Pregunta Científica
¿Cómo se caracterizara el adulto mayor discapacitado del sector Sarria Parroquia La Candelaria en el periodo de abril del 2008 a abril del 2009?
JUSTIFICACIÓN DEL PROBLEMA
Dada la importancia de mantener las relaciones sociales en estas etapas de la vida, así como el apoyo y el aporte del adulto mayor en el ámbito familiar, conocer la Participación y Aceptación Socio-familiar de nuestros adultos mayores y en especial en aquellos que viven con algún grado de discapacidad, mediante el empleo de la Clasificación Internacional del Funcionamiento de la Discapacidad y la Salud, ha sido el principal incentivo para la realización de este trabajo.
Novedad Científica
Como parte de una estrategia global para mejorar la implementación de servicios de salud y de establecer programas para la ejecución de proyectos que mejoren la atención médica, hoy día se diseñan por muchos sistemas de salud estudios exploratorios como este, los cuales aportan información acerca de la situación del problema y sus características, antes de llevar a cabo intervenciones que pudieran resultar erróneas en caso de no prever a quiénes y de qué modo sería la mejor forma de ofrecer determinados servicios. No se recogen antecedentes de estudios similares en la población atendida, siendo ésta la primera investigación que aborda esta temática.
Aporte Práctico
Este tipo de estudio no solo es útil, previo a desarrollar acciones de intervención, sino para evaluar cuánto se ha hecho, o cuán distantes estamos aún de alcanzar una meta loable en determinado problema de salud.
El presente trabajo permitió describir las características de un fenómeno de salud no reconocido como un problema sanitario en el entorno venezolano y brindó elementos científicos para futuras acciones de promoción y prevención.
MARCO TEÓRICO
Con el objetivo de aunar los criterios en el intento por definir mundialmente el concepto de discapacidad y basado en trabajos iniciados en 1972 a partir de la Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE), la Organización Mundial de la Salud presentó la “International Clasificación of Impairments, Disabilities and Handicaps. A Manual of Clasificación Relation to the Consequences of Diseases”; publicada por el Instituto de Migraciones y Servicios Sociales (IMSERSO) de España en 1983, que se conoce con el nombre de Clasificación Internacional de Deficiencias, Discapacidades y Minusvalías (CIDDM). Esta clasificación establece una agrupación diferenciada de los distintos niveles de manifestación de las deficiencias y clasifica las diversas categorías médicas al uso. (23)
La Clasificación Internacional del Funcionamiento de la Discapacidad y la Salud (CIF) organiza la información en dos partes: La primera parte versa sobre Funcionamiento y Discapacidad y la segunda parte sobre factores contextuales. Cada una de estas partes consta a su vez de dos componentes: (24)
Componente de Funcionamiento y Discapacidad, con sus dos clasificaciones (Funciones y estructuras corporales y Actividades y participación)
Componente de Factores Contextuales (Factores Ambientales y Factores Personales).
En el contexto de la Salud la Clasificación Internacional del Funcionamiento de la Discapacidad y la Salud (CIF) define:
• Funciones corporales: son las funciones fisiológicas de los sistemas corporales (incluyendo las funciones psicológicas).
• Estructuras corporales: son las partes anatómicas del cuerpo, tales como los órganos, las extremidades y sus componentes.
• Deficiencias: son los problemas en las funciones o estructuras corporales, tales como una desviación o una pérdida.
• Actividad: es el desempeño/realización de una tarea o acción por parte de un individuo. La capacidad potencial de la persona en la ejecución de una tarea en un entorno facilitador o uniforme.
• Limitaciones en la Actividad: son dificultades que un individuo puede tener en el desempeño/realización de actividades.
• Participación: es el acto de involucrarse en una situación vital. Representa la perspectiva social del funcionamiento. Permite describir lo que los individuos hacen en su ambiente/entorno real.
• Restricciones en la Participación: son problemas que el individuo puede experimentar al involucrarse en situaciones vitales.
• Factores Ambientales: constituyen el ambiente físico, social y actitud en el que una persona vive y conduce su vida.
