desarrollan su actividad, debido a que:
Es la fuente de la carga músculo-esquelética. Sea cual sea la posición de adoptemos, los músculos ejercen fuerzas para equilibrar nuestra postura y controlar los movimientos. Incluso en una postura relajada, cuando el trabajo muscular tiende a cero, los tendones y las articulaciones pueden mostrar signos de fatiga. Está en estrecha relación con el equilibrio y la estabilidad. (6)
Diariamente durante la realización de las actividades por parte del personal de salud adopta posiciones inadecuadas que al final de la jornada laboral comienza con molestias físicas agudas, destacando que luego se dirigen a sus hogares y realizan actividades continuas que intensifican los síntomas.
Se define la mecánica corporal como el uso coordinado y eficaz de las diferentes partes del cuerpo con el fin de lograr el movimiento y mantener el equilibrio y se prevengan posibles lesiones para la persona (6).
Es decir que al realizar movimientos físico y anatómicos adecuados se disminuiría la energía y se mantendría un equilibrio corporal siendo una técnica esencial beneficiosa tanto para el personal de salud como para los usuarios. Esta disciplina tiene gran importancia porque ha perdido la capacidad de hacer las cosas correctamente por el instinto, se debe aprender a utilizar las fuerzas efectivamente.
Algunas posturas son, por naturaleza, inestables (por ejemplo, cuando intentamos alcanzar un objeto distante) y esto, unido a que no siempre puede garantizarse la estabilidad del entorno, puede llevarnos a la pérdida del equilibrio. Esta es una causa muy habitual en los accidentes de trabajo. (6)
En tal sentido, permite inferir que al realizar las actividades se debe tener en cuenta que la formación del personal de salud para evitar tales alteraciones músculo – esqueléticas debe comenzar por los niveles altos de gerencia, dirección médica.
Algunas de ellas son las posiciones: fijas o restringidas, sobrecargan los músculos y los tendones, recargan las articulaciones de una manera asimétrica, carga estática en la musculatura. Ejemplo; posturas forzadas como mantener el tronco flexionado y girado, inclinar el tronco, elevar uno o ambos brazos por encima de los hombros, giros forzados de muñeca y realizar fuerza con las manos y brazos.
En otro orden de ideas, se entiende por movimientos repetidos a un grupo de movimientos continuos, mantenidos durante un trabajo que implica al mismo conjunto osteomuscular provocando en el mismo fatiga muscular, sobrecarga, dolor y por último lesión.(6)
El trabajo repetido de miembro superior se define como la realización continuada de ciclos de trabajo similares; cada ciclo de trabajo se parece al siguiente en la secuencia temporal, en el patrón de fuerzas y en las características espaciales del movimiento. (6)
En concordancia de lo anterior, la realización cicló de los mismos movimientos miles de veces que obliga a realizar trabajo repetitivo significa también poca variedad de las actividades, escasas oportunidades de aprendizaje, pocas cosas a decidir, monotonía y aburrimiento por quienes lo realizan.
Este protocolo trata de vigilar el riesgo de lesión musculoesqueléticas como consecuencia de tareas repetidas, en la zona de cuello-hombro y en la zona de la mano-muñeca fundamentalmente.
Entre las Fuentes de exposición las tareas de trabajo con movimientos repetidos son comunes en trabajos en cadenas y talleres de reparación así como en casi todas las industrias, sin escapar de esta los centros de salud, pudiendo dar lugar a lesiones musculoesqueléticas. Estando reconocida como causa importante de enfermedad y lesiones de origen laboral. Mediado por el Mecanismo de acción la carga de trabajo tanto estático como dinámico, junto con factores psíquicos y orgánicos del propio trabajador además de un entorno desagradable y no gratificante se suman en la formación de la fatiga muscular. Conforme la fatiga se hace más crónica aparecen las contracturas, el dolor y la lesión. Formándose un círculo vicioso de dolor. (7)
Las anomalías en la calidad del líquido sinovial. Factores desencadenantes como las organizacionales: Poca autonomía, supervisión, la carga del trabajo, la manipulación manual de cargas y el ciclo de la tarea. Los traumatológicos: En las lesiones asociadas a los trabajos repetidos además de la repetitividad, existe un conjunto de factores que interactúan con la repetitividad y con la duración de los ciclos de trabajo, aumentando el riesgo de lesión y de fatiga. Por ejemplo, la fuerza y la repetitividad interactúan de tal manera, que las fuerzas elevadas y la repetitividad alta aumentan el riesgo de manera multiplicativa. Tanto los datos epidemiológicos como los experimentales indican que las posturas extremas aumentan el riesgo de lesiones. Igualmente las velocidades altas de los movimientos y la duración de la exposición, en minutos por día, y en el número de años, influye en el riesgo de lesiones en los trabajos repetidos. (7)
Los trabajos de investigación enfocados en el estudio de lesiones por movimientos repetidos han puesto de manifiesto la existencia de factores que intervienen en la aparición de las lesiones musculoesqueléticas que abarca diversos niveles corporales, como: efecto biomecánico: los movimientos de pronosupinación en antebrazo y/o muñeca, especialmente si son realizados contra resistencia, las repetidas extensiones y flexiones de muñecas, las desviaciones radiales o cubitales repetidas y la existencia de movimientos repetidos contra resistencia. Entre los Factores predisponentes: las mujeres en época menstrual y embarazo, las anomalías anatómicas como semilunar más grande. (7)
En tal sentido, en el área de la salud el personal realiza movimientos continuos de las manos, con ciclos continuos de las actividades sin descanso entre ellos con posturas forzadas de la misma, siendo uno de los factores de riesgo más relevantes en dicha área.
Otro de los factores que interviene es el tiempo de recuperación insuficiente, que es el periodo de descanso siguiente a un periodo de actividad con movimientos repetitivos de las extremidades superiores, permitiendo la recuperación fisiológica. Se considera como tiempo de recuperación las pausas descanso así como otras tareas que representen una inactividad substancial de la extremidad superior, como las tareas de control visual. Es recomendable realizar 10 minutos de recuperación cada 50 minutos de trabajo repetitivo. (7)
Cabe resaltar que en el ámbito laboral dentro de los centros de salud, el personal atiende una cantidad de usuarios que no le permite el descanso adecuado entre cada procedimiento, debido que en algunas situaciones son de emergencias.
Finalmente como consecuencia