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Intervenciones de enfermería para mejorar la calidad de vida en pacientes con enfermedad de Crohn

Intervenciones de enfermería para mejorar la calidad de vida en pacientes con enfermedad de Crohn

La enfermedad de Crohn es una enfermedad crónica que puede afectar a cualquier zona y capa del tracto digestivo, pudiendo haber zonas afectadas intercaladas con zonas sanas.

Autores

Ana Ibero Morales (Graduado en Enfermería).

Resumen

Las lesiones se inician con aftas, las cuales pueden llegar a ulcerarse. La sintomatología aparece en forma de brotes, los cuales se intercalan con periodos de remisión.

Objetivo: Conocer la enfermedad y como poder mejorar la calidad de vida de aquellos pacientes que la poseen.

Metodología y desarrollo: Realizar una revisión bibliográfica sobre las intervenciones de enfermería necesarias para mejorar la calidad de vida de pacientes con enfermedad de Crohn.

Conclusiones: Hoy en día se tarda mucho desde que aparecen los primeros síntomas hasta que se diagnostica la enfermedad, a pesar de los avances tecnológicos que existen. Por ello, destacar la necesidad del continuo desarrollo de investigaciones y de nuevas tecnologías.

A  sí mismo, el imprescindible papel de enfermería para el manejo de dicha enfermedad y para mejorar la calidad de vida de los pacientes que la padecen.

Palabras clave

Enfermedad de Crohn, Cuidados de enfermería, Educación en salud, Calidad de vida.

Introducción

La denominación de Enfermedad Inflamatoria Intestinal  (EII), se emplea para referirse a una amplia variedad de manifestaciones clínicas y presentaciones cuya característica común y principal es la inflamación crónica del tubo digestivo, en diferentes localizaciones.

Dentro de la EII, podemos encontrar: la Colitis Ulcerosa (CU), la Colitis Intermedia (CI) y la Enfermedad de Crohn (EC).

La Enfermedad de Crohn, es una enfermedad crónica que engloba la EII, la cual puede afectar a cualquier zona del tracto digestivo, desde la mucosa oral hasta el ano, aunque predomina más en el íleon distal y en el colon. Tiene una afectación transmural, es decir, puede afectar a cualquier capa del tracto digestivo (mucosa, submucosa, muscular y serosa) y de forma segmentaria, es decir, puede haber zonas afectadas intercaladas con zonas sanas. Los síntomas se presentan en forma de brotes,  en intervalos más o menos largos dependiendo de la gravedad y del tratamiento de la enfermedad, intercalados con periodos de remisión.

Las lesiones se inician con aftas, las cuales con el tiempo pueden ulcerarse. Éstas pueden remitir espontáneamente o con tratamiento o por el contrario pueden aparecer complicaciones.

Situación actual en España

La EII ha ganado especial relevancia en España en los últimos años debido al incremento de casos, especialmente en adultos jóvenes y por tanto aumento del impacto social y económico.

En nuestro país se estima que entre 84.000 y 120.000 personas tienen EII y de esas personas el 42 % tiene la enfermedad de Crohn. Según la Sociedad Española de Patología Digestiva una de cada 450 personas padece de estos problemas.

Objetivos

Objetivo General

Establecer intervenciones de enfermería para mejorar la calidad de vida en pacientes con enfermedad de Crohn.

Objetivos específicos

  • Determinar cambios en el estilo de vida de los pacientes para mejorar su calidad de vida.
  • Determinar medidas para mejorar los síntomas de dichos pacientes.
  • Determinar medidas de apoyo emocional para dichos pacientes.

Metodología y desarrollo

Metodología

Se realizó una revisión bibliográfica sobre las intervenciones de enfermería necesarias para mejorar la calidad de vida de pacientes con enfermedad de Crohn. Para ello, se utilizaron bases de datos científicas, revistas  y otras fuentes especializadas.

Desarrollo

Perfil de las personas que poseen la enfermedad de Crohn.

La enfermedad de Crohn puede aparecer a cualquier edad pero existe un pico de incidencia entre los 20-30 años y otro pico entre los 60 años.

