del fluido gingival y otras manifestaciones clínicas (27).
El interés por las alteraciones gingivales se basa no tanto en su gravedad, sino en su enorme prevalencia en la población. Puede detectarse en el 54% de los individuos entre 19 y 44 años.
Acerca del papel de las bacterias y del huésped en la gingivitis, se ha llegado a la conclusión de que todo el proceso tiene lugar como consecuencia del intento del huésped de defenderse de la amenaza que suponen las bacterias de la placa. Cronológicamente, lo primero que ocurre es que una inadecuada técnica de higiene oral permite la acumulación de placa sobre el surco gingival, ante lo cual el huésped va a responder con una capacidad mayor o menor, lo que le generará un cuadro de gingivitis más o menos llamativo (26).
La inflamación en las encías está directamente relacionada con la higiene bucal deficiente y el hábito de fumar (27).
La relación causa-efecto entre la acumulación de placa a nivel gingival y la aparición de inflamación gingival fue demostrada por el clásico estudio de Löe en el que los individuos que permitían la acumulación indiscriminada de placa en ausencia de higiene oral desarrollaban una inflamación en sus encías que remitía completamente al poco tiempo después de que la placa fuera removida (28).
Por otro lado, el tabaquismo constituye uno de los factores de riesgo que se asocia más frecuentemente con el desarrollo de periodontopatías inflamatorias e influye de un modo relevante en el curso y pronóstico de la enfermedad periodontal. Los fumadores, y en especial los que fuman grandes cantidades de cigarrillos, tienen la tendencia de padecer enfermedad periodontal por el efecto local de los productos derivados de la combustión, y el efecto general por los productos tóxicos del tabaco sobre el organismo (29).
La gingivitis se puede prevenir mediante buenas prácticas de higiene oral, incluyendo el cepillado dental, el uso del hilo dental (30), y siguiendo los consejos de la ADA mencionados en el apartado anterior (5).
Para estudiar los conocimientos que los individuos presentan sobre la inflamación gingival se han realizado preguntas que hacen referencia a los problemas de las encías como enfermedad, con afirmaciones tales como: “Los problemas de la encía no son una enfermedad”, con opciones de respuesta “Sí”, “No”, “Ni idea” (9); otros preguntan directamente “¿Qué es la gingivitis?” (31).
Hay autores que indagan sobre el conocimiento de uno de los signos principales de la gingivitis, “el sangrado gingival”, con afirmaciones tales como: “El sangrado de las encías es un signo de enfermedad de las encías” (9); “Sangrado de las encías significa encías inflamadas” (14); “Cuando las encías sangran el cepillado dental debe ser detenido”, con opciones de respuestas “Si”, “No”, “Ni idea” (9, 32); otros preguntan “¿Qué indican las encías sangrantes?” con respuestas alternativas incluyendo la respuesta correcta (33) o “¿Es normal el sangrado gingival?» y las respuestas posibles “Sí”-“No”- “No sabe” (31).
Con respecto a los factores etiológicos hay autores que hacen referencia a la placa dental como principal causa de gingivitis (9, 12, 15, 34); a la falta de higiene bucal (17); a las bacterias; a la malnutrición (12); al consumo de tabaco como factor de riesgo para la periodontitis (17) o como agente perjudicial para los dientes y la boca (11, 18, 19, 23).
En relación a los factores que pueden influir en la prevención de la gingivitis se han planteado opciones de respuestas tales como: “Beber té de hierbas”; “Mejorar el cepillado de los dientes”; “Enjuagarse después de comer”; “Usar pasta de dientes con medicamentos”; “Visitar al dentista”; “Comer frutas y alimentos nutritivos”; “Otros”; “No sabe” (12).
Varios trabajos coinciden al preguntar por el cepillado dental como método preventivo (12, 15, 33), con cuestiones tales como por ejemplo: “¿Sabe Usted si el cepillado dental ayuda en la prevención de enfermedades de las encías?” (22) o en forma de declaraciones: “Cepillarse los dientes hace que las encías estén sanas” (18, 19); “Cepillarse los dientes previene el sangrado de las encías” (13, 23); “Creo que el cepillado y el uso del hilo dental al menos una vez al día es necesario para evitar tener caries, enfermedad de las encías o perdida de dientes” (35).
Otras cuestiones referidas a los métodos para prevenir la inflamación de las encías hacen referencia al uso del hilo dental (15, 22, 33); a la consulta odontológica (11, 13, 19) y a la gingivitis como causa de la perdida dental (31).
· HIGIENE BUCODENTAL
Además de haberse realizado preguntas referentes al conocimiento de la higiene bucal como método para prevenir la caries dental y la gingivitis tratadas en los apartados anteriores sobre conocimientos de dichas patologías; se plantearon otras cuestiones de conocimiento sobre higiene bucal como ser: “¿Cuándo debe comenzar el cepillado dental?”, “¿Cuándo debe comenzar la utilización del hilo dental?”,“¿Cuánto tiempo debe durar el cepillado dental?”,“¿Cuándo debe ser cambiado el cepillo de dientes? (11); “¿El cepillo de dientes se debe cambiar a intervalos?” (9); “¿Con qué frecuencia se debe utilizar el hilo dental?” (17); “¿Sabe cómo mantener sus dientes limpios?” (22). En tal sentido, en un trabajo se pidió a los participantes que calificaran la importancia de la utilización del hilo dental y la importancia de mantener los dientes y las encías limpios con opciones de respuestas que varían desde extremadamente importante a nada importante (24).