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Rol de la persona cuidadora y su experiencia en el cuidado de personas con discapacidad muy grave y severa

Rol de la persona cuidadora y su experiencia en el cuidado de personas con discapacidad muy grave y severa

Objetivo: Analizar y describir el rol de la persona cuidadora y su experiencia en el cuidado de personas con discapacidad muy grave y severa.

Diseño del estudio, estudio de tipo cualitativo de teoría fundamentada constructivista basado en las experiencias diarias de las personas cuidadoras (gráfico 2). Lugar de estudio: Cantón Catacocha, Distrito de Salud 11D03 Paltas-Salud.

Rol de la persona cuidadora y su experiencia en el cuidado de personas con discapacidad muy grave y severa

Trabajo de investigación.

Autor.

  1. Dr. Álvaro Manuel Quinche Suquilanda.
  2. Dra. Ana Lorena Ríos Elizalde.
  3. Md. Ginger Tamara Goya Rodríguez.
  4. Md. Miguel Aurelio Molina Idrovo.
  5. Md. Esther Paola Conde Minga.
  1. Doctor en Medicina General y Cirugía, Estudiante del Posgrado de Medicina Familiar y Comunitaria de la Universidad Nacional de Loja.
  2. Doctora en Medicina General y Cirugía, directora del departamento de discapacidades del Distrito 11D03 Paltas-Salud.
  3. Médico, Estudiante del Posgrado de Medicina Familiar y Comunitaria de la Universidad Nacional de Loja.
  4. Médico, Teniente del Navío – Armada del Ecuador.
  5. Médico General, Estudiante del Posgrado de Medicina Familiar y Comunitaria de la Universidad Nacional de Loja.

Resumen.

Participantes: 50 personas cuidadoras de personas con discapacidad de un universo total de 109 cuidadores, seleccionados aleatoriamente.

Método: la información recolectada se realizó durante el trabajo de campo, mediante entrevistas heteroadministradas estructuradas previamente (gráfico 3).

Resultados: dentro de la caracterización de los cuidadores el 89% de cuidadores refirió tener problemas de salud, estados de depresión y ansiedad (gráfico 1), a mas de sentir un bloqueo progresivo en su vida social, son unas de las múltiples respuestas que indican las personas cuidadoras, cuadros que han seguido una evolución cronológica desde antes del cuidado y posterior al mismo.

Conclusiones. Las múltiples realidades evidenciadas en el estudio indican que el cuidado de personas con discapacidad representa una actividad agobiante y estresante, que en la mayoría los conduce a estado de morbilidad por lo cual su manejo e intervención debe ser tomado muy en cuenta por los diversos organismos de la salud local como Nacional para evitar o manejar de mejor manera el síndrome del cuidador y sus repercusiones.

Introducción.

Actualmente la sociedad se encuentra en una fase de envejecimiento debido al fuerte descenso de la natalidad y a la disminución de la mortalidad en edades avanzadas, aspectos que traen como consecuencia el aumento en la esperanza de vida.

Este fenómeno conlleva a que cada vez la población esté constituida por un porcentaje mayor de personas dependientes o con problemas de salud que precisan más soporte y cuidados. (Sánchez, 2002) señala que el patrón epidemiológico de América Latina indica que en muchos países las enfermedades crónicas comparten los primeros lugares de morbimortalidad con las enfermedades agudas y que éstas presentan tendencias a incrementarse. (Martínez Fuentes, A. J., & Fernández Díaz, I. E. 2008) determin´ó en su estudio que la situación de aumento de la longevidad y la caída de la fecundidad y natalidad conlleva a la inversión de la pirámide poblacional ya no solo presente en países desarrollados sino ya a la par de países en desarrollo como el nuestro. Por lo cual la presencia de personas adultas mayores aumenta mucho mas las atenciones continuas y la presencia de enfermedades, estadísticamente se determina que por cada 4 habitantes 1 constituye un adulto mayor con todos los problemas médicos que por la edad se presentan. Por lo que para alcanzar una longevidad satisfactoria debe lograrse un envejecimiento saludable, estilos de vida satisfactorios, mantenimiento de las reservas funcionales, prevención de enfermedades y discapacidades, pero sobretodo de una sociedad más amigable con las personas de edad.

Por ello, podemos evidenciar que estas personas adultas terminan siendo vulnerables a enfermedades crónico-degenerativas y por ende en el 40% de los casos según estudios terminan necesitando cuidador. Es decir la situación en la que una persona requiere de la ayuda de otro/s para realizar las actividades de la vida diaria, es cada vez un problema más relevante por sus implicaciones sociales, psicológicas, económicas, políticas y familiares.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que en 2030, a escala mundial, aumentarán las defunciones ocasionadas por enfermedades no transmisibles (ENT). Las enfermedades cardiovasculares aumentarán de 17 millones a 25 millones, mientras que las muertes ocasionadas por el cáncer aumentarán de 7,6 millones a 13 millones.

Partiendo de estas tendencias, la previsión es que la cifra anual de defunciones por ENT alcance los 55 millones de personas en 2030; en cambio, se pronostica que los descensos ocasionados por enfermedades infecciosas disminuirán paulatinamente en los próximos 20 años.

En Ecuador las enfermedades crónicas no trasmisibles representan un problema de salud pública, evitable, que gubernamentalmente se establecieron estrategias que se basan en cuatro ejes que son la política y abogacía, vigilancia, promoción de la salud y prevención y manejo integrado de enfermedades crónicas no transmisibles y factores de riesgo. En el país las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte, seguido por el cáncer.

En Ecuador las enfermedades crónicas no transmisibles como la diabetes mellitus y la hipertensión arterial han experimentado un incremento sostenido desde 1994, y se determino que de cada 10 muertes 6 corresponden a ENT.

En nuestro país, el Gobierno a implementado políticas de inclusión social, política y laboral a las personas con discapacidad entre el 2010 y el 2013 se ha logrado la inclusión laboral de 60.758 personas con discapacidad, otras 20.172 se benefician del bono Joaquín Gallegos Lara, que representa una ayuda económica de 240 dólares para el cuidado de una persona con discapacidad muy grave y severa.

Sanchez Herrera, (2002) señala que el patrón epidemiológico de América Latina indica que en muchos países las enfermedades crónicas comparten los primeros lugares de morbimortalidad con las enfermedades agudas y que éstas presentan tendencias a incrementarse. Este hecho junto con las nuevas disposiciones de las instituciones de salud, en las que se hace evidente la evasión de responsabilidades de cuidado formal para las personas en situación de enfermedad crónica, ha puesto de manifiesto el problema del cuidado a largo término.

Estos hechos hacen que en las dos últimas