueda de diferentes planes, guías, documentos y normas referentes a la gestión de residuos hospitalarios incluyendo un total de se han encontrado un total de 41 artículos de los cuales se han seleccionado un total de 12 artículos al cumplir los criterios de inclusión.

CONCLUSIONES: El volumen de residuos sanitarios es muy inferior al resto de residuos y, debido a que resulta complicado establecer cantidades producidas al estar enmarcado dentro de otros grupos, los programas medioambientales hacen una aproximación del volumen generado. La gestión que hay en España se basa en intercentros, extracentros y SIGRE, en los que colaboran empresas privadas y públicas coordinándose y manteniendo la información de los residuos hasta su tratamiento final. En cuanto a legislación, al no ser residuos con su propia categorización, es flexible pero estricta en cuanto a documentación necesaria de obligado cumplimiento y los mínimos exigibles de cada uno de ellos.

Palabras clave: “residuos hospitalarios”, “gestión”.

1.            Definición, caracterización y valoración: TIPOS DE RESIDUOS HOSPITALARIOS

Los residuos generados en los centros sanitarios se clasi­fican de la siguiente forma:

  1. NO PELIGROSOS:
  • Grupo I: Residuos generales asimilables a domésticos
  • Grupo II: Residuos sanitarios asimilables a domésticos
  1. PELIGROSOS:
  • Grupo III: Residuos peligrosos SANITARIOS
    • Grupo III A: Residuos Biológicos
    • Grupo III B: Residuos de medicamentos citotóxicos y citostáticos
    • Grupo III C: Residuos Químicos
  • Grupo IV: Residuos peligrosos no sanitarios
  • Grupo V: Residuos Radiactivos (regulados mediante una normativa específica)

A.            RESIDUOS NO PELIGROSOS

Dentro de este tipo de residuos podemos encontrar dos grupos:

I.                GRUPO II. RESIDUOS SANITARIOS ASIMILABLES A DOMÉSTICOS

Son los residuos que se producen como consecuencia de la actividad sanitaria asistencial y/o de investigación asociada pero que no son considerados como residuos sanitarios peligrosos (Grupo III). Por ello, se gestionan de forma diferencia al grupo anterior.

Ejemplos:

  1. Residuos cuya recogida y eliminación no con lleva requisitos especiales:
  • Restos de curas y pequeñas intervenciones quirúrgicas, bolsas de orina vacías y empapadores, recipientes desechables de aspiración vacíos, yesos, sondas y catéteres, pañales, envases, equipos vacíos de goteros, bombas extracorpóreas, bolsas de colostomía, ropa blanca, ropa desechable, etc.
  • Objetos cortantes y punzantes que no hayan estado en contacto con infecciosos.
  • Material que se haya tratado para su descontaminación y/o esterilización.
  • Residuos procedentes de hemodiálisis provenientes de pacientes no contaminados por virus de transmisión sanguínea (VHC, VHB, VIH, etc.).
  • Sangre y hemoderivados en forma líquida (en cantidades menores a 100 ml) y los recipientes que la hayan contenido.
  • Residuos con alto contenido en grasa, los cuales no deben ser eliminados por el desagüe.
  • Vacunas inactivadas.
  • Residuos asociados a animales que no hayan sido infectados. Su eliminación se encuentra regulada por el Reglamento (CE) 1069/2009 del Parlamento Europeo y del Consejo de 21 de octubre de 2009, por el que se establecen las normas sanitaria aplicables a los subproductos animales y los productos derivados no destinados al consumo humano (SANDACH) y el Reglamento (UE) 141/2011 de la Comisión, de 25 de febrero de 2011, por el que se establecen las disposiciones de aplicación del Reglamento 1069/2009.
  1. Medicamentos desechados (salvo los citostáticos y citotóxicos):
  • Medicamentos caducados.
  • Medicamentos en mal estado: termolábiles que no hayan conservado la cadena de frío (en su cartonaje aparece el símbolo D), los carentes de identificación necesaria sobre su contenido, dosificación, lote y fecha de caducidad.
  • Jarabes, gotas óticas, colirios, pomadas, etc. en los que no conste la fecha de apertura.
  • Restos de medicamentos sin utilizar.
  1. Residuos de productos químicos no peligrosos (azúcares, aminoácidos y algunas sales orgánicas e inorgánicas).

B.            RESIDUOS PELIGROSOS

Dentro de este tipo de residuos se establecen dos grupos:

II.                GRUPO I. RESIDUOS GENERALES ASIMILABLES A DOMÉSTICOS

Son los residuos generados fuera de la actividad sanitaria y no precisan medidas especiales en su gestión. Estos serán clasificados mediante el capítulo 20 de la Lista Europea de Residuos (códigos sin asterisco), el cual hace referencia a los residuos municipales y fracciones de recogida selectiva.

Entre ellos se incluyen: biorresiduos (residuos alimenticios y biodegradables), residuos procedentes de actividades administrativas, residuos procedentes de actividades de limpieza y mantenimiento, etc.

  • Ejemplos: papel y cartón, vidrio, plásticos, aceites y grasas comestibles, ropa y tejidos, madera, metales, etc.

III.                GRUPO III – RESIDUOS PELIGROSOS DE ORIGEN SANITARIO

Son los residuos que se producen como consecuencia de la actividad sanitaria de servicios médicos o veterinarios y/o de investigación asociada, que conlleven algún riesgo potencial para los trabajadores expuestos o para el medio ambiente. Estos residuos precisan medidas de gestión específicas.