El proceso de transición demográfica trae consigo cambios en el comportamiento epidemiológico relacionados con una mayor eficiencia en el control de las enfermedades infecto-contagiosas, lo que ha conllevado a un incremento en la prevalencia de enfermedades crónicas más duraderas y discapacitantes, que representan las primeras causas de muerte en los países desarrollados y en Venezuela. (34)
También han influido en el cambio del patrón epidemiológico (conocido como transición epidemiológica) variaciones en los hábitos y estilos de vida de las poblaciones y por ende en diferentes factores de riesgo, que unidos al hecho de que las personas viven más tiempo contribuyen a elevar el porcentaje de entidades como la diabetes mellitus (DM), la hipertensión arterial (HTA), la cardiopatía isquémica (CI), el cáncer, la obesidad, la enfermedad cerebrovascular (ECV), trastornos músculo esqueléticos como la artritis, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), osteoporosis, demencia y depresión, entre otras. La sola presencia de estas enfermedades no es suficiente como indicador del estado de salud de los ancianos, pues en ellos resulta primordial la evaluación del grado de capacidad funcional que habitualmente se expresa en el desempeño o grado de independencia para la realización de actividades del diario vivir. Aunque la mayor parte de los adultos mayores que padecen dichas patologías crónicas se mantienen activos e independientes, la prevalencia de discapacidad se incrementa progresivamente con la edad (34) y la misma suele aparecer como consecuencia de las complicaciones o secuelas que ellas provocan. (34)
La discapacidad se ha definido como toda restricción o falta (resultante de una deficiencia) de capacidad para enfrentar una actividad de la manera o dentro de los márgenes que se consideran normales. (22-24)
Las discapacidades físicas, mentales y sociales, íntimamente relacionadas con el incremento de la expectativa de vida, se consideran entre los problemas más graves que hay que enfrentar en el presente siglo, situación favorecida por la prolongación de la vida. Su evaluación resulta difícil, ya que son consecuencia de interacciones entre alteraciones estructurales y funcionales del organismo, unido a una multitud de factores psicológicos y sociales. (23-25)
Existen dos momentos cumbres en el abordaje de la discapacidad.
El primero se relaciona con la creación por Karnofky en 1948, del status de desempeño
El segundo, con el índice de independencia del diario vivir, realizado por Katz (IK) en 1963 (14-24).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que las Actividades de la Vida Diaria (AVD) constituyen el indicador más importante para medir el funcionamiento en el anciano discapacitado y existen diferentes definiciones de las mismas. (26)
Fillembaun las definió como la capacidad de valerse por sí mismo y desarrollar las actividades propias de la vida diaria,
Patterson y Eberly las definió como un conjunto de conductas cuya ejecución regular y apropiada es necesaria para el cuidado personal y el mantenimiento de una vida independiente.
Las actividades de la vida diaria (AVD) se dividen en básicas e instrumentales:
Las básicas (ABVD) son aquellas habilidades esenciales para llevar a cabo actividades de auto cuidado (alimentación, vestirse, aseo personal, necesidades fisiológicas, etc.)
Las instrumentales (AIVD) son más complejas y necesarias para desarrollar una vida independiente (preparar alimentos, usar los transportes públicos, utilizar el teléfono, manejar dinero, etc.).
Para medir las actividades de la vida diaria (AVD) se han utilizado diferentes instrumentos, dentro de los que se destacan por su uso, el índice de Katz, para las básicas y el índice de Lawton (IL), para las instrumentadas, confeccionado este último en 1969 (18). En él se introduce un nivel más complejo en la evaluación, ya que a través del mismo se pueden medir aspectos que van más allá del auto cuidado. (25-26)
Sobre la discapacidad física en el adulto mayor se han realizado desde la década del 80 diversidad de estudios, destacándose entre ellos los de Bond y colaboradores en 1982, Fillembaun en 1984, Pearlman y Utilman en 1988 y Pardavilla en 1989 apreciándose la heterogeneidad en las definiciones planteadas en cuanto a la discapacidad física, considerada por algunos si el sujeto está incapacitado para realizar al menos una actividad instrumentada de la vida diaria, mientras que otros señalan la imposibilidad de realizar dos actividades individuales de la vida diaria y un tercer grupo de autores fija tres actividades de la vida diaria como número mínimo de limitaciones para clasificar a un individuo como discapacitado, todo lo cual dificulta las comparaciones entre estudios. 16-26.27.28-29
Existen otros puntos de vista en el análisis de la discapacidad física relacionados con los factores de riesgo de esta, apareciendo en la literatura un grupo de investigaciones a partir de las cuales han emergido un conjunto de variables que incluyen: la inactividad, la insatisfacción con actividades cotidianas, la inadaptación a la jubilación, pérdida de roles sociales, pérdida de familiares, amigos, hijos y cónyuge, la ausencia de confidente, los sentimientos de soledad, las condiciones materiales inadecuadas, presencia de enfermedades crónicas, las secuelas post-fractura del tercio superior del fémur y las amputaciones. (17-25-30)
Se han considerado otros factores como la escolaridad, el sexo y la ocupación del anciano entre los factores de riesgo de discapacidad física en este grupo poblacional. (26-30-31)
La evolución en los conceptos sobre discapacidad mental ha sufrido transformaciones a lo largo de la historia, ligada estrechamente con el desarrollo de la sociedad. Desde la era de Hipócrates, comienzan a realizarse estudios sobre los trastornos mentales, fundamentalmente asociados al retraso mental y mucho más tarde acerca de enfermedades psiquiátricas y otras afecciones orgánicas mentales (26-32).
