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Violencia y maltrato al adulto mayor

fue un estudio descriptivo, de naturaleza cualitativa, de corte transversal.

Objetivo: Describir el maltrato que han sentido un grupo de sujetos de la tercera edad y el conocimiento qué tienen acerca del maltrato en la vejez.

Universo: Nuestro universo estuvo compuesto por 60 personas de la tercera edad que asisten regularmente a tres consultorios del médico de la familia pertenecientes al Policlínico Grimau del municipio Arroyo Naranjo.

Muestra: Estuvo constituida por 48 personas con más de 60 años, de ambos sexos.

Criterios de inclusión: Asistir regularmente a los consultorios del médico de la familia, no presentar deterioro cognitivo, no presentar patologías mentales crónicas y estar en disposición de participar en nuestra investigación.

Criterios de exclusión: Sujetos que carezcan de las condiciones psíquicas necesarias para la comprensión de las tareas evaluativas, con patologías mentales crónicas, que durante la investigación deseen ser excluidos a pesar del consentimiento informado.

Definición conceptual de variables:

Violencia: Para la Real Academia de la lengua española, la violencia es, por “una parte, una acción impetuosa o efecto de violentarse. Impetuosa por hacerse con repugnancia, furia o ira. Es la aplicación de medios violentos a cosas o personas para vencer su resistencia y/o producir un daño”. (Diccionario, 2000).

Maltrato: “Toda acción, intencionada o no que produzca daño desde el punto de vista biológico, psicológico, social, financiero, material y las conductas negligentes, ya sean de forma transitoria o permanente” (Karachi, Perel, 2002).

Maltrato sentido: Toda aquella forma de maltrato, expresada en cualquiera de sus modalidades, que llega a ser sentida por la víctima y referida luego de manera consciente.

Maltrato físico: Es el uso de la fuerza física que puede producir una injuria.

Maltrato social: Es la indiferencia, falta de respeto o no apoyo de la sociedad hacia los adultos mayores.

Maltrato familiar: Cuando el anciano es excluido de las decisiones familiares, no siendo considerada su opinión o sugerencia.

Maltrato financiero Cuando los recursos financieros del anciano no son manejados por estos y/o empleados sin su consentimiento.

Negligencia: Toda acción de descuido intencional o por desconocimiento, que pueda provocar pérdida de peso, deshidratación, falta de higiene, visión o audición deficiente sin corrección, agudización de patologías crónicas por retiro de medicamentos necesarios sin consulta previa que provoque dolor físico, exceso de medicamentos indicados por facultativos que conllevan riesgo para el anciano.

Victimario Persona que infringe maltrato a un anciano.

Análisis de los resultados:

De los encuestados correspondieron al sexo femenino el 58.3% y al masculino el 41.7%. El grupo etario mayormente representado es de 70 a 79 años, esto se puede corroborar en la Tabla 1.

Referente al estado civil, encontramos el mayor porcentaje en los casados con un 43.7%, de los cuales el 55% son hombres y el 35.8% son mujeres. Luego el estado de viudez, especialmente en la mujer con un 46.4%. En la tabla 2, se evidencia la prevalencia del estado civil viudo, en la mujer

En la Tabla 3, se puede intuir que la convivencia con la familia en los gerontes es la más frecuente, representada en un 66.7% de la muestra. El sexo femenino predomina en un 67.8% y la convivencia con familiares en los hombres alcanza un 65%.

En la Tabla 4, se observa la distribución de adultos mayores según nivel educacional alcanzado y ocupación actual, las cifras más altas corresponden a la enseñanza secundaria con un 37.5% y la media superior con un 41.7%. El nivel de enseñanza primaria está representada en un 14.6% y la enseñanza superior en un 6.3%, de los cuales el 79.2% corresponde a la condición de jubilados. El 44.4% de las amas de casa alcanzaron el nivel secundario y el 33.3% solo el nivel primario. En la muestra estudiada no existen personas activas laboralmente, ya que los sujetos de estudio se han jubilado.

Los tipos de maltrato mayormente referidos por los sujetos de estudio fueron el psicológico y el social representados con un 64,5%, seguidos por el maltrato familiar, acumulando un resultado de un 39,6%. Esto se evidencia en la tabla 5.

La negligencia representó un 31, 2% seguido por el maltrato físico el cual quedó representado en un 22, 9% de la muestra, resultó de menor cuantía el financiero con un porcentaje de 12,5%.

En la tabla número 6 se puede apreciar como los victimarios están en correspondencia con el tipo de maltrato que han sentido los sujetos estudiados. El maltrato psicológico mayormente representado es por otros, con un 41,9%. Referente a familiares y amigos, los sujetos estudiados coincidieron en un 29,0%.

El maltrato físico arroja resultados de un 54,6% en cuanto a familia, el 27,3% de la muestra manifestó esta modalidad de maltrato por parte de otros y el 18,2% declaró haber sido maltratados por amigos.

En cuanto a negligencia, la familia como victimario está representado en un 73,3%, los amigos alcanzó un 26,7%. Como podemos observar gran parte del maltrato proviene de la familia.

Lo expuesto anteriormente se pudo corroborar con el análisis de la entrevista. Se obtuvieron algunas respuestas las que se agruparon teniendo en cuenta factores comunes en las mismas, aunque para los entrevistados variaran el orden de mención: agresividad, violencia (traducida en golpes), e insultos (mencionados además como agresión verbal acompañada de amenazas), asociadas también como hecho de importancia a: falta de respeto, indiferencia, desprecio.

En cuanto a la pregunta ¿Qué conoce del maltrato en la vejez? No hubo respuestas ejemplificadoras de su opinión ya que su mayoría repetían los conceptos (golpes, insultos, falta de respeto).

Al preguntar la actitud tomada cuando se sintieron o fueron víctimas de maltrato, respondieron que nada en un 100%, aceptando o resignándose por temor, dolor o incapacidad de recurrir a extraños y pasar por experiencias de tipo legal.

La actitud de los entrevistados frente a los hechos narrados es cien por cien pasiva, no hacen nada frente al conocimiento de estas formas, reconocidas por ellos mismos, de maltrato.

En relación con el maltrato financiero