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Manejo de la torsión testicular

Manejo de la torsión testicular

Resumen:

La torsión testicular se refiere a la torsión del cordón espermático del que se sostiene un testículo al resto del tracto genital. Dicho cordón espermático usualmente contiene los vasos sanguíneos que llevan irrigación sanguínea al testículo, de modo que una torsión del cordón suele provocar una isquemia testicular asociada a dolor súbito que puede causar náuseas y vómitos. La torsión testicular es una urgencia quirúrgica y en caso de retraso, la isquemia puede conllevar a la muerte del testículo por necrosis. Si la cirugía se lleva a cabo dentro de las 6 primeras horas, se pueden salvar la mayoría de los testículos operados. (1)

En el humano, la condición es más común durante el primer año de vida del varón y al comienzo de la adolescencia.

Manejo de la torsión testicular

Autora: Encarnación Sánchez Jiménez. Especialista en Medicina Familiar y Comunitaria

Palabras clave: torsión testicular, síntomas, diagnóstico, tratamiento.

CONCEPTO

Rotación axial del cordón espermático que interrumpe la vascularización venosa y arterial del testículo, comprometiendo la viabilidad del mismo. Es más frecuente en neonatos y adolescentes, pero puede ocurrir a cualquier edad. En adultos puede estar en relación con pequeños tumores testiculares, o bien con actividad física importante, siendo el factor desencadenante la contracción brusca y dolorosa del cremáster.

La torsión testicular es una de las mayores urgencias pediátricas, puesto que no debe transcurrir un período superior a 6 horas desde su inicio hasta su intervención (a partir de las 4 horas ya existen lesiones importantes).

Su etiología depende de anomalías estructurales (con mayor movilidad, como en las criptorquidias) o de fijación cremastérica (en los testes en bolsa). Es característica en los niños mayores y pre-adolescentes, con un pico de incidencia a los 14 años, y en los recién nacidos. En estos últimos la torsión es extravaginal, por fuera del orificio inguinal externo y de la vaginal testicular, mediante un giro axial (mayoritariamente antihorario) de las estructuras del cordón inguinal, que conducen a la obstrucción primero venosa y ulteriormente arterial, con infarto final de las estructuras torsionadas distales. Afecta por igual ambos lados (derecho e izquierdo) y frecuentemente termina siendo bilateral, en distintos episodios, por lo cual, en los casos unilaterales, es obligada la fijación quirúrgica del teste contralateral neonatal.

CLÍNICA

El motivo de consulta suele ser dolor (habitualmente irradiado a cuadrante abdominal inferior ipsilateral) y signos inflamatorios exagerados de aparición brusca, a los que se pueden añadir náuseas y vómitos, afectación del estado general, fiebre, etc.

Es importante señalar en la anamnesis datos como dolores testiculares previos, traumatismos, infección urinaria, parotiditis, situación anterior del teste…En la exploración física valorar datos como el lado, tiempo de evolución, rapidez de instauración, fiebre, náuseas, vómitos, dolor abdominal, hidrocele reaccional, localización del dolor, aumento o induración del teste, movilidad y elevación testicular, dolor o engrosamiento en epidídimo o cordón, posición del teste contralateral…

En la torsión existe eritema y edema del escroto, edema e infiltración testicular, teste afecto más elevado, engrosamiento del cordón espermático, ausencia del reflejo cremastérico y escrotal, orientación anormal del teste, pero ninguno es patognomónico por sí mismo.

DIAGNÓSTICO

El diagnóstico, a veces difícil, se iniciará con la exploración física y se completará con determinadas pruebas complementarias.

  1. Exploración física
  2. El testículo se encuentra elevado hacia la raíz del escroto, enrojecido con edema escrotal y sin signos inflamatorios locales. En los casos que afectan al cordón espermático, puede palparse su engrosamiento y un anillo de torsión a ese nivel. Es útil la exploración de los siguientes signos:
  3. Signo de Gouverneur: el testículo afectado está más horizontalizado y alto que el contralateral.
  4. Signo de Prehn: en el paciente con torsión, la elevación del testículo genera un aumento del dolor; por el contrario, en el caso de las orquiepididimitis, el paciente experimenta una mejoría del dolor.
  5. Reflejo cremastérico: consiste en la estimulación de la cara interna del muslo, que provoca el reflejo de contracción del músculo cremastérico y un ascenso del testículo. Este reflejo se encuentra abolido en los casos de torsión.
  6. Un nódulo doloroso en el polo superior del testículo debe sugerir una torsión del epidídimo o un apéndice rudimentario testicular. Este nódulo, a través de las cubiertas escrotales, presenta una coloración azulada como consecuencia de la isquemia.
  7. Pruebas complementarias

Como pruebas básicas, se deben solicitar: hematimetría con fórmula y recuentos leucocitarios; bioquímica sanguínea que incluya glucosa, urea, creatinina, sodio y potasio, y radiografía simple de abdomen. Luego, si es necesario, se extrae sangre para estudio de coagulación previo a la cirugía, dentro de una valoración preoperatoria completa.

El Doppler-color es la prueba diagnóstica de elección porque permite visualizar la vascularización testicular. En la torsión, el flujo está disminuido o ausente. También se puede solicitar gammagrafía isotópica con Tecnecio 99.

Ante cualquier duda será necesario la cirugía exploratoria para obtener el diagnóstico si los resultados de las anteriores valoraciones no han sido concluyentes.

TRATAMIENTO

La detorsión manual del testículo se realiza sin anestesia rotándolo hacia el exterior a menos que el dolor aumente o haya resistencia evidente. En ese caso la rotación se haría en sentido contrario. El éxito se define como el alivio inmediato de todos los síntomas y hallazgos normales en el examen físico. La ecografía Doppler puede utilizarse como prueba de control. El tratamiento definitivo es quirúrgico realizando orquidopexia bilateral.

COMPLICACIONES

Si se interrumpe el suministro sanguíneo hacia el testículo por un período de tiempo prolongado, éste puede atrofiarse (contraerse) y necesita extirparse quirúrgicamente. La atrofia del testículo puede ocurrir días o meses después de haberse corregido la torsión. La infección