En el desarrollo de la enfermedad intervienen factores tanto genéticos como ambientales aunque la etiología de ésta es desconocida.

Sintomatología

Como se ha mencionado anteriormente, la enfermedad de Crohn se manifiesta en forma de brotes a lo largo de la vida de los pacientes, en periodos más o menos largos en función del tratamiento y de la remisión de la enfermedad.

Algunos síntomas más características de la enfermedad son los siguientes:

  • Dolor abdominal .Sobre todo a nivel de la fosa iliaca izquierda y a nivel periumbilical.
  • Pérdida de peso
  • Principal síntoma, la cual es dolorosa, y puede acompañarse de sangre o de moco.
  • Mala absorción. Por tanto, astenia, alteraciones nutricionales…
  • Sensación de cansancio permanente.
  • Lesiones anales. Fisuras, fistulas o ulceras.
  • Febrícula o picos febriles.

Complicaciones

  • Fístulas tanto internas como externas.
  • Procesos neoplásicos de colon.
  • Abscesos intrabdominales.
  • Hemorragias graves.
  • Perforación intestinal.

Pruebas diagnosticas

La realización de varias pruebas diagnósticas concluirán al diagnóstico de la enfermedad, entre ellas encontramos: pruebas de imagen, de laboratorio, endoscópicas, biopsias y sobre todo la clínica del paciente.

Tratamiento

El principal objetivo del tratamiento es controlar los síntomas de la enfermedad, de esta manera se previene la aparición de los brotes agudos y de las complicaciones,  mejorando la calidad de vida de los pacientes y evitando la cirugía lo máximo posible.

El tratamiento de la enfermedad puede ser dietético, farmacológico  o quirúrgico.

  • Respecto al tratamiento dietético, se recomienda seguir una dieta lo más variada posible, dedicando especial atención al consumo adecuado de proteínas, hierro y calcio. No se puede dejar de consumir ningún alimento, ya que a día de hoy no hay ningún aval científico que relacione que un determinado alimento desencadena un brote.
  • Especial cuidado con la ingesta de leche y fibra durante un brote (disminuir su consumo), ya que estos alimentos aumentan los síntomas.
  • Respecto al tratamiento farmacológico encontramos dos grupos grandes: el tratamiento convencional y el biológico. En el convencional se encuentran los aminosalicilatos, los corticoides y los inmunomoduladores.
  • Los aminosalicilatos se emplean para disminuir la inflamación en los casos más graves. Se administran a un 55% de los pacientes.
  • Los corticoides, se emplean únicamente para remisión de los brotes sintomáticos debido a los efectos secundarios que producen a largo plazo.
  • Los inmunomoduladores únicamente se utilizan en los casos más graves y que precisan de un estricto control médico ya que pueden influir en el sistema inmunitario del paciente.

Por otro lado encontramos el tratamiento biológico, el cual se utiliza para inducir  y mantener la remisión de los brotes moderados y graves. El propio paciente puede administrárselo por vía subcutánea en su domicilio o también se puede administrar por vía intravenosa pero deberá acudir a un centro hospitalario.

Dicha tratamiento está suponiendo un gran avance ya que los pacientes están notando una mejoría en su estado de salud, que con el tratamiento convencional no notaban.

  • Respecto al tratamiento quirúrgico, la mayoría de los pacientes con EC (alrededor de un 70%) se han visto sometidos a alguna intervención quirúrgica derivada de dicha enfermedad. La única intervención quirúrgica definitiva para la cura de dicha enfermedad es la extracción completa del intestino grueso, la cual, supone un alto impacto en la calidad de vida del paciente.

  • A día de hoy podemos encontrar otras alternativas para el tratamiento de la EC como es la plasmaferesis o el trasplante de medula ósea, los cuales pueden ser tratamientos temporales o definitivos dependiendo del paciente. Dichos tratamientos a día de hoy van asociados a altos riesgos, además de ser muy costosos.