Un punto neurálgico en la historia de la discapacidad intelectual lo ha constituido la falta de integración existente entre el enfoque médico y educacional del defecto, lo que indiscutiblemente ha frenado en ocasiones el proceso de desarrollo en este tema. (26-32)
Una de las alteraciones que con mayor frecuencia inciden en la aparición de este tipo de discapacidades en el adulto mayor, es el deterioro cognitivo y su pesquisa ha sido acometida a través de disímiles instrumentos. 18-23
En 1975, Folstein y Mc Hugh crean el Miniexamen del Estado Mental (MEM) logrando un importante avance en dichos estudios, pues se adquiere un cuestionario que permite la exploración de la esfera cognoscitiva a través de la orientación, memoria de fijación o registro, atención, cálculo, memoria de evocación, lenguaje y construcción vídeo espacial, que permite la detección temprana del deterioro a este nivel. La temática del estudio del deterioro cognoscitivo, incluida la demencia, continúa siendo un tópico vigente y objeto de interés de investigadores de diversas latitudes, lo que parece estar dado no solo por su magnitud, sino por la repercusión de este en el ámbito individual, familiar y social. (31-33)
La discapacidad ha sido abordada en nuestro país en diferentes trabajos, tratándose en ellos aspectos relacionados con la identificación de factores de riesgo para la misma, su prevalencia en los niveles comunitario y hospitalario, así como cálculos sobre la expectativa de vida ajustada por discapacidad sobre dicha temática. (34)
Existen evidencias que demuestran el impacto de las enfermedades no transmisibles (ENT) en la calidad de vida del anciano, tanto en forma individual como asociadas (29-32).
La comorbilidad o coexistencia de varias de estas afecciones se relaciona sustancialmente con una mayor probabilidad de aparición de discapacidades, considerándose un fuerte factor de riesgo para el surgimiento de las mismas, no solo por las consecuencias derivadas del incremento en su número, sino también por los efectos de combinaciones específicas entre las mismas, las cuales elevan el riesgo y la severidad de las alteraciones funcionales, físicas o mentales que de ello se deriva.
De ahí que se estableció cuales son los conceptos centrales de discapacidad, sobre lo que la clasificación internacional del funcionamiento y la discapacidad (CII), define la discapacidad concluyéndose: (24-26)
1. Estado negativo de salud
2. Limitaciones o dificultades en la realización de las actividades.
3. Restricciones en la participación.
4. Barreras ambientales (físicas y actitudes).
Todo lo cual determina el grado de discapacidad, definiéndolo en los siguientes grados. (24-26)
Discapacidad leve. Persona que presentan alguna dificultad para llevar a cabo actividades de la vida diaria, sin embargo la persona es independiente y no requiere apoyo y puede superar barreras del entorno.
Discapacidad Moderada. Persona que presenta una disminución o imposibilidad importante de su discapacidad, para realizar la mayoría de las actividades de la vida diaria, llegando a requerir apoyo en labores básicas de auto cuidado y supera solo con dificultad algunas barreras del entorno.
Discapacidad Severa. Personas que ven gravemente imposibilitada la realización de sus actividades cotidiana requiriendo del apoyo o cuidado de una tercera persona y no logra superar las barreras del entorno