Dentro de este grupo se establecen tres subgrupos:

SUBGRUPO IIIA: RESIDUOS BIOLÓGICOS

Son todos aquellos residuos cuya recogida, transporte y eliminación es objeto de requisitos especiales con el fin de prevenir infecciones. En general, estos residuos no se consideran como contaminantes del medio ambiente, ya que el número de microorganismos que pueden contener no es superior al de las basuras urbanas.

Incluyen los siguientes residuos:

  • Infecciosos:

Son todos aquellos residuos que pueden transmitir infecciones. Según la NTP 372 sobre tratamiento de residuos sanitarios, la lista de enfermedades infecciosas transmisibles por agentes patógenos contenidos en los residuos sanitarios es la siguiente: (Ver tabla 1).

Estas listas están sometidas a revisiones periódicas de acuerdo con la evolución de los conocimientos epidemiológicos y de los avances técnicos.

En la práctica, el riesgo potencial más elevado se centra en enfermedades de escasa frecuencia entre nuestra población como: el ántrax, el muermo, las producidas por virus del grupo de las fiebres hemorrágicas africanas (Enfermedad de Marburg, la fiebre hemorrágica de Ébola y la fiebre de Lassa), y las enfermedades lentas producidas por agentes no convencionales (Creutzfeldt-Jacob).

Listado publicado por el Principado de Asturias de residuos biológicos infecciosos y los residuos contaminados. Obtenido de la Guía para la Gestión de Residuos Sanitarios del Principado de Asturias:

  • FIEBRES HEMORRÁGICAS VÍRICAS (Fiebre de Congo-Crimen, Fiebre de Lassa, Marburg, Ébola, Argentina (Junin), Boliviana (Machupo), Complejos encefalíticos transmitidos por artrópodos vectores (arbovirus)): Todos los residuos
  • BRUCELOSIS: Pus
  • DIFTERIA FARÍNGEA: Secreciones respiratorias
  • DIFTERIA CUTÁNEA: Secreciones de lesiones cutáneas
  • CÓLERA: Excretas
  • ENCEFALITIS DE CREUTZFELDT-JACOB: Material contaminado con sangre, LCR y tejidos de infectividad alta
  • MUERMO/BORM: Secreciones de lesiones cutáneas
  • TULAREMIA PULMONAR: Secreciones respiratorias
  • TULAREMIA CUTÁNEA: Secreciones purulentas
  • PESTE BUBÓNICA: Secreciones purulentas (Pus)
  • PESTE PNEUMÓNICA: Secreciones respiratorias
  • RABIA: Saliva, secreciones respiratorias
  • FIEBRE Q: Secreciones respiratorias
  • TUBERCULOSIS ACTIVA: Secreciones respiratorias
  • HERPERS VIRUS SIMIAE: Todos
  • CARBUNCO (Bacillus Anthracis): Secreciones respiratorias/cutáneas
  • VIRUELA (erradicada): Todos
  • POLIOMIELITIS: Heces, secreciones respiratorias
  • Agujas y otro material punzante y/o cortante: que requieran requisitos especiales para prevenir infecciones (agujas, lancetas, pipetas, hojas de bisturí, portaobjetos, tubos capilares y otros tubos de vidrio, etc.).
  • Cultivos y reservas de agentes infecciosos que hayan estado en contacto directo con ellos, residuos de actividades de análisis o experimentación microbiológica: placas Petri, hemocultivos, extractos líquidos, caldos, instrumental contaminado, filtros de campana de flujo laminar, etc.

Reservas de agentes infecciosos que incluyen los residuos procedentes de la diálisis de pacientes con virus de transmisión sanguínea (VHC, VHB y VIH).

  • Residuos infecciosos de animales: Incluyen los cadáveres, partes del cuerpo y otros restos anatómicos, camas de estabulación y cualquier otro material contaminado procedente de animales infectados o animales de experimentación que hayan sido inoculados con los agentes infecciosos responsables de las infecciones citadas en el apartado de infecciosos.

La gestión de estos residuos se encuentra igualmente regulada por el Reglamento (CE) 1069/2009 (SANDACH) y el Reglamento (UE) 141/2011 de la Comisión, de 25 de febrero de 2011, por el que se establecen las disposiciones de aplicación del Reglamento 1069/2009.

  • Vacunas vivas y atenuadas incluyendo los viales y jeringas con restos de la vacuna y las vacunas caducadas.
  • Fluidos corporales, sangre y hemoderivados en forma líquida procedentes de pacientes con infecciones altamente virulentas, erradicadas, importadas o de muy baja incidencia en España incluyendo los recipientes que hayan contenido estos fluidos.

En el caso de orina esta ha de ser vertida al desagüe y el recipiente que la contuvo tratarse como residuo del grupo II.

  • Residuos anatómicos: son restos anatómicos (exéresis quirúrgicas, placentas, tumores, etc.) que, por su entidad, no se incluyen en el ámbito de los regulados por el DECRETO 72/1998, de 26 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento de Policía Sanitaria Mortuoria en el ámbito del Principado de Asturias.

SUBGRUPO IIIB: RESIDUOS DE MEDICAMENTOS CITOTÓXICOS Y CITOSTÁTICOS

Son todos los restos de medicamentos anticancerosos y material sanitario que haya estado en contacto con el fármaco, ya sea en su preparación (viales, filtros, bolsas…), en la protección del manipulador (mascarilla, guantes, batas….) o en la administración a los pacientes (agujas, jeringas, gasas, etc.).

La Ley 22/2011, de residuos y suelos contaminados, excluye a las materias fecales de su ámbito de aplicación, sin embargo, se considera que tanto desde el punto de vista sanitario como de la posible contaminación ambiental, las excretas de los pacientes que han recibido tratamientos con citotóxicos y citostáticos deberían ser gestionadas de manera especial.