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Torticolis Paroxística Benigna. A propósito de un caso. Diagnóstico diferencial de la Torticolis en la Infancia

Torticolis Paroxística Benigna. A propósito de un caso. Diagnóstico diferencial de la Torticolis en la Infancia

Resumen: La palabra torticolis proviene del latín, compuesto por “Torus” que significa retorcido y la palabra “collum” que significa “cuello”. Tortícolis se refiere a la torsión lateral del cuello que hace que la cabeza se incline a un lado, con el mentón girado hacia el lado opuesto. Es una queja común en los niños y puede ser congénita o adquirida. Generalmente en las causas se distingue en dos grandes grupos, como son las congénitas y las adquiridas, la diferencia clínica entre ambas es la asimetría facial que está más frecuente en la primera, además que la congénita es más común que la adquirida.

Autores: Ángel José Albarracín Contreras (Médico residente en Medicina de Familia y Comunitaria). Elena Pérez Gil (Especialista en Pediatría). Isabel Abascal Sañudo (Residente en Medicina de Familia y Comunitaria) Aranzazu Aleixandre Catalá (Especialista en medicina de familia y comunitaria). Zojaina Rafaela Hernández Rojas (Residente en Medicina de Familia y comunitaria).

La particularidad de este caso radica en el hecho de que haciendo una buena exploración física y pruebas complementaria poco invasivas y muy rentables se puede hacer una diagnóstico diferencial desde Atención Primaria, ya que en este caso la clínica del paciente era muy típica de Torticolis Paroxística Benigna. Aun así es importantes descartar otras posibles causas cuya gravedad amerita de un diagnostico precoz.

Caso clínico: Lactante de 9 meses, sin patologías. Embarazo, parto y periodo neonatal normales. Con desarrollo psicomotor acorde a su edad. Que desde los 6 meses presenta episodios de inclinación de la cabeza a la izquierda, y rotación del mentón hacia el lado contralateral (ver imagen nº1), postura que se prolonga  durante horas o días, aunque permitiendo movilidad normal del cuello y normalización de la postura cuando gira voluntariamente la cabeza.

No tiene simultáneamente nistagmo, ni signos vegetativos (Palidez y vómitos). Apetito y sueño normales. Exploración física: buen estado general, afebril, sin signos de afectación piramidal, extrapiramidal, ni cerebelosa. ORL normal. Desviación de la cabeza a la izquierda, pero sin diferencias de tono muscular de ambos esternocleidomastoideos. Tórax y abdomen normales. Neurológico: Desarrollo psicomotor normal, con bipedestación firme y paso con ayuda bilateral, balbuceo frecuente, inicia silabeo. Comprensión adecuada. Pruebas complementarias: Se realiza radiografía transoral y cervical: normales. Ecografía transfontanelar: Sin hallazgos de significación patológica.

Discusión: En el manejo de la tortícolis infantil, la historia clínica y exploración física para plantear el abanico de posibles diagnósticos diferenciales, desde los más frecuentes, hasta aquellos que necesita de pruebas de imágenes específicas para su diagnóstico. El tortícolis muscular congénito es la causa más común de tortícolis en niños, su diagnóstico es netamente clínico: presentando masa o rigidez en la porción inferior del musculo esternocleidomastoideo (ECM), manifestación generalmente evidente entre los 2 y 4 semanas de edad, con reducción de la amplitud de movimiento cervical tanto para la rotación como para la flexión lateral, por lo que solo se pide pruebas de imágenes cuando se tenga dudas 1.

Luego vienen las causas traumáticas la más común la subluxación atloaxoidea, causas infecciosas (infecciones de vías  respiratorias altas y sus complicaciones como los abscesos retrofaríngeos), tumorales con los de fosa posterior, causas neurológicas y oculares.

Debido a las características clínicas de la lactante con episodios recurrentes de tortícolis auto-limitadas que suelen presentarse en los primeros meses de vida, y la ausencia de síntomas de clínica infecciosa o traumática nos orienta en pensar en la Tortícolis Paroxística benigna 1, cuya patogénesis no sea determinado, de vez en cuando se confunde con la tortícolis congénita, a diferencia de esta la torticolis benigna puede acompañarse de síntomas de vómitos, palidez, irritabilidad, ataxia o somnolencia, que puede simular convulsiones o tumores de fosa posterior, que sería indicación de un electroencefalograma o prueba de neuroimagen.

En el caso de la paciente aunque no presentaba estos síntomas asociados, se realizó un estudio de neuroimagen de fácil acceso y de mucha rentabilidad, debido a que la paciente aún tenía apertura de la fontanela, por lo que se hizo ecografía cerebral, además de radiografías cervicales y transoral. Lo característico a la evolución benigna y autolimitada de esta patología no amerita tratamiento 1, por lo que la paciente goza de buena salud a pesar de dichos episodios recurrentes que le limitan

Imagen nº1: Paciente vista en la consulta en uno de los episodios de torticolis.
Imagen nº1: Paciente vista en la consulta en uno de los episodios de torticolis.


Bibliografía:

G Macias, MD, MPH.Vanthaya Gan, MD. Acquired torticollis in children. Patient selection, evaluation, implantation, and complications. In: UpToDate, Post TW (Ed), UpToDate, Waltham, MA. (Accessed on July, 2017).