como óxido nítrico (⋅NO). (5)
A partir del 2000 encontramos las primeras publicaciones cubanas sobre el tema. El Hospital Militar Central «Dr. Luis Díaz Soto» ha realizado trabajos de revisión con los títulos siguientes: «Métodos para medir el daño oxidativo» (2000), «Radicales libres en la biomedicina y estrés oxidativo» (2001) y «Daño oxidativo, radicales libres y antioxidantes» (2002). (5)
Las especies reactivas del oxígeno han sido asociadas con el proceso de envejecimiento y un grupo de enfermedades relacionadas con la edad, como las enfermedades cardiovasculares y enfermedades neurodegenerativas como el Parkinson y el Alzheimer. Se ha llegado a declarar que el estado redox contribuye al desarrollo de una amplia gama de enfermedades como un componente crítico de las mismas inducidas por el estrés oxidativo. ( 3, 6) El grupo de las enfermedades cardiovasculares y dentro de ellas la aterosclerosis y al HTA, merecen especial atención por constituir actualmente uno de los problemas más importantes de la salud pública. En muchos de estos casos, no es claro si los oxidantes desencadenan la enfermedad, o si se producen como consecuencia de esta y provocan los síntomas de la misma. (7)
Por otra parte es válido destacar que el estrés oxidativo no solo se encuentra relacionado con procesos patológicos como se menciona anteriormente, sino que también, intervienen en procesos fisiológicos como es el envejecimiento. (8,9)
En la actualidad, el estrés oxidativo se ha divulgado tanto entre las diferentes especialidades médicas, que resulta difícil no encontrar en cualquier revista científica un artículo que se refiera a dicho tema, y su relación con las los fenómenos antes enunciados. A pesar del aumento, tanto de la información científico-técnica y de los avances logrados en el campo de la bioquímica, el estrés oxidativo y su relación con diferentes enfermedades y procesos resulta aún poco conocido. Lo que nos conduce al siguiente problema científico:
¿Qué relación existe entre el estrés oxidativo y el desarrollo de lesiones a nivel celular que conduzca al envejecimiento y la aparición de enfermedades cardiovasculares?
Objetivo general:
- Describir la relación entre el estrés oxidativo y diferentes enfermedades perjudiciales para el organismo.
Objetivos específicos:
- Definir los componentes y las consecuencias del estrés oxidativo.
- Identificar la participación del estrés oxidativo en las enfermedades cardiovasculares y el envejecimiento.
Desarrollo
Estrés Oxidativo: Componentes y consecuencias.
El balance oxidativo del organismo humano resulta esencial para la regulación metabólica, entre otras funciones a nivel celular. Si este balance entre los sistemas oxidantes (generadores de especies reactivas del oxígeno) y los antioxidantes (sustancias con función preventiva, secuestradora y reparadora) se desequilibra a favor de los primeros, por la producción excesiva de estas especies, el debilitamiento de los sistemas antioxidantes o por ambas causas, se estará en presencia de lo que se conoce como estrés oxidativo. (10)
De los procesos antes mencionados involucrados en el estrés oxidativo, el más difundido en la literatura es el relacionado con el aumento en la producción de las especies reactivas del oxígeno, debido a su asociación morbosa con diversas enfermedades y procesos fisiológicos. Sin embargo, cabe destacar que también existe literatura correspondida con los sistemas antioxidantes (tales como glutatión, vitamina C, y vitamina E, así como enzimas tales como la catalasa, superóxido dismutasa y varias peroxidasas) (11) que tienen como función específica proteger al organismo de los daños ocasionados por los primeros.
Estas especies reactivas como: el anión superóxido (O2–), el peróxido de hidrógeno (H2O2) y lipoperóxidos (R–OO–) -siendo R un ácido graso, un esteroide o una lipoproteína-; son generalmente moléculas muy pequeñas altamente reactivas debido a la presencia de una capa de electrones de valencia no apareada. Además incluyen iones de oxígeno, peróxidos tanto inorgánicos como orgánicos y principalmente radicales libres. (12)
Estos radicales libres tienen un electrón desapareado por lo que son muy reactivos, de modo que tienden a sustraer un electrón de otras moléculas estables que los rodean con el fin de alcanzar su estabilidad electroquímica. Al producirse esta reacción, la molécula estable que ha cedido el electrón se convierte a su vez en un radical libre por quedar con un electrón desapareado, iniciándose así una reacción en cadena. (13)
Dichos agentes oxidantes, que tienen como precedentes a varias sustancias pro-oxidantes tales como: fármacos diversos, insecticidas y pesticidas órgano fosforados, ciertos compuestos químicos, alimentos descompuestos y todas aquellas sustancias que al igual que estas puedan generar especias reactivas del oxígeno (14); pueden alterar el código genético celular, por modificación de la estructura espacial de la molécula de ADN o la destrucción de pares de bases; reprimir la expresión de genes de la misma mediante la inhibición; modificar sus funciones por la acumulación de lipoproteínas oxidadas de baja densidad (LDL); desestabilizar la estructura y función de la célula y sus organelos, condicionando la activación de señalizaciones para la autodestrucción de membranas y muerte celular; así como la célula puede perder su integridad por ruptura de la pared celular causada por la oxidación lipídica. (4, 15)
Estrés oxidativo y enfermedades cardiovasculares: ateroesclerosis e hipertensión arterial –HTA-.
Si bien ya se ha planteado que el estrés oxidativo juega un rol determinante en el desarrollo de un grupo de enfermedades, muchas de las cuales son ampliamente estudiadas y con mecanismo etiopatogénicos esclarecidos; es válido destacar que los enfoques de la participación del estrés oxidativo siempre resultan novedosos. Dentro de este, cada vez más creciente grupo de enfermedades, es oportuno enfatizar el de las enfermedades cardiovasculares; prestando especial atención a la ateroesclerosis y la hipertensión arterial (HTA); porque estas patologías (que han emergido como la primera causa de morbimortalidad en el mundo occidental y en Cuba) (16) constituyen un gran problema de salud pública.
El aumento mundial en la frecuencia de enfermedades