Inicio > Enfermería > Análisis de las ventajas y desventajas del pinzamiento tardío del cordón umbilical en el neonato

Análisis de las ventajas y desventajas del pinzamiento tardío del cordón umbilical en el neonato

Análisis de las ventajas y desventajas del pinzamiento tardío del cordón umbilical en el neonato

El alumbramiento o tercera fase en el proceso del parto comienza desde la salida del neonato hasta la expulsión de la placenta y sus anejos. Ésta es la fase en la que se realiza el pinzamiento del cordón umbilical, que une al feto y la placenta.

– Alba Domínguez Romero (Especialista en Enfermería Pediátrica, Graduada en Enfermería, Universidad de Zaragoza)

-Eva Ciprés Añaños (Graduada en Enfermería, Universidad de Zaragoza)

– Lucía Largo Sola (Graduada en Enfermería, Universidad de Zaragoza)

– Cristina Villar Yus (Graduada en Enfermería, Universidad de Zaragoza)

– Jana Plou González (Graduada en Enfermería, Universidad de Zaragoza)

Hospital Universitario Miguel Servet

Palabras clave:

Cordón umbilical, ligadura, recién nacido, madre,

Breve resumen:

Hoy en día sigue sin haber un acuerdo sobre cuál es el momento óptimo del clampaje, pues hacerlo tempranamente o de forma más tardía puede tener consecuencias a nivel de hiperbilirrubinemia patológica, transfusiones sanguíneas y anemias férricas, considerando al recién nacido como recién nacido a término saludable.

El objetivo principal de esta revisión es determinar los efectos del pinzamiento precoz del cordón umbilical comparado con el pinzamiento tardía del cordón umbilical después del parto sobre los efectos en madres y neonatos.

Se ha realizado una búsqueda sistemática correspondiente a los últimos diez años tanto en lengua castellana como inglesa mediante diferentes buscadores y bases de datos y en libros y revistas especializados en las bibliotecas locales, encontrando un total de 20 documentos válidos.

Todavía no existen estudios suficientes respecto al tema pero se puede afirmar que parece justificado que retrasar el clampaje del cordón umbilical en los neonatos nacidos a término saludables, ya que aumenta las concentraciones tempranas de hemoglobina, eleva el peso al nacer y aumenta las reservas de hierro hasta el primer semestre de vida. En contraposición, se observa un riesgo de ictericia por lo que habría que tratar con fototerapia. El pinzamiento tardío del cordón parece tener efectos saludables siempre que esté disponible el tratamiento con fototerapia para la ictericia.

ABSTRACT

The delivery or third phase in the birth process begins from the departure of the newborn until the expulsion of the placenta and its annexes. This is the phase in which the clamping of the umbilical cord, which links the fetus and the placenta, is performed. Today there is still no agreement on what is the optimal time for clamping, because doing it early or later may have consequences at the level of pathological hyperbilirubinemia, blood transfusions anemias, considering the newborn as a healthy newborn .

The main objective of this review is to determine the effects of early clamping of the umbilical cord compared with the late clamping of the umbilical cord after delivery on the effects in mothers and neonates.

A systematic search has been carried out corresponding to the last ten years in both Spanish and English through different search engines and databases and in books and specialized journals in local libraries, finding a total of 20 valid documents.

There are still not enough studies on the subject but it can be said that it seems justified to delay the clamping of the umbilical cord in healthy infants born at term, since it increases the early concentrations of hemoglobin, raises birth weight and increases iron reserves until the first semester of life. In contrast, there is a risk of jaundice, which should be treated with phototherapy. Late clamping of the cord seems to have healthy effects whenever phototherapy treatment for jaundice is available.

