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Retinopatía del prematuro

Retinopatía del prematuro

Autora principal: Blanca Guadalupe Ocaña Cereceda

Vol. XVI; nº 2; 84

Premature retinopathy

Fecha de recepción: 08/12/2020

Fecha de aceptación: 20/01/2021

Incluido en Revista Electrónica de PortalesMedicos.com Volumen XVI. Número 2 –  Segunda quincena de Enero de 2021 – Página inicial: Vol. XVI; nº 2; 84

AUTORES Y LUGAR DE TRABAJO

Blanca Guadalupe Ocaña Cereceda. Enfermera en Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza, España).

Andrea Coma Marco. Enfermera en Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza, España).

Alberto Borobia Lafuente. Enfermero en Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza, España).

Pilar Pardos Val. Enfermera en Hospital Universitario Miguel Servet (Zaragoza, España).

RESUMEN

La Retinopatía del Prematuro (ROP) es una de las principales causas de ceguera infantil potencialmente evitable. Es una enfermedad que afecta a recién nacidos inmaduros, generalmente sometidos a oxigenoterapia y de etiopatogenia actualmente desconocida. Un gran porcentaje de casos evolucionan favorablemente. Sin embargo, una pequeña parte puede dejar algunas secuelas como por ejemplo la ceguera. La oftalmoscopia binocular indirecta es el método de referencia para la detección de ROP aunque tiene muchos inconvenientes.

La exploración con OBI es un método complicado que requiere un oftalmólogo especializado en prematuros. En muchos hospitales de diversas comunidades, la exploración de los prematuros es difícil debido al aumento de niños que requieren seguimiento y la escasez del personal cualificado que puede realizar la prueba. Se identifican a los oftalmólogos especialistas en ROP como el único profesional sanitario experto en visión capacitado para diagnosticar y controlar la ROP mediante el análisis de retinografías utilizando la Telemedicina.

Algún grado de ROP se produce en el 50 por ciento de todos los nacimientos prematuros, y el 10 por ciento de estos niños necesitan tratamiento. Existen cinco estadios de retinopatía del prematuro desde un estadio leve, hasta un estadio grave, en el que la retina se desprende del ojo.

Palabras clave: Retinopatía, prematuro.

ABSTRACT

Premature Retinopathy (ROP) is one of the leading causes of potentially avoidable childhood blindness. It is a disease that affects premature newborns, usually subjected to oxygen therapy and currently unknown etiopathogenia. A large percentage of cases evolve favorably. However, a small part may leave some sequelae such as blindness. Indirect binocular ophthalmoscopy is the reference method for ROP detection although it has many drawbacks.

OBI scanning is a complicated method required by an ophthalmologist specializing in prematuros. In many hospitals in various communities, screening for preterm babies is difficult due to the increase in children requiring follow-up and the shortage of qualified personnel who can take the test. Ophthalmologists specializing in ROP are identified as the only vision-expert healthcare professional trained to diagnose and control ROP by analyzing retynography using Telemedicine.

Some grade of ROP occurs in 50 percent of all preterm births, and 10 percent of these children need treatment. There are five stages of preterm retinopathy from a mild stage to a severe stage, in which the retina detaches from the eye.

Keywords: Retinopathy, premature.

INTRODUCCIÓN

La retinopatía del prematuro es una enfermedad vasoproliferativa que afecta a los recién nacidos prematuros y que se produce en el momento del desarrollo y maduración vascular. En países desarrollados, es la causa más frecuente de ceguera infantil1.

La retinopatía de la prematuridad es un trastorno ocular causado por el crecimiento anormal de vasos sanguíneos en la retina de los bebés prematuros. Esto afecta normalmente a bebés nacidos antes de la semana treinta y uno, con bajo peso al nacer1-3.

Normalmente, esta patología se resuelve sin ningún tratamiento y no provoca daños. La retinopatía del prematuro avanzada, por el contrario, puede provocar problemas visuales permanentes o ceguera2.

Etiopatogenia:

En este tipo de retinopatía, los vasos sanguíneos se hinchan y crecen excesivamente en la capa de nervios sensibles a la luz de la retina. Cuando la afección está avanzada, los vasos sanguíneos anómalos en la retina se extienden hacia el vítreo que rellena el centro del ojo. El sangrado de estos vasos puede dejar una cicatriz en la retina produciendo desprendimiento parcial o total de la retina y a veces, ceguera4.

Los vasos sanguíneos crecen desde el centro de la retina del bebé en proceso de desarrollo hasta las 16 semanas de embarazo. A partir de los ocho meses, se ramifican hacia el exterior y alcanzan los extremos de la retina4.

En los bebés prematuros, el crecimiento normal de los vasos sanguíneos de la retina puede verse alterado y desarrollar vasos sanguíneos anómalos que pueden causar pérdidas de sangre y hemorragias dentro del ojo2.

La retinopatía de la prematuridad no tiene signos ni síntomas cuando se empieza a desarrollar en el ojo de un recién nacido. Mediante un examen ocular podemos detectar esta enfermedad5.