Intervenciones de enfermería para mejorar la calidad de vida de los pacientes

  • EDUCACION PARA LA SALUD

Educación para la salud para cambiar los estilos de vida. Modificaciones dietéticas y eliminación de los factores de riesgo que pueden inducir a la aparición de brotes (tabaco, estrés, medicamentos, infecciones…)

  • Recomendaciones dietéticas

Se debe recomendar seguir una dieta equilibrada. Los pacientes serán los que detecten que alimentos les van mejor y cuales peor y por tanto poder evitarlos.

A si mismo se deben beber abundantes líquidos,  evitando por completo el consumo de alcohol y de cafeína. Los alimentos que más problemas suelen dar y por tanto los que más habría que reducir serían los lácteos, las grasas, los hidratos de carbono y los alimentos flatulentos.

  • Hábito tabáquico

El tabaco agrava el proceso de la enfermedad y aumenta las posibilidades de recaída, por lo que a los pacientes se les tiene que recomendar que dejen de fumar

  • Estrés

El estrés tiene un impacto negativo sobre la enfermedad, pudiendo provocar exacerbaciones, por lo que habrá que aconsejar que los pacientes intenten identificar y eliminar todos los factores estresantes.

  • Medicamentos

Pueden exacerbar la enfermedad los antinflamatorios no esteroideos y no selectivos y los anticonceptivos orales, los cuales pueden empeorar la sintomatología gastrointestinal, aumentando el riesgo de sangrado.

Podrá aconsejarse el uso de paracetamol debido a su mejor tolerancia por vía oral. Sobre todo insistir al paciente en que debe cumplir el tratamiento que el especialista le ha recetado y estar pendiente de los posibles efectos adversos que se pueden dar.

  • Evitar infecciones

Evitar al máximo las infecciones (procedimientos quirúrgicos, tratamiento que afecte al sistema inmunitario, desnutrición…).

Tener en cuenta que el principal signo de infección es la fiebre, por lo que deberán consultar con un médico cualquier manifestación clínica.

Respecto a las vacunas, se deberán administrar antes de iniciar cualquier tratamiento inmunosupresor, aunque aquellas con agentes patógenos inactivados o muertos se pueden administrar en cualquier momento.

  • MANEJO SINTOMATOLOGÍA

 

  • DIARREA
  • Evitar la deshidratación con un buen aporte hidroelectrolítico.
  • Valorar la turgencia de la piel y de las mucosas.
  • Pesarse diariamente.
  • Realizar comidas en pequeñas cantidades con mayor frecuencia.
  • Valor si es necesario la utilización de suplementos nutricionales.
  • Reducir los alimentos ricos en fibra.

 

  • DOLOR
  • Tener en cuenta que dicho síntoma puede ser multifactorial y no una exacerbación de la enfermedad.
  • Aconsejar el uso de paracetamol, si es necesario.

 

  • INCONTINENCIA
  • Realización de ejercicios para reforzar el suelo pélvico.
  • Reentrenamiento intestinal.
  • Cuidados de la piel perianal.

 

  • APOYO AL PACIENTE Y A LA FAMILIA
  • Apoyo emocional y psicológico.
  • Enseñar a los pacientes a reconocer los signos y síntomas de complicaciones y en el caso de existir ponerse en contacto con el personal sanitario.
  • Detectar estados de depresión, ansiedad, miedo e incertidumbre.
  • Comunicación con las familias, ya que permite involucrarlos en el proceso de atención e influir positivamente en la calidad de vida de los pacientes.
  • Grupos de apoyo y asociaciones de autoayuda entre pacientes.

Conclusiones

Hoy en día se tarda mucho desde que aparecen los primeros síntomas hasta que se finaliza el diagnóstico de la enfermedad a pesar de los numerosos avances tecnológicos que existen. Por ello destacar la gran importancia del continuo desarrollo de tecnologías y del desarrollo de investigaciones sobre la enfermedad.

Así mismo, el papel importantísimo de enfermería, la cual puede influir en el manejo de la enfermedad dando educación sobre esta, sobre el manejo de su sintomatología y sobre todo dando apoyo tanto al paciente como a la familia para evitar al máximo la aparición de complicaciones.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener conflicto de intereses con ninguna casa comercial.

Bibliografía

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