ANÁLISIS DE LAS VENTAJAS Y DESVENTAJAS DEL PINZAMIENTO TARDÍO DEL CORDÓN UMBILICAL EN EL NEONATO

1- INTRODUCCIÓN

Durante el trabajo de parto se diferencian tres fases: primera fase o fase de dilatación, segunda fase o fase de expulsivo y tercera fase o fase de alumbramiento. Este artículo se centra en la fase del alumbramiento que es la que transcurre desde el nacimiento hasta la expulsión de la placenta y anejos ovulares. Su duración se considera prolongada si termina por completarse pasados los 30 minutos tras el expulsivo con manejo activo (empleo de fármacos tras la salida del hombro anterior) y 60 minutos con el alumbramiento espontáneo.

En el cordón umbilical se encuentran tres vasos sanguíneos importantes: dos arterias y una vena. Las arterias umbilicales se encargan de llevar los desechos del feto hacia la placenta y la vena de transportar el oxígeno y nutrientes al feto desde la placenta. A su vez, estos vasos están rodeados de una sustancia especial de textura gelatinosa conocida como la Gelatina de Wharton, que es la que una la placenta con el ombligo del feto. El cordón mide alrededor de unos cincuenta centímetros y en él es donde se produce el intercambio de nutrientes con oxígeno y dióxido de carbono con la madre. Este cordón se constituye en la cuarta semana gestacional.

En la mayoría de las ocasiones el pinzamiento del cordón umbilical se realiza de forma mecánica y se puede decir que casi inmediata tras el nacimiento, sin objetar en las complicaciones que puede conllevar el hacerlo tan temprano.

Nada más nacer, el bebé sigue unido a la madre por el cordón umbilical, que forma parte de la placenta. Para separar al bebé de la madre es necesario pinzar el cordón. Este proceso forma parte de la tercera fase del parto: fase del alumbramiento. Este momento puede tener variaciones en la práctica clínica según la política del centro.

Por lo general, se considera pinzamiento precoz del cordón umbilical aquel que ocurre antes del primer minuto tras el parto, mientras que se conoce como pinzamiento tardío el que se realiza tras los primeros sesenta segundos de vida del bebé o cuando hayan terminado las pulsaciones del cordón.

Parece estar justificado un enfoque más liberal en la demora del pinzamiento del cordón en los recién nacidos a término saludables, concretamente, teniendo en cuenta las pruebas crecientes de que el pinzamiento tardío aumenta las concentraciones tempranas de hemoglobina y las reservas de hierro, lo que resulta beneficioso para el bebé, considerando imprescindible la disponibilidad de la fototerapia para aquellos fetos que necesiten tratarse la ictericia.

2- OBJETIVOS

Objetivo general

  • Realizar una revisión bibliográfica para establecer los efectos del pinzamiento tardío del cordón umbilical comparado con el pinzamiento precoz del cordón umbilical después del parto en madres y neonatos.

Objetivos específicos

  • Revisar la evidencia científica existente en cuanto a los beneficios e inconvenientes de ambos tipos de ligaduras.
  • Analizar la evolución en el tiempo de espera del pinzamiento del cordón umbilical a lo largo de la historia y según diferentes recomendaciones.
  • Comprobar la existencia de diferencias en los niveles de bilirrubina, hierro hematocrito y hemoglobina en neonatos, distinguiendo aquellos a los que se les realizó ligadura precoz de los que se realizó pinzamiento tardío.

3- METODOLOGÍA

Tipo de estudio

En el presente trabajo se ha realizado una búsqueda profunda y sistemática de información. La metodología se ha desarrollado basándose en una investigación estructurada en buscadores y bases de datos y en libros y revistas especializados en Pediatría, Neonatología y Materno-Infantil sintetizando los resultados con el fin de obtener un conocimiento contrastado sobre el tema.

Búsqueda bibliográfica

La búsqueda se centra en encontrar artículos, guías de práctica clínica y libros especializados en el tema con el fin de comparar su contenido para lograr la mayor evidencia científica. El periodo de búsqueda de información comprende desde abril hasta julio de 2018. En total se han seleccionado 20 documentos válidos a través de los siguientes buscadores y bases de datos y revistas especializadas:

  • Bases de datos y buscadores utilizados: Dialnet, PubMed, UpToDate, ScienceDirect, CSIC, CUIDEN, Embase, MEDES, BMJ Open y Cochrane.
  • Revistas especializadas utilizadas: Matronas Profesión, Metas Enfermería, Rol de Enfermería, Pediatría de Atención Primaria (PAP), Evidencias en Pediatría, Anales de Pediatría, Anales de Pediatría Continuada Pediatría Integral.