El uso de oxígeno en exceso provoca el crecimiento vascular anormal. Actualmente, existen métodos disponibles para controlar el oxígeno. Como resultado, el problema es menos común, especialmente en países en vías de desarrollo. Sin embargo, sigue sin saberse exactamente cuáles son los niveles adecuados de oxígeno para los bebés prematuros4,5.

Algunos de los factores que pueden ser responsables del desarrollo de la retinopatía del prematuro son4,5:

  • Peso bajo al nacer.
  • Edad de gestación.
  • Ventilación mecánica y la administración total de oxígeno.
  • Niveles elevados de anhídrido carbónico en la sangre.
  • Deficiencia Vitamina E.
  • Cardiopatías.
  • Anemia.
  • Desajustes en el PH
  • Transfusiones de sangre.
  • Hemorragias intraventriculares.
  • Síndrome de tensión respiratoria.
  • Hipoxia crónica en el útero.
  • Convulsiones.
  • Infecciones.

La tasa de retinopatía en bebés prematuros ha disminuido en países en vías de desarrollo en las últimas décadas debido a mejores cuidados en la unidad de cuidados intensivos neonatales.

Por el contrario, más bebés muy prematuros ahora son capaces de sobrevivir, con más riesgo de padecer ROP5.

Los bebés caucásicos tienen más probabilidades de tener ROP que los bebés afroamericanos. Los bebés prematuros también tienen más probabilidades de tener ROP si tienen otros problemas de salud5.

Valoración y diagnóstico:

Después del nacimiento de un bebé prematuro, se debe confirmar que no tenga retinopatía del prematuro6.

El oftalmólogo puede examinar los ojos del bebé durante su ingreso en el hospital. Es posible que la retinopatía no aparezca hasta varias semanas después del nacimiento. Los bebés prematuros deben ser evaluados por un oftalmólogo entre cuatro y seis semanas después de nacer7.

El futuro de la retinopatía del prematuro se enfoca más hacia la prevención de la enfermedad que no hacia el tratamiento. El descubrimiento de los marcadores anti angiogénicos determina un nuevo enfoque en el pronóstico y en los factores de riesgo. El conocimiento más profundo de estos factores determina un diagnóstico más certero del momento en el que se produce la enfermedad, se debe actuar de la forma más rápida posible7,8.

El avance en los estudios en telemedicina, con imágenes fundoscópicas digitales de alta resolución cada vez facilitan más la identificación de estos pacientes, el tratamiento es más efectivo8.

Tratamiento:

La finalidad de la cirugía es detener la proliferación de los vasos sanguíneos anómalos mediante la concentración del tratamiento en la retina periférica para preservar la retina central.

En esta cirugía se crean cicatrices en la retina periférica para frenar la proliferación anómala y evitar así la tensión sobre ella9.

Se crearán cicatrices en la retina periférica. Al salvaguardar la retina central, el ojo aún podrá realizar funciones vitales como diferenciar colores, leer, etc9.

Técnicas de cirugía más frecuentes8-10:

  • Cirugía láser

Es la cirugía más común. Se usan pequeños haces de láser para producir cicatrices en la retina periférica (fotocoagulación).

El objetivo de la cirugía láser y la crioterapia es crear tejido cicatricial en la retina periférica. La retina periférica con cicatrices dejará de estimular el crecimiento de vasos anómalos. Los vasos retinianos normales se extenderán hacia al área en la que estaban ausentes antes del tratamiento.

A pesar de que el área con cicatrices de la retina periférica dejará de funcionar, la retina central funcionará bien y se preservará la visión. La cirugía láser suele llevar alrededor de 30-45 minutos por ojo.

Después de la cirugía, probablemente note que los ojos y los párpados del bebé están algo rojos. También se puede producir una hinchazón alrededor de los párpados. El ojo no se cubrirá y se administrará al bebé un colirio durante una semana.

  • Crioterapia

Fue el primer tratamiento para esta enfermedad. La crioterapia usa un instrumento para congelar una parte específica del ojo que se extiende más allá del borde de la retina, así se detiene la proliferación de vasos sanguíneos anómalos. Hoy en día, se utiliza en raras ocasiones porque los resultados son mejores con la cirugía láser.

En el procedimiento de crioterapia, se coloca sobre la esclerótica o blanco del ojo un estilete de metal que ha estado expuesto a nitrógeno líquido. La temperatura bajo cero se transmite rápidamente a la retina periférica y congela y crea cicatrices en el área.

La crioterapia demora entre 30 y 45 minutos. Advertirá el enrojecimiento en los ojos del bebé y posiblemente alrededor del párpado, así como cierta hinchazón. El ojo no se cubrirá y se administrará al bebé un colirio.

En los casos más avanzados de retinopatía del prematuro, en los que se ha producido desprendimiento de retina, se utilizan estos métodos10:

  • Indentación escleral

Colocación de una banda flexible (normalmente de silicona). Ésta se coloca alrededor de la esclerótica o blanco del ojo y se la presiona hacia adentro. Así, la retina desprendida permanece contra la pared exterior del ojo.

La indentación escleral es un procedimiento reservado para los casos de retinopatía prematura en los que la retina ha comenzado a desprenderse. El concepto consiste en envolver la parte lateral del ojo (en otras palabras, no alrededor del cristalino) con una banda. Esta banda fuerza a la retina a permanecer en su lugar.

Aproximadamente, este proceso puede durar entre una y dos horas. El bebé presentará enrojecimiento en los ojos y alrededor de los párpados, así como cierta hinchazón en el área. El ojo se cubrirá con un parche hasta que sane.

Los pacientes sometidos a una indentación escleral deberán hacerse examinar cada 6 meses o con mayor frecuencia si existe algún problema. La banda no se retirará a no ser que esté demasiado ajustada o produzca algún problema.

  • Vitrectomía

La extracción del vítreo permite retirar el tejido cicatricial y disminuye la tensión sobre la retina, haciendo que esta no se separe.

La vitrectomía consiste en retirar el vítreo del ojo (el líquido gelatinoso transparente del centro del ojo) y reemplazarlo por una solución salina que funciona de manera muy similar al componente real.

La vitrectomía permite al cirujano especializado en retina retirar el tejido cicatricial de la parte interior del ojo y reducir la tensión sobre la retina.

Mediante un microscopio y lentes especiales sobre el globo ocular para obtener una mejor visión de la parte posterior del ojo, el cirujano utiliza un bisturí para efectuar varias incisiones pequeñas en la esclerótica. A través de las cuales puede realizarse un tratamiento láser.

La herramienta cortante se utiliza para retirar el vítreo y eliminar cualquier tejido cicatricial, sangre o desecho del ojo. Luego, utilizando la vía de infusión, se reemplaza el vítreo por una solución salina.

Todas las incisiones se cierran con puntos de sutura. La vitrectomía puede llevar varias horas. El bebé presentará enrojecimiento en los ojos y alrededor de los párpados, así como cierta hinchazón en el área. El ojo se cubrirá con un parche hasta que sane.

La recuperación puede llevar varias semanas. Los bebés sometidos a una vitrectomía necesitan exámenes oftalmológicos frecuentes.

El oftalmólogo explica el procedimiento a la familia del prematuro con esta enfermedad. Se debe firmar el consentimiento de cirugía y de anestesia8.

La cirugía láser y la crioterapia se realizan bajo sedación profunda, mientras que la indentación escleral y vitrectomía se realizan bajo anestesia general8.

No se realizan incisiones ni se aplican puntos de sutura durante la cirugía láser ni la crioterapia, pero todos los procedimientos quirúrgicos para la retinopatía del prematuro requieren la administración de sedación y analgésicos o anestesia general al bebé8.

La cirugía láser y la crioterapia suelen practicarse junto a la cama del niño con sedación y analgésicos. La indentación escleral y la vitrectomía (anestesia general), se realizan en un quirófano. En todos los procedimientos, se observarán atentamente las frecuencias respiratoria y cardíaca del bebé durante la cirugía8.

Se administra al niño un colirio para dilatar las pupilas antes de cada intervención. Debajo de los párpados para evitar que se cierren, colocaremos el Blefarostato8.

Después de la indentación escleral y la vitrectomía se cubre el ojo con un parche, pero no después de la terapia láser o crioterapia8.

Complicaciones:

El objetivo de la cirugía de la retinopatía del prematuro es detener el avance de la enfermedad y evitar la ceguera. A pesar de que la cirugía para la retinopatía del prematuro tiene un alto índice de éxito, no todos los bebés responden al tratamiento. Podrían perder la vista un 25% de los bebés sometidos a esta operación10,11.

A veces, la cirugía láser o la crioterapia no es exitosa y hay que volver a repetirlas. Si la proliferación continúa, quizás deba intentarse con la indentación o la vitrectomía. Sin embargo, es importante saber que la cirugía para los estadios avanzados de la retinopatía del prematuro no garantiza que la retina volverá a unirse y que se devolverá la visión11,12.

Algunas complicaciones son10-12:

  • Estrabismo:Los ojos no se alinean correctamente.
  • Ambliopía:Un ojo es más débil (“ojo perezoso”).
  • Miopía: Dificultad para ver objetos lejanos.
  • Glaucoma:Aumento de la presión ocular que puede dañar el nervio óptico y provocar pérdida de la visión o ceguera.
  • Desprendimiento de retina:La retina se desprende del ojo y produce pérdida de la visión o ceguera.

CONCLUSIONES

Tras la realización de la presente revisión bibliográfica sobre la retinopatía del prematuro hay que concluir:

PRIMERO: Es de gran importancia la realización del fondo de ojo a los prematuros nacidos en la 33 semana o antes. Esta exploración se realizará en la quinta semana de vida.

SEGUNDO: Los principales factores de riesgo son la prematuridad y el bajo peso al nacer.

TERCERO: Es necesario un uso juicioso de la oxigenoterapia. La finalidad del tratamiento es evitar el desprendimiento de la retina y la ceguera.

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