Las palabras clave empleadas en la búsqueda fueron: cordón umbilical, ligadura, recién nacido, madre. Los operadores booleanos que se han utilizado son: OR y AND. La búsqueda se ha limitado a un periodo de 13 años, que comprenden del año 2005 al año 2018. Se excluyeron artículos anteriores al 2005, sin estar a texto completo. Se incluyeron solo aquellos artículos en texto completo, relacionados con países de Europa y en idioma castellano e inglés. Una vez seleccionada toda la información necesaria, se procede a dividir la información según el contenido de cada artículo, para así poder compararlos y obtener las conclusiones.

4- DESARROLLO

Se han realizado muchos estudios, discusiones y debates pero no existe todavía un convenio sobre el mejor momento del clampaje el cordón umbilical tras el parto. Así mismo, tampoco hay un acuerdo en los posibles beneficios o daños para el recién nacido como consecuencia del pinzamiento tardío o temprano. Los textos clásicos de obstetricia y sociedades científicas son prueba de ello. (1,2)

El pinzamiento del cordón es una técnica que se realiza en la tercera etapa del proceso del parto; interrumpe la circulación de sangre, oxígeno y nutrientes, entre el feto y la placenta. La placenta a lo largo del embarazo se encarga de suministrar todos los nutrientes al feto para su desarrollo. Al nacer, la placenta todavía sigue transfundiendo sangre al bebé, por lo que el momento de pinzar el cordón tendrá consecuencias en el volumen de sangre del bebé. (3-6)

Si la ligadura del cordón tarda en realizarse, una parte de la sangre de la placenta llega al bebé (transfusión placentaria) lo que supone un aumento en el volumen de sangre del bebé y en el flujo a los principales órganos, como los pulmones. (6-9)

Tras la revisión de diversos estudios, se ha considerado durante mucho tiempo que el pinzamiento temprano del cordón umbilical reduce el riesgo de hemorragia tras el parto, pero estudios aleatorios posteriores en mujeres y recién nacidos no han mostrado diferencias en las tasas de hemorragia postparto entre aquellos a los que se les practicó de forma temprana frene a aquellos que se hizo tardía (entre el primer y tercer minuto de vida). Por otra parte, la mayoría de los estudios reflejaban mejorías visibles del pinzamiento tardío en recién nacidos a término nacidos sanos como mayor peso al nacer y aumento de la concentración de hemoglobina y de las reservas de hierro en el primer semestre de vida. Como desventaja principal se encuentra el aumento del riesgo de sufrir ictericia, que se solventaría con la disponibilidad de la fototerapia. (10-14)

Si se consigue retrasar el pinzamiento del cordón, el volumen sanguíneo fetal puede verse incrementado en hasta un 50%, lo que supone incrementar las reservas férricas disminuyendo la probabilidad de sufrir anemia por déficit de hierro en los primeros seis meses de vida. Sin embargo, el pinzamiento tardío también supone provocar una policitemia sintomática con acentuación de la viscosidad sanguínea y aumento de la bilirrubinemia, relacionada o no con ictericia clínica. La mayoría de los estudios refieren resultados similares respecto a las ventajas y contraposiciones de practicar el pinzamiento tardío. Algunos artículos señalan la efectuación tardía como factor de riesgo para la aparición de niveles patológicos de bilirrubina que precisan tratamiento con fototerapia. Por otro lado, otros estudios no muestran diferencias estadísticamente significativas en los niveles de bilirrubina en la práctica del pinzamiento tardío, lo que no se consideraría como hiperbilirrubinemia ni precisarían de fototerapia. (